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4) Con conocer algo a priori Kant se refiere que significa conocer algo con anterioridad a la

experiencia o independientemente de ella. En un sentido lógico: no es necesario recurrir a


la experiencia para conocer si un enunciado es verdadero.

9) Las intuiciones por sí mismas, son sólo hechos subjetivos. Es por eso que para que haya
conocimiento, se requiere que estén referidas a un objeto, y esto implica que el orden y
enlace de las unas con otras no sea arbitrario, sino uno determinado, uno que se afirme
como obligatorio; inversamente: la única manera de que las intuiciones no puedan enlazarse
unas con otras de cualquier modo, sino que haya en la mente una regla para ese enlace, es
que se afirme la referencia de esas intuiciones a un objeto. Hay, pues, una representación,
distinta, que constituye, a la vez e idénticamente, la referencia a un objeto y el enlace de la
multiplicidad de las intuiciones en la unidad de un objeto. Esta representación de unidad es
el concepto. Las vías para esto son:

1)  Sensibilidad: Es pasiva y se limita a recibir las impresiones (intuiciones) procedentes del


exterior 

2) Entendimiento: Es activo y produce espontáneamente ciertos conceptos e ideas sin


derivarlos de la experiencia (por lo tanto a priori).

14) En la parte analítica de la crítica de la razón pura se demuestra: que el espacio y el


tiempo son formas de la intuición sensible, es decir, simples condiciones de la existencia de
las cosas en cuanto fenómenos; que tampoco da nada por hecho, mientras quede algo por
hacer poseemos conceptos del entendimiento, por lo tanto,elementos para conocer las cosas
sino en la medida en que puede darse la intuición correspondiente a tales conceptos; que, en
consecuencia, no podemos conocer un objeto como cosa en sí misma, sino en cuanto objeto
de la intuición empírica, es decir, en cuanto fenómeno. De ello se deduce que todo posible
conocimiento especulativo de la razón se halla limitado a los simples objetos de la
experiencia. No obstante, hay que dejar siempre a salvo que, aunque no podemos conocer
esos objetos como cosas en sí misma, sí ha de sernos posible, al menos, pensarlos.

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