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WOMG) CRAGIICHT UA Ss ESCAIAAION AINA COMO) PRAGTICAR) LA ASME iG Wergnds) ) \Orie 355 saueilss iY/contactar con) otras cnlidndcs EpAIN Mc@oy oh rH 4 = = FS = = C4 Ps = = <= y raf i C4 = = Ss b=4 S = = Cs o = oS pwd 4 Pore “Tuto de oii: HOW TO DO AUTOMATIC WRITING Traci por (MARIO LAMBERT 1 1994 By an coy £6 1991 Denton Estria EDF. S.A. 197 aoa EDAF, SA. orge a. 20, Mai ‘aren en esfatl por acer con LLEWELLYN PUBLICA "TIONS, une Ds de LLEWELLYN WORLDWIDE, I, Mieso- ‘oe permit I erode malo pc de ese io, st Prem font, nl tanomssn lag forma 9 por cnleer fr. yu se lstric, mesic, po orci. po eso o> Ino sine ein previ y or eset de sitar dl Coprih Depsto Legal: M.27830-1997 ISBN: 8140088 PRINTED IN SPAIN Grifies Coil, S.A Poly nd. Prado de Regordoto - Méstoles (Madi IMPRESO EN ESPANA jCémo hacerlo! €3 ‘0 importa lo que sea, Ia pregunta importante siempre es: {Cémo hacerlo? La mente tiene muchos poderes maravillosos; muchos més de los que usted haya podido sofiar alguna vez, y la huma- nidad apenas ha comenzado el maravilloso viaje evolutivo que nos permitira usarlos todos a volun- tad, Aumentamos nuestras capacidades a medida que vamos realizando las cosas. Existen numerosas cosas maravillosas que usted puede hacer. A medida que las hace, aprenda mas acerca de las cualidades inherentes a la mente y al espfritu, y a la medida que ejercita estas capacida- des internas, crecerén en fortaleza, al igual que aumentard la visién de su potencial mental y espi- ritual, ‘Al aprender a realizar la Escritura automética, 0 a hacer un hechizo de amor o a usar un espejo magi- co, 0 muchas otras y extraitas cosas, usted esta extendiendo un poco, el tremendo don que pasee en su interior, la fuerza vital misma ‘Nacemos para poder crecer, y el no usar este don, el no erecer en su percepcién y comprensién, es dar 8 COMO PRACTICAR LA ESCRITURA AUTOMATICA Ja espalda a los dones de la vida, del amor, de la belleza, de la felicidad, que constituyen la verdadera raz6n para la ereaci6s Aprender etmo hacer estas cosas es abrir venta nas psfquicas a los nuevos mundos de la mente y del espiritu, El hacer realmente todo esto significa entrar en los nuevos mundos. Cada una de estas actividades que hacemos es un paso adelante en la aceptacién de una responsabilidad ante los mundos {que usted puede moldeare influenciar. Es algo simple y facil de seguir, y. sin embargo, muy satisfactorio. Seguir estas instrucciones paso a paso puede iniciarle en grandes aventuras. Establez~ a control sobre el mundo que le rodea, y entre los, nuevos mundos de la mente y del espiritu. Reconocimientos &3 L antiguo adagio de los escritores que dice que nadie puede escribir un libro a solas nunca fue tan verdadero como en el caso de este pequetio volumen. No podria haber llegado a ver la luz sin la ayuda de numerosas personas, algunas de las cuales pueden tener poca o ninguna idea de cudn profunda influencia ejercieron en el producto final, Entre las que tengo una deuda de agradecimiento por toda st ayuda se encuentran: Avigail, mi muy querida amiga de numerosas vidas a quien primeramente ‘expuse mis ideas; Vanessa, Liana y David, quienes fueron mis primeros estudiantes de escritura auto- mitica; «Evelyn de California», cuya eseritura auto- matica me impresiond primeramente sacéndome de ‘mi cémoda complacencia; ef maravilloso profesor y autor Dick Sutphen, en cuyos estupendos seminario descubri por primera vez la escritura automética; mis padres, Don y Billie Taylor, quienes, aunque no -mpre comprenden qué es lo que estoy tratando de hhacer, no obstante permaneven brindéndome sopor- te; y, finalmente, mi esposo, Mark, el por much tiempo sufrido conejillo de India: de muchos de mis 10 COMOPRACTICAR LA ESCRITURA AUTOMATICA indice experimentos fisico/mégicos, quien funge como mi secciGn de animacién, eritico, lector de pruebas y es reparador de ordenadores. Yt mis sincero apresio y agradecimieno va, como siempre, a Nancy Mostad de Llewellyn, por su gentil estimulo, y a Trish Telesco, por incentivar mis facultades creativas y mostrarme nuevas formas, igs de expandir este simple concepto hasta convertirlo a cen un libro valios. Como Hacert.o! . REcONOCIMIENTOS 9 1. Introducci6n ala escrituraautomatica 13 {Qué es Ia escritura automética? 2B 3. {Con quién y con qué puede usted hacer contacto? .. 33 4. Sintonizando su eseritura con la astto- Tog eo oat 5. Prepariindose para hacer contacto con otras inteligencias, 3 6. jRealizndolo! (En 15 sencillos pasos) 147 7. Sial principio no tiene éxito, 185 8. Realizando la escritura automitica para otros. 219 9. Imerpretando su escritura automatica 227 10. Resumiendo todo lo anterior 243 Gtosario 245 1 $8 Introduccién a la escritura automatica | primera experiencia personal con la escrtu- +2 automtica la tuve en julio de 1987 cuando mi esposo y yo fuimos a los bellos y misticos cafo- nes de roca roja en el norte de Arizona para partici- par en un seminario sobre psiquismo. Estos cafiones han sido considerados desde hace mucho tiempo ‘como sagrados por los ameticanos nativos, quienes creen que estin habitados por deidades y espiritus 4e ayuda que con frecuencia aetian como cataliza- ores de experiencias psiquicas. Durante casi veinte aiios, muchas personas han descubierto las podero- sas vibraciones espirituales de estos impresionantes ccafiones que parecen potenciar cualquier hechizo, ritual, adivinacién, u ottos trabajos psfquicos. Quedé gratamente impresionada por la sorpren- dente belleza del rea, y ante el innegable poder que percib{ como emanando de los rojizos cafones y escarpadas paredes que me rodeaban. A pesar de {que los lamentables signos de la comercializacién estaban datiando muchas de las espectaculares vistas ¥. en algunos casos, incluso impidiendo el acceso Pibico a lugares sagrados, el magnetismo del lugar 14 COMO PRACTICAR LA ESCRITURA AUTOMATICA ejerefa todavia una poderosa atraccién para cual- ‘quiera que tuviese un minimo de interés 0 el talento necesario para el crecimiento psfquico y espiritual Lo que no me impresion6, sin embargo, fue el ejercicio de escritura automética que se nos pidié que hiciésemos durante el seminario. En ese ‘momento de mi vida habfa aprendido que virtual- mente cualquiera podia abrir los canales a sus pro- pias capacidades psfquicas innatas, pero tenia una gran duda acerca de que la escritura automética fuese una capacidad que mereciese Ia pena desarro- ilar. El proceso en su totalidad me parecia una frivo- la pérdida de tiempo. EL hombre que dirigia el ejercicio era, y todavia es, un Ifder muy respetado del movimiento Nueva Era, cuyo trabajo y enseianzas he admirado siem- pre. Pero sélo pensar en sentarse en una especie de trance, sosteniendo un lépiz y un papel mientras esperdbamos que nos egase alguna inspiracién divina a través de éstos, por su propia cuenta, me conmovieron por lo ridfculo, No hab{a asistido al seminario tanto por su con- tenido como por permitirme un tiempo para estar en ese espacio sagrado, y compenetrarme con 1a natu raleza y con mis deidades y para complementar mi propio trabajo de hechicerfa. En ese tiempo me hallaba buscando respuestas acerea de por qué habia sufrido dos fracasos de embarazo y estaba encontrando dificultades en concebir nuevamente. Siguiendo el camino de muchas mujeres afectadas de problemas de fertilidad, me habia vuelto obse- sionada con la locura por los bebés, y el hecho mas frustrante de todo ello era que ningtin médico podia INTRODUCCION ALA ESCRITURA aUTOMATICA 15, localizar ninguna razén que justificase mi pro- blema. Mientras estabamos en Arizona realicé unos ‘euantos hechizos con el Tarot, con las piedras y con las hierbas. Tenfa unas geodas en un cajén de la cémoda, una tirada de Tarot colocada en mi maleta, tallos de trigo rodeando mi cama, mezclas especia- les de aceites esenciales para el baifo, y pequeitos dibujos de bebés atados a una pequefia bolsita para ‘guardar t6tems, la cual llevaba alrededor de la cintu- 1a, que més parec‘a un cordén umbilical retorcido. Mientras estuve alli me hice una regresién para ver si mis problemas tenian origen en una vida pasada, € incluso terminé aprendiendo cémo obtener algiin control sobre mis proyecciones astrales. Pero a ppesar de todos estos esfuerzos, las respuestas a mis, problemas de fertilidad me seguian eludiendo, EI momento en que iba a experimentar por prime- ra ver la escritura automatica era una tarde eélida, soleada y seca, el tipico dfa de verano en esa zona que reduce todos los poderes de concentracién y de ‘oluntad a los que no estén habituados a ese clima, Estaba irritable y exhausta de tantos largos dias de constantes experimentos.psiquicos, a pesar de que todos ellos habjan sido sorprendentemente exitosos. ‘Nuestro profesor invirté gran cantidad de tiempo explicéndonos lo que era la escritura automiética, y nos expuso su propia técnica para hacerlo. Escuché todo 10 que dijo con los ofdos filtrantes de una escéptica innata. Por mucho que admiraba a esta persona, no lograba convencerme. Luego nos pidi6 a cada uno que miréramos alte dedor de la habitacién y que hiciéramos equipo con 16 COMOFRACTICARLA ESCRITURA AUTOMATIC algtin participante desconocido, a fin de someter al proceso a una prueba satisfactoria. Yo, junto con uchos otros, incluido mi esposo, no tenfamos nin- ‘gin entusiasmo. Tenia que mantener una sonrisa forzada cuando debia formar equipo con el descono- cide mAs cereano que no tuviera ya compaiiero. Intercambiamos breves saludos y evitamos toda conversacidn posterior que pudiera colorear la escri- tura automatica que estabamos @ punto de poner a prueba, Todo lo que sabfamos la una de la otra era {que ella se lamaba Evelyn de California y que yo cra Edain de Texas, ‘Una vez dejadas atrés las cortesfas de rigor, aban- donamos la sala del seminario y buseamos un lugar ‘tanquilo bajo el brillante sol, cerca de la piscina del hotel donde podiamos trabajar juntas. All nos sen- tamos, frente a frente, sobre dos sillas de playa de rejilla cubierta de vinilo, con nuestros cuadernos balancedndose sobre las rodillas, mientras que las ‘dos, cada una a su manera, tratamos de entrar en un estado mental meditativo, haciendo intentos por contactar el espiritu guia de la otra persona (éste era ‘tro concepto que tampoco estaba segura de aceptar fen eve tiempo), afin de proporcionar a nuestra com- pafera alguna informacién personal de interés. Cuando abr los ojos para escribir me sentia pro- fundamente molesta por el hecho de que no me He- gaba absolutamente ninguna réfaga de inspiraci6n ni de intuici6n. Para poner peor las cosas, por el rabillo del ojo podta ver que Evelyn estaba escribiendo rapida y furiosamente, su pluma deslizindose fil mente sobre la brillante hoja de papel blanco, mien- tras yo me hallaba haciendo garabatos en un esfuer- INTRODUCCION ALA ESCRITURA AUTOMATICA 17 20 por liegar a algo, cualquier cosa que fuese, que na, Cuanto més lo intentaba peor se me daba. Me di cuenta réipidamente que mi propio except cismo era, en parte, responsable de bloquear mi flujo energético, y también lo era el hecho de que siempre habia asociado esta préctica con la contro- vertida Uija. La verdad es que tema dejar que algu- na cosa del pasado Hlegara a través de mi, De mane ra que mentalmente proyecté un circulo protector a mi alrededor, lo mismo que he venido haciendo en Jos rituales de mi religién por muchos afios. Decidt «que no permitrfa que algo negativo se abricra paso a través de mi, e invogué el poder de mi Diosa pidiendo guia y ayuda. Después de hacer todo eso comencé a relajarme, ¥ con la relajacion comencé a percibir impresiones ‘ecasionales que no podia ignorar. Aunque estaba Picadas biaseriateny alec iaieca ee Ilevado por alguna fuerza invisible deletreando pala- bras con una letra jue no me era familiar, y senti ‘que habia captado algo que podia merecer ta pena escribir. Me senti profundamente molesta cuando me di cuenta que lo que estaba eseribiendo era acer- ca de la necesidad de Evelyn de contactar con otras, personas que compartieran sus intereses, que estaba permitiéndose a si misma estar sola y sislada cuan- do en realidad no tenfa por qué hacerlo, También estaba escribiendo sugerencias sobre como ella y su esposo podrfan mejorar su debilitada relacién matri- rmonial. Cuando ambas habiamos concluido y nos hallé- ‘amos por completo de vuelta en nuestra conciencia 18. COMOPRACTICAR LA ESCRITURA AUTOMATICA normal, Evelyn me pii6 que comenzara yo prime- +0, Eché una incémoda ojeada a las patéticamente escasas notas que habia garabateado y me pregunté si tenfaalggin derecho a decir tales cosas personales {una mujer de quien no conoefa ni una sola cosa Pero allf estaba yo, sentada con las notas en la mano, y sabiendo que tenfa que decir algo. Decidi {que tenia que romper el silencio con la esperanza de echarle la culpa de cualquier palabra ruda a algsin infliz espiritu guia. Me disculpé por adelantado, y Iuego le lef mi breve péina ‘No estoy segura de quign qued6 més sorprendida, ella cuando eseuché 10 que yo habia escrito, 0 yo ‘cuando vi que era capaz de comprender ¢ identifi ‘earse con todo To que estaba en esas notas, Me dijo que ella estaba verdaderamente sola, y que habia Yenido al seminario con una mujer a quien realmen- te no conocia muy bien, mientras que su esposo se fue al Mediterrdneo por unas semanas. Se dio cuenta ‘que estaba buscando respuestas a preguntas que no habia sido capaz de identificar hasta que no la lef mis notas. Me quedé complacida de que Evelyn se sintiera feliz con las palabras que habia yo aportado, y agra- decida de que no se hubiese ofendida en forma algu- na, pero todavia me sentia lejos de estar convencida de que hubiese sido la portadora de un mensaje pro- cedente del espiritu guia de Evelyn 0, si se quiere, de cualquier otra parte de su subconsciente. Aun cuando nunca he tenido dotes de psfquica, he sido siempre altamente empética, y me estaba preguntan- do si habria estado captando alguna proyeccion cemocional de tristeza de parte de ella y la hubiese eTRODUCCION A SCRITURAAUTOMATICA 19 asociado inconscientemente con el hecho de que usaba un anillo de casada, pero obviamente no esta- ba con su pareja en el seminario, Simple légica. Un Viejo truco de salén de adivinos. Segui siendo ceseéptica y esperando ser convencida acerca de los Iméritos de la escrtura automstica. Debo confesar, haciendo una retrospectiva, que ro es que no estuviese conmovida. Supongo que me sentfa un poco engreida aunque se tratase de un éxito insignificante, pero todavia tenia muchas du- das de que esta mujer pudiese entrar en contacto con mi propio espiritu gufa, si por ventura esa clase de ser existiera, y mucho menos que me dijese algo de again valor que no pudiese descubrr por mi misma Me arrellang en la pegajosa slla de playa de vi Jo esperando oft las acostumbradas y banales charlas 4que suelen pronunciar los canalistas aficionados en todas partes, Estaba esperando que me dijese algo Postico y Hleno de sentimiento barato tal como: « sobre un pizartin sellado. Ein los aos posteriores a Ia Primera Guerra Mun- dial, el famoso artista ¢ ilusionista del escape, Harry Houdini, que era un maestro en el arte de los trucos teatrales, intent6 desenmascarar los fraudes. Crefa sinceramente que la comunicacién con las inteligen- ciias desencamadas era posible, y estaba dispuesto a ‘ofrecer una jugosa recompensa a quien se lo pudiera probar. Offecié pagar 10.000 délares a cualquier ‘médium del planeta que pudiera proporcionarle pruc- ‘bas concluyentes de que hubieran hecho contacto con su propia madre, Houdini aseguraba piblicamente que no habia podido encontrar nunca ni tan solo un médium cuyos trucos no fuese él capaz de desenmas- carar, aunque la evidencia posterior sugiere que quiz cencontré uno o dos, incluyendo a la sefiora de Arthur Conan Doyle, cuya escritura automética le fue dificil «de menospreciar. [No obstante, la promesa de dinero y fama que se podia obtener con 1a médiumnidad siguié consttu- yendo un eebo atractivo para los granujas, y. even ‘ualmente, solicitaron al Congreso de los Estados 28 COMO PRACTICAR LA ESCRITURA AUTOMATICA Unidos que investigara y, de ser necesario, que regulase la industria de los adivinadores de la fortu- 1a bajo lo cual se clasificaba en ese tiempo al espii- tismo y a la escritura automstica. El asunto se con- virtié en uno de los més difundidos en los anos 1920; se euestionaron serios aspectos consttuciona- les, tales como el derecho a la libertad de empresa, & la libertad de expresiOn y ala libertad religiosa. En ese momento el dao ya estaba hecho. El ‘movimiento espiritista, con un interés subsidiario en la eseritura automitica, llegd a la easpide en la década de los afios 20, después de 10 cual s6I0 los verdaderamente dedicados permanecieron dentro de la fe. La gente estaba ya cansada del espectéculo permanente. Con la legada de la Gran Depresién en 1929, el pasatiempo de la eseritura automética fue desapareciendo hasta llegar al olvido, mientras que asuntos més serios, tales como la forma de alimentar ‘una familia, ocuparon el tiempo y la atencién de la gente en ambos lados del Atkdntco. Hoy en dia, Ia escritura automtica es todavie uti- lizada en las iglesias espiritistas, de la misma forma ue lo hacen en la Nueva Era, los paganos, y altos ‘magos, quienes han Hegado a redescubrirla como étodo confiable de adivinacién, ‘A lo largo de la pasada década ha existido un renovado interés en el proceso, pero sus secretos than permanecido en las manos de canalizadores pro- fesionales y psiquicos declarados, quienes con fre~ ‘cuencia tratan de decimos que cuando estemos tan «iluminados» (tenga cuidado con esa palabra) como ellos lo estan, entonces el secreto del proceso nos serd revelado, .QUEES LA ESCRITURA AUTOMATIC’ 29 Quizds por ser uno de los més ficiles de usar y ims fascinantes orfculos, a quienes desean perma- necer ejerciendo su control no les gusta la idea de compartir su poder. No existen simbolos abstractos que interpretar, ni ningtin lenguaje florido (usual- mente) que investigar, y tampoco ningun cono miento cultural asociado al proceso. En la mayoria de los casos todo se resume en una simple y directa respuesta comunicada en nuestro propio idioma. iMenudo secreto!, ;n0? ‘+ {Como puedo utilizar la eseritura automdtica? La escritura automitica puede ser utilizada lo mismo que cualquier otra clase de oréculo. Se pue- den recibir comentarios, ideas, normas, consejos € informacién del propio Yo Superior de uno, 0 de cualquier otra entidad con Ia cual quiera probar a hacer contacto. Podré conocer acerca de sus vidas pasadas, deseubrir recuerdos de la niftez olvidados, encontrar ebjetos pendidos, comunicarse con fami- liares y amigos que han muerto, o adivinar potencia~ les hechos futuros. El proceso completo de la escritura autométiea serd completamente tratado en los capitulos Cinco y Scis, y alli se le darn més ideas sobre cémo puede trabajar el ordculo para usted, con quien puede esta- blecer contacto y qué puede aprender de estos seres. ‘Algunas veces la gente se queda tan fascinada con el proceso adivinatorio que termina utitizandolo tini- camente como entretenimiento personal. A pesar de que esto no es intrinsecamente malo, el uso repetido 30 COMOPRACTICAR LA ESCRITURA AUTOMATICA de Ia escritura automitica sin propOsitos més eleva- dos en mente puede terminar resultando tan intitil para usted como un juego de video, Terminara sien- do un entretenimiento, un juego para animar reunio- nes sociales con el que «sorprender y deleitar» a sus amigos. Sus poderes benéficos disminuiran, y podré incluso atraer entidades negativas a su escritura, ‘Viéndolo en una escala mayor, podré dafar la repu- tacién de la escritura automética como oréculo vli- do lo mismo que ocurri en los aos 1920. Una pregunta que con frecuencia plantean los Principiantes es que si pueden hacer lecturas (otro nombre para las adivinaciones) para otras personas. Al igual que sucede con otros oréculos, la escritura ‘automética funciona mejor cuando se la hace para ‘uno mismo, si bien pueden, cuando se lo pidan, rea- lizar una lectura correcta para otras personas. Pero Ic iri mucho mejor ensefiarles a utilizar el proceso por ellos mismos, si son serios para utilizarlo como ‘medio de adivinaci6n sobre una base regular. ‘Nunca debe hacer lecturas para otros sin su cono- cimiento y consentimiento, ya que ésta es una forma de espionaje y manipulacién. Debido a que soy Pagan, siempre me gusta citar Ia triple ley a la gente a quien ensefio, que pueda estar tentada a aventurarse por este camino destructivo. La ley esta- blece que cualquier energia que uno pueda enviar, tanto buena como mala, se volverd sobre el que la envia con fuerza triplicada. Pero no me crean a mi. Busquen en las ensefianzas de cualquier religién 0 sistema ético y encontrarén que la eventual retribu- cin en relacién con el daiio voluntario es un tema universal. QUES LA ESCRITURaA AUTOMATIC 31 Y si esas advertencias no son suficientes para usted, considere los dems riegos. Usted es en cier- ta forma vulnerable cuando se abre como canal, incluso contando con los ritos de proteccién y los ieonos en su lugar.

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