Cómo escribir tu currículum

Por lo general, tu currículum es la primera impresión que las empresas tienen de ti, por
lo que debes asegurarte de incluir información relevante en él. Lo que quieres incluir

 Quién eres: nombre, dirección, número de teléfono, correo electrónico

 Antecedentes educativos: dónde y qué estudiaste (o estás estudiando)
 Antecedentes laborales: dónde y en qué puestos trabajaste (o estás trabajando)
 Habilidades relevantes

Cuando describas tus antecedentes educativos, incluye las universidades a las que
asististe, las certificaciones que obtuviste y cualquier programa educativo adicional que
hayas completado. Puedes incluir un promedio general o un promedio de calificaciones
para cada carrera si lo deseas. No es necesario incluir fechas en tu sección de educación.

Si eres recién graduado o todavía estás estudiando, sería mejor que incluyas algunos
detalles adicionales, como proyectos interesantes que realizaste durante tu estudio o
destacar una materia optativa que hayas cursado. Si ya cuentas con algunos años de
experiencia profesional, simplemente puedes incluir la carrera, el año y el lugar donde
la cursaste.

Un formato de currículum "funcional" o "basado en habilidades" es ideal para los recién

graduados o para aquellos candidatos con experiencia laboral limitada. Este formato se
enfoca más en torno a tu conjunto de habilidades, en lugar de tu experiencia laboral.
Puedes incluir un breve resumen de las calificaciones, seguido de una lista de
habilidades con ejemplos para cada una. Este formato funciona bien para los candidatos
con antecedentes laborales limitados, pero con muchas habilidades aplicables.

En tus antecedentes laborales, sería mejor que destaques las habilidades que son más
relevantes para el puesto que estás buscando. Usa un formato cronológico directo o
inverso para los antecedentes laborales. Indica el mes y el año para cada puesto con
precisión. Enumera los logros, no solo las tareas realizadas, y haz que sean
cuantificables. Usae el formato de oración "verbo/acción + tarea específica + punto
cuantificable". Por ejemplo: "Proceso de creación de imágenes automatizado para
computadoras nuevas, lo que reduce en un 90% el trabajo manual para el equipo de TI".
Incluye las responsabilidades de tu función, pero no llenes tu currículum con montones
de viñetas sobre cada tarea pequeña. Resume y adapta tus viñetas en función de la
descripción del trabajo al que te postulas. Por ejemplo, en lugar de decir: "Crear nuevas
cuentas de usuario, eliminar cuentas antiguas, establecer contraseñas...", puedes decir:
"Administrar y mantener todas las cuentas de usuarios".

Hazlo de manera similar para las habilidades relevantes. Debes incluir los temas
generales sobre los que tienes conocimientos, como atención al cliente, redes,
administración de sistemas, programación, etc. Puedes enumerar los sistemas operativos
con los que trabajaste y los lenguajes de programación en los que estás capacitado, pero
no intentes enumerar todos los protocolos de red de los que oíste hablar o cada
herramienta de TI que alguna vez usaste. El ruido distrae de la información relevante.

Más allá del formato que decidas usar (cronológico, funcional, etc.), asegúrate de
mantener la coherencia en el formato y la estructura en todo momento. Por ejemplo, si
usas oraciones completas para las viñetas, asegúrate de aplicar ese formato en todas
ellas, con la puntuación y la gramática adecuadas. Comprueba los tamaños y estilos de
las fuentes para asegurarte de que también sean coherentes.

Cómo adaptar el currículum

Antes de enviar un currículum a un determinado puesto de trabajo,

se recomienda verificar que su contenido coincida con la descripción del trabajo. Debes
adaptar tu currículum para cada trabajo al que te postules. El envío de CV genéricos a
tantos puestos como sea posible no es una buena estrategia. Un enfoque dirigido
siempre es mejor.

Si te postulas a un puesto de soporte de TI, tal vez desees destacar tu experiencia en

soporte al cliente, incluso si sólo solo proviene de una organización de voluntarios en tu
universidad. En cambio, si te postulas para un trabajo de programación, deberás
destacar tu experiencia en desarrollo de software, sin importar si la adquiriste en la
universidad o en el trabajo.

Tu presencia en la Web

En la actualidad, muchas empresas se contactan con candidatos a través de sitios web

como LinkedIn, por lo que es importante que mantengas tu perfil web completo y
actualizado. Comienza escribiendo un resumen que describa tu puesto de trabajo actual
(si corresponde) y tus aspiraciones profesionales. Incluye una foto profesional e
información de contacto actualizada (aunque los reclutadores también pueden
contactarte directamente a través de LinkedIn).

Los perfiles de LinkedIn son mucho más profundos que los CV. Puedes incluir logros
específicos de tantos puestos de trabajo como desees, pero usa el mismo formato que en
tu currículum (verbo/acción + tarea específica + punto cuantificable).

Agregar proyectos personales también puede ser útil, en especial si tienes algo tangible
para mostrar. Por ejemplo, si creaste una aplicación, un sitio web o un tipo de producto
similar como parte de un pasatiempo o proyecto escolar, inclúyelo y proporciona un
vínculo a él.

Al igual que un currículum, enumera tus habilidades, tu experiencia y lo que estás

buscando como próximo paso. Asegúrate de incluir toda la información relevante de
antecedentes que le pueda interesar al reclutador que mire tu perfil. Asegúrate de ser
descriptivo, no supongas que el lector tendrá contexto.