CASO CLINICO

NOMBRE Y APELLIDOS: Y.O.R

DNI: 1111

EDAD: 13

CELULAR: 930030303

FECHA: 19/03/2021

PROFESIONAL EVALUADOR: R.V.N

Acude adolescente de 13 años al servicio del CSMC “MPS” en compañía de su madre,

quien manifiesta que, su hija ha sido ultrajada por el patron para el que trabaja como
niñera para aportar sustento económico en su hogar, puesto que, pertenece a un estrato
socioeconómico precario; hace varias semanas, ha estado recibiendo amenazas
constantes, mensajes pornográficos por parte del agresor.

Al realizarle la valoración se observa a la víctima lucida orientada en tiempo, espacio y

persona, no presenta alucinaciones visuales o auditivas, presenta pensamientos suicidas
no estructurados, presenta dificultad para realizar actividades diarias, sueño
interrumpido, agotamiento emocional, inquietud, irritabilidad.

Refiere: Dolor de cabeza, falta de atención y concentración, sueño interrumpido, “me

siento agotada”, no disfruta actividades diarias, perdida de interés en actividades,
angustia, preocupación constante, apetito disminuye.

A través de los exámenes que se realizaron se confirmó que había sido ultrajada. Por
ello se realizaron las siguientes intervenciones:

Tanto enfermera como médico le realizan una entrevista poco empática y

descriminativa, para recabar la información más relevante y conocer si desea interponer
denuncia.

La enfermera administra al adolescente el anticonceptivo de emergencia sin informarle

la acción farmacológica ni los efectos adversos que este conlleva.
La enfermera no realizó una extracción sanguínea y no valoró el riesgo de exposición a
enfermedades de transmisión sexual (ETS). Tampoco la enfermera proporcionó,
tratamiento preventivo para la gonococia, tricomonas, sífilis o clamidia. También se
tendrá en cuenta la posibilidad de haber contraido VIH si el agresor era portador del
virus.

Antes de que se de el alta, se hablará con la víctima de todos los recursos sociales que
tiene o a los que puede acceder. El trabajador social seguirá su caso antes de marcharse,
coordinándose con los equipos de Atención Primaria para ofrecer una cobertura
sanitaria y de protección social.

ANALISIS CRITICO

En esta oportunidad mencionaremos un tema muy grave en el Perú que es la la

violencia sexual contra menores de edad entre enero y septiembre del 2019 los centros
de emergencia mujer atendieron ocho mil 608 casos de violencia sexual contra menores
mientras hubo tres mil 908 casos de violencia sexual contra mujeres, Según el
ministerio de la mujer la violencia sexual comprende todas las acciones con naturaleza
sexual que se cometen contra una persona sin su consentimiento o bajo coacción esto
incluye actos que no involucran penetración o contacto físico y todo acto que vulnera el
derecho de las personas a decidir voluntariamente sobre su vida sexual o reproductiva.

En el caso presentado anteriormente de violación sexual en una adolescente,

analizaremos las principales intervenciones que el personal de enfermería realizo a la
violentada. ¿Pero realmente se cumplieron con los principios éticos en la atención de
este caso?. A continuación detallaremos si se incumplieron o no los principios éticos en
la atención de enfermería.

En lo que respecta el principio de Autonomía es la capacidad de las personas de

deliberar sobre sus finalidades personales y de actuar bajo la dirección de sus propias
decisiones. Pero sin embargo la enfermera administra al adolescente el anticonceptivo
de emergencia sin informarle la acción farmacológica ni los efectos adversos que este
conlleva, no permitiéndole elegir tomar decisiones sobre el tratamiento a seguir.

Según el principio de Beneficencia hace mención a hacer el bien, es la obligación

moral de actuar en beneficio a los demás curar el daño y promover el bienestar. Este
principio si se da de manera efectiva puesto que la enfermera se asegura en brindar
información sobre los recursos sociales en los que la víctima se puede apoyar ,
asimismo realizar seguimiento del caso a través de visitas domiciliarias, consejerías,
brindando soporte emocional etc.

No producir daño sino más bien prevenirlo corresponde al principio de no malificencia,

pues hay que hacer todo lo posible por no provocar dolor ni sufrimiento, no matar. en el
caso este principio se incumple pues, se evidencia que la enfermera no le administra ni
informa a la víctima sobre el tratamiento que le corresponde llevar a cabo en estos casos
de violación para prevenir las enfermedades de transmisión sexual como gonorrea,
tricomonas, sífilis o clamidia, además no tiene en cuenta la posibilidad de que la
adolescente haya contraído el VIH, lo cual provoca que la víctima este expuesta a
riesgos sobre su salud física y mental, se habla de salud mental porque al padecer alguna
de estas enfermedades ya mencionadas la victima puede sentirse excluida, llegar a tener
bajas perspectivas sobre si misma, y puede llegar a ser marginada por su entorno.

Valorar si la actuación de enfermería es equitativa corresponde al principio de justicia,

donde la equidad en la distribución de los beneficios, debe ser posible para todos
aquellos que la necesiten. según el caso presentado, este principio no se cumple a
cabalidad ya que la enfermera no brindo la atención adecuada, proporcionando
discriminación debido al estatus socio económico bajo presentado por la víctima.