LA MIGRACION VENEZOLANA SU IMPACTO EN LA

SOCIEDAD Y LA NECESIDAD DE UN CAMBIO PARA LA

RECONSTRUCCION DEL PAIS

Desde hace alrededor de una década hemos sido testigos del deterioro progresivo
de la calidad de vida de los venezolanos en lo social, económico, salud,
educación, etc. Producto de malas políticas internas, corrupción, intervencionismo
extranjero y un estrangulamiento diverso en todas las áreas que han traído como
consecuencia una galopante inflación y el colapso de los servicios públicos y
privados que ha carcomido la sociedad venezolana. En 2014 comenzamos a
evidenciar un éxodo de venezolanos buscando mejores alternativas del sustento
en lo económico en los países vecinos como por ejemplo: Colombia, Perú, Chile,
Brasil, Panamá, entre otros, esta situación ha sido progresiva y constante, lo que
ha traído como consecuencia la fuga de talento humano de profesionales como de
mano obra generando una disfunción social y familiar que para nada ha sido
beneficioso para Venezuela.
Para las personas que ven como opción la de emigrar de Venezuela están
pensando en el deterioro del poder adquisitivo se ven acorralados financieramente
al no poder cubrir sus gastos básicos y consideran que fuera en otro país hay
mejores opciones. Con lo que ganan en un mes en otro lugar aquí verían esa
cantidad en meses, ciertamente conozco familiares y amigos que me han
manifestado que les ha resultado esa decisión lo que se traduce en mejoras en lo
económico y la calidad de vida de las personas que están en el país y que
dependen de su manutención pero conozco muchos más que viven una situación
difícil expuestos a la explotación laboral, discriminación, xenofobia, violencia y que
de igual manera lo que perciben allá, sus gastos y los gastos de sus familiares
aquí menguan la posibilidad de ahorro y sienten frustración por la decisión
tomada. Lo que sí es evidente en todos los casos es la separación de las familias
padres, madres, hijos, abuelos, amigos. Y en algunos casos causas de rupturas
familiares esposas abandonadas con sus hijos, esposos abandonados, hijos sin
un padre o una madre que los guie y los reconforte, etc.
Algunos datos suministrados por ONG, AGNUR, entre otros reportan hasta 4
millones de venezolanos migrando fuera del país millones de médicos, abogados,
licenciados, arquitectos, ingenieros que terminan ejerciendo otra labor que no se
identifica con sus dotes académicos y por supuesto otra gran cantidad de
personas con mano de obra y talentos diversos que van a ser explotados con
largas jornadas laborales sin seguridad sanitaria y mal pagados en comparación
con los nativos del país a donde emigran, además debemos recalcar que van a
ser objeto de violencia por la creciente xenofobia y la creencia de que estos
venezolanos van a robarse el trabajo que a otro le corresponde, he leído infinidad
de reportajes de ataques a compatriotas que solo buscaban trabajar dignamente
de mujeres llevadas a la fuerza a la prostitución y explotación sexual, todo esto
solo por ser venezolanos.
Es nuestra responsabilidad crear una confianza no como individuo sino como
sociedad y ver como posibilidad absoluta rescatar nuestro país del abismo sin
fondo en donde hemos caído, cuando vemos y analizamos nuestra historia, la
historia de Venezuela, vemos una serie de batallas encarnizadas en busca de la
libertad e independencia, una serie de personajes que dio todo incluso sus vidas
por lo que creían justo y necesario para crear un cambio drástico y necesario para
el bien común del venezolano en general. Obviamente no sugiero la de alzarnos
en armas en enfrentamiento cívico-militar sino de recuperar nuestro patriotismo y
amor por nuestra tierra, no como un eslogan político sino como un verdadero
ideal, ser patriota debe ser razón de orgullo deber ser sinónimo de grandeza de
amor por nuestra gente. Debemos estar conscientes que tenemos unos de los
países más ricos del mundo tenemos unas de las mejores reservas de Gas,
Petróleo. Oro, Coltan (usado en la elaboración de la telefonía celular) minerales,
etc, tenemos una buena posición geográfica, tenemos belleza cultural y lo mejor
de todo tenemos buenos talentos tanto profesional como mano de obra. Es hora
de llamar a la reflexión a aquellos que manejan el país y generar propuestas
dirigidas a la recuperación económica y política se requiere de inversiones tanto
públicas como privadas para recuperar lo que antes ya teníamos e incluso mejor.
Recordemos la potencia que era por ejemplo Lara con Mercabar, ahora desértico,
las zonas industriales fuentes de trabajo y prosperidad económica, ahora
neutralizadas según fuentes hasta en un 70%, recuperar la renta petrolera (mas
no depender solo de ella).Todo esto se puede y se debe recuperar.
Si bien es cierto antes migraba un sector de la sociedad en busca de una mejor
preparación académica pero luego retornaban con el propósito de aplicar lo
aprendido en el país, ahora resulta en la fuga de personas capacitadas llevando
su talento a otra parte. Pero para generar un cambio se debe garantizar la
protección del poder adquisitivo, garantizar las condiciones de salud y el respeto
por las carreras académicas recordemos no podemos edificar un país sin
preparación educativa, sin médicos, sin funcionarios públicos que representen su
cargo de manera intachable, entre otras cosas más, debemos exigir un mejor
manejo de las riquezas del país, un mejor manejo de la política socio-económica y
debemos ser partícipes en esta reconstrucción debemos dejar de ser el problema
y transformarnos en la solución. Debemos pensar en todo lo que dejamos atrás si
partimos de nuestra tierra; nuestras familias, nuestros amigos, nuestras carreras;
debemos luchar para no seguir perdiendo lo que nos importa sino más bien
defenderlo.
Debemos pensar en nuestro legado que dejaremos a las generaciones futuras que
va a ser de nuestros nietos y bisnietos cuando pregunten porque no luchamos por
el país, porque apostamos a emigrar y no apostar a nuestra tierra, porque no
luchar por algo mejor, porque elegir conformarse y ver como unos pocos
desgarran las riquezas del país, porque esperar que venga un salvador para
reactivar y reconstruir el país si es nuestra responsabilidad. Las investigaciones
científicas de los recursos naturales y socio-económicas afirman que tenemos un
país rico que todavía tiene mucho para dar, tanto así, como para que cada
individuo tenga una vida digna con lo suficiente para satisfacer sus necesidades
básicas. Pero fácil no es, más de una década en caída libre, pero imposible
tampoco hay que expulsar y erradicar la corrupción aquellos falsos defensores del
pueblo y buscar representantes con cualidades dignas y ética ejemplar. Solo hay
que tener mente positiva una mirada objetiva y honesta y muchas, muchas ganas
trabajar y edificar un buen cimiento para una Venezuela prospera.