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Las escuelas eficaces en Honduras

Tabaré Fernández Aguerre


Virginia Trevignani Gagneten
Carlos Silva Forné

1
371 Fernández Aguerre, Tabaré
F39 Las escuelas eficaces en Honduras / Tabaré
Fernández Aguerre. -1a. ed. -- Tegucigalpa:
PNUD, 2003.
25 p.

ISBN 99926-667-5-7

1. ESCUELA-PLANES

Colección Cuadernos de Desarrollo Humano Sostenible 16


Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD)
Colonia Palmira, Ave. República de Panamá, Tegucigalpa, Honduras. Marzo, 2003

Diseño y diagramación: Giovani Fiallos


Ilustración de portada: “Madre con flores“ de Helio Lorenzo Flores
(Tomado del Catálogo de Pintores, colección Banco Atlántida)

Las ideas expuestas en los Cuadernos de Desarrollo Humano Sostenible son de exclusiva
responsabilidad de sus autores y no reflejan necesariamente la visión del Programa de las
Naciones Unidas para el Desarrollo.

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Prólogo

El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Honduras, como un aporte
destinado a facilitar los procesos de democratización y difusión del conocimiento y la información
pertinente para el desarrollo del país, inicia la publicación de tres colecciones: Visión de País,
Cuadernos de Desarrollo Humano Sostenible y Prospectiva.

Estas series son fruto del trabajo de la Unidad de Prospectiva y Estrategia (UPE) de la oficina del
PNUD en Honduras y están destinadas a difundir el pensamiento de académicos, intelectuales,
técnicos e investigadores hondureños y extranjeros que desde diferentes perspectivas se enfoquen
en la construcción del paradigma del desarrollo humano sostenible.

La difusión y creciente adopción a escala internacional y nacional de un nuevo paradigma del desa-
rrollo humano sostenible, cuya premisa y finalidad es ampliar las capacidades y oportunidades de
los individuos, conlleva el desafío de insertarlas y aplicarlas como un eje transversal en la construc-
ción de un proyecto de país. Éste es el propósito de las reflexiones y análisis presentes en cada uno
de los trabajos publicados en estas colecciones.

Nuestro propósito es contribuir al análisis y diseño de estrategias y políticas públicas, globales y


sectoriales, que reflejen y respondan a la realidad hondureña. Estamos seguros de que la comuni-
dad nacional e internacional encontrarán aquí un espacio para la reflexión y el diálogo en torno a los
problemas del desarrollo y el fortalecimiento de la democracia en Honduras.

Jeffrey Avina
Representante Residente
del PNUD en Honduras

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Colección de Desarrollo Humano Sostenible

Uno de los principales retos planteados a inicios de este nuevo siglo es la construcción de un nuevo
paradigma del desarrollo. Para ello se requieren aportes de carácter científico, académico e intelec-
tual, desde diferentes perspectivas y disciplinas, partiendo de diversos tipos de conocimientos,
saberes y experiencias que puedan nutrir e incidir en la generación y aplicación de un pensamiento
de desarrollo humano sostenible en el contexto nacional, regional y local.

La Colección de Desarrollo Humano Sostenible es un aporte de la Unidad de Prospectiva y


Estrategias (UPE) del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) a los procesos de
pensamiento y reflexión en torno a los problemas y planteamientos del desarrollo. De tal forma,
pretendemos complementar otros esfuerzos realizados por la UPE en esta dirección, tales como la
preparación del Informe Nacional sobre Desarrollo Humano en Honduras.

La Colección de Desarrollo Humano Sostenible es un espacio abierto para difundir las contribu-
ciones de intelectuales, académicos y técnicos nacionales y extranjeros cuyos trabajos respondan
a los parámetros de calidad, originalidad y fundamento a la construcción de este paradigma del
desarrollo humano.

Esta serie se propone reforzar las iniciativas de la sociedad hondureña en torno a un proyecto de
visión de país y la aplicación del Acuerdo Nacional de Trasformación para el Desarrollo Humano
Sostenible en el siglo XXI. Nuestro propósito es tender un puente entre el mundo académico y
técnico, los intelectuales y los formuladores de políticas públicas para contribuir conjuntamente, a
través de las ideas y la praxis, a la formulación de las bases del desarrollo humano en Honduras.

Sergio A. Membreño Cedillo


Coordinador
Unidad de Prospectiva y Estrategia
(UPE)/PNUD/Foro para el Fortalecimiento de la Democracia (FFD)

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Indice

Introducción ...................................................................................................................................................... 7
A. La “organización marca la diferencia” .......................................................................................................... 8
B. La perspectiva clásica sobre las escuelas eficaces ...................................................................................... 9
C. La investigación contemporánea sobre la eficacia escolar ....................................................................... 10
D. La agenda pendiente para Honduras ........................................................................................................ 13
E. La medición de la eficacia escolar .............................................................................................................. 14
F. Enfoques para medir la eficacia escolar ..................................................................................................... 15
G. Eficacia terminal de la escolarización primaria ......................................................................................... 17
H. Estimación de la eficacia interna ............................................................................................................... 18
I. Factores contextuales asociados a la eficacia ............................................................................................. 19
Bibliografía ....................................................................................................................................................... 22

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al sistema educativo hondureño, requieren de un exa-
INTRODUCCIÓN men detallado de las relaciones empíricamente obser-
vables entre los resultados educativos, las escuelas, las
redes sociales y el diseño institucional del sistema edu-
Honduras enfrenta un doble desafío histórico: al-
cativo. Este capítulo tiene como propósito presentar
canzar una escolarización universal en la educación
un modelo de análisis, basado en la “perspectiva clási-
básica y lograr que sus estudiantes desarrollen las com-
ca de las escuelas eficaces”, en los desarrollos poste-
petencias de alto orden requeridas para el más libre
riores de la investigación sobre los efectos de la es-
ejercicio de la ciudadanía y para una plena inserción
cuela y la teoría del capital social. Dado el contexto
de los diferentes sectores sociales hondureños en la
general en que se inscribi, resulta pertinente señalar
economía globalizada. Todos los actores son conscien-
dos limitaciones del análisis. Por un lado. no es ni ex-
tes de estos desafíos: lo cual se refleja desde media-
haustivo ni excluyente: la perspectiva organizacional y
dos de los noventa, en la importantísima producción
local adoptada no excluye otras, por más que reclame
de documentos en los que se formular propuestas de
para sí rendimientos diferenciales .Por otro lado, sos-
reforma educativa.
tenemos que la política educativa es un instrumento
Si bien en los objetivos finales se observa gran co-
privilegiado y por tanto necesario para el desarrollo
incidencia nacional, las discrepancias parecerían sur-
humano; pero no es suficiente.
gir, tal como era de esperar, en los instrumentos y en
Este documento consta de dos grandes partes.
las secuencias. El Estado, pero también todos los de-
La primera parte está dedicada a la teoría sobre las
más actores sociales y políticos del país, se encuen-
escuelas. El acento se ha puesto en el cambio de pre-
tran frente a una encrucijada de caminos en la que,
guntas, de hipótesis y de teorías producido a finales
por un lado, se requiere que las prioridades y relacio-
de los setenta y el presente; un verdadero cambio de
nes entre los diversos instrumentos de las políticas
paradigma que se ha dado desde la investigación so-
públicas tengan una fuerte consistencia intersectorial;
bre la eficacia escolar y que constituyen un giro
y por el otro, que el conjunto de las políticas públicas
organizacional que ha repercutido tanto a nivel de la
estén decididamente orientadas a la promoción de la
comprensión como de la gestión de las escuelas. Una
dignidad de todas las personas. La coyuntura mundial
breve pero condensada cita muestra, en el apartado
es propicia para las reformas estructurales, así como
(a), cuál es el estado actual del conocimiento sobre
también lo es para extraer lecciones profundas de al-
los determinantes de los aprendizajes, para luego re-
gunas experiencias que se han mostrado equivocadas.
señar uno de los consensos más notables de la políti-
El país viene arrastrando grandes déficit de desarrollo
ca educativa de fines de los noventa, la importancia
en los últimos 50 años y no se pueden dar pasos que
del modelo de organización de la escuela. Luego,(b),
agraven estos problemas.
se presenta la perspectiva clásica de las escuelas efica-
Como se dijo anteriormente, los consensos suelen ces a fines de los años 70. En el apartado (c) se rese-
ser difíciles de concretar cuando se ingresa en el te- ñan resultados de investigaciones realizadas entre 1998
rreno de las decisiones operativas de la política públi- y el 2000, tanto a nivel regional en México, Perú y Uru-
ca. Durante los años noventa, la tendencia regional ha guay, como internacional (PISA 2001). Esta reseña per-
sido privilegiar algunos instrumentos de política mite relacionar directamente la idea de eficacia esco-
macroeconómica, marginando a la política social a un lar con los ideales más venerables de la pedagogía
carácter supletorio, paliativo o coyuntural de la pobre- moderna, Todos los niños pueden ser educables a con-
za. Entre otras razones, porque en ciertos círculos in- dición de que la organización del entorno escolar de
telectuales sigue predominando la tesis de que sólo aprendizaje se centre en objetivos claros y conocidos,
con nuevas estructuras económicas es posible el de- en altas expectativas de los adultos, en comunicacio-
sarrollo. nes fluidas sobre los avances y problemas, en relacio-
Sin embargo, algunas experiencias contemporáneas nes de cooperación y cuidado de los más
y muchos ejemplos históricos de política educativa desprotegidos. Todos estos enunciados constituyen un
muestran que la política social no es meramente un mojón central en la rehabilitación de la política educa-
instrumento marginal, sino estratégico. Si el objetivo tiva como instrumento de promoción humana.
es expandir la estructura de oportunidades para que La segunda parte, está dedicada al análisis de la efi-
las personas desarrollen al máximo sus capacidades y cacia las escuelas hondureñas. Para esto, se discuten
realizar de forma moralmente digna sus planes de vida, en el apartado (d) distintos enfoques meto-dológicos
el Estado debe atender especialmente la calidad y la corrientemente utilizados para construir indicadores
equidad de los aprendizajes; aún si se entienden éstos de eficacia, para luego en el apartado (e), presentar la
en el sentido más restringido de “formales”, “escola- metodología adoptada para este estudio y que se basa
res” y “básicos”. en una combinación de un resultado educativo “tradi-
Dentro de esta premisa general de política, el pro- cional” con el enfoque del valor agregado. Dado que
pósito es bien preciso. Los desafíos que se ponen frente no fue posible acceder a los microdatos de la reciente

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Evaluación de Aprendizajes realizada por la Unidad enfatiza la interacción entre los determinantes del
Externa de Medición de la Calidad de la Educación aprendizaje, los caminos de las políticas educativas de
(UMCE 2001), se han debido utilizar variables aproxi- los noventa, tanto en los países centrales como en la
madas. El indicador utilizado es una estimación de cuál región latinoamericana, han enfatizado la segunda pre-
es la probabilidad de que un niño que ingresa en pri- misa y sostienen la tesis de que “la organización marca
mer grado concluya sus estudios primarios en seis la diferencia; las escuelas importan” (Savedoff 1998).
años, sin abandonar antes o repetir algún grado. Con Este consenso general trasciende los enunciados de la
esta tasa de eficacia terminal como variable dependien- gran política y permea fuertemente las demandas de
te, se ajusta luego un modelo de regresión usando cambios en el modelo de gestión de las organizacio-
como determinantes, distintas propiedades sociales e nes. Tal es el caso en la propia Honduras de los docu-
institucionales. Las escuelas son clasificadas en tres mentos de política más recientes: “Transformación del
categorías, “bloqueadas”, “predecibles” y “eficaces” con Sistema Educativo en Honduras” de enero de 1999,
base en el saldo de valor agregado y luego se descri- “Educación y Desarrollo. Estudio Sectorial - Plan
ben algunas características generales de estas escue- Decenal” y la “Propuesta de la Sociedad Hondureña
las. para la Transformación de la Educación Nacional” de
noviembre del 2000. Los instrumentos de política
“organizacional” sugeridos son la descentralización, la
autonomía de los centros, la participación de las fami-
I lias, la planificación por proyectos a nivel de centros y
la evaluación de resultados.
A. La “organización marca la La postura se ancla en una respetable acumulación
diferencia” de conocimiento científico generado. Casi 25 años de
investigación sobre los efectos de la escuela en distin-
En el más reciente informe internacional elabora- tos países, particularmente centrales, han aportado
do sobre factores condicionantes del aprendizaje es- suficiente evidencia empírica como para sostener que
colar entre los jóvenes de 15 años, se incluyen las si- el tipo o modelo de organización que caracteriza a una
guientes afirmaciones: “El nivel de conocimiento y escuela, es un factor significativo para explicar el nivel
destrezas adquiridas depende de la extensión con que de conocimiento alcanzado por sus alumnos, tanto en
los estudiantes tienen acceso a entornos efectivos de la educación básica como en la educación media. De
aprendizaje, tanto en la escuela como en el aquí la legitimidad científica que tienen en general las
hogar.[Pero ...] Importantes factores que afectan tanto propuestas gerencialistas y otras propuestas de ges-
el desempeño de las escuelas como de los países [eva- tión educativa que convendrá distinguir a lo largo de
luados] están correlacionados con el nivel este artículo.
socioeconómico de la escuela. Entre los factores exa- Estas ideas, sin embargo, no son ni universales ni
minados, no hay un único factor que explique por pacíficamente aceptadas por varias razones. La escue-
qué algunas escuelas o algunos países, tienen mejo- la como organización no ha sido sino desde hace poco
res resultados que otros. Más precisamente, los des- tiempo, un objeto de investigación relevante y
empeños exitosos son atribuibles a una constelación específico1.Un breve recorrido por los manuales de
de factores que incluyen los recursos, la política [o sociología de la educación americanos de los años se-
gestión] escolar y las prácticas de aula.” (PISA 2001: senta mostraría sólo recurrencias y variaciones del es-
160, 207). Este párrafo presenta sintéticamente el es- quema clásico de Parsons sobre el “aula como un sis-
tado actual de nuestro conocimiento sobre los facto- tema social”; una réplica en miniatura de la sociedad.
res sociológicos (no psicológicos) que inciden en los Tanto los funcionalistas como los marxistas desarro-
aprendizajes. En él se destacan tres grandes premisas: llaron sus teorías suponiendo que la escuela era un
a) el fuerte peso que tienen la clase social y la sociali- factor constante para cualquier explicación; y en con-
zación familiar, tanto a nivel individual como secuencia, descartaron teóricamente elaborar un mo-
composicional; b) los varios niveles de incidencia que delo explicativo que incluyera ciertas propiedades
tiene la escuela en tanto sistema organizacional; y c) variables de la organización. Una conclusión similar
la correlación empírica entre factores de escuela y fac- se puede extraer cuando se analiza la investigación
tores de clase social, por la cual se puede inferir que educativa en América Latina. Aunque ésta surgió con
una parte de las variaciones observadas en la desigual- bastante retraso relativo, recién a fines de los ochenta
dad educativa deben atribuirse al nivel más general de empiezan a ser realizados estudios de caso sobre cen-
los niveles de desigualdad presentes en una sociedad. tros educativos. En los diagnósticos de los ministerios
En el contexto complejo de un conocimiento que de educación de la región no existía una idea clara de
la escuela como sistema organizacional. Los capítulos
1 Con la excepción más notoria de la obra pionera de Willard Waller (1932)
de diagnóstico por lo general hacían énfasis en descri-
The Sociology of Teaching, un sociólogo de la Escuela de Chicago. bir la calidad y cantidad de “insumos” de la “función

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de producción educativa”: tasa de alumnos por maes- les son las características que sí importan respecto a
tro, cantidad de textos disponibles en cada escuela, una escuela?” (Rutter et al 1979:1).
edificios y programas oficialmente aprobados. Otro Para contestar esas interrogantes, Michael Rutter y
factor que contribuyó a este rezago en la compren- sus colaboradores realizaron una investigación
sión y en la gestión educativa fue la falta de indicadores longitudinal en 12 escuelas secundarias comprensivas
estandarizados sobre la finalidad central de la educa- de la zona central de la ciudad de Londres durante 4
ción: el aprendizaje de los niños y adolescentes. años. Los hallazgos principales pueden resumirse
sumariamente en seis rasgos y una conclusión global.
En primer lugar, las escuelas estudiadas diferían
B. La perspectiva clásica sobre las significativamente en los cinco indicadores de resulta-
escuelas eficaces dos escolares estudiados, incluso cuando estos fue-
La investigación sobre los determinantes sociológi- ron controlados por variables antecedentes tanto so-
cos del aprendizaje tuvo un cambio trascendental a cio familiares como personales del niño. En segundo
fines de los años setenta con la emergencia de la “pers- lugar, las diferencias se mantuvieron para las distintas
pectiva de las escuelas eficaces”, la cual vino a despla- cohortes de alumnos y a lo largo del período en estu-
zar el extendido pesimismo despertado por el famoso dio. En tercer lugar, los indicadores de resultados
Reporte Coleman de 1966, y los trabajos fundacionales mostraron correlaciones altas y significativas entre ellos
de la Teoría de la Reproducción (Bernstein 1971; para una misma escuela. Cuarto, que las diferencias
Bourdieu & Passeron 1971). en los resultados no se debieron ni a la infraestructu-
¿Cómo dar cuenta de los casos desviados? Es decir, ra, ni al equipamiento ni tampoco al status administra-
¿cómo explicar que hubiera escuelas que logran que tivo de las escuelas. En quinto lugar, las diferencias se
sus alumnos tengan altos niveles de rendizaje a pesar relacionaron sistemáticamente con factores de las es-
de que aquellos proveniesen de medios sociales po- cuelas como organizaciones, tales como el grado de
bres, marginados y con escasos estímulos culturales? énfasis académico; las prácticas docentes en las activi-
Edmonds (1979) realizó una amplia revisión de dades de enseñanza; la existencia de estímulos y re-
pequeños estudios de caso que habían pasado des- compensas para los alumnos y en el grado en que los
apercibidos desde principios de los años setenta. Al alumnos podían tomar responsabilidad en distintas
esquematizar los hallazgos de cada uno, permitió con- áreas. “Todos estos factores estaban abiertos a modi-
figurar un nítido perfil de explicaciones que resulta- ficaciones realizables por el staff, más que fijadas por
ban convergentes en cada uno de los casos para la efi- restricciones externas”(Rutter et al 1979:178). En sép-
cacia de las escuelas eficaces en barrios pobres. Su timo lugar, se halló que los resultados escolares sí es-
propia explicación general adoptó la forma de una teo- taban asociados al balance socio-académico propio de
ría “intermedia” que luego fue denominada como “de la población escolar que llegaba a cada escuela. Los
los cinco factores”. Estos eran: a) el liderazgo peda- resultados eran mejores cuando existía un núcleo im-
gógico del director del centro; b) la obtención de con- portante de “alumnos intelectualmente promedio”. O
sensos activos por parte de los actores de una escuela lo que es lo mismo, cuando no existía una distribu-
en torno a la enseñanza de competencias básicas; c) ción de las habilidades de partida sesgada en contra
la construcción de fuertes redes de cooperación y co- de la escuela. Los autores finalizan señalando que “la
responsabilidad profesional entre los profesores; d) la asociación entre la medida combinada de los pro-
existencia de un clima ordenado con reglas precisas, cesos escolares con cada una de las medidas de re-
conocidas y estables; e) una apertura significativa de sultado fue mucho más fuerte que cualquier asocia-
la escuela hacia las demandas y evaluaciones. ción entre las variables individuales de proceso es-
Una de las teorías más exhaustivas construidas fue colar. Esto sugiere que el efecto acumulado de estos
presentada también en 1979 por parte de un grupo distintos factores sociales era considerablemente
de investigadores británicos en un informe titulado mayor que cualquier otro individualmente conside-
“Quince mil horas: las escuelas secundarias y sus efec- rado. La implicancia es que las acciones o medidas
tos sobre los niños”. En su introducción presentaba individuales robablemente se combinan creando un
las preguntas provocativas típicas de estos trabajos: ethos particular, un conjunto de valores, actitudes y
“Por casi doce años durante un período formativo comportamientos que devienen en características de
de su desarollo, los niños gastan la mitad de su tiem- la escuela como totalidad” (Rutter et al 1979: 179).
po de vigilia tanto en la escuela como en su hogar. Este enunciado fundó lo que podríamos denominar,
Tomado en su conjunto esto representa 15 mil horas la teoría de la organización social de la escuela, con
(desde la edad de 5 años hasta dejar la escuela), tiem- ascendencia en las tesis de clima organizacional intro-
po durante el cual las escuelas y los maestros debie- ducidas por la Escuela de las Relaciones Humanas
ran dejar un impacto en el desarrollo de lo niños a (Fernández 2001: cap. 3).
su cargo. ¿Tiene las experiencias escolares algún efec- Diez años más tarde, la evidencia conllevó a una
to?; ¿tiene importancia a cuál escuela asiste?; ¿cuá- complejización muy superior de la explicación dado

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que implicó combinar la teoría de los cinco factores basadas en la estrategia de estudios de casos, y com-
de Edmonds con la teoría sobre la organización social parar luego la consistencia teórica de todos los hallaz-
de la escuela.Mortimore y colaboradores concluyen en gos con tres investigaciones cuantitativas que constru-
Gran Bretaña, el Junior School Project (1988). Este es yeron modelos multinivel (HLM).
ya un extenso proyecto de investigación que combina
análisis cualitativo y cuantitativo de datos C.1. Estudios cualitativos
longitudinales sobre una muestra intencional de 50
El equipo técnico de la Unidad de Medición de Re-
escuelas primarias de Londres. En una forma muy sim-
sultados Educativos (UMRE) de Uruguay, realizó un
plificada, se pueden resumir sus conclusiones dicien-
análisis de diez escuelas primarias públicas ubicadas
do que los factores de la eficacia hallados eran: (a)
en contextos socioculturales desfavorables que habían
liderazgo con una visión fuerte no sólo del director
tenido indicadores de eficacia extremos en la evalua-
sino también de otros directivos; (b ) compromiso y
ción de 6tos. años de 1996 (Ravela et al 1999). Cuatro
participación de los profesores; ( c ) coherencia y co-
escuelas que tuvieron resultados muy debajo de lo
ordinación entre los profesores; (d ) actividades de
esperable dadas las características sociales de su
aprendizaje estructuradas y planificadas para los alum-
alumnado fueron denominadas “bloqueadas”, en tan-
nos en cada asignatura; (e) enseñanza intelectualmen-
to que seis escuelas que tuvieron resultados educati-
te desafiante para los alumnos; ( f) procesos muy
vos por encima de lo predecible fueron denominadas
interactivos entre cada estudiante y su profesor; ( g)
“eficaces”. En cada escuela se ubicaron al menos tres
hábitos escolares sistemáticos de registro de activida-
maestros que hubieran tenido a cargo la generación
des de aprendizaje; ( h) involucramiento y participa-
evaluada en algún momento de su trayectoria escolar.
ción de los padres; e ( i) “feedbacks” positivos hacia
Con cada uno de estos maestros se realizaron obser-
los estudiantes (Stringfield 1994).
vaciones de aula, entrevistas y análisis de documen-
En síntesis, en el marco de esta perspectiva teórica,
tos.
una escuela fue denominada eficaz en el caso en que
A modo de síntesis general, se hallaron cuatro gran-
hubiera obtenido “buenos resultados académicos” en
des dimensiones que diferenciaban a las escuelas efi-
las áreas básicas de la educación escolar (matemática
caces de las bloqueadas. En primer lugar, las primeras
y lengua), a pesar de estar trabajando con una pobla-
contaban con un estilo de dirección que fue denomi-
ción estudiantil proveniente de clases sociales subal-
nado como institucional”, en tanto en las escuelas blo-
ternas, obreras o urbano-marginales o también con
queadas se aproximaban a un estilo de“administración
minorías étnicas marginadas (como son los hispanos
de recursos”. Los directores de las seis escuelas efica-
y los negros en Estados Unidos). Estos “buenos resul-
ces desarrollaban su gestión poniendo gran énfasis en
tados” estarían confirmando lo que Edmonds (1979:20)
distintos aspectos relativos al proceso de enseñanza-
denominó su tesis central: “que todos los niños son
aprendizaje a nivel del aula, sea directamente compar-
eminentemente educables”. El término tiene una con-
tiendo clases, sea a través de visitas de orientación di-
notación adicional. La obtención de tales resultados
dáctica a las maestras nuevas. Todos presentaban una
más allá de la clase social de origen, convertiría a estas
alta motivación y satisfacción con la tarea que habían
escuelas en “eficaces” en relación a los ideales de “igual-
desarrollado en la escuela, en la medida en que sen-
dad” en las oportunidades de acceso a un mínimo ni-
tían que estaban cumpliendo con su vocación. Este
vel común de los conocimientos científicos y artísti-
relativo optimismo era transmitido a todos los miem-
cos que la sociedad define como su patrimonio cultu-
bros de la escuela.
ral. La idea de eficacia combinó calidad con equidad
en educación. En segundo lugar, las escuelas eficaces presenta-
ron relaciones positivas y fluidas entre maestros y fa-
milias, aunque con matices. Más que la participación
C. La investigación contemporánea de los padres en reuniones, clases abiertas o actos
sobre la eficacia escolar culturales, la diferencia decisiva se hallaba en la valo-
En la última década, la investigación educativa dio ración recíproca que padres y maestros se tenían. In-
un paso fundamental al realizar estudios con “estrate- cluso en unas escuelas, los maestros sentían que en
gias mixtas” en los que se combinaron los estudios ocasiones los padres se extralimitaban en sus
cualitativos de caso propios de las “Escuelas Eficaces” cuestionamientos al ingresar al terreno pedagógico.
con los estudios cuantitativos usuarios de grandes Sin embargo, aún en estas circunstancias, apreciaban
muestras representativas de todos los estudiantes nor- esta crítica en la medida en que la consideraban indi-
teamericanos. El objetivo de la nueva ola de investiga- cativa de un alto interés por el aprendizaje de los ni-
ciones ha sido explicar las características de las escue- ños.
las eficaces más allá de que sean públicas o priva- En tercer lugar, las escuelas eficaces se diferencia-
das. Resulta de interés reseñar brevemente dos inves- ban de las bloqueadas en el tipo de clima institucional
tigaciones cualitativas, una uruguaya y otra mexicana, que construían. Las primeras habían establecido una

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demarcación simbólica nítida entre escuela y barrio. escuelas fueron seleccionadas según si sus resultados
Este “adentro/afuera” luego se replicaba en un alto se habían incrementado o decrementado de un ciclo
respeto por los horarios de entrada y salida de clases; escolar a otro. A los efectos de presentar una breve
en el silencio que reinaba en las escuelas durante las síntesis de estos hallazgos conviene comenzar dicien-
horas de clases; todo lo cual repercutía en estimular el do que este estudio encontró diferencias en los mo-
trabajo académico. El conocimiento y claridad con que delos de gestión entre las escuelas incrementales y
se daban las normas de disciplina y convivencia en la decrementales, pero que sólo se observó un modelo
escuela permitía que niños y maestros pudieran regu- pedagógico básico con variaciones entre las escuelas
lar su comportamiento sin incertidumbres y además, (SEP 2001:16).
bajo una cierta expectativa de que se hacía lo correc- Las escuelas increméntales mostraron cinco mode-
to” en cada situación. los de gestión escolar diferentes, aunque dos de ellos
En cuarto lugar, en las escuelas eficaces fue posible fueron predominantes. el liderazgo académico y el
constatar la existencia de una visión organizacional que modelo de capital social positivo. El primero de ellos
nucleaba el consenso de maestros y directores sobre tenía por objetivo fundamental y prioritario la aten-
qué función tiene la escuela en el contexto en que es- ción al proceso de aprendizaje de los alumnos en to-
taba ubicada y con la cultura local con que trabajaba. dos sus aspectos condicionantes. Por esta razón se
Esta visión incluía tres aspectos centrales: por un lado, evaluaba frecuentemente problemas de aprendizaje;
una clara percepción acerca de la importancia del co- se detectaban necesidades de actualización entre los
nocimiento y la capacidad de uso de información para docentes; se gestionaban materiales y equipos
la vida y el futuro de los niños; simultáneamente, un didácticos; se motivaba la activa participación en con-
conjunto de expectativas positivas sobre las posibili- cursos escolares; se tenía especial cuidado con las es-
dades de aprendizaje de los niños; por último, ideas tadísticas de fracaso escolar (reprobación y deserción);
definidas acerca de qué características debe tener una se ofrecía ayuda especial para atender a los alumnos
escuela para alcanzar aquellos fines. Las expectativas con rezago, y se comunicaba de manera clara una
positivas se traducían en altos niveles de exigencia y intencionalidad de mejoramiento permanente. El se-
en señales positivas a los niños que se preocupaban gundo modelo de gestión de las escuelas
por superarse. Asimismo, los docentes reconocían y incrementales, denominado “de capital social positi-
asumían que lo que los niños aprendieran dependía vo” se basaba en asignar máxima prioridad a crear y
fuertemente de los procesos de enseñanza que ellos mantener un clima de confianza entre padres, maes-
mismos desarrollaban. tros, directivos y supervisores. Los instrumentos ge-
Finalmente, en todas las escuelas eficaces y por neralmente seleccionados con este fin eran la partici-
oposición a las bloqueadas, fue posible constatar una pación en instancias de discusión y resolución y la crea-
alta importancia otorgada a la lengua como eje trans- ción de espacios de trabajo colegiados entre los do-
versal del currículo. Sea en matemática, en historia o centes. Se promovía la comunicación franca, directa y
en ciencias, los maestros de estas escuelas eran cons- cordial. Las actitudes positivas y las buenas relaciones
cientes y trabajaban explícitamente el papel instrumen- eran valoradas incluso más que la exigencia académi-
tal que juega el dominio del lenguaje en la compren- ca.
sión de textos y en la producción de argumentos. Sin Las escuelas decrementales por su parte no presen-
embargo, más allá de esta diferencia no se encontra- taron un modelo predominante de gestión, sino que
ron diferencias marcadas en las prácticas de aula de se distribuyeron entre seis distintos. El modelo de “ca-
los maestros estudiados. La explicación dada a este pital social negativo“ se caracterizó por el alto nivel de
resultado es que la formación docente predominante tensión en el clima de la escuela. Se observó descon-
en el país ha disminuido al mínimo las diferencias fianza ya sea entre maestros como entre maestros y
didácticas, promoviendo prácticas centradas en la apli- familias. Esto obstaculizaba las comunicaciones y con-
cación mecánica de algoritmos, un bajo uso de la re- llevaba múltiples problemas de información incomple-
solución de problemas como estrategia. Desde este ta o errónea. La escuela solía levantar murallas simbó-
hecho, la conclusión fue que “las diferencias de los licas o incluso físicas, frente a sus enemigos externos.
resultados en el área de matemática no parecen obe- Un segundo modelo, denominado “formal-normativo”
decer a un escenario en que ciertas escuelas ense- se basaba en asignar máxima prioridad al cumplimien-
ñan bien y otras lo hacen mal, sino a un escenario to de las reglas, normas o acuerdos de manera más o
en que unas escuelas se esfuerza por enseñar y otras menos inflexible, así como considerar los aspectos
ya no lo hacen”(Ravela et al 1999:131). administrativos de la escuela como los más importan-
La Dirección General de Evaluación de la Secreta- tes en términos de esfuerzo, tiempo y reatividad. El
ría de Educación Pública de México presentó el año tercer modelo identificado se designó como “inercial
2001 un documento en el que se sintetiza un amplio decremental”. Al igual que el modelo inercial de las
estudio de casos realizado en 128 escuelas primarias escuelas incrementales, en este tipo de escuelas no se
durante dos ciclos escolares (desde 1997 a 1999). Las detectaron estrategias especiales orientadas a la inno-

11
Cuadro 1
Factores organizacionales que inciden en los aprendizajes: comparación de cuatro
modelos multinivel
Eficacia
Dimensiones Variables Perú 1998 Uruguay 1999 PISA 2000
Entorno institucional (estatal =1; otros=0) 0 0
Contexto de la (Selva = 0)
escuela Región geográfica en que se ubica la escuela Costa + (Interior=0)
Sierra + Ar. Met. 0
Porc. Indice socioeconómico de los alumnos de la + + +
Posición social escuela
de la familia Años experiencia docente del maestro (*) -, + +
Años estabilidad maestro en la escuela +
Práctica Indice de actividades pedagógicas no tradicionales 0
docente Indice de actualización pedagógica de los maestros +
Maestro c/ formación universitaria en matemáticas +
Num. Horas enseñanza matemática +
Biblioteca de aula +
Clima Ind. De clima disciplinario en el grupo + +
Ind. De relaciones maestro / alumnos del grupo +
Clima organizacional +
Escala y Tamaño de la escuela / grupo 0 0 (*) +, -
recurso de la Razón alumnos por maestro mayor que 50 -
escuela Infraestructura de la escuela 0 0
El director dice que no hay apoyo de los padres 0
% maestros de la escuela que participan en +
Gestión programas de desarrollo profesional
Evaluación que las familias hacen sobre la escuela +

Porcentaje de Nivel niños (intra escuela) 59% 70% 11%


varianza Nivel escuela / grupo (entre escuelas) 41% 30% 68%
explicada Nivel países (entre países) *** *** 32%
Fuente: elaborado en base a Boletín UMC No. 8 (2001) del Ministerio de Educación de Perú; Fernández 2002c; PISA (2001). (*) Variable
incorporada con una forma funcional cuadrática. Los casilleros en blanco indican que esa variable no fue medida y/o incluida en los
modelos.

vación. Predominaba la percepción de que las cosas mina concluyendo enfáticamente: “No se encontraron
“caminaban bien”, pero que podrían ir mejor. Estas evidencias de operación de actividades en la pers-
escuelas se mostraron extremadamente sensibles a pectiva construccionista, que es la que se ha reco-
cambios en el contexto institucional y local. (SEP 2001: mendado en los últimos años en los cursos de actua-
13 y ss). lización.” (SEP 2001: 17)
Como se indicó más arriba, este estudio de la SEP
halló análogamente como la UMRE: una escasa dife-
C.2. Los estudios multinivel (HLM)
renciación entre las prácticas docentes de uno y otro
tipo de escuela. Entre las escuelas mexicanas, predo- Ahora bien, los estudios cualitativos regionales en-
minaba un estilo que la bibliografía designa como “fron- frentan dos tipos de problemas metodológicos: la se-
tal”. El proceso pedagógico estaba centrado en el maes- lección no aleatoria de casos que puede generar sesgos
tro; la preocupación estaba en la enseñanza y no en el de selección y la generalización de los hallazgos al
aprendizaje; la explicación verbal era la principal for- universo de escuelas. Ambos problemas intentan ser
ma de transmisión pedagógica apoyada en el libro de en parte resueltos por los estudios basados en gran-
texto como única o principal fuente de información. des muestras aleatorias de alumnos y de escuelas. Li-
En matemática, se realizaban ejercicios más o menos teralmente “en parte”, porque la ganancia en
mecánicos, se memorizan los procedimientos y las representatividad implica, por lo general, una pérdida
rutinas de cálculo. Era extraño que se incentivara la en profundidad de los factores estudiados. Con esta
reflexión sobre alternativas de resolución frente a si- clara limitación en mente, las evaluaciones de apren-
tuaciones problemáticas. Las variaciones observadas dizaje han incorporado regularmente en sus estudios,
no alcanzaban a alterar el núcleo del modelo pedagó- cuestionarios organizacionales y pedagógicos orienta-
gico general. Entre las más importantes se hallaron la dos a relevar aquellos factores que la investigación
introducción de juegos, dinámicas, planeación y uso precedente señala como relevante.
de recursos didácticos diversificados. El estudio ter- Entre 1998 y el 2001, la UMRE de Uruguay, como

12
de la Unidad de Medición de la Calidad (UMC) del Perú marias tanto de Perú como Uruguay.2
y el Programa Internacional para la Evaluación de Es- Finalmente, conviene resaltar la variabilidad obser-
tudiantes (PISA del cual México forma parte), especi- vada en la magnitud en que incidirían los factores
ficaron modelos multinivel con los cuales analizaron organizacionales según lo estima cada uno de estos
de qué variables dependían los resultados en mate- estudios. El mínimo valor es el de Uruguay, que se
mática de los alumnos evaluados. Si bien, la compara- encuentra en el 30%; para el Perú asciende al 41% en
ción no puede ser directamente realizada ya que las tanto que el PISA estima en el 68% para el estudio de
poblaciones evaluadas no son las mismas ni se utilizó los 32 países participantes, el más alto nivel de todos.
una prueba equiparada, los resultados son interesan- Esto supone que un amplio margen de acción le que-
tes. da abierto a las políticas educativas que buscan mayo-
En el cuadro 1 se han incluido sólo los factores res niveles de igualdad en la educación.
organizacionales y pedagógicos medidos para los es-
tudios. Los resultados en líneas generales confirman
las tesis levantadas por las escuelas eficaces. Las varia- D. La agenda pendiente para
bles contextuales tienen un comportamiento diferen- Honduras
te según el tipo. Por ejemplo, se observa que no es El examen realizado de la teoría sobre los efectos
significativa la relación entre el carácter privado o pú- de la organización escolar sobre los aprendizajes ha
blico de la escuela ni en Perú ni en Uruguay. En cam- recibido atención entre los especialistas hondureños,
bio, tanto el área geográfica como índice particularmente los que trabajan en la UMCE. La pu-
socioeconómico medio presentan efectos que privile- blicación en 1997 de Factores asociados al rendimien-
gian a los niños que viven en las áreas más densamen- to académico proporcionó un detallado panorama so-
te pobladas o que asisten a escuelas con una pobla- bre el origen de las desigualdades educacionales ob-
ción de más alto status. servadas tanto en tercer como en sexto año de la en-
Las variables relativas al maestro del grupo se com- señanza primaria.
portan distinto para los estudios latinoamericanos y La exploración bivariada desarrollada por la UMCE
para el estudio del PISA. En Perú y Uruguay, priman (1997:105 y ss) permite extraer tres conclusiones. En
las características de la trayectoria profesional (expe- primer lugar, no existe una variabilidad grande en los
riencia y estabilidad en la escuela); en cambio para los aprendizajes, aunque es mayor en español que en
países de la OCDE la propiedad significativa radica en matemática y más importante en tercer grado que en
que el maestro tenga a nivel universitario una forma- sexto grado.
ción disciplinaria específica en el área que enseña. Es En segundo lugar, las variables identificadas como
de notar que para el caso de Uruguay, también se avan- significativas resultan en general consistentes con los
zó en identificar en 1999 como se había hecho en 1996, hallazgos internacionales y que fueron revisadas más
el efecto positivo y significativo que tiene la actualiza- arriba: área geográfica de residencia, la clase de escue-
ción pedagógico didáctica del maestro, hallazgo que la, el tamaño de la escuela, la razón entre alumnos y
está en la línea de la preparación disciplinar. Otras dos docentes por grupo, el grado de cobertura del pro-
variables relativas a las interacciones maestro-alumnos grama, el tipo de administración escolar, el capital cul-
a nivel del aula también son significativas en estos es- tural familiar y la ocupación. Sin perjuicio de que el
tudios: el tipo de relaciones entre maestros y alumnos análisis se mantiene en el nivel bivariado sin construir
(PISA), el clima disciplinario del grupo (Uruguay , PISA) un modelo multivariado, de los cuadros presentados
y el número de horas que efectivamente se dedican a surge como razonable la hipótesis de que las desigual-
la enseñanza de matemática, descontando problemas dades más grandes se encuentran al considerar el ca-
y demoras (Perú). Estas variables condicen con la lí- pital cultural familiar medido a través de los años de
nea de investigación sobre las salas de clase efectivas escolaridad, las disposiciones educacionales futuras
(Slavin 1997). medida a través de la expectativa de máximo grado a
A nivel de la escuela han resultado relevantes el cli- alcanzar, la posición ocupacional y el equipamiento
ma organizacional (Uruguay), la evaluación que los familiar. Lo cual confirma la tesis central de la estratifi-
padres hacen de la escuela (Uruguay), la disposición cación social de los aprendizajes.
de equipamiento satisfactorio (Perú) y el tamaño de la En lo que respecta estrictamente a los factores es-
escuela (PISA). El clima y la relación con las familias se colares los hallazgos muestran relaciones bivariadas
corresponde tanto con los hallazgos cualitativos co- débiles. El tipo de administración ordena a las escue-
mentados más arriba en este mismo apartado, como las desde las más exitosas (privadas bilingües) hasta
también con la teoría clásica de Edmonds sobre los las menos exitosas (las rurales); pero dado que no se
cinco factores de eficacia. La escasa evidencia relativa controla la composición de la escuela no se puede dis-
a la incidencia de la infraestructura debe sin embargo
interpretarse con cautela, dadas las graves carencias
que en general aquejan a casi todas las escuelas pri- 2 Respecto de Uruguay ver UMRE 1997.

13
Cuadro 2
Honduras: factores sociofamiliares asociados
II
al rendimiento en Matemáticas, 1997
Factor Matemática Matemática E. La medición de la eficacia escolar
asociado 3er. Año 6to.
Actividad económica del padre Para realizar un estudio sobre efectividad escolar
Obrero 48.5% 47.0% es necesario adoptar tres grandes definiciones concep-
Agricultura 49.0% 48.1% tuales y metodológicas: i) cuál es el objetivo de la edu-
Profesional 59.6% 50.7%
Educación 3.6% 55.8%
cación formal que va a ser evaluado; ii) cuál es el me-
Escolaridad de los padres jor indicador disponible para medir ese objetivo; y iii)
Ningún año 50.9% 47.9% qué metodología permitirá determinar si una escuela
6 años 51.1% 49.4% es o no eficaz en el sentido en que este concepto ha
Más que 12 años 57.7% 57.0%
sido desarrollado en los apartados anteriores. Tomar
Fuente: Elaboración propia a partir de UMCE 1997. estas decisiones implica resolver serios problemas teó-
ricos y metodológicos, en un contexto en que, para la
tinguir si el más alto resultado es debido al tipo de región latinoamericana, no hay demasiados consen-
administración o a los orígenes sociales. Las escuelas sos elaborados al respecto de estos temas.
que tienen un más alto nivel de equipamiento didácti- Para comenzar, la teoría clásica introdujo el con-
co y edilicio logran también un más alto promedio en cepto de “escuela eficaz” para distinguir las escuelas a
matemática (r=0,17). También se observa una relación partir de los aprendizajes cognitivos que obtenían sus
positiva pero débil entre tamaño de la escuela y resul- alumnos. Esta selección de un objetivo último de la
tados matemáticos de sexto (r=0,14). Llaman la aten- educación, el aprendizaje, implica como consecuen-
ción otros dos resultados: por un lado, las escuelas cia, minimizar otros objetivos morales, cívicos o reli-
con docentes multigrados tienden a disminuir el re- giosos, a la vez que considerara insuficiente un análi-
sultado del alumno en sexto (r=- 0,13); por otro, cuán- sis de los objetivos elementales de la escolarización
to más alto fue el contenido cubierto en el desarrollo (cobertura, abandono, acreditación del nivel, grado de
del curso de matemática, más alto fue el resultado fi- avance). Si bien el consenso mundial sostiene que es
nal en matemática de sexto (r=0,18). Esto hace pen- necesario evaluar la calidad de los aprendizajes en las
sar si no habrían relaciones entre ambas variables y la áreas de matemática, ciencias y lenguaje, para varios
desventaja del multigrado no estaría explicada en gran países de la Región entre los que Honduras se incluye,
parte por la imposibilidad de concluir el programa. no es posible desconocer los objetivos pendientes de
Ahora bien, el avance que se ha realizado en la in- incluir universalmente en las escuelas a todos los ni-
vestigación constituye un paso importante, aunque su ños de cada cohorte o de que éstos finalicen en seis
naturaleza es meramente preparatoria, al menos por años acreditando el nivel. Lo ideal en este contexto,
razones fundamentales. Por un lado, la investigación sería combinar ambos tipos de indicadores.
sobre la eficacia escolar ha confirmado la tesis de Rutter El segundo tipo de problemas tiene relación con
et al (1979) al mostrar que los determinantes del ren- los indicadores. A partir de una respetable acumula-
dimiento son configuraciones o interacciones entre ción de investigaciones sobre prácticas de evaluación
factores y no meramente factores aditivos. Por otro en el aula y en las escuelas, se ha formado un consen-
lado, la teoría elaborada ha recibido corroboración en so amplio sobre la necesidad de evaluar la eficacia,
países con alto o medio alto desarrollo humano, en utilizando pruebas estandarizadas en las áreas de ma-
los cuales está presente un alto grado de temática, lengua o ciencias, aplicadas de acuerdo a
institucionalización de la asistencia y obtención de la estrictos procesos que garanticen la validez y
credencial educativa primaria y una alta y sostenida confiabilidad de las mediciones. En otras palabras, los
inversión educativa. En consecuencia, es necesario ser resultados educativos administrativamente generados
cautelosos con la extensión acrítica de las teorías a por las escuelas, tales como tasas de repetición, de
Honduras. Se hace necesaria nueva y más profunda abandono y de promoción, no son los más adecuados
investigación sobre eficacia escolar que incluya el ajuste para medir la eficacia. Pero inmediatamente surge la
de un modelo multivariado especificado correctamen- pregunta de cómo diseñar una prueba de aprendiza-
te con los indicadores derivados de la teoría jes válida para todos los niños de al menos un país,
organizacional. cuando cada escuela y cada maestro en su aula
enfatizan distintos objetivos y proyectos. La respuesta
a esta pregunta supone a la vez una fuerte discusión
sobre las curricula obligatorias, las competencias a
desarrollar y los objetivos terminales para cada grado
en particular. Por esta razón, la definición de
indicadores de aprendizaje en cada país ha requerido

14
de un proceso de concertación con dimensiones polí- la mayoría de los países de la región, donde incluso se
ticas y pedagógicas interrelacionadas del cual depen- han verificado episodios de ocultamiento de las eva-
de en buena medida el éxito de las evaluaciones luaciones de aprendizaje, como el sucedido con el
(Benveniste 2000). Estos acuerdos se suelen documen- Laboratorio Latinoamericano de la UNESCO. En este
tar entre otros medios, en una “tabla de especificacio- contexto, el caso de Honduras es bastante particular.
nes de las pruebas” en las que se detallan las distintas Por un lado resulta una fortaleza institucional que el
competencias y subcompetencias involucradas en cada país cuente desde el año 1995 con una unidad externa
área, así como los indicadores alternativos para su de evaluación, concertada entre la Secretaria de Edu-
medición que se plantean en términos de estándares cación y la Universidad Pedagógica. La UMCE ha reali-
a ser alcanzados al cabo de un ciclo (Ravela et al 1999; zado dos relevamientos a nivel de la Educación Prima-
Ravela 2001). ria: en los años 1996 y 1999 fueron evaluados los 3eros
Ahora bien, en tercer lugar para estimar cuáles son y los 6tos años. Pero, por otro lado, es una debilidad
los efectos propios de la escuela es necesario distin- que sólo se haya tenido acceso a estos datos mediante
guir teóricamente los efectos que pueden ser atribui- publicaciones escritas.
dos a las características familiares o innatas del alum-
no. Como los niños comienzan la escuela primaria pre-
sentando ya diferencias importantes tanto en el pro- F. Enfoques para medir la eficacia
ceso de socialización primaria, los resultados educati- escolar
vos deben ser controlados o depurados través de al- Estos problemas y las alternativas de decisión pue-
gún método de análisis estadístico multivariado. Esto den sistematizarse en un conjunto de “enfoques” ge-
se ha realizado en general, de dos formas. Por un lado, nerales. Varios autores han discutido la validez y ex-
levantando a través de encuestas dirigidas a los padres, tensión de estos enfoques, entre ellos, Rutter et al
una amplia batería de variables sociofamiliares relati- (1979), Brian Rowan et al (1983) Craig Richards (1991)
vas a la ocupación, tenencia de bienes, estructura fa- y Schafer, Yen & Rahman (2000). A partir de estas revi-
miliar, educación de los padres, y diferentes disposi- siones, se pueden identificar cuatro grandes estrate-
ciones culturales. Estas variables son luego incorpora- gias sobre cómo medir la eficacia de una escuela: a) el
das a un análisis de regresión. Por otro lado, también enfoque comportamental; b) el enfoque la calidad re-
se han considerado realizar mediciones de desarrollo lativa o del valor agregado; c) el método combinado
cognitivo y/o lingüístico al inicio de la escolaridad (Mara de Edmonds; y d) los diseños longitudinales de panel.
2001). Cuando se disponen de estas variables, es fre- Cada una de ellas implica tres elementos: un indica-
cuente que se cree una nueva medida de aprendizaje dor de resultado educativo, una fuente de informa-
a partir de la “ganancia” entre el inicio y el final; o que ción y un control estadístico de las variables de con-
se incorpore como un regresor más al análisis texto.
multivariado (Rutter et al 1979;Lee & Croninger 1994). La estrategia comportamental resulta la más sim-
Estas exigencias teóricas abren varios problemas ple y a la vez más cuestionable de todas, ya que opera
adicionales. El más importante de todos es que para con resultados educativos “tradicionales” admi-
ser análisis sólidos de efectividad escolar es necesario nistrativamente generados. Aún con estos problemas,
contar con un sistema nacional de evaluación que pro- puede resultar ser el único disponible en varias situa-
porcione con regularidad una estimación de resulta- ciones.4 Este tipo de enfoques se concentra en exami-
dos educativos válidos y confiables respecto de la po- nar las variaciones existentes entre escuelas con res-
blación de alumnos que cursan la educación básica.3 pecto a ciertos comportamientos estudiantiles que son
En América Latina, esta exigencia metodológica pue- definidos como básicos para el desarrollo de los pro-
de ser satisfecha porque varios países cuentan ya con cesos de aprendizaje: la asistencia y el buen compor-
organismos especializados en la realización de evalua- tamiento disciplinario. La asistencia regular a la escue-
ciones estandarizadas: Argentina (IDECE, actual DGE), la es considerado a la vez como un prerrequisito
Brasil (SAEB), Chile (SIMCE), Honduras (UMCE), Méxi- comportamental para la internalización de las pautas
co (SNEE), Paraguay (SNEPE), Perú (UMC), Uruguay de orientación cognitivas y morales transmitidas por
(UMRE). la socialización escolar. Se podría fundamentar que las
A su vez, es imprescindible para el desarrollo de características de la enseñanza y de la etapa psicológi-
estos estudios, que los investigadores accedan a tra- co-evolutiva tanto de la infancia como de la pre-ado-
bajar directamente con el conjunto de los microdatos
de una evaluación. Tal exigencia se ha resuelto con
criterio restrictivo por vía de permisos o licencias de 3 Tal vez esta sea una buena razón por la que esta perspectiva haya podido ser
recibida solamente en aquellos países que han desarrollado un sistema de eva-
investigación, o con criterio amplia publicidad, median- luación educativa que se esfuerzan por cumplir esos estándares de calidad en el
te la liberación pública de las bases a través de Internet, diseño.
4 En una investigación realizada en 1998 sobre una muestra nacional de cen-
como ha sido el caso de Argentina o del propio TIMSS. tros públicos uruguayos que imparten el ciclo básico de educación media, esta
En general, esta exigencia aún está por cumplirse en fue la estrategia finalmente utilizada.

15
lescencia, requieren de la interacción diaria entre los
profesores y los alumnos. Las ausencias prolongadas Recuadro 1
o reiteradas por más de un período de tiempo deter-
“Nosotros también utilizamos una definición particular de
minado, permitiría inferir una discontinuidad no re- una escuela eficaz: es aquella en la que la proporción de
parable en el proceso de enseñanza y por tanto, una niños de bajo nivel socioeconómico que demuestran
presunción fuerte de falta de carencias en el dominio maestranza en las competencias básicas es virtualmente
cognitivo de los contenidos y competencias exigibles idéntica a la proporción de los alumnos de clase media
en ese grado escolar. Coexiste también otra interpre- que lo hacen. Si una escuela no cumple con este test,
ninguna otra cosa podrá cualificarla como efectiva. Su-
tación: desde la Teoría de Sistemas, se enuncia que pongamos que una escuela tiene el 50% de alumnos de
una escuela es un sistema de decisiones cuya caracte- clase media y un 50% de alumnos de clase baja, que el
rística central es el condicionamiento de la membrecía. 96% de los alumnos de clase baja demuestran maestranza
Las organizaciones, más allá de cuál sea el tipo especí- anualmente: esa escuela podría ser nominada como efec-
fico, requieren alcanzar y estabilizar la membrecía a tiva sólo si el 96% de los alumnos de clase baja demues-
tra anualmente maestranza académica. Esto no significa
través de decisiones de inclusión/exclusión de las per- que las escuelas necesariamente lleven a los niños a des-
sonas y así garantizar la reciprocidad en el desempeño empeñarse iguales. Incluso en las escuelas efectivas, los
normal de sus papeles, y la reducción de la contingen- niños de clase media como grupo todavía sobrepasan a
cia. En una organización escolar, la inasistencia pro- los niños de clases bajas como grupo. Esto no viola nues-
longada de un miembro pone en cuestión el éxito de tro estándar porque nosotros requerimos solamente que
la proporción de aquellos que exceden el mínimo deben
la organización en condicionar su inclusión. Respecto ser aproximadamente la misma”. (Edmonds 1979:95)
al comportamiento disciplinario hay menores antece-
dentes de su uso como indicador de eficacia en la bi-
bliografía, con la excepción notable nuevamente de en el tramo superior, de más una desviación, fueron
Rutter et al (1979: 47 y ss). Estos investigadores defi- definidas como “efectivas”, dado que obtuvieron re-
nieron un estándar mínimo de buen comportamiento sultados por encima de los previstos según los capita-
que luego fue contrapuesto con un conjunto de com- les culturales con los que ingresaron sus alumnos. En
portamientos indeseables tales como faltas, mentiras, otras palabras promovieron una movilidad cultural as-
ruidos molestos en el aula, palabras consideradas gro- cendente en sus alumnos. Por el contrario, las escue-
seras, rayados en las paredes, etc. las que tuvieron residuos de menos de una desviación
Una crítica radical dirigida contra este enfoque es estándar negativo (S<-1), fueron definidas como “blo-
que no atiende estrictamente al aprendizaje cognitivo queadas”, dado que sus resultados eran peores de lo
sino que se concentra en aspectos morales y que por que cabría esperar de acuerdo a las características so-
tanto, está más ligado a la perspectiva funcionalista que ciales de sus alumnos. Las demás escuelas fueron de-
al nuevo paradigma sobre la educación. Otra crítica nominadas como “predecibles” (Ravela et al. 1999).
frecuente señala que este enfoque opera sobre fuen- Se señalan debilidades a este enfoque. Por un lado,
tes administrativas de información, que en general son este enfoque permite clasificar como eficaces también
de reducida confiabilidad por múltiples motivos. a aquellas escuelas que obtuvieron bajos niveles abso-
El enfoque de la calidad relativa relativa, tam- lutos de logro, asignando prestigio a escuelas a las que
bién denominado “del valor agregado”, intenta supe- la opinión pública no definiría como tal. Por otro lado,
rar las críticas hechas al anterior enfoque mediante el si bien Schafer et al (2000) compararon los resultados
uso de indicadores de resultado generados mediante obtenidos por los tres métodos y señalaron altas co-
evaluaciones estandarizadas y controlados esta- rrelaciones entre las estimaciones obtenidas, recomen-
dísticamente con variables antecedentes so- daron que “el abordaje de HLM debería ser utilizado
ciofamiliares opersonales. De acuerdo a Schafer et al para las medidas de efectos de la escuela sobre la
(2000), existen tres técnicas estadísticas distintas para base de su estabilidad”.
estimar un efecto ajustado de la escuela controlando El enfoque combinado de la calidad y de la
los factores sociofamiliares; éstos son: i) el modelo de equidad se presenta como crítico tanto del primero
mínimos cuadrados ordinarios (OLS); ii) el modelo de y del segundo. El centro de la discusión es el carácter
regresión ponderado (WLS)y iii) el modelo jerárquico encubridor que puede tener un indicador de logro pro-
lineal (HLM). El más frecuentemente utilizado es el ducto de la agregación (promedio) de resultados indi-
primero. En él, se estima la eficacia a través de una viduales en una escuela que generalmente es
análisis de regresión lineal múltiple, en el que al resul- policlasista. Por lo tanto, un promedio alto puede no
tado de aprendizaje observado se le resta el resultado estar indicando eficacia en el sentido aquí dado, sino
previsto según la clase social de la escuela. Estos “resi- por el contrario una situación análoga a la que existe
duos” son estandarizados y finalmente recategorizados en el sistema educativo: que los niños de más alto ni-
en tramos. La UMRE de Uruguay utilizó este enfoque vel social obtienen en esa escuela los más altos resul-
para su informe con los resultados de la evaluación de tados. Dicho en otras palabras, se requiere de un indi-
1996. En esa ocasión, aquellas escuelas que quedaron cador de eficacia que describa precisamente qué pasa

16
con la relación individual entre clase social y logro, y los niños reciban su acreditación formal de haber rea-
no relaciones promediadas a nivel de escuelas entre lizado todo el ciclo, sin consideraciones de clase so-
estas propiedades analíticas de los colectivos. En este cial, geográficas o de género. A mediados de los años
sentido, la medida de logro preferida es por lo gene- sesenta, en toda la región esta fue una preocupación
ral, aquella que indica el dominio o maestranza de las muy extendida en todos los países de la región, y en
competencias escolares básicas: en lugar del prome- este sentido, las altas tasas de abandono escolar reci-
dio se prefiere utilizar el “porcentaje de alumnos sufi- bieron gran atención. El paso siguiente ha sido poner
cientes” pero dentro de cada categoría social existen- el objetivo de la acreditación del nivel en el tiempo
te en la escuela. curricularmente establecido, considerando a la vez las
El diseño longitudinal de panel, utilizado en tasas de repetición y de abandono escolar. Los proble-
general con el método combinado, constituye una “so- mas de alta repetición en los dos primeros grados de
fisticación” en relación al problema de la eficacia al tras- Primaria pasaron a tener gran importancia dentro de
ladar la determinación de los indicadores al momento este objetivo que recibió el nombre de “eficiencia ter-
del diseño de la investigación. Se ha puesto en prác- minal”. Finalmente, el cuarto objetivo en profundidad,
tica a través de la medición de logro en una misma es alcanzar niveles altos de calidad y equidad en la dis-
población estudiantil de la escuela secundaria en los tribución de los aprendizajes de los niños. Evidente-
estudios del Departamento de Educación de Estados mente, cuando se llega a este plano, las soluciones
Unidos High School & Beyond (HSB 1982-1984) y administrativas de suprimir la repetición resultan tri-
National Educational Longitudinal Study (NELS1988- viales: de nada servirá que el niño egrese de sexto año
1990-1992). El argumento crítico que promovió tal si no desarrolló las competencias que se supone que
extensión es que los modelos no contaban con varia- debería haber adquirido. La credencial sin contenido
bles de control que permitieran conocer el nivel de creíble y corroborable sufre un acelerado proceso de
desempeño inicial de los estudiantes. Esto suponía que devaluación.
no podía saberse realmente si la escuela había inter- Nosotros nos situaremos en la consideración del
venido logrando un cambio en el nivel de logro del tercer objetivo, la democratización de la acreditación
alumno a través del tiempo de escolarización. El indi- en un tiempo óptimo y proponemos un análisis sobre
cador de eficacia de la escuela pasa a ser ya no el resul- la eficacia terminal. No se trata de una mera relación
tado absoluto sino el nivel de ganancia o pérdida de de maximización de resultados o de minimización de
cada alumno en la escuela (Lee & Croninger 1994). gastos; lo cual sin dudas está involucrado. Más bien se
trata de la capacidad del sistema educativo de que los
alumnos egresen titulados en el tiempo en que el cu-
G. Eficacia terminal de la rrículum prevé que es óptimo para adquirir los apren-
escolarización primaria dizajes que la sociedad definió como básicos. Se trata
Tal como se desprende de la anterior sección, el por lo tanto, de la eficacia terminal del sistema.
análisis de la eficacia escolar debiera basarse en un di- Es claro que Honduras se encuentra en la coyuntu-
seño de panel, que relevara aprendizajes medidos por ra del tercer objetivo: lograr no solo una alta
pruebas estandarizadas y equiparadas y que fuera escolarización sino una democratización de la acredi-
acompañado por encuestas a las familias y a las orga- tación del nivel primario. En consecuencia, el estudio
nizaciones escolares. Este desiderátum teóri- de la eficacia escolar focalizado en este concepto de
cometodológico, difícilmente es realizable en nuestros acreditación en tiempo óptimo, permite evaluar cuán
países por el momento. Es necesario por lo tanto, rea- bien se desempeñan las escuelas en este contexto de
lizar aproximaciones al objeto de estudio a través de las políticas. Pero, así como consideramos que puede
los datos disponibles. En los países con acceso a los ser un enfoque aproximativo solvente, es necesario
microdatos generados por los sistemas de evaluación explicitar y adelantar algunos riesgos. El más impor-
los problemas son menores en este sentido, dado que tante de todos consiste en suponer que la mayor efi-
se puede trabajar con información válida y confiable. cacia se alcanza suprimiendo la repetición en los gra-
Sin embargo, en el caso de Honduras, las dificultades dos inferiores mediante algún tipo de promoción au-
para acceder a los microdatos de UMCE , nos llevaron tomática. La experiencia muestra que cada vez que en
a adoptar un enfoque comportamental y credencialista nuestros países se implementó esto, tuvo resultados
para aproximarnos a nuestro objeto. catastróficos sobre la calidad de los aprendizajes.5
El objetivo mínimo de una política de escolarización Este abordaje ha sido trabajado anteriormente en
universal en la Educación Primaria, consiste en demo- varios países (Muñoz Izquierdo ) y también en Hon-
cratizar el acceso de todos los niños al nivel, bajo con- duras. El cuadro 3 presenta la serie publicada para el
diciones equitativas de prestación del servicio. Este período 1990-1997. Se puede apreciar que durante los
objetivo correspondió a la etapa fundacional de los años 90 la tasa ha fluctuado en forma significativa en
sistemas educativos. Un segundo objetivo derivado de
aquel, es la democratización del egreso, es decir que 5 Por ejemplo, ver Rama 1992.

17
Cuadro 3
Eficacia terminal de la Educación Primaria de Honduras para los años 90
1990- 1991- 1992- 1993- 1994- 1995- 1996- 1997-
1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998
Tasa 49.7% 72.7% 65.7% 65.1% 60.4% 64.7% 64.2% 64.0%
Fuente: «La educación en cifras 1990-1999».

cerca de 23 puntos, con grandes oscilaciones entre los de la población estudiantil a lo largo del año debido a
ciclos escolares, desde niveles tan bajos como el 50% migraciones, problemas metereológicos, etc, y por tan-
del año 91 al 73% en 1992 para caer al 60% en el año to se fijó la tasa de eficacia en 0. En otras, faltaron da-
1995. La serie que llega al año 1998, antes del Mitch, tos para al menos un grado, lo que imposibilitaba el
muestra una tendencia a estabilizar la eficiencia inter- cálculo. Quedaron en total fuera del análisis 4035 es-
na del sistema educativo hondureño debajo de los dos cuelas que representan el 40,2% del universo inicial
tercios de ingresados. existente en la base de datos. El conjunto de decisio-
nes han supuesto un descarte de escuelas oficiales
rurales (267,7%), de privadas urbanas (40,4%) y priva-
H. Estimación de la eficacia interna das rurales (37,4%). En consecuencia, con mayor ra-
Con base en estos antecedentes, procederemos zón aún es imperioso tomar con prudencia las conclu-
ahora a construir un indicador de resultado que mida siones a que se pueda arribar con este análisis
la eficacia del sistema para acreditar el nivel primario exploratorio.
en cada escuela a la que asisten los niños hondureños Con esta advertencia en mente, se procedió a cal-
desde el primer grado. Los indicadores de resultado cular para cada escuela una nueva variable a partir de
educativo que se utilizarán son aquellos generados la combinación de las anteriores que mide la probabi-
administrativamente por las escuelas como parte de lidad que tiene un niño que ingresa a la escuela en
su ciclo anual: repetición y deserción. En esta ocasión primer año de finalizar exitosamente la educación pri-
estos han sido relevados a través del Censo de Educa- maria al cabo de 6 años. Esta medida se ha interpreta-
ción realizado por la Secretaría en el año 2000. El Cen- do en general como la tasa de eficiencia terminal o
so relevó para cada grado de primaria, cuántos niños coeficiente de eficiencia interna para una cohorte hi-
habían matriculados, cuántos habían abandonado y potética.
cuántos habían desertado. Los períodos de referencia Entrando al análisis sustantivo de los resultados
para cada pregunta no son necesariamente iguales: (Cuadro 4), el primer aspecto a destacar es el magro
“Marque la letra que corresponde a sección del gra- desempeño que tienen las escuelas primarias hondu-
do que atiende, el número de alumnos, el número reñas contrastado con las urgentes tareas educativas
de repitentes del año anterior y el número de deser- planteadas en el contexto de la globalización. Este pri-
tores del presente año.”(SE 2000: 8). mer indicador de resultados muestra que un niño que
A los efectos de trabajar con esta información se
formularon los cinco supuestos relativos a la estabili-
dad de los estadísticos relevados en el Censo (Recua- Recuadro 2
dro ). En la medida en que hubiera información publi- Supuestos para el cálculo de una tasa de
cada sobre estos aspectos, se han contrastado la eficacia
razonabilidad de estas suposiciones. 1) Las cifras de alumnos que abandonaron o que repitie-
El universo inicial de 10034 escuelas tuvo variacio- ron, relevadas por el Censo a través de la encuesta a
nes importantes en razón de las sucesivas decisiones los maestros de primaria son válidas y confiables.
adoptadas. En principio, se retiraron del análisis nove- 2) Las tasas de repetición y de deserción se mantuvieron
relativamente estables entre el ciclo escolar 1999 y el
cientas escuelas que carecían de información (9,4%). 2000.
Siguiendo algunas decisiones tomadas por la UMCE 3) Las tasas de repetición para cada grado se han mante-
(2001: 13 y ss) se retiraron del análisis las escuelas in- nido estables y que por tanto, las relevadas en el año
2000 resultan buenos estimadores de las que se podrían
completas, es decir aquellas que reportaron “cero” observar en los próximos años manteniendo constantes
alumnos en alguno de los grados de 1º a 6º . Esto im- las condiciones actuales.
plicó sacar del análisis casi tres mil escuelas. Sencilla- 4) Las tasas de abandono para cada grado se han mante-
mente no era razonable estimar una tasa de eficacia nido estables y que por tanto, las relevadas en el año
2000 resultan buenos estimadores de las que se podrían
terminal para escuelas en las que no se dispone de observar en los próximos años manteniendo constantes
esta posibilidad por no contar con todos los grados. las condiciones actuales.
En otras pocas escuelas, las cifras de deserción y de 5) La inscripción o matrícula en las escuelas declarada en
el año 2000 resulta un buen estimador de la matrícula
repetición superaban a los alumnos inscriptos en el promedio de la escuela en un período más amplio de
grado, lo cual implicaba resultados negativos. Se su- año.
puso que estas escuelas presentaban gran movilidad

18
Cuadro 4 puede desconocer los factores del entorno que con-
Honduras: indicadores de Eficacia Terminal dicionan, restringen o favorecen el desempeño de la
estimado para las Escuelas Primarias (2000) escuela. Este apartado se ocupa de identificar el im-
pacto de estos factores a través de observar las dife-
Estadístico Magnitudes rencias de eficacia que existen de acuerdo al entorno
Promedio nacional 62.50% que enfrentan las escuelas hondureñas. El análisis
Mínimo 0.00% exploratorio se realizará controlando contextos: las
propiedades socioterritoriales, e institucionales de las
Máximo 100.00%
escuelas; y socioculturales de los municipios en que
Desvío estándar 24.65% se encuentran las escuelas. Dado que, como se señaló
Coeficiente de variación 39.44% más arriba, no se disponen de los datos sobre las ca-
Fuente: Elaboración propia en base del Censo Escolar del año racterísticas socioculturales de la población escolar en
2000 realizado por la Secretaría de Educación de Honduras. sí misma y por tanto deberán aproximarse a aquellas a
través de propiedades del contexto. Se utilizará la in-
ingresa a la escuela tiene una probabilidad de 62,5% formación proveniente de la Encuesta de Hogares más
de finalizar acreditando el ciclo en 6 años. A la inversa, recientemente disponible (setiembre de 1999) y se
más de uno de cada tres niños hondureños que ingre- seleccionarán indicadores de escolarización e ingreso
sa a primer año de Primaria no completará el ciclo en para dos tramos de edades. La cobertura será evalua-
el tiempo curricularmente estipulado. da en la subpoblación de niños entre 5 y 13 años, en
El nivel de eficacia varía en forma significativa entre tanto que los logros de ingresos y de capital escolar
escuelas, observándose ambos valores extremos. Los serán evaluados en la subpoblación entre 14 y 65 años.
niños no tienen las mismas probabilidades de concluir Existe una moderada pero estadísticamente signifi-
el ciclo, importando y mucho a cuál escuela asista un cativa heterogeneidad en los niveles de eficacia para
niño para anticipar si concluirá exitosamente su Edu- cada una de las mayores jurisdicciones políticas del
cación Primaria. Las diferencias entre escuelas refie- país (Cuadro 5). Observando el indicador de eficacia
ren a una desigualdad en las oportunidades educati- terminal para los departamentos del país, se encuen-
vas. tra que la más alta eficacia se encuentra en Copán (69)
Es necesario contextualizar este dato con otros y cotepeque (68), en tanto que la más baja es propia
indicadores del desempeño del sistema y que se rela- de los departamentos de Gracias a Dios (43) y
cionan con la escolarización. La tasa de cobertura en Comayagua (53,0). Por debajo del promedio nacional,
educación primaria ha alcanzado un nivel alto para se encuentran ocho departamentos en tanto que por
todo el país, aunque con diferencias regionales impor- encima de la media hay nueve. Colón y Paraíso tienen
tantes que señalan la existencia de grandes problemas un nivel de eficacia terminal similar al promedio na-
de escolarización. Al año 1999, un 10% de los niños en cional. La variabilidad dentro de cada departamento
edad escolar no asistían a la escuela primaria. Esto sig- medida por el coeficiente de variación, también resul-
nifica que aproximadamente una mitad de los niños ta significativa de considerar. Los departamentos de
hondureños pueden concluir la Primaria en seis años Copán y La Paz resultan ser los menos heterogéneos,
y que muy probablemente el resto abandone la escue- en tanto que Gracias a Dios presenta la más alta varia-
la sin terminarla. Esto imposibilita seriamente la for- bilidad.
mación de capital humano a mediano plazo por más El comportamiento de la tasa de eficacia por de-
que el promedio de años de escolaridad pueda seguir partamento parecería seguir un patrón de regularidad
incrementándose. Un rezago histórico en la formación fuerte y lógico cuando se la relaciona con la tasa de
de capital tan importante sumado a las urgencias con- cobertura bruta de la Educación Primaria. Tal como se
temporáneas que impone la globalización, exigen un puede apreciar en el gráfico 1, el crecimiento de la
desempeño compensador francamente más elevado cobertura bruta tiene una fuerte relación (R2 = 0.63)
que el actual. Para esto es necesario lograr a breve pla- pero parabólica con la tasa de eficacia. En una primera
zo que por lo menos el 90% los niños permanezcan, fase es positiva: cuanto más alta es la cobertura, ma-
aprendan y concluyan el ciclo primario. Este es un yor es la eficacia. Se destacan los departamentos de
problema de escolarización en el que la escuela está Lémpira, Yoro, Paraíso, Olancho y Copán. Esto hace
en el centro. ¿Qué hace que los niños completan el pensar en la incidencia que tiene lograr que la pobla-
ciclo escolar en los años previstos?. ción objetivo valore la escuela y asista a ella. Llegado a
cierto punto próximo al 90%, la repetición empieza a
presionar a la baja la eficacia terminal. Es la situación
I. Factores contextuales asociados a la de los Departamentos de Cortés, Colón, Intibucá y
eficacia particularmente, Gracias a Dios.
Aún aceptando la tesis de que los problemas de la Una forma más precisa de observar las diferencias
educación primaria son de tipo organizacional, no se en la eficacia atribuible a cuestiones territoriales, es a

19
Cuadro 5
Honduras: eficacia terminal estimada para las escuelas primarias según departamento, 2000

Eficacia Coeficiente Total


Departamento terminal Desvío variación escuelas
Atlántida 65.9 24.7 37.1 300
Colón 62.6 23.2 43.5 211
Comayagua 52.7 23 32.1 434
Copán 68.8 22.1 34.6 218
Cortés 65.5 22.7 37.4 496
Choluteca 62.1 23.2 40.8 498
El Paraíso 62.5 25.5 34.6 552
Morazán 66.7 23.1 76.1 687
Gracias a Dios 43.2 32.9 37.5 68
Intibucá 61.1 22.9 43.7 259
Islas de la Bahía 64.1 28 33.9 30
La Paz 66.2 22.4 44.3 277
Lempira 56.5 25 36.7 296
Ocotepeque 68 24.9 42 140
Olancho 65.7 27.6 44.5 598
Santa Bárbara 54.2 24.1 34.8 389
Valle 67.4 23.4 38.3 191
Yoro 60.8 23.3 39.5 354
Total 62.5 24.7 39.5 5999
Fuente: Elaboración propia en base a datos del Censo Escolar del año 2000 realizado por la Secretaría de Educación de Honduras.

través de las grandes áreas urbanas denominadas “do- coeficiente de correlación intraclase. Los resultados
minios”. Los resultados forman tres grandes “escalo- muestran que los niveles contextuales tiene una in-
nes”: las dos grandes ciudades, el resto del país urba- fluencia marginal sobre la eficacia terminal de la es-
no y los municipios rurales. Las escuelas ubicadas en cuela. Las diferencias entre los departamentos apor-
las áreas de Tegucigalpa y San Pedro Sula presentan tan poco a la varianza, en tanto que las diferencias en-
aproximadamente siete puntos más en el indicador de tre los municipios aportan un 11%. Esto significa que
eficacia que las escuelas de las restantes ciudades. A son las propiedades de la escuela las que estarían en
su vez, se observan reducidas diferencias entre peque- definitiva explicando las variaciones observadas.
ñas y medianas ciudades y las zonas rurales. El com- Existe gran discusión sobre la verdadera naturaleza
portamiento de las escuelas ubicadas en municipios de los efectos del entorno institucional sobre las es-
rurales resulta importante de destacar; en particular cuelas, y sobre todo, de la mayor eficiencia y eficacia
porque aquí se han eliminado un porcentaje impor- del sector privado. La investigación contemporánea ha
tante de escuelas incompletas que eran rurales del
análisis. Gráfico 1
Al considerar la dispersión dentro de cada estrato, Eficacia terminal según tasa de escolaridad
se observa una heterogeneidad significativa que se bruta en primaria
incrementa al disminuir la concentración de la pobla- 75
ción. Una primera conclusión de estos datos podría COPAN
70
desprenderse es que los niveles de eficacia no respon- MORAZAN OCOTEPEQUE
CORTES
der estrictamente a la escala urbana del entorno, sino 65 OLANCHO
ISLAS
INTIBUCA
a sus características socioculturales. La alta dispersión 60 PARAISO
YORO
COLON

del medio rural indica que existen márgenes de ac- LEMPIRA


55
ción importantes ahí. COMAYAGUA

Un detalle aún mayor sobre las desigualdades terri- 50

toriales asociadas a la eficacia terminal puede realizar- 45


se observando qué proporción de la varianza está ex- 40
GRACIAS A DIOS

plicada por los tres niveles de análisis hasta ahora con- 60 70 80 90 100 110 120 130
siderados: escuela, municipio y departamento. Utili- Tasa bruta total primaria
zando un modelo HLM de tres niveles, se calcula el

20
Cuadro 6 tor privado urbano presenta altos niveles de desem-
Honduras: eficacia terminal de las escuelas peño muy por encima de la media nacional y próxi-
primarias según dominios geográficos mos a la universalidad; adicionalmente resulta ser un
Eficacia Coeficiente sector de escuelas relativamente más homogéneas en
Dominio terminal Desvío variación
Distrito Central 71.3% 19.38 27.17
cuanto a este indicador. Un comportamiento similar
San Pedro Sula 71.6% 18.71 26.12 se observa también en las escuelas privadas rurales que
Ciudades Medianas 63.8% 22.73 35.65
Ciudades Pequeñas 65.0% 23.61 36.33
obtienen una eficacia que es nueve puntos porcentua-
Municipios Rurales 60.7% 25.44 41.91 les más alta que la obtenida por el sector de escuelas
Fuente: Elaboración propia en base a datos del Censo Escolar del año 2000 oficiales urbanas. A su vez, el sector oficial rural tam-
realizado por la Secretaría de Educación de Honduras.
bién presenta un promedio levemente más alto que
su contrapartida urbana, aunque también se caracteri-
Cuadro 7
Descomposición de la varianza en la eficacia con un za por una importante heterogeneidad.
modelo HLM3 Finalmente, corresponde controlar los niveles ob-
Estadístico Eficacia terminal
servados de eficacia terminal según las propiedades
Años de escolaridad promedio 0.155 contextuales de tipo sociocultural. Se han elegido 6
% de analfabetos en la población de 14 y más años del municipio de la escuela -0.132 variables, siendo solo dos de ellas relativas a la dimen-
% niños entre 6 y 14 años que abandonaron la escuela sin completarla -0.071
sión socioeconómica: una estimación del ingreso me-
Fuente: Elaboración propia en base a datos del Censo Escolar del año 2000
realizado por la Secretaría de Educación de Honduras. dio per cápita en el municipio de la escuela y de la tasa
de hacinamiento en los hogares (Cuadro 9). Tal como
Cuadro 8 se ha expresado, los efectos composicionales tienen
Honduras: eficacia terminal de las escuelas una magnitud importante en los procesos y resulta-
primarias según sector institucional, 2000 dos educativos. Un contexto de más altos ingresos y
Eficacia Coeficiente promedio de años de escolarización municipal tiene
Sector terminal Desvío variación
un efecto positivo sobre la eficacia terminal. En cam-
Privada urbana 85.4% 16.57 19.40
Privada rural 70.5% 25.46 36.10 bio, aquellos municipios con mayor peso de la pobla-
Oficial urbana 61.3% 17.98 29.32 ción analfabeta, a la vez presentan una menor eficacia
Oficial rural 61.7% 25.32 41.02
Fuente: Elaboración propia en base a datos del Censo Escolar del año 2000
terminal.
realizado por la Secretaría de Educación de Honduras. Para concluir esta sección, se hace necesario con-
frontar el indicador educativo construido con otros
mostrado que en realidad el efecto “escuela privada” indicadores de eficacia más apropiados. Para esto se
desaparece cuando se introducen variables de control utilizarán los resultados globales en español corres-
apropiadas, tales como el status socioeconómico de pondientes a la 4ta. Evaluación de Aprendizajes reali-
la escuela y otras características organizacionales. Pre- zada en tercero y sexto año de Educación Primaria en
cisamente partiendo de la fuerte asociación entre sta- el año 2000. El sentido de esta comparación consiste
tus socioeconómico de la escuela y sector institucional, recuperar en el análisis, la distinción entre el éxito de
producto de la autoselección familiar, es posible utili- la acreditación y el éxito de la calidad educativa, en
zar esta variable como un proxy de las desigualdades momentos en que desde algunos sectores se reclama
sociales observadas en la eficacia terminal. El examen la “promoción automática” en los primeros grados. El
que sigue se ha realizado construyendo una clasifica- riesgo más crucial para la política educativa es confun-
ción del entorno de las escuelas que combina sector dir ambos objetivos o pensar que entre ellos pueda
(público/privado) con área geográfica (urbano/rural). existir una relación lineal. El problema en cuestión
Las variaciones observadas en la eficacia terminal al puede ser formulado de la siguiente manera: ¿cuál es
controlar por sector resultan de importancia. El sec- la relación entre una más alta acreditación de Primaria

Cuadro 9
Correlaciones r de Pearson entre la eficacia terminal y variables socioculturales
contextuales a la escuela derivadas de la EHPM (1999)

Estadístico Eficacia terminal


Años de escolaridad promedio 0.155
% de analfabetos en la población de 14 y más años del municipio de la escuela -0.132
% niños entre 6 y 14 años que abandonaron la escuela sin completarla -0.071
% niños entre 6 y 14 años que nunca asistieron -0.58
Ingreso percápita del municipio 0.147
% hogares con hacinamiento -0.125
Fuente: Elaboración propia en base a datos del Censo Escolar del año 2000 realizado por la Secretaría de Educación de Honduras.

21
Gráfico 2
Resultados globales según eficacia terminal por departamento, 2000
55
COPAN

50 MORAZAN
YORO
COMAYAGUA CORTES
LEMPIRA

45
VALLE
INTIBUCA UMCE 6to
COMAYAGUA
CORTES
Eficacia terminal
YORO
40 LEMPIRA

VALLE

COLON
UMCE 3to
Eficacia terminal
35
ISLAS

30
43.00 48.00 53.00 58.00 63.00 68.00
Tasa de eficiencia

y la calidad de los aprendizajes?. El gráfico 2 ensaya lograda a través de la promoción automática, no lo-
una respuesta provisoria que debe ser tomada con grará por sí mismo resolver los problemas más graves
cautela por razones metodológicas. Antes de analizar- de baja calidad en los aprendizajes. Las altas repeticio-
lo, es necesario explicitar ciertas advertencias.La efica- nes tienen que ver con problemas de aprendizajes; su-
cia terminal y los promedios de los resultados de UMCE primirlas por decreto puede ser una medida de efi-
están medidos a nivel de departamentos. Toda agre- ciencia educativa pero no de calidad y muy proba-
gación implica suprimir varianza intra-departamental, blemente menos aún de equidad.
por lo que la relación registrada puede encubrir gran-
des diferencias entre escuelas. Por otra parte, no es
lícito extraer conclusiones para las escuelas de rela- Bibliografía
ciones verificadas entre otras unidades de análisis.
Con estas advertencias en mente, se puede extraer BAEZ DE LA FE, Fernando. 1994 «El movimiento de las escue-
las eficaces: implicaciones para la innovación educativa». Re-
algunas conclusiones. A nivel de los departamentos,
vista Iberoamericana de Educación. nº4 p.93 -116. Madrid.
se observa una relación positiva pero en forma de BRYK, Anthony & DRISCOLL, Mary Erina. 1988 The School as a
parábola entre la eficacia y los resultados globales en Community. Theoretical Foundations, Contextual Influences
la prueba de español. La magnitud de esta relación es and Consecuences for Students and Teachers. The University
mediana para el tercero (R2 = 0.23) año pero modera- of Chicago. Wroking Paper 88/1105.
BRYK, Anthony & LEE, Valerie. 1992 “Is Politics the Problem and
da para sexto año (R2 =0.40), lo cual permite inferir Markets the Answer?. An Essay Review of Politics, Markets and
nuevamente que hay una regularidad importante en America ‘s Schools.” Economics of Education Review vol. 11
el comportamiento de las variables educativas a nivel nº4 pp. 439-451. Pergamon Press. UK.
departamental. Copán es el departamento con más alta BRYK, Anthony; LEE, Valerie & HOLLAND, Peter. 1993 Catholic
eficacia terminal y también alcanza el promedio en Schools and the Common Good. Cambridge University Press.
MA.
español más alto. Ahora bien, ¿qué significa que la re- BRYK, Anthony & RAUDENBUSH, Stephen. 1992 Hierachical Li-
lación sera parabólica?. Una posible interpretación tie- near Analysis . Ed. Sage. Thousand Oaks. CA.
ne que ver con la tesis del “trade off ” entre “inclusión CARNOY, Martin. 1997 “Is Privatization Though Education
y calidad”. El incremento en la tasa de eficacia termi- Vouchers Really The Answer?: A Comment on West”. IN The
nal conlleva un primer período de reducción en la ca- World Bank Research Observer volume 12 number 1 . February.
Pp. 105-116. 2000 “School Choice? Or is it Privatization?”.
lidad promedio de los aprendizajes. Es el caso de los Educational Researcher vol. 29 (7) pp.15-20.
departamentos de Comayagua, Lémpira, Santa Bárba- CARNOY, Martin; COSE, Gustavo; COX, Christian & MARTINEZ,
ra, Yoro e Intibucá. Sin embargo, una vez superado Enrique. 2001 The Lessons of Education Reforms in the
cierto umbral en el nivel de inclusión, se observa un Southern Cone. A comparative Study of Argentine, Chile, and
cambio en el sentido de la relación, la cual se torna Uruguay in the 1990’s.
CHRISS, Barbara; NASCH, Greta & STERN, David. 1992 “The Rise
positiva. En los departamentos de Colón, Cortés, and Fall of Choice in Richmond, California”. En Economics of
Morazán y Copán, por ejemplo, una mayor inclusión Education Review. vol 11. nº4 pp. 395-406.
está acompañada de mayor calidad en los aprendiza- CHUBB, John E. & MOE, Terry. 1990 Politics, Markets and
jes. America’s schools. The Brooking Institution, Washington.
En síntesis, esta gráfica muestra que un mero in- CHUBB, John E.; MOE, Terry; TWEEDIE, Jack & RILEY, Dennis.
cremento de la acreditación como meta de política 1990 “Should Market Forces Control Educational Decision

22
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