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Arnaldo Arrecillas Miker

Honestamente no sé qué decir sobre lo que he visto. En otros casos podría decir cómo me ha

hecho sentir la historia o sobre lo que he pensado al escuchar lo que se dice junto con las

imágenes que se muestran, pero en esta ocasión no puedo realmente hacerlo por la forma en la

que está realizado el documental. Personalmente hablando, creo que la mejor forma en la que

podría hablar sobre lo que me hizo sentir y pensar el filme, sería tratando los dos temas que más

me llamaron la atención, los cuales fueron el sonido y las facetas de la humanidad que se

muestran en el filme.

Como dije anteriormente, no puedo hablar de lo que me hizo sentir o pensar como normalmente

suelo hacerlo, ya que en este caso no se dice ningún tipo de información en concreto, se muestran

varias escenas de distintas situaciones, cada una siendo acompañada por algún tipo de sonido, a

veces siendo música de fondo, en otras escenas se escuchan sonidos naturales y finalmente en

otras el sonido creado por el hombre. Recuerdo que hubo momentos donde me perdía en el filme,

donde me hacía sentir como si en lugar de estar viendo una película, estuviera en el lugar que se

mostraba, escuchando el sonido de lo que sucedía. Me sentía extraño notando un momento en

que se podía ver pura naturaleza y antiguas tradiciones, solo para que después se mostrara la

mecanización que ha ocurrido a lo largo de la historia para que tengamos los servicios que

tenemos ahora. Lo anterior mostró un extraño contraste, exponiendo los episodios más viejos de

la humanidad chocando con los más novedosos y haciéndome pensar sobre lo que realmente

significa ser humano.

Incluso al escribir esto sigo sin poder poner bien mis pensamientos sobre el asunto, pues unos se

contradicen con otros, de una forma que muy pocas veces me había ocurrido. Pero supongo que
eso es en parte lo que significa ser humano. Los claroscuros de la película mantuvieron mi mente

en caos y con una sensación de sentimientos encontrados. Somos luz y oscuridad, somos todo y

nada.

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