Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Diversos tipos de estudios sugieren que los daños al material genético de las células están en
el origen del cáncer. Por ejemplo, se conoce perfectamente que existe una estrecha
correlación entre las sustancias carcinogénicas (producen cáncer) y la mutagénicas (producen
cambio y daños al DNA; mutaciones). Es decir, el potencial de algunas de ellas para producir
cáncer se correlaciona generalmente con su capacidad para producir mutaciones en el DNA.
Lo anterior refleja la participación de estas sustancias en el desarrollo de una de las etapas
conocidas para el desarrollo de los tumores.
Diversos tipos de estudios sugieren que los daños al material genético de las células están en
el origen del cáncer. Por ejemplo, se conoce perfectamente que existe una estrecha
correlación entre las sustancias carcinogénicas (producen cáncer) y las mutagénicas (producen
cambio y daños al DNA; mutaciones). Es decir, el potencial de algunas de ellas para producir
cáncer se correlaciona generalmente con su capacidad para producir mutaciones en el DNA.
Quedó de manifiesto el hecho que algunos genes de ciertos miembros cercanos de la familia
Papova, los poliomavirus y el virus SV40, son capaces de alterar de manera dramática el
comportamiento de las células normales. Es decir, la introducción de pocos, e incluso uno, de
los genes de estos virus de DNA puede afectar a una célula normal y transformarla. Estos
hallazgos permitieron establecer sistemas in vitro, en cultivos establecidos de células, que
permitieron definir los distintos procesos asociados a la transformación maligna. Uno de ellos,
el ahora descrito como inmortalización, corresponde a la pérdida del control sobre el ciclo
celular que resulta en la adquisición de una capacidad ilimitada para dividirse, sin alcanzar el
límite característico de todas las células normales.
Ahora entendemos las bases moleculares de algunos de los procesos que resultan de la
introducción de los genes transformantes de estos virus dentro de una célula normal.
Las células de los tumores malignos presentan dos características que las distinguen de las
normales:
2) son capaces de invadir y colonizar tejidos y órganos distantes, en lugares donde normalmente
no pueden crecer.
Los tumores cancerosos se caracterizan por la división celular, que deja de ser controlada como en
el tejido normal. Las células "normales" dejan de dividirse cuando entran en contacto con células
similares, un mecanismo conocido como inhibición por contacto. Las células cancerosas pierden
esta capacidad. Es decir, en las células cancerosas se desequilibra el sistema de autorregulación
que controla y limita la división celular. El proceso de división celular, ya sea en células normales o
cancerosas, se realiza a través del ciclo celular. El ciclo celular va de la fase de reposo, pasando por
las fases de crecimiento activo, hasta la mitosis (división).