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EL BARCO Papa por un dia Hera Lind Printera edicrcn: seprieritae £998 Bencemate en fb 2008 ade ei Esher Sn ne Barbers ‘Titulo original: Der Tag. © deltcuts Fisch Tax am Main, 1097 © Ediciones SM, 199% rapresores.2 as oct Bad 78€60 Baadilla del Monte !Madral ganegtopam.com bh, Feonkliee STENGION ALG fel 902 12.13.23 Bax 902 2412.22 eval cliemax@peupo ISBN 978-34-348-61107 Spot epee 8977 Casarrubueles Madiidy “Goege tf Industias Grafieas SU - 2 jenn pica y sso fs deo peoped re ida cont dedelto conn Tee ea ee golpe. Fridolin se desperto, Que pena que ya se hubiera acabade ese suet tan bonito en el que se des- lizaba con suy pstines en linea por fa valla de a gasolinera. Fiidolin, que Uevaba una gosra chulisima, se habia subido a la valla con toda la solmra del munds y habia recorrido por lo me- hos cinco metros sin tambalezrse. Todos los ma- yores se habian guedsdy mirandolo y Fridolin se sintié genial, Pero justo entonces tuvo que ce- rrarse aquella maldita puerta del bao. Eso sig- nificaba que papa se habia levantado. ¥ que era un jueves como cualquier otro. ¥ que Fridolin no tenia ni idea de andar sobre patines en linea, al menos no fa suficiente idea como para desl: zarse por encima de la valla de Ja gasolinera. Mesuda gracia Fridolin se Jevanté y entré en el cuarto de bao, Papa, cnvuelto en su albornoz, estaba sentado en el vater leyende el periadico. —Buenos dias —-murmuré Fridolin Papa cerré rapidamente cl periddico vy tam: bién la tapa del varer. —-jHola, Fridolin! ;Has dormido bien? —~Mas 0 menos, Fridolin se subi6 al taburete eojo pata buscar su dentifrico de pisufos. Todas las demas pastas de dientes sabian a sayos. Puso un poco de den- tifrico en e} cepillo y se quedé pensando en el suefio que habia tenido, Papa se estaba emba- durnando la cata con espuma de afeizar. La ima- gen de papa y de Fridolin que se retlejaba en el espejo era la misma de todas: las mafanas: es- puma de dentifrico, espuma de afeitar y pelos revueltos. justo en ese momento, papd solté un verda- dero disparate. Ti si que tienes suerte ~-dijo—, Ya me. gustaria a mi yolver a tener ocho afios. Pero Fridolia no estaba de humor para ese tipo de bromas. ——;Por gué dices que tengo suerte? —-pregun- £6 irvitado—. Me paso el dia en Ja escuela y me aburro un montén, y los mayores nunea me de- jan juger con ellos. Papa hizo una mueca muy extraa y comenz6 a quitarse con la maquinilia la espuma de la cara. Ta no tienes que afeirarre —dijo--, ni ha- cer muchas otras cosas gue yo si tengo que ha- cer. ‘ —jY qué? —grité Eridolin, enfadado—, Pero puedes conducir un coche y hacer lo que te dé la gana y por la noche te acucstas cuando te apetece y, ademis, ticnes dinero y puedes irte al McDonald's, y cuando alguien se rie de ti, le suel- tas un guantazo y ya esta, ~-Anda, Fridolin —dijo papa—, alégrave de que ain no eres adulto, Puedes jugar y dormir, vy mama ce hace Ia comida, y todo el mundo te quiere. Fridolin se sent6 en el suclo para vestirse, Come de costumbre, los caicetines se le resistian. ¥ los calzonctilos renian que’ser, e6mo no, de florecitas; exan de lo mas hortera y la goma le apreeaba la ipa. Eridolin se estaba poniendo de muy mal humor. —-;Por qué tengo que ponerme siempre lo que diga mana? jQdio estos calzoneillos y también estos calcetines! ;Y. ademés, hoy tenemos gim- hasia 7 yo soy el que fleva los calzoncillos mas vidiculos de toda fa clase! -—Bueno, pues si quieres, hacemos un iner- cambio dijo pap, que acababa de cortarse y estaba secandose fa mejilla ensangrentada con un algedoncilio—. Ta re pones mi traje.oscure y te ves a la offcina, y yo cojo ms calzoncitlos flo- reados y me voy al cole. {Trato hecho? —Muy gracioso —respondié Fridolin, agobia- do--, De todas formas, no fancionara. Claro que funcionara contest papi-—. Bastara con que os dos fo queramos de verdad. Fridolin se queds alli sentads en el suelo del quarto de baio con un calcetin en fa mano y mirando fijamente 2 papa. Papa se incline sobre Fridolin y Je umo la nariz con espuma de afeitar. —Seguro que funciona, Ya yerds, ya. Eso no te lo crees ni é —refunfisid Eri. dolin, mieneras se ponia la cumisii, Como de coseumbre, la camiseta estaba al revés, y Fridolin no tenia ni idea de por qué agnjero habia que meter la cabeza. Durance ef desayuno, Fridolin esper6 ansioso ef momento en que de pronza se convertiria en su padre, pero por supueste wo paso nada de nada. Bl seguia siendo Fridolin y se aburria, y papa era paps y lela ef periddico. Fridolin soled un eructo. Eso si gue se le daba bien, Lo hacia mejor que paps, auaque Ja verdad €5 que papa tampoco fo hacia aada mal, Salo cuando no estaba mama, claro. —Vaya —dijo papa—. ;No podias aguantar- te? —Yo eructo cuando me da 1a gana ~ contesté Fridolin con tono desafiante. ~-Pues si quieres ser yoi por un dia, sera mejor que no hagas eso —respondio papa escondido detras del periddico. —Si me dejas ser r&, te aseguro que no volveré a etuctar —prometié Fridolin sin pensarlo dos veces, ‘Tenia que molar un montén ser papa para va~ rier. Ser mayor y fuerte y rico y ener un coche guay y poderse escapar con é sin mas. Y no tener que ir al cole. Tenia que molar un monton. —De verdad que me gustaria ser ti —dijo Fridolin, pensarivo—, Lo malo es que seguro que po fo decias en serie. Papi cerrd ef periodico. --Pues claro que Jo decia en serio, silo que hoy ya no es posible, Pero mafiana yo haré de ti y ta de mi, si ee parece bien. —Siempre dices mafana y nunca llega el mo- mento —contesto Eridolin, decepcionado. il si te lo PROMETO? Me creeris enton- ces? -={DE VERDAD te cambiaris conmigo? =-pregunté Fridolin, De repence, le abrasaban las majillas y le brillaban los ojos. —Por supuesto —contests. papi—. Siempre he querido voiver a tener ocho anos. Después se levantd, le pasé a Fridolin la mano por la cabeza y Je revolvié un poco el pelo. Lue- go, cogié de la rcpisa Ia Have del coche, —jEstis listo? Pues venga, ja la escuela! Fridolin se paré eo Ja esquina para decisle adiés con ia mano y papa se alejé a toda pastilla con su impresionante BMW negro. Entonces, Fridolin también se puso en mar- cha. 10 ee eae, Codi co pudo dejar de pen- sar en Jo que le habia prometide papi. ;De ver- dad querfa hacer: aquel incercambio? Ta! vez lo habia sofado todo o papa no habia escuchado con atencién. Fridolin. intentaba concencearse, {Ota vex matemécicas! Siempre aquellos ejerci- cios estipidos y aburridos! Si eso cra lo que papa queria a toda costa, peor para 4, Después de Ia. clase de mates, rocaba dibujo, La macstra se empefié en que pintasen un can- guro, El cangura de Vridolin no parecia un can- guro. Jan, st compaiiero de pupite, le dij -—jPero si has dibujado un cerdo con pinta de gato! —4¥ qué? —contesré Fridolin—. Pues wv can: guro parece un salchichén roto Los demis se rieron, pero Fridolin estaba muy enfadado, Mafiana le tocaria a pap pintar can- guros durante horas, mientras él se iria de paseo con el coche, Después hubo clase de gimnasia. jMenos 12 nadie descubrié tos calzvoncillos de flores porque Fridolin se fue al servicio a mudarse de ropa. Pero, aun asi, el nifio seguia de muy mal humor ¥.s€ puso a correr como un loco, De paso, apro- vech6 para tirar al suelo a unas cuantas chicas estpidas. Sobre todo, a las que se habian reido de su canguro con pinta de gato-cerdo, Pero todavia quedaba lo peor: clase de flauta. Por supuesto, Fridolin no habia ensayado en casa y seguia sin salirle el £2 sostenido. Todos los nitios sabian hacerlo, excepto Fri dolin, claro. El suyo soné horrible y muy desa- finado cuando todos entonaron juntos una can- cian. Por poco te estallan los timpanos. Estaba de tan mal humor que emnpezd a soplar adrede con mucha fuerza. La flauea chirriaba de dolor. Ni una sola nota sond como debia. Ni una sola, La macstra los interrumpié con un «Silencio todo el mundo!» y fe mando a Fridolin que ro- cara solo. Era lo que Je faltaba. «Mafiana que cOque papa la flauta —pens—. Ya puede tocar esta cancién hasta que se le caigan las orejas a sachos. Y después, que le rina Ja sefio y que to- das las chicas se rian de él. Y, mientras tanzo, yo Voy y me compro uncs patines en linea y me doy unas vueltas por 1a gesolinera.» 13 Piss shrreide tabi, abel a. Una ver, en casa, Fridolin tuvo que ponerse a hacer los deberes. Se senré en la mesa de fa cocina: el bebé también estaba alli y mama le iba dando de un potite uma especie de puré asqueroso y el hebé estaba todo embadurnado y no paraba de golpear la mesa con sus manites regordetas, Ast no ha: bia forma sc concentrarse!! 68 ands 24, anovd Pridolin en el cuaderno, No tenia ni ia mas mota idea de cudnto podian ser 68 mis 24. Y la verdad es que fe importaba un pepino, A ver st Megaba manana de una vez. Mahana serfa papd quien estaria alli sentado calculando cudnco eran 68 mas 24. Mafiana le tocaba a él roinperse Ja cabeza y asistix a la cenita del bebé, procurando disimmuiar el asco que le daba verlo comer. Qué tal en ef cole? —pregunté mamé, Muy bien —contesté Fridolin. El bebé agarré su cuaderno de marematicas ¢ intenté arrancar una hoja, Fridolin pudo sesca- tarlo por los pelos, 14 j —,Qué habéis aprendido hoy? —quiso saber mama. Nada —contestd Fridolin, —-Bueno, gues dime qué te ha parecido lo mas divertido de! d Wwe te pasa? Tiene que haber algo gue te hays parecido divertido, gno? —pregunrd mam, mieriteas le xestregaba al bebé el babero por la cura. El bebé segaia em- pefiado en destrozarle a Fridolin el cuaderno de matematicas, que ya tenfa una esquina doblada y una mancha de zanahoria ~Vale —admitié Fridolin-—. Hemos dibuja- do canguros. —iQué bonite! —comenté mama—. .¥ por qué os han mandado dibujar canguros? —Y¥ yo qué sé. Puedo irme a jugar? — jHas acabado los deberes? —Claro —contesté Fridolin, —2¥ has hecho los cjercicios de flauta? Hoy no tengo que ensayar. Basta con que Jo haga Ia semana que viene. —Bueno, vale —contexé mama, En realidad, ella tampoco tenfa muchas ganas de que Fridolin se pusiese a tocar la Alaura. EI bebe empezo a berrear. Fridolin ya estaba harto de tanto Horiqueo. Ademis, tenia muchas ganas de comprarse una bolsa grande de patatas ts fricas. Aun tenia en ef bolsillo del pantalén los dos marcos que Je habia dado el abuelo, oro eso eta un secreto, Fridolin no sabia si dejarse los dos marcos en cl bolsillo, como reserva por si al dia siguiente de repente le entraban 4 papa ganas de comer patatas fritas, ~-Hoy nos iremos remprano a Ia coma —dijo mami—. Pareces cansado. —Té vere a la cama teraprano, pero yo quiero esperar a que venga papa. Tengo que hablar con @l de algo muy importance. Papa hoy va a volver rarde a casa —dijo mami—. Ya lo veris mafiana por la mufona. ~-cQuieres decir que no voy a ver a paps hoy? —pregunto Fridolin fuera de si— si tengo que hablar con él de algo immportanci- sim: De qué quieres hablarle? —dijo mama mientras le acariciaba cf pelo. Igual puedes hablarlo conmigo, — No = dijo Fridlin — Bs un asimto encre Papa y yo. Tengo que quedacme levantado y es. perarlo, Mama alz6 al bebs de Ja trona. Como de cos tumbre, se le quedaron atrapadas las piernecitas: el bebé se negaba 2 ponerse de pic y 2 mama le entré dolor de espalda. —Ya s€ lo que vamos a hacer —dijo mama, que por fin habia consepuido sacar al bebe de 46 la trona—. TG y yo mos vamos a acostar esta noche en la cama grande. y ceperaremos juntos a que legue paps, ;Qué te porece? De sepente, Fridolin pensé que tenia una mamé estupenda, Si maSana podia hacer de papa, le regalaria un aniflo precioss un collar de perlas o una biciclera, Ya se te ocurriria algo, 18 Hastie puso los patines y se fue a la ga- solinera. Alli volvié a encontrarse con los cha- vales mayores que se deslizaban por Ia valia con sus patines en Iinea, Por supuesta, los pacines en Tinea molaban mucho mds que los patines co- rrientes, pero papd y mama habian dicho que uno no puede tenerla todo con ocho afios y que ellos a su edad tampoco tenian patines en linea. Fridolin se entrené un poco junto al tren de la vado sin que nadie lo viera. Aunque indiscuti- blemente fo hacia mucho peor que los mayores, se le deba bastante bien patinar hacia atrés, Y hasta sabia dar algtin que otro salto. A él le pa- rela que ya empezaba a fener un estilo bastante guey. —jOye, canijo, sal de mi camino! —le grird ano de los chicos mientras lo adelantaba a tod marcha. —jAnda, largare! —le dijo un chico Meno de espinillas que ya fumaba—. Aqui no queremos bebés. 19 El de ias espiniflas dio un gio brusco y se puso a patinar hacia atrés come si fuera la cosa mis facil del mundo y sin dejar de fumar, Las chavalas, que estaban sentadas en el respaldo de un banc, se echaron a reir, No, si él ya sabia que hoy so era su dia, Fri- dolin les hizo un corte de mangas. Es que, asi de repente, no se le ocurrié nada mejor. «Mafiana... —pens6-—, maiiana os vais a en: terar, Mafiana vendre con mi coche y vercis 19 que es bueno.» Fridolin se metié las manos en los bolsilles, a qué es lo que encontrs su mano derecha? Los dos marcos que le habia dado el abuclo, Aunque Fridolin se habia propuesto dejarselos a papa, es- taba tan disgustado que fue y se comprd una bolsa de patatas frites. Imego parind un rato por la acera misatras se las zampaba Nadie volvie a fijasse en él. Tampoco las chicas, que seguian sentadas en el respaido del banco bebiendo cora- cola, *Mafiana le daré a papa dos marcos de la paga... —pensd Fridolin~-, 0 tres o cinco. Por si las moscas.» Nada mis pensat eso, se sintié mucho mejor. Fridolin decidié dar una vucla por el parque pata ver si andaba por alif alguno de sus amigos, Asi podria inyitarlos a paratas fritas y jugar un rato al fitbol, 20 Peto sélo se encontre con el conto de Chris- topher, que cra vecine suyo, Estiviese loviendo ® luciendo el sol, Cheistopher siempre Ievaba un gorro de lana ¥ un arotak muy hortera, que Parecia de chica. Mamé solia decir que cra la abucla de Christopher, que vivie con él, Ja que de obligaba a evar aquel gorro, Christopher se puso muy contento cuando vio llegar a Fridolin. Bsre decidid 00 contarle a Christopher lo del intercambio £08 papa. > Hola —dijo Christopher, Bucgas conni- go? No sé... —conresed Fridolin Depende. Antes de nada, Fridolin tenia que ascgutarse de que no andaba por ahi cerca ninguna de sus colegas. Si veian a Fridolin Jugando fopher, el mocoso aburride con Chris. def gorro de inna, se deer Ete SO cso siete haves age demasiado. Christopher era tan Fequeiic ¥ ton- *orrén que una vez, cuando alin ban rodoc tos a la guarderia, se fue corriendo rasa a Buscarse 2 sf mismo, Resulsa que mama habia gritado: Rapido, bay que ic a buscar a Clssiopberl Sc este hacienda wcdes, Y cs que mama no se habia dado cuenta de que Chris. topher ya habia Hlegado; de modo que todos, in- cluido el propio Christopher. fhevon corriendo becca Hl bebe de Christopher guise iz « bnscarse a si mismo! .Como ib: ¢ permicir’ Bri. jane 2 st propia a2 n ifado delio que Jo_veson jugande con wn chido wo aquél? Slo habia maton en la coset Ni sno aquél? Si pars ena css, Nin ee eee ais si ehaeie. 5 b ira ve) excava: Christopher y empens 2 mirar ae: i es ‘mente por complacerle, Fsidolin ‘ Se i z i tile: io i os Ls exeavadora fuese louie con lo que a fa, dispuesto a jugar. Pero, en ef ae lo, aa estarin dispues Pet ae ts exavadors mob més que todo to que He ee ita, € i chile, incluides ta Flaw ba en ss ochila, ineios by Asura HOSS Be hiecrettiese (el iba det camguro Secs oa ia oe eater Pan ee i esalo de pate gue mas fe aba prec Bre me koe ose cron a pets eens ein ee ete rin pas dentro dele Ga 406 st mss buen rate jugendo con Christopher y con l exeavadora, y ent ee ee eC ae arena bole de pues De pron lp on : hev emperd a caerle : oo ee or en papi le cen Peers foul Wy Cheaashe pote un selefons mévil. As < po Th nar priziero a su madre y pregunta mar pri en Cas: os de ta alli para ir a bus. m casa ati corres hasta alli par en cas e g: isn cares a si mis be Eridlin se pus de repent muy cooteno, ye, Choistopber —dijo— rae a rs ( : gor ¢ dana. "Vines a encercar ti gorro de 5 Fridolin con caza de sor a édolin con caza de Christopher snir6 a Fric -= Par que? Porque es rouy hortera. a3 —éPor qué dices que es hortera? —preguneé Christopher, No te preocupes que yo me sable —contesio Fridolin—. Tu gorto, pests, Entonees Henaon el gosro de hojas seeas y lo meticron dentro de la bolsa de patatas Gita y, ttas anadir unas cuantay piedras pesadas, lo en. fettaron en un hoye muy profundo que cavaron en Ja atena. Se lo pasaron bomba y no pararon de reise, y despues se pusieron 4 pisoreat le zona donde habian entertado el gorro, aia etd —concluy6 Fridoiin, satisfecho—, Ese gotro jamis volvera a ver Ja luz del dia fo —mmurenss, S lev un sists tcemendo : vorarr6n. jEl era paps! Tea ors habis Furcionadat iSe habia conversida en papal Be pronto, el corasén le latin como —Mamdl —grufé, amerto de Mam, join duerines? Mama segaia duemionds 5 estaba rambado entre ios dos Papa buses al ofr su propie 2 wniedo—- sa lado. Fl bebé ios dos y tambien doce congjite de tape, Atti esr: exactamente donde terior. Vide —se dijo a si misino—. No hay de qué asusrarse. Ahara me levanto y voy a ver si Fri- dolin ya se he despertado Gogié su conejizo de trapo y se fue al cuarco de baite. ridolin egraba sentado en el vater leyendo el habia dejado la noche an periodico Buenos dias —le seludé con vor de tifo—. gHtas dornido bien, grandullon? Fridolin cerro el periddico y se metio debaje de ta duch: --Anda, ayédame a bajar fe ducha... que yo no Hlego. Papa estahe muy soxprendide por fa tranqui- lidad con que Fridolin se lo estaba, tomando todo, Tras ajuster In ducha, se puso « buscar su dentifrico de pirufos, Eetaba tan devpistado que se subié al taburete, ce dio con la cabeza contra ja ldmpara y el raburere se rompid. —-jMMierda! —-ijo papd con vox grave—. No habia pensado en esto. —Codntas veces he de ceperiros a ti y am madre que no diggis pelabrovas dijo Ja voz de debajo de la ducha —-jfues yo digo «mietday —grité pap’ enfa- dado, parque me he hecho dao! Fridolin salié de 3s ducha riérdo: sreande aga y cho- ~Tranquilo, es la: ma piazte. Papa empesé a Horiquesr empre tlene ace ninguna gravia! sete del princi. que veiece de mi. No me _ Perdona, papsiro —le dijo Fridelin acaei eandole el codo porque no Hegabs mile axriba Nunca volveré a reirme de tiv te lo prometo, Micnaas decia eso, Feidolin ne podia deiar de feu Y entonces papa también cuye que solar una carcajada. Después pupa se seca fas Iderimnas eon la punta de la toalia y se sento en @f suelo para ponerse Ins calcecines. : Los calcetines se le pegaban a Ja piel y se re- sistlan a deslizarse por sn estépide pic. ~ Mami siempre quiere gue me ponya estos malditos caleetines —dijo papa de mal hu. mot. ¥ estos calzoncilioy de flores 29 me los Bongo yo ni loco, jQue va a pensar Ja cuando nos vayamos a hacer deporte? Pero si no tienes pos qué ersefiarle los cal zoncilles a la secretaria —Jo tranquiliza Fridolin dindole unos golpecitos carifosos en la cabe- a~. Te vas a la oficina y puedes quedarce rode &l dia sentado en el sillon. La ne si fa Hamas y, entonces, re res tomar café. o retaria, erarig sélo vie La —-<¥ si me aperece mds un coi Unto papd. escéprico, Te tacts todo to que ni quieras —le pro- metié Pridclis. Quiero coce-cole —dijo papa portiendo mo- rritos. : =¥ hiego te v dotin. Qué ¢3 ese de ta reunién? zAlgo aburrido —-Casi siempre; pero si te aburres, puedes echar una siestecita. —Enronces ao quiero ira la reunién —dijo a la reunion --explice Fri- 2 papd, decidido. Pues a veces uno se fo pasa muy bien en Jas reuniones —lo tranquiliz6 Eridolin—, La genre se pelea y s¢ arma cada una... —— Chachi! —-gritd papa con los ojos brillan- tes y dando salcos de alegria por code el batio—. (Me voy a la oficins, me voy a le ofieinal Yupi! Feidolin inventé aleanzar fa maquinilla de afeitar. pero no legaba, —-Ayfdame, anda —le pidié a papa. Se le habia olvidado por completo que. atin fno.tenia barba! --Pero si 10 tienes que afeitarte,. —le dijo papi. Sélo yo tengo que hacerlo, Papa estaba alli delance det espejo con sus cal- cetines negros —uno ain a medio poner— y con os calzoncillos de flores en la mano, y Fridolin, Je enseniaba como afeizarse sin cortars En ese momenin, entré inam’. Hola, hombrecieas mios. Mer judo ruisly es- tiis metiendo, seh? : Le parecié un poco extrato que Fridolin te sujetara a papi le mano i dijo nada, Woy a prepararos ef desayuno —. bebé acaba de desperturse, Mama no se habia dado even y Fridolin se miraron censpiradores, vara afeltarse, pero no ea de nada! Paps el uno al erte como de Después chocaron las manos coro dos Futbolistas, Que tengas suerte, chiquitin —le dijo ut : , chiquitin le dijo jut. dolin. a papa. q ae Todo en orden, colega —fe dolin, : lo hacen dijo papa a Bri. Cy IME coe ens base dune aceon al bebé. Papa se habia scorado x fa mesa y cormia sus copos de maiz mieniras daba chasquidos con la lengua y sorbla la Ieche con mucho ruide. Al mismuy tiempo, recozria Ja mesa con su coche de jagueve. Fridolin bebia café y lela el periddico, “El presidente vuelve 3 estar en China -dnuncid con su voz de crio, Si, eso es lo que dijeron ayer en el telediario —-contesté mami, —-Pues ia verdad es que de es0 se podia haber encargado ¢l ministio de Asuncos Exteriores -—opind Fridolin, ixricado—-. Yaya manera de despilfarrar el dinero de los contribuyentes! Mama dejo de dar el biberin al bebé y se quedé mirando bogpiabierta a Fridolin, BI bebé, que rambien se habia quedado con Ia boca abierta, empezé 3 gritar. Mamé volvié a meterle toda confusa el bibe- ron on la boca, Papé solté un exucto sobre sus copos de inate ¥ dijo con vox grave: “Vaya muermo de presides: Maia se pasé la mano por los ojos. —-No he dormido nada hier es a noche, Qué estuvisce haciendo ayer hasta tan tarde, Erich? ~-Pues enterré un gorro de lane en la arena ~explicé papa, o:gulloso-—, y despues desmonce el portabultos de la bici. Eso. es todo, Mamé estaba tan aturdida gue le metié al bebé ef biberén en la oreja —2¥ quién fie el que dejé Grados el. porta: bultos y ta caja de herramicntas delante de la puerta para que yo teopezase en medio de la os curidad? —pregunté Fridolin, enfadado, ~—Lo sieeentooo... —contesté papa boscezan- do, ~-Fridolin, dare prisa que se ts esté haciendo tarde —Ie advirtié mama Papa se levanté, Sen A Me voy —respondis mientras vogia la mochila—, Pero no pienso levarme esa Flaura estiipida, IBRICH! —grité mama—. (Se puede eaber qué estis haciendo? Pap se estremecid, —Bra una broma —dijo dandole un abrazo ‘muy carifoso a mamé al tiempo que miraba ha- cia Fiidolin — Auda, 36 _Ah sia dijo Eridolin-—, Bs cterto: tengo que ir a ls escuela... Bueno, chicos, no sabeis como sne alegro, A todo esto, ges guapa la macs: tra? Lu sefiora Kessel? —pregunté mama mi- papi con cara de sorpresa—-. Por qué rando pregunta eso ef nifio? : “La sefiora Kessel esté gorda —contesto papa. Eridolin doblé el peniddice y se limpio los zapatos. Después echo ua vistazo al espejo, se hizo la taya en medio y sc peiné con esmere. Estuvo a punto de besar a mam en La boca, pero como era demasiado pequetto. Je dio un beso eo el pecho. Mama se quedé pasmada, “Esto se debe 2 que ayer le dejé ver Ia tele por la noche —-se reproché a si misma—. L pelicula no le ha sentado pada bien al niftc. Eridolin quiso coger las {aves del coche y reléfono movil, pero papa grité: —Veae eso! (Es 5 —jAy, sil Es verdad —se disculpé Pridolin~ Tienes razon. Ha sido un despisve mio. © sea que. a fa escuela, zh? ;¥ 2 qué clase? A la 2 b le ayuda papi—. Eso deberi saberlo, Fridolin! Mama se ri3. —Menvde oumerito que estiis montando los dos esta masana. a7 as Waves del coche y el mévil, La Yerdad es que estaba muy, pero que muy ser. “lose. De repents, le empezo a doler ta eripa. ~Fengo que ir otea vez al vater —-le dijo a ( mama—. Pero puede ir yo solito. ma se ques esperando delante de Ia pucr- ta del bane con el bebe on brazos. Papa volvia rorpemente la braguera, Des. pues Je dio un beso « mamd y oto al bebé, Fridolin esperaba con ia bici junto a la verja. Mama fue con el bebé hasta la puerta para deciles adi6s, Rap’ se acercé cautelosamente al coche y abrié la puerta, Eso no le resulté dificil: fo habla hecho montoncs de veces. Se sent en el asients del conductor y agarré el volante con las dos manos. wciBtich! —grité mamé— jHas olvidado algo? Papa metio la Have en ef contacto. El mon arrancé a la primera, Papa piso el acelerdor, El « hacia delante. Papa gird brus ¥ el poche fue a parar contre fos acbustos, Luego frend en seco y el coche se decuva THREERICH! —-yrité mami—. ;Qué haces! Estoy conduciendo —le contesté pap gri- tando también. -O acuso te creias que estaba cortando el césped? Papa Jo intenré de nu a salle y se sul che pegé un bote neate el volante ‘ Volvio a pisar el 38 avelerador, ef coche solts un sugido, pass rasan: do Jos arbustos y, de pronto, iba condieienio Por Ia calle. (La cosa funcionaba! jEstaba con. cupiceda un echel Pas pug el. igterini ce con oda Ja naturalidad del mundo > gird en ta siguiente esansina, (Que guay! Condusis easke urada! Papa decidié dar unas cuantay vnelun 6 Ja manzana, Que lo vieran todos. {Todos! Por alli ibe Chtistopher con un gosro auevo, Pap pegd un ocinane y Te hizo sefales con la mar. pero Christopher se lev un susto de mucire y se eché a tn Jado. Papa fue basta ta gasolinera, yolvis a pisar un Pat de veces el aeeletador, porque hacia tn raide realmente impresionance, y apago el motor. El othe choco contra un conteneder de bacura, El encargado de la gasolinera se le quedé mirande Papa ented en la tienda, saco la cattera y extrajo de ella un billere de cien marcos, que puso en- cima del mostrador, = edo ayadarle en algo? —le-pregunes el encargado, Papd le enseao el billere de cien marcos, —=¢Queé me da por esto? El encargado frunci6 las cejas, Ot SO. Bueds lense el depésito y lavar ef coche, por cjemplo, Note —comiests papa—, tse es muy abu- rrido. é : usted? —pregunté fh _-Bntonees, ;gué propone us regi eater oe Be ease all leegslie seer a buevos sorpresa —dijo el golosa de papa—-. Y, por supussto, pataias fritas Hee nee tan 7 a iga Pe ry de chen SoBieao ip aulelneed diva, Por alo : Pate a Papé le cendié ef hhillete de cien marcos. —For valor de esto. — Como wsied quiets, El encangade ge Fue al alinacén 'y volvi6 con ito Heno de cajas. un carrito Hleno de caja He 8 Gualore: Gin’ sella Weve aden a roche? Seale etc out pane cade Uemtenia: EI a r oO. Bi cee dt guise ccs eae ee Pat Telecel de lan ensyer ene! ie ee ¥ luego se senté cémodamente en el maletero, ei un ea, romp con ls dente lpia b A 16 1a SOLA Vez PAG ei ie basal ably «6 sence ual treinta ositos en la boca. 41 eae enmrd con fa bici en el patio de la escuela. Los nines, que acudian en tropel de to- das partes, se empujaban los unos a los otros para pasar por

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