MATRIMONIO

Introducción
Como personas físicas con pensamientos y necesidades humanas, concebimos al
matrimonio como un acto necesario para la formación de lazos familiares. Dando
al matrimonio una definición vulgar, pero a la vez haciendo uso de las definiciones
científicas, deducimos que, el matrimonio es un acto jurídico, una ceremonia o una
celebración, que se da entre dos personas que tienen un lazo subjetivo, es decir,
que en la mayoría de estas celebraciones el uso de las emociones es uno de los
requisitos que sobresalen para poder efectuar la unión con otro individuo, estas
emociones son aquellos sentimientos que los individuos conocemos como: el
amor, el cariño, el deseo, etc.
Además, los seres humanos somos el único ente viviente que tiene raciocinio, lo
que nos convierte en los únicos seres con fundamentos o principios morales, por
esta razón somos los únicos entes vivos de hacer posible este acto un símbolo,
que a su vez puede ser visto como un contrato.
El matrimonio puede ser visto como un contrato por que se puede comparar
negocio económico; esta formalidad tiene como virtud el hecho de dar para recibir
algo a cambio, es decir, si fuese un contrato de compra venta, el vendedor le
ofrece a otro individuo que conocemos como comprador, un bien necesario, el
comprador al adquirir este le genera una ganancia para el mercader y de este
modo ambas partes se ven beneficiadas ya que ambos satisfacen sus
necesidades. En el matrimonio esa necesidad para adquirir puede ser vista como
la compañía, el anhelo de tener a alguien más, la necesidad de procrear o
simplemente la necesidad de no sentirse solos.
El matrimonio también es visto como un derecho ya que cualquier individuo en uso
de sus facultades mentales puede proceder a realizar este acto, pero, así como
pueden defender su derecho nupcial, al adquirir el titulo de esposa o esposo
también adquieren una serie de obligaciones que el Estado obliga al individuo
cumplir. Para dar fe a que este vinculo es real es necesario la presencia de un
juez quien dictaminara los requisitos fundamentales que deben cumplir los
contratantes.
La iglesia ha tenido un poder importante para el requerimiento matrimonial, es
decir que esta es la que ha efectuado su poder para demandar los requisitos que
deben tener las personas para poder adquirir el bien matrimonial. Pero el
matrimonio es antes que un sacramento un contrato, un acto natural, es decir, que
los humanos por inclinación natural y por necesidad de la misma naturaleza se
unen entre si para lograr satisfacer sus necesidades, necesidades que el mismo
cuerpo y sistema social.
DESARROLLO
Comúnmente definimos al matrimonio como una institución jurídica que se da
entre dos personas que se unen entre si con la finalidad de establecerse como
una familia, hoy en día reconocemos como matrimonio a la unión entre hombre y
mujer (matrimonio heterosexual,), mujer con mujer u hombre con hombre
(matrimonio homosexual), reconociendo que pueden o no tener una familia
conformada por hijos concebidos o adoptados, pero también puede ser que la
familia consista simplemente en dos seres humanos conviviendo en unión
matrimonial.
A la palabra matrimonio se le han efectuado diversas definiciones para poder
explicar el significado que obtiene este vocablo, así mismo la sociedad le da un
valor a este termino, no solamente como una definición científica o estudiada, sino
como un acto donde predominan los sentimientos de las personas, algo que para
el derecho es intangible, ya que los sentimientos no pueden ser tocados o
visualizados para poder terminar un carácter legal. La iglesia a jugado un papel
muy importante para poder definir este término, pero sobre todo para definir las
obligaciones de los contrayentes. Las definiciones que encontramos acerca de
esto vine desde una concepción que se inicia por la religión, en el derecho
canónico el término matrimonio se emplea para designar el acto de su celebración
en el cual los contrayentes hacen recíproca entrega de sí mismos en calidad de
cónyuges (DE LA HERA, 1942).
Para la iglesia fue una necesidad establecer el matrimonio para regular de cierto
modo las actividades que tenían los esposos una vez que estaban unidos entre sí,
de ahí que al hablarse de matrimonio se refiera también al termino familia
empleándose este como un principio del matrimonio y que para ello se reconociera
que los únicos en poder cumplir con este requerimiento sea la unión de un hombre
y una mujer, ya que al unirse estos puede o no ser concebido una nueva persona.
Como una definición de carácter jurídico en el matrimonio podemos encontrar que
es un acto que puede ser definido como un negocio-causa que da lugar a un
estado civil, para este estado es necesario que los contrayentes tengan motivos
para realizar el acto, estos motivos son subjetivos y tienen una finalidad en común,
alguna de estas finalidades puede ser el deseo de permanecer unidos por un
lapso de tiempo, formar una familia, establecerse en un lugar con cierta
independencia, dar crédito a sus palabras y sentimientos e incluso satisfacer a la
sociedad. Además, se puede considerar al matrimonio como una institución
jurídica, dicha institución tendrá como obligación la ayuda mutua y participación
equitativa para cumplir con el contrato matrimonial. Como punto importante es
necesario especificar que dicho contrato como cualquier otro puede ser anulado a
través de un proceso que llamamos divorcio en el cual también, será necesaria la
presencia de un juez del registro civil quien levantara un acta que especificara el
nombre y apellido de los conyugues, edad, ocupación y domicilio además de la
fecha y lugar en el que se contrajo matrimonio.
Martha Guzmán en su texto “El régimen económico del matrimonio” cita a Colin y
Capitant quienes definen al matrimonio como un “contrato de derecho familiar,
dicho contrato presenta una importancia mayor que la de los contratos corrientes
de la vida jurídica, un arrendamiento, una sociedad. Pero en ello no hay nada
distinto de la idea de contrato”. El matrimonio visto como un contrato nos anticipa
que al adquirir este estado civil de esposo o esposa, también adquirimos
obligaciones y derechos, viéndose ambos contrayentes como iguales; “el esposo o
esposa gozan de la misma importancia y de iguales derechos por lo cual están
excluidos los privilegios y las discriminaciones que se originen en el vínculo,
adquieren estos las ventajas, la responsabilidades y las cargas que el sistema
jurídico establezca a favor de las personas unidas en matrimonio, sin necesita de
un vínculo formal” (GUZMAN, 2006)
Para la existencia del matrimonio debe coexistir consentimiento por las partes
interesadas, es decir que los contrayentes deben de estar de acuerdo de unirse
ante la ley, recordando que hay un acto civil que se da ante un juez y un acto
religioso que puede o no puede hacerse. El código civil Federal en su capitulo VII
establece los requerimientos que deben existir para poder contraer matrimonio,
especificando que los interesados deben presentarse ante el juez con registro civil
de cualquiera de las partes, llevando una serie de requisitos que son
fundamentales para poder contraer matrimonio, entre los principales se requiere
conocer el nombre, edad, ocupación y domicilio tanto de los contrayentes como de
los padres de estos, teniendo a los contrayentes la plena seguridad de que es
voluntad propia, no obligada de contraer matrimonio y de ser así no tener ningún
impedimento legal para casarse. Cumpliéndose los requerimientos para contraer
matrimonio se levantará un acta que haga constar la unión de estos, dicha acta
especificará como puntos importantes el nombre, apellidos, edad, domicilio,
ocupación y lugar de nacimiento de los contrayentes, además, los nombres y
apellidos de los padres de estos, pero sobre todo la firma del Juez de registro civil
quien da fe y legalidad del acto. (CODIGO CIVIL FEDRAL, 2021) 1.
El matrimonio se ha constituido como un derecho que cualquier individuo en uso
de sus facultades mentales, puede tener. Las leyes y normas que rigen a nuestra
sociedad e incluso a nuestra república se han ido modificando a lo largo de los
años con la finalidad de que todos gocen de este derecho y aun con esas
modificaciones hoy en día se busca seguir renovando para que sea más igualitario
y equitativo.
Una unión matrimonial tiene mucho significado en la sociedad de los individuos
que los rodean, es una ceremonia que se hace comúnmente rodeado de las
personas más allegadas a los contrayentes, familiares, amigos, vecinos, muchas
culturas hacen participe incluso a personas de otros sitios para poder dar fe de
que el matrimonio cumple con los requerimientos sociales y legales para poder
realizarse el acto. El hombre y la mujer como seres independientes, aun unidos
ante este contrato tienen roles diversos con la finalidad de poder fortalecer su lazo
matrimonial, es decir que de manera individual deben cumplir con las obligaciones
que establecían las leyes, ya sean jurídicas, sociales y religiosas. Anteriormente
1
CODIGO CIVIL FEDERAL DEL ARTICULO 97 AL ARTICULO 113
se creía que el hombre al ser la parte fuerte del matrimonio era quien debía
proveer de todas las necesidades que tenían como pareja, satisfaciendo también
las necesidades de los hijos, mientras que las esposas eran las encargadas de las
tareas del hogar y de procrear y educar a los hijos, dichas concepciones se han
ido eliminando con los años, ya que las necesidades de hombres y mujeres han
ido cambiado al igual que sus intereses, anteriormente para hablar de una familia
era necesaria la existencia de hijos, hoy una familia puede estar constituida por
dos integrantes.
De las obligaciones de los cónyuges, como las reporta cualquier contrato; esas
obligaciones son de diversa índole los contratantes se deben fidelidad reciproca,
es decir que durante el tiempo que dure este contrato ambos deben permanecer
fieles a sus parejas, sin tener una relación que sería considerada extramarital,
además los contrayentes deben colaborar económicamente para los gastos que
implica la familia y el hogar, ambos han de evitar que el matrimonio se disuelva,
debe haber entre ellos mutuo respeto y ayuda. (Rodríguez, 2002). En la actualidad
el matrimonio a pesar de ser importante es un acto que muchos individuos decide
no realizar, esto es por la falta de interés de hacer este acto, puesto que hoy en
día el derecho a la libertad da cierto control de el individuo solo, sin necesidad de
depender ni económicamente ni emocionalmente de una persona, es por esta
razón que cuando dos entes deciden dar formalidad su relación simplemente “se
juntan”, acto que se conoce como unión libre, Mónica Sebastián en su texto
“Relación de pareja en la unión libre” (2016) a Rojina para quien la “unión libre se
da entre una mujer y un hombre pero sin celebración jurídica al que el derecho
otorga la independencia de la voluntad de los protagonistas”. Esta es una de las
exigencias que se han ido suscitando con los años, incluso las parejas que
deciden unirse sin necesidad de un contrato lo hacen con la finalidad de
conocerse, de saber si como pareja les conviene pasar a un acto legal para poder
ser un matrimonio, incluso la comodidad de no realizar tanto papeleo o de disolver
el vínculo, ya que conviviendo juntos pueden determinar si tienen o no un futuro.
El matrimonio obliga a las partes a compartir de los bienes adquiridos dentro del
acto, es decir que se dividen en partes iguales sin contar con los bienes que se
adquirieron antes de contraer matrimonio, esto jurídicamente se conoce como
derecho u obligación mancomunada, pero también existe la regla de casarse con
motivo de separación de bienes, donde todo lo que se adquiera de manera
individual será propiedad de la persona el conyugue no participara de estos bienes
y en caso de separación o divorcio la persona que los adquirió será el único
responsable y dueño de lo que compro disponiendo del objeto o cosa sin pedir
autorización o consentimiento de la otra persona, estos son tipos de regímenes de
sociedad conyugal. Cada pareja será responsable de decidir por qué tipo de
régimen debe ser adquirido al momento de ejercer este hecho.
María Fernández y Denitza López citan el artículo 16 de la declaración universal
de los derechos humanos, el cual, indica que “los hombres y mujeres, a partir de la
edad núbil, tienen derecho, sin restricción alguna por motivos de raza,
nacionalidad o religión, a casarse y fundar una familia, y disfrutaran de iguales
derechos en cuanto al matrimonio, durante el matrimonio y en caso de disolución
de matrimonio”. Otra de las concepciones que se tenia anteriormente era creer
que solo el hombre y la mujer podrían contraer matrimonio, hoy en día en México
20 estados de la republica mexicana y la ciudad de México, han modificado sus
códigos estatales para permitir que los matrimonios se den de la misma forma a
una pareja homosexual como se les ha dado a las parejas heterosexuales, es
decir que hombres puedan contraer matrimonio con otro hombre, mujer con mujer;
incluso los trasvestis, transexuales pueden ejercer este acto. Para ello se han
modificado a largo de los años a los artículos constitucionales o a los artículos
involucrados en tema de matrimonio con la finalidad de involucrar a cualquier
individuo y de este modo darles la oportunidad de ejercer su derecho libremente,
es un tema que está aún en nuestros días en discusión para poder dar
oportunidad de ejercer dicho derecho a cualquier persona sin importar su sexo y
raza, creencia religiosa, educación etc.
El matrimonio como todo contrato tiene un inicio y un final, el inicio que como ya
se ha mencionado es donde se realiza el acto que dará fe de la existencia de este
matrimonio y el final puede ser por que el tiempo a vencido, en este caso las
conyugues deciden en que momento finalizar dicho convenio, también puede ser
terminado por incumplimiento a alguna de las clausulas del contrato, en este caso
mas que una clausula civil pueden ser las reglas que como parejas se imponen
para cumplir, ejemplo de ello puede ser la infidelidad, el no dar solvencia
económica que aporte al progreso que se tiene como pareja; la muerte es también
un motivo que da finalidad al matrimonio ya sea del esposo o de la esposa, esta
situación convierte los convierte en viudos.
En el caso de Divorcio hay varios temas que se centran en ella para poder
determinar como se ejercerá este fin de contrato, aquí es donde se comprueba el
tipo de régimen que fue adquirido al casarse, además el hecho de que esta unión
halla dado el nacimiento de hijos o se hallan adoptado. El artículo 266 del código
civil indica “El divorcio disuelve el vinculo del matrimonio y deja a los cónyuges en
aptitud de contraer otro…”, (CODIGO CIVIL, 2021) con ello se puede decir que al
divorciarse se adquiere la libertad para volver a realizar este acto con alguien más.
“Para efectos del divorcio administrativo deben cumplirse algunos requisitos:
1. Que halla trascurrido un año o más desde la celebración del matrimonio
2. Voluntad de los cónyuges
3. Que los solicitantes sean mayores de edad
4. Que hayan liquidado la sociedad conyugal de bienes, si bajo ese régimen
se casaron
5. Que la cónyuge no esté embarazada
6. Que ninguno de los cónyuges requiera alimentos 2
En el caso de separación no desaparece el vinculo que une a la pareja, y se da
comúnmente por infidelidad, la separación de los cónyuges nos parece que
constituye una solución a medias de los problemas entre casados, pedo deja
abierta la puerta para la reconciliación entre los mismos.

2
Rodríguez(2002)
En conclusión, el matrimonio se ha constituido mediante bases morales, sociales y
naturales que se han convertido en fundamentos legales que permiten a los
esposos garantizar una unión donde ejercerán derechos y obligaciones en
equidad; también, este contrato matrimonial, permite que los hijos tengan una
calidad de vida optima.

Bibliografía
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