características más resaltantes de cada plan, además de
una breve descripción de los reglamentos más conocidos que instan su elaboración e implementación.
Como observamos, la información es abundante respecto
a este tema, en lo personal, recomiendo no fijarnos tanto en la forma sino en el contenido, quiero decir que podemos tener un plan que incluso pueda llamarse “plan de emergencia y contingencia”, pero si esta incluye la información antes mencionada y sobre todo cumpla con el objetivo de minimizar los riesgos e impactos en la organización ante situaciones de emergencia propiamente dichas, eso será lo más importante, al mismo tiempo que cumpliremos con la exigencias legales vigentes sin ningún inconveniente.