Explora Libros electrónicos
Categorías
Explora Audiolibros
Categorías
Explora Revistas
Categorías
Explora Documentos
Categorías
integradora 3
Selecció n de texto e
ideas aplicables
Pedro Antonio Moreno Hurtado
Grupo: M2C3G23-065
Título: “La noche boca arriba”
Fecha de publicación: Año 1956 en el libro “Final del juego” primera edición en
México
Las tres grandes formas de expresión literaria son: lirica, narrativa y dramática.
Resumen
El cuento comienza con el protagonista saliendo a la calle apresuradamente para
subir a su moto, yendo a tiempo hacia donde se dirigía, el disfrutaba del paseo y
aún más cuando llego al trayecto que le parecía más agradable, pero ir tan
relajado no era lo más conveniente, ya que su relajamiento le impidió prevenir el
accidente que estaba a punto de acontecer, entonces sucedió lo inevitable, y aun
que él quiso frenar abruptamente no pudo y choco al querer esquivar a una, mujer
que se había lanzado al estar las luces en verde, con el choque perdió la visión.
El hombre comenzó a soñar, pero era un sueño tan vivido en donde percibía
olores, y era perseguido por los aztecas, él tenía que huir y su única opción era
esconderse, porque los aztecas andaban de caza de hombre, en su sueño el
hombre tenía miedo y en el él miedo abundaba, cuando sintió el olor que temía se
hecho hacia adelante, y un enfermero que estaba cerca de él le dijo que se caería
si seguía saltado, cuando abrió los ojos vio que solo era una pesadilla, tenía el
brazo enyesado y sintió tanta sed como si hubiera corrido kilómetros, pero aun así
no les dieron más que para que se mojara los labios.
La confusión seguía, y le traía sensaciones por instantes, el corría y sin saber por
qué se aferraba al mango de un puñal, trayendo en el cuello un amuleto protector ,
la guerra en su sueño seguía y si conseguía refugiarse en lo profundo de la selva
los guerreros no le seguirían el rastro, el de la cama de al lado le decía que era
por la fiebre, porque a él le pasaba igual cuando se operó, cuando cayó la noche
la sala le parecía deliciosa lejos de pensar en la pesadilla ya que había tantas
cosas en que entretenerse, distinguía las formas de la sala, las camas los
armarios las vitrinas, al parecer ya no tenía tanta fiebre.
Saliendo del hospital siguió viendo su sueño, un sueño en el cual el ya aceptaba
su destino un sueño que ahora ya era su realidad y no la realidad que existía
cuando paso por el accidente.