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ROM hee Ura ee) et Wn 18) » EL JURADO HECHIZADO hess nie) ene ae eae iS Re ean ara Ni sstaed LUIS DE LA BARREDA SOLORZANO Luis de la Barreda Saldrzano + rdinador del Programa Uni- versitario de Derechos Humanos de la UNAM fue ef presi dente fundador de la Comision de Derech % HUMmanOs del Distrito Federal. Cursé historia universal on hi nvwestra Maria Teresa Landa en la Preparatoria Uno, Le apastonan los temas os . La pasion de Maria Teresa Landa de derechos humanos y justicia penal. Su libro mas recierite es éCulpable? Florence Cassez. el juicto del sigle EDITORIAL PORRUA AV. REPUBLICA ARGENTINA 15 MEXICO, 2013 Primers edicidn, 2015 Copyngin © 2015 (ns be UA Barrena Soudmzar Esta obra y wus caracteristicns son propiedad de EDITOMAL PORAUA, SA de CV & Av. Republica Argentina 15 altos. col. Centro, 06020, Méauico, DE WiWWWe porns cent ‘Queda hecho ef deposing que marca la ley Derechos reservados ISBN 978-607-09-149 161 IMPRESO EN MEuCO PRINTED DV EXC constancia de mi profundo agradecimiento a quienes me Aron una valiosisima ayuda en la elaboracidn de este Elisa Speckman me sugirid la idea de escribirlo y me pro- land articulos y ensayos muy importantes sobre el caso, Maria Cecilia Vazquez y José Antonio Aguilar Valdez me hicie- Hegar ef libro Confidencias de “Miss México” de Manuel jel y Alvarez. inexistente en librerias Sonia Araujo iracujo cel inglés al espanol el ensayo —iné- por lo menos hasta el rnomento de esa traduccién— Ima~ aciones en el drbol de judas; cuentos de perdin de la ia México” de Michele Jeanine Mericle, tesis presentada ta Universidad de Anzona para obtener la Maestria de Arte. Moleds Alfredo Plata, Octavio Beltran © Ivan Tapia buscaron ¥ fotografiaron en la Hemeroteca Nacional de la Universidad joral Auténoma de México los diarios que se citan en esta obra. EL JURADO HECHIZADO La pasién de Maria Teresa Landa La maestra fp * oy alameestra Maria Teresa Landa en el! Antiguo Co- i} de San Iidefonso —uno de los lugares sagrados de la de México, dice Octavio Paz. y entonces lujosa e inau- pte de la Preparatoria Uno— ha sido la experiencia mas loliciowa que como alumno he tenido en mi vida. Era una pléndida narradora que, al exponernos con apasionada in- feildad episodios dramaticos protagonizadas por importantes Tipiras histricas, nos remontaba a las épocas correspondien- ¥ nos hacia estar alli como emocionados y aténitos testigos. Wall) }Comprenden los lectores lo que eso significa? Estar w era disponer de una maquina del tiempo y del espacio que Oe Wevaba ahi donde se habian producido acontecimientos ordinarios, y darnos el privilegio, el privilegio insdlito, de f testifies de tales acontecimientos. Eso ha existido no en i} Fealidad sino en la literatura y en el cine de clencia ficcion Pero también existia en las clases de la maestra Landa. Ese ‘Milagro, la creacion de la maquina del tiempo y del espacio, 2 PeAlizaba la maestra Landa, en cada una de sus clases, en anto empezaba a hablar. Su voz ayudaba mucho al efecto fmibelesador que nos producia: era una voz grave. clara, po- feme, profunda, que ella sabia manejar extraordinariamente HaAndole los matices, los cambios de tone y de volumen, los ‘Oifisis precisos, como una actriz de tragedia griega. Era una Maria Callas en la intensidad interpretativa. Par encima del contexto social de los aconrecimientos, la Wikesita Landa subrayaba las caracteristicas psicolégicas de Jos protagonistas. Se decenia en los detalles que mostraban Caracieristicas complejas de la condicién humana, esencial- EL JURADO HECHIZADO La pasion de Maria Teresa Landa mente invariable a través de los tiempos. La maestra era due fia de una capacidad descriptiva extraordinaria, pero, aun mas que las descripciones escenograficas, era esa perspectiva psicolégica, los retratos que trazaba del alma de los persona- jes, lo que hacia la clase tan apasionante La vehemencia narrativa de la maestra se agudizaba nota- blemente cuando los protagonistas histéricos eran mujeres de sina tragico. Entorices se volvia mas penetrante, se de- moraba mas en la exposicién y se mostraba, como decirlo, mas identificada con el personaje! parecia ponerse en sti lu- far. Sus palabras incendiaban el anima de sus escuchas. no- sotras, sus alumnos de la clase de historia universal. Salo una piedra hubiera podido —las piedras jamds, puloma. qué van a saber de amores, dice la bellisima y enigmiatica cancién popu- lar de Tomas Méndez “Cucurrucucu. palomma”— permanecer indiferente a los relatos de la maestra. La maestra Landa nos hace oir las voces de origen divino que desde los 13 afos escucha Juana de Arco. No las imita las reproduce. En verdad las estamos escuchando, con esca- lofrio en la espalda. Sentimos la sensacion de miedo, descon- cierto y confusidn que Juana, casi nifa, experimenta al escucharlas. Aunque no todos compartimos su certeza, ella no duda de que son enviadas por Dios. La tercera vez que las oye, |uana reconoce al arcangel San Miguel, protector cel reino de Francia, pues lo ve con sus proplos ojos, acompana- do de los angeles del cielo. Ove las voces dos 0 tres veces por semana Luego identifica lade Santa Caralina de Alejandria y la de Santa Margarita de Antioquia, las santas mas veneradas del momento, ambas martires de su fe cristiana. El arcange! y las santas le revelan su mision de liberar a Francia del do minio inglés. Si, a ella, casi una nifa, una campesina Hletrada sin conocimientos militares, le-asigna el cielo una mision im posible. ¢Por qué. por qué a ella?, nos preguntamios Hija de campesinos, Juana de Arco no sabe leer ni escribir Rechaza toda forma de coqueteria femenina: viste cara va ron y usa él cabello muy corto. No siente atraceién por nin- WG mMuchacho aunque esta en la edad en que las hormonas alborotarse. Sus habitos son los de un asceta. Se ru- que no ha menstruado debido a su frugalidad. Quiza tendo que-el destino le depara cometide tan alto, des- Gut las Voces se le manifiestan, con solo 13 afios, Juana f Voto de castidad. Pero como es usual en la época, su . Sin consultarla. la promete en matrimonio. Ella se nie- SiMirse, decision excraordinaria en una muchacha de su social y de su tiempo, Despechado, él pretendiente, un Paul LeMarie, la lleva a juicio acusandola de incumplimien- Ji promesa matrimonial, Juana desmiente al demandan- On tal contundencia —era una muchacha sumamente TA Mmaestra ros emociona a todos: obedeciendo a sus yo- ) Jaina de Arco atraviesa territorio enemigo para pedirle [in que ponga a sus drdenes, ja las drdenes de una nina 1) afos!, un ejército para ir a librara la ciudad de Orleans Weedio dé las tropas inglesas, Escuchen lo que le dice Jua- WW) Hos lnvita la maestra Landa, y es la voz de Juana. no la We |i maestra Landa. la que escuchamos: “El rey del cielo te 1a Un Mensaje a través de mi: td serds consagrado y co- (6 en Relms, y tu serds el lugarteniente del rey del cielo, 680 6 Ser rey de Francia. El me envia para guiarte hacia thy, donde recibiras tu coronacion y consagracion”, Con i) poder persuasiva se lo habra dicho, que le fue concedido, li, na nifa de trece anos, lo que pedia AchMpanamos en su cabalgata a Juana de Arco, que capi- | ies Un pequeno ejército con el que conseguira que Jos in- ees levancen el sitio de Orleans. Cabalgamos a su lado, Lawndo el puente de Reims, y la admiramos, invicta y ra- ‘Tlanie ef su armadura, magnifica, con el estandarte blanco Phdeande al viento y la aureola que le da una apariencia so- Tnenatural. A pesar de su falta de femineidad en el arreglo, NOs parece hermosa. Asistimos después a la ceremonia so- Jenne de Reims en la que, gracias a Juana de Arco, se corona fey 4 Carlos tl, Juana esta radiante -. a i JURADO HECHCTAOO La pamon o# Mana Teresa Langa Pero las apoteosis. jay!, son fugaces. La maestra nos hace sentir el desconcierto de Juana ante Ja actitud posterior del rey. quien, sin haberle informado de sus planes, pacta treguas y quiere negociar con los borgofeses. aliados de los ingleses, mientras la Doncella sigue combatiendo con ejércitos insufi- cientes. La maestra se ensombrece al relatarnos la captura de Jua- nade Arco en Compiegne, sus intentos de fuga, su periplo de una villa a otra hasta su llegada a Ruan, donde se le somete a uno de los procesos mas /amosos y ruines de la historia. A la maestra le tiembla la voz al describirnos la celda oscuraen que es recluida Juana, al referirse a las tentativas de viola- clon que sufre la Doncella por parte de dos de los cinco hom- bres que la vigilan (los cuales son amonestados por Ana de Borgofa, duquesa de Bedford), al decimos que la enjuiciada no ésla presente en las diez sesiones preliminares de su jui- cio, y al informarnos sobre los documentos, descubjertos tiempo después. que prueban que buena parte de los miem- bros del jurado de la Santa Inquisicién que juzgo a Juana es- taban sobornados para fallar en su contra. La voz de la maestra se oscurece, pero no se debilita, al hablarnos de la acusacin, segun la cual Juana de Arco est dominada por ocultas fuerzas diabélicas que son las que la hacen escuchar voces. Se le acusa de herejia y asesinato. Se le teprocha su ropa de hombre. La maesira sube atin mas la in tensidad al decirnos que notarios y asesores, dudando ce la culpabilidad de la acusada y de la forma de llevar el proceso, proponen recurrir al Papa, pero los jueces deniegan la peticion Juana de Arco no quiere morir, pero acepta la voluntad de Dios. Se siente llena de vitalidad, su cuerpo tan joven se quie- re aferrar a la vida, su corazon late con fuerza, pero se some- te a la voluntad divina. Sabe que es victima de una conjura miserable, pero su fe la conforta. Escucha, sigue escuchando las voces que la han acompafiado durante tantos afios, y esas voces le dan animos. Al fin y al cabo todo ta hizo porque las voces se lo dictaron, todo lo hizo en servicio de su rey y asu rey Je hizo los servicios por servir a Dios, que es su ver O rey, lo hizo porque esa era la voluntad de Dios, a Ora, abanionada por todos. como Cristo, se enco- da Aunque Juana de Arco no se enamoré jamas, no es plar la muerte cuanda, por decirlo con los versos de @ Nerve. la vida es una novia enamorada que nos dice iP viiyas todavia Ma pliza del Viejo Mercado de Ruan, mas de diez mil Micuden a ver la ejecucidn. En el estrado donde esta , UW tablon dice: "jana, meritirosa, perniciasa, enga- del pueblo, hechicera, supersticiosa, blasferna de Dios, untiow, desere(da de la fe de Jesucristo, jactanciosa, id6- | cruel, disoluta, invocadora de los dermonios. apdstara Piatica y hereje” | li vor de la maestra es un lamento indignado— se Fever de rodillas, clerra los ojos, junta las manos bajo el ¥ rera; "Padre, te suplico que acojas mi alma y ten- ihien He tomar en cuenta sus momentos de debilidad o Que ii amor generoso se derrame sobre mis her- | Presentes o ausentes, y los bendiga. librindolos de Yo les perdono todo el mal que me hacen —concluye if Hose A quienes la han condenado— y prometo que WG Me hallé junto a Jesus, a la diestra de Dios Padre, in- dor’ ante El para que vuestros errores sean perdonados” ojos de la maestra se humedecen cuando nos dice que. despues de que juana fue quemada, la Iglesia pide la ON de su proceso, En ese reexaren —la maestra esboza Porites triste— muchos testigos que la hablan incrimina- alaban y le atribuyen milagros de toda indole. La maes- fs hace escuchar las palabras de la sentencia del tribunal iW) fevisar el caso ha resuelto inhabilitar el juicio y declarar peencla de la Doncella de Orleans, irreversiblemente eje- fa dos décadas atras. Somos testigos de como. tras ser rads bruja y condenada a la hoguera, ahora se le invoca, vez revisado el proceso, como Juana la Santa.' 1 Pare compensar las infidelidades de mi memoria —“los callejones 2 de la Mervoria, vieja ciudad de traiciones”, definid el eseritor bra

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