Está en la página 1de 14

¿Qué es banda ancha?

La banda ancha o acceso a Internet de alta velocidad permite a los usuarios acceder a Internet y a los
servicios relacionados a velocidades significativamente más rápidas que las disponibles mediante los
servicios de discado (dial-up, en inglés). Las velocidades de banda ancha varían significativamente,
dependiendo de la tecnología y del nivel de servicio contratado. Los servicios de banda ancha para
consumidores residenciales proveen típicamente velocidades más rápidas de descarga de datos (de
Internet a su computadora) que las velocidades de carga de datos (de su computadora a Internet).

La banda ancha permite a los usuarios acceder a información vía Internet, utilizando una de las diversas
tecnologías de transmisión de alta velocidad. La transmisión es digital, lo que significa que los textos, las
imágenes y el sonido se transmiten vía "bits" de información. Las tecnologías de transmisión que hacen
posible la banda ancha transportan dichos "bits" de manera mucho más rápida que las conexiones
telefónicas tradicionales o móviles, incluyendo las conexiones de acceso a Internet de discado
tradicional.
Características.

 La banda ancha es una importante herramienta para ampliar las oportunidades educacionales y
económicas de los consumidores en sitios remotos.

 La banda ancha permite aprovechar los servicios que no están disponibles o cuyo uso no es
conveniente mediante una conexión a Internet vía discado (dial-up, en inglés) como por
ejemplo, la telefonía por Internet (Voice over Internet Protocol, VoIP por sus siglas en inglés),
como una alternativa al servicio de telefonía de voz tradicional.

 La banda ancha hace viables las consultas médicas de larga distancia (telemedicine, en inglés):
los pacientes que residen en áreas rurales pueden realizar conferencias vía Internet con los
especialistas médicos que se encuentran en las áreas urbanas y pueden así compartir
información y los resultados de sus exámenes médicos, rápidamente.

 La banda ancha ayuda a acceder eficientemente a numerosas referencias y fuentes culturales,


facilitando su uso vía Internet.

 La banda ancha también es necesaria para aprovechar las numerosas oportunidades de


aprendizaje a larga distancia, como cursos y enseñanza universitaria en línea y programas de
extensión ofrecidos por universidades para el público en general y las personas de la tercera
edad.

 La banda ancha permite efectuar compras en línea, de manera más rápida y eficiente.

Servicios

La velocidad media global de Internet se está acelerando, la demanda de ancho de banda crece año tras
año y con el tiempo siguen surgiendo nuevas aplicaciones que requieren velocidades de conexión aún
más rápidas. En 2018, el ancho de banda global de Internet aumentó en un 26%, situándose en 466 Tbps
(Terabits por segundo).
El ritmo de crecimiento es positivo, y también varía según la región: África ha experimentado un
aumento del ancho de banda de Internet más rápido con una tasa anual del 45% (CAGR) entre 2015 y
2019, mientras que América Latina, vinculada a las redes de telecomunicaciones de Estados Unidos y
Canadá, forma la ruta interregional con mayor capacidad.

Pero ¿qué impulsa la demanda de ancho de banda actualmente? La respuesta es el crecimiento masivo
de dispositivos y conexiones, que aumenta en un 10% de CAGR, de manera más rápida que los usuarios
de Internet (7% de CAGR), pero también los servicios de gran capacidad que los consumidores utilizan
día a día.

Según el Índice de Redes Visuales de Cisco, la transmisión de vídeo por Internet es una de las actividades
que requieren un mayor consumo de ancho de banda, con una demanda superior al 55% en 2019.
Además, se espera que la demanda total de datos continúe creciendo hasta el 71% para el año 2022, ya
que la calidad de los vídeos está mejorando exponencialmente, y la conexión a Internet se utiliza cada
vez más para transmisiones en televisores de pantalla grande.

Netflix se ha clasificado recientemente como la aplicación Over-The-Top (OTT) que más ancho de banda
requiere, especialmente durante las horas pico. La transmisión de vídeo OTT es una de las actividades
que más capacidad (datos) exige y para la que, principalmente, los usuarios utilizan su conexión de
banda ancha.

Por ejemplo, las tecnologías de red como FTTC (Fiber-To-The-Cabinet) y el cable en el Reino Unido
permiten las transmisiones de Netflix de ultra-alta definición durante las horas pico, mientras que para
transmisiones de alta definición, una conexión ADSL2 + sería suficiente para proporcionar una calidad
del servicio adecuada.

Sin embargo, el consumo de vídeo en línea continúa evolucionando y puede superar a las aplicaciones
OTT -como Netflix- en cuanto a demanda de ancho de banda. La retransmisión de un vídeo de alta
definición requiere un ancho de banda de al menos 5 Mbps, mientras que para la reproducción de
vídeos con una calidad 4K se necesita un mínimo de 25 Mbps. Por otro lado, para la transmisión de
vídeos con una calidad Ultra HD 4K, cada vez más populares entre los consumidores, es probable que las
conexiones a Internet tengan que ser mucho más rápidas, para evitar la congestión del ancho de banda.

Por otro lado, los videojuegos en línea también son una fuente clave de demanda de ancho de banda. La
industria de los videojuegos está creciendo más que nunca gracias a los avances en las nuevas
tecnologías, la madurez del sector y las experiencias inmersivas que ofrecen a los usuarios digitales.
Es importante destacar cómo las conexiones a Internet fuertes y las velocidades rápidas amplían el
ancho de banda. Esto permite disfrutar de los videojuegos multijugador (MMO, por sus siglas en inglés),
que prácticamente están reemplazando a los videojuegos para un solo jugador, y mejorar así la
experiencia de juego. En estas situaciones, la amplia disponibilidad de ancho de banda evita fallos
imprevistos de la red y mantiene a los usuarios conectados con el resto del equipo.

Entonces, te preguntarás: ¿qué es una buena conexión a Internet para disfrutar de los videojuegos en
línea? En términos generales, la calidad y la fiabilidad de las sesiones de juegos online dependen de la
velocidad de descarga (no menos de 3 Mbps), la velocidad de carga (al menos 1 Mbps) y la latencia, que
pueden verse afectadas por las distancias y el tráfico de la red.

Estos requisitos y las tendencias del sector son indicadores de que el consumo de ancho de banda está
creciendo continuamente, a medida que los consumidores utilizan cada vez más servicios que necesitan
una gran capacidad de datos, pero también requieren una mejor calidad de la experiencia. Además, la
creciente adopción de entornos de Realidad Virtual y Realidad Aumentada también está empujando a
que los requisitos de banda ancha sean más altos debido a la necesidad de mayor capacidad, menor
latencia y experiencias equivalentes.

Tecnologías que satisfacen los requisitos de ancho de banda residencial de los usuarios

La creciente demanda de ancho de banda y banda ancha ultrarrápida está directamente ligada a la
demanda de contenido y entretenimiento de los usuarios residenciales.

La fibra es la opción más escalable, segura y rentable para transmitir grandes volúmenes de datos y
atender las necesidades de los consumidores más exigentes. FTTP (Fiber-To-The Premises) es la
tecnología que mejor satisface los requisitos de ancho de banda superior a 1 Gbit/s, y podría mejorar
altamente la calidad de la red, incluidas las bajas latencias. Sin embargo, dado que es un medio
compartido, puede necesitar actualizaciones a medida que la demanda aumenta. Hoy en día, esta
tecnología ofrece altos estándares de calidad y rutas de actualización casi ilimitadas.
Seguridad

Las conexiones de banda ancha pueden utilizar varias tecnologías de cifrado para garantizar la
privacidad e integridad de los datos cuando transitan por Internet, y admiten fácilmente
comunicaciones cifradas que, habitualmente, exigen entre 10 y 20% más anchura de banda que la
transmisión de información no cifrada.
Legislación y reglamentación

La creación e instalación de sistemas de seguridad mejorados y la adopción de legislaciones y


reglamentaciones apropiadas serán fundamentales para la elaboración de aplicaciones comerciales y
públicas tales como el cibergobierno, la telesanidad o el cibercomercio. Para que los usuarios acepten
estos servicios en línea, habrá que garantizarles que sus datos serán consultados y tramitados
únicamente por los que estén autorizados a hacerlo, que su buzón electrónico no se llenará de correos
electrónicos masivos no deseados (“spam”) y que pueden confiar en la información facilitada por ciertos
servicios.

Seguridad para los usuarios privados

La seguridad también es importante para los usuarios privados que, habitualmente, no se benefician de
los controles y la asistencia técnica de que suelen disponer las empresas o las oficinas públicas. Un
ordenador conectado las 24 horas del día a Internet se asemeja a una ventana abierta: cualquiera puede
entrar. Por consiguiente, la seguridad es necesaria para crear confianza, a fin de que las tecnologías
como la banda ancha puedan aprovecharse al máximo y para poder crear un ambiente de confianza en
la sociedad mundial de la información.

Tecnologías

A medida que la tecnología informática ha ido evolucionando a lo largo de los últimos 30 años
aproximadamente, se ha producido un aumento cada vez mayor de la demanda por parte de los
usuarios finales de un acceso de buena calidad y alta velocidad a los servicios de telecomunicaciones.

A medida que la tecnología informática ha ido evolucionando a lo largo de los últimos 30 años
aproximadamente, se ha producido un aumento cada vez mayor de la demanda por parte de los
usuarios finales de un acceso de buena calidad y alta velocidad a los servicios de telecomunicaciones.
Esta demanda procede de todos los sectores de la sociedad –desde empresas, grandes y pequeñas,
hasta particulares que quieren acceso desde sus hogares. Normalmente, los usuarios simplemente
requieren acceso a Internet de banda ancha (por ejemplo, alta velocidad). Los términos “banda ancha” y
“alta velocidad” se refieren estrictamente a cualquier velocidad de acceso más rápida que la que se
consigue mediante el acceso por marcación a través de la red telefónica. El significado exacto de los
términos está determinado por el contexto en el que se utilizan.
Muchos gobiernos consideran que en el siglo XXI un acceso de calidad y alta velocidad a los servicios de
telecomunicaciones será clave para el desarrollo económico de sus países. Esto se compara a menudo
con el desarrollo de las autopistas en el siglo XX. Además, la OECD (Organización para la Cooperación y
el Desarrollo Económico por sus siglas en inglés) publica actualmente estadísticas y clasificaciones de
países en relación con la disponibilidad y el uso de la banda ancha por parte de los usuarios finales en los
mismos1. Por lo tanto, la implantación de la banda ancha se considera un indicador del desarrollo
económico de un país y de su capacidad de crecimiento en el futuro. Todo esto, simplemente muestra
que los servicios de telecomunicaciones se han convertido en un aspecto básico de la vida diaria de la
sociedad moderna.
Hoy en día, la abrumadora mayoría de los usuarios de banda ancha obtienen acceso compartiendo el
“último kilómetro” de cable de la red telefónica o de televisión del servicio existente. Esto da como
resultado una velocidad de subida de entre 128 Kbps y 1 Mbps, y una velocidad de bajada de unos 6
Mbps (en realidad, la velocidad nominal de bajada disponible es mayor, pero el acceso se comparte
entre múltiples usuarios). Ahora el problema es que los usuarios finales solicitan anchos de banda que
están empezando a exceder la capacidad de las bandas de primera generación. Se habla ya del deseo de
llegar a un ancho de banda de hasta 100 Mbps.

Una capacidad tan grande en relación con la actual requerirá un cambio radical de la tecnología, un
cambio que se convertirá en la base del desarrollo en el futuro. Existen diversas alternativas técnicas
que ofrecerían un acceso de alta velocidad universal, aunque el principal problema es su coste. En lo que
al sistema telefónico se refiere, la red de acceso supone hasta un 70% del coste total de la red. En
cuanto al mantenimiento regular, el coste de funcionamiento y mantenimiento de la porción de acceso
de la red podría superar incluso el 70% del coste de funcionamiento total.
Cualquier nuevo método de acceso de red deberá además proporcionar los servicios existentes. Está
claro que Internet es la tecnología de la World Wide Web y del correo electrónico, y parece inevitable
que servicios existentes como el teléfono e incluso la televisión por cable “emigren” de forma rápida a
Internet. Sin embargo, esto aún no ha sucedido, y deberán transcurrir aún muchos años hasta que se
complete la transición.
Existen varias arquitecturas potenciales disponibles que de alguna forma satisfarían las necesidades. Por
supuesto todas ellas tienen unos beneficios y suponen unos gastos.

- Una solución ideal podría ser conectar a cada usuario final directamente a una central de conmutación
(centralita) a través de un par dedicado de fibra óptica. Esto satisfaría todas las necesidades previsibles y
por tanto resultaría una gran inversión a largo plazo, pese a su alto coste inicial.
- Otra solución sería alcanzar una mayor velocidad a través de los cables telefónicos de cobre existentes
acortando la distancia entre los usuarios y la central de conmutación. Se trataría de la denominada
solución FTTx (“Fibra a x” por sus siglas en inglés - la “x” aquí se utiliza para indicar que el punto de
unión intermedio podría encontrarse en diversas ubicaciones posibles, siempre que no estuviera a más
de unos 500 metros del usuario final). Para lograr esto, deben instalarse refugios para el equipamiento
(cabinas) en algún lugar entre las centrales de conmutación existentes y el usuario final. Dichas cabinas
podrían estar en la calle, en un edificio adecuado o dentro de la propiedad del usuario. Esta solución
supone un coste significativamente más bajo que la instalación total de fibra óptica, aunque la velocidad
disponible sólo satisfaría las necesidades inmediatas de acceso a Internet y el coste de mantenimiento
regular podría ser bastante alto.

- Las soluciones de radiofrecuencia pueden ofrecer una solución –y de hecho lo hacen. El problema que
tienen es que el ancho de banda disponible es insuficiente. La solución funcionaría y sería muy
económica para un pequeño número de usuarios, pero no sería adecuada para una amplia utilización en
ciudades densamente pobladas. Cabe la posibilidad de que una arquitectura celular, similar a la utilizada
para las redes de telefonía móvil, fuera una solución apropiada. Sin embargo, para lograr esto se
necesitarían gran cantidad de estaciones base situadas cerca de los usuarios finales. Estas estaciones
base deberían estar conectadas mediante fibra óptica y necesitarían un potente suministro eléctrico y
grandes antenas. En realidad, la puesta en práctica de esta solución sería complicada por diversas
razones, entre ellas la preocupación política sobre riesgos de radiación.
- La solución más económica para la mayoría de situaciones sería una solución óptica global. Cada
usuario final estaría conectado a través de fibra óptica, Y estas fibras se conectarían entre sí mediante
divisores ópticos pasivos situados en la calle. En la central de conmutación, un par de fibra simple
contaría con 32 usuarios (incluso más) “multiconectados” al mismo. Debido a la necesidad de instalar
nuevas fibras en la ubicación de cada usuario final, esta solución también conlleva un alto gasto de
instalación, aunque considerablemente más bajo que la solución “ideal” planteada como hipótesis
anteriormente. Además, su coste de mantenimiento regular es bajo y (si se necesitara) podría sustituirse
por la arquitectura “ideal” en un futuro. En la actualidad, existen diversas variantes de esta solución
disponibles designadas con el apelativo genérico PON (Red óptica pasiva por sus siglas en inglés). La PON
más adecuada actualmente es la llamada GPON (Gigabit PON). Existen pocas dudas sobre el hecho de
que una solución basada en PON sea la única arquitectura disponible para satisfacer las necesidades
previsibles de los 20 próximos años o más con un coste razonable. No obstante, FTTx también satisface
la demanda actual y además “deja la puerta abierta” para evolucionar a PON en el futuro.

Independientemente de la arquitectura que se adopte, deberá utilizarse fibra óptica en la red de acceso.
El problema es decidir qué red se puede diseñar para satisfacer la demanda actual de los usuarios a la
vez que se allana el camino (de tecnología neutra) para una futura evolución, y todo ello a un precio
asequible.

Aplicaciones actuales y adecuadas para el futuro


Todas las tecnologías de red propuestas deben centrarse en las necesidades de cualquier tipo de usuario
potencial.

Viviendas
La conexión de red en las viviendas particulares es quizá la aplicación predominante, debido a las cifras
que implica. Se recoge una amplia gama de aplicaciones, entre ellas control de alarmas (en el que se
transfiere una cantidad de datos mínima), correo electrónico, acceso a Internet (www), teléfono,
televisión por cable tradicional, vídeo a la carta, etc. Un número cada vez mayor de ellas muestran un
cierto grado de “crecimiento orgánico”. Por ejemplo, actualmente los sitios Web cuentan con gran
cantidad de animaciones Flash y contenido de audio y vídeo, por lo que una conexión más rápida facilita
la navegación y ayuda a la población, tanto en el trabajo como en casa, a ahorrar tiempo.
Otra aplicación que necesita mucho ancho de banda frecuentemente mencionada es el vídeo a la carta.
En el pasado, esto se había considerado (y probado) como una entrega de vídeo controlada (películas de
todo tipo) a través de una conexión entre el proveedor de servicios y el usuario. No obstante, es
importante destacar que en la tecnología actual podría establecerse una arquitectura alternativa que
enviara la película completa (quizá 3 ó 4 Gb) en un archivo a un disco duro situado en el descodificador
del usuario. Así, el usuario podría ver la película del mismo modo que vería cualquier programa grabado
previamente. Esta arquitectura elimina la necesidad de sincronizar el usuario con la red y simplifica el
sistema de entrega al proveedor. Para conseguir esto con material HDTV se necesitaría una velocidad de
conexión de al menos 10 Mbps, aunque con una velocidad superior a cien Mbps sería aún más eficaz.
También es posible concebir la IPTV como el método predominante de emisión de TV en nuestras casas.
Actualmente, no se emiten demasiados programas de TV en directo (prácticamente sólo programas
deportivos e informativos), sino que la mayoría se han grabado previamente. Si se llegara a la situación
mencionada, el espectador podría consultar un menú de los programas disponibles en ese momento,
descargarlos a un descodificador y reproducirlos desde el mismo. Para tratar la minoritaria cantidad de
emisiones en directo se necesitaría un mecanismo determinado, pero algunos ya prevén que éste será el
futuro de la televisión.
Pero no es únicamente el entretenimiento lo que hace que aumente la demanda de conexiones de red
con mayor velocidad en nuestras casas, también los negocios lo requieren dado que el aumento del
coste social, medioambiental y económico de los transportes llevan cada vez a más gente a trabajar al
menos parte de la semana desde casa.

Empresas (grandes y pequeñas)


Tradicionalmente, las empresas se han caracterizado por contar con un amplio número de usuarios
finales, datos (de transacción) relativamente pequeños y la necesidad de plazos de respuesta muy
cortos. De ahí que se hayan necesitado rápidos accesos de red. Todo esto sigue desarrollándose y cada
vez más aplicaciones utilizan imágenes gráficas, a medida que maduran aplicaciones como las de
videotelefonía y videoconferencia. El problema demográfico de muchas empresas es que habitualmente
están situadas en polígonos industriales, en donde los operadores de TV por cable no instalan sus redes
debido al alto coste y demanda limitada, privando a muchas de estas empresas de un acceso de banda
ancha muy popular en las viviendas particulares.

Hospitales, universidades y escuelas


Estos usuarios son similares a los de las grandes empresas, si exceptuamos que en los últimos tiempos
han comenzado a utilizar aplicaciones de visualización de datos. Las tomografías computarizadas y la
“visualización científica” requieren la transferencia de archivos muy grandes que deben enviarse en un
período de tiempo relativamente corto.
En medicina, las aplicaciones con mayor auge en la actualidad son aquellas que permiten a los
especialistas realizar diagnósticos o consultas a distancia estando a cientos o incluso miles de kilómetros
del paciente. Incluso algo tan simple como una radiografía debe transmitirse con alta resolución ya que,
como afirman dichos especialistas, necesitan el mayor aumento posible en la calidad de la imagen. Lo
mismo ocurre con las consultas a distancia, en relación a las cuales los médicos exponen que los vídeos
deben ser de alta calidad para poder observar al paciente con claridad. Elementos aparentemente tan
triviales como el historial médico de un paciente pueden ser de suma importancia ante una emergencia.
Cuando alguien acude a Urgencias, a menudo se encuentra lejos de su doctor habitual, por lo que la
posibilidad de contar con su historial puede marcar la barrera entre la vida y la muerte. Por lo tanto,
existen buenas razones para hacer que los historiales (al igual que las radiografías, TAC, etc.) estén
disponibles online con el fin de poder ser consultados desde cualquier lugar en caso de emergencia.
Además, no transcurrirá demasiado tiempo antes de que las tecnologías de visualización se utilicen de
forma habitual en las aulas, e incluso en los juegos de los que disfrutamos en nuestras casas.

Infraestructura móvil
Las redes de telefonía (y datos) móvil conectan al usuario final a través de conexiones de radio a corta
distancia (normalmente menos de un kilómetro). Esto significa que existen gran cantidad de estaciones
base distribuidas en toda la zona cubierta. Todas ellas deben estar conectadas en una red principal de
datos y telefonía. En el pasado, esto se lograba mediante fibras, con enlaces microondas y con cables de
cobre. Dado que las redes móviles continúan su desarrollo y expansión (especialmente para ofrecer
acceso a Internet), las estaciones base de telefonía móvil tendrán que contar a partir de ahora con
conexiones de subida de alta velocidad. Por supuesto, éstas podrían integrarse (o al menos reubicarse)
en otros equipos de red.
Necesidades inmediatas
La Tabla 1 ofrece una visión general de las necesidades de banda ancha en las aplicaciones existentes.

La red telefónica existente


Las primeras redes de telefonía utilizaban circuitos abiertos para la conexión, un método muy adecuado
para lograr el objetivo deseado. Sin embargo, incluso para un pequeño número de usuarios se
necesitaba un gran espacio exterior en el que poder instalar los postes telefónicos. Además, se ha
calculado que si se quieren ofrecer servicios de telefonía a más población de los países occidentales, se
necesitaría más cobre del disponible en todos los depósitos de dicho metal conocidos.
La arquitectura de la red de acceso telefónico tradicional (figura 1) es la siguiente:

- Un par simple de cables relativamente delgados (0,4-0,8 mm) establecen una ruta dedicada y contigua
desde cada usuario final hasta la central de conmutación, a menudo situada en un radio de unos 4 km, a
veces hasta 6 km, por medio de cables más gruesos.
- Los cables que llegan y salen desde la central contienen unos 600 pares de cables de cobre, en
ocasiones más.
- Los cables a menudo están enterrados2 y conectados a un “cuadro de conexiones” situado en la calle.
En éste, cada par se aísla y conecta a otro par de cables salientes.
- Cada par dirige la señal de teléfono analógica y tensión de bajo voltaje de corriente continua (CC) para
alimentar al teléfono receptor. En la mayoría de las redes se suministra mayor tensión a la línea para
hacer que el teléfono suene. A menudo, esto permite a los usuarios poder utilizar el teléfono en caso de
emergencia aunque se haya cortado el suministro eléctrico principal.
- En el caso de las viviendas unifamiliares, normalmente sólo se necesita un par simple para realizar la
conexión. Por el contrario, en edificios con más de una vivienda o local, habitualmente se utilizan cables
de pares múltiples.
- La red entre la central y el usuario final en sí misma es totalmente pasiva. Aunque los cables contienen
energía eléctrica, en la ruta de la señal NO existen componentes activos. Ésta es una de las razones de la
alta fiabilidad de las redes telefónicas.
- Las centrales de conmutación a menudo son edificios bastante grandes en los que hay técnicos y
personal de mantenimiento todos los días durante las 24 horas.

Acceso de banda ancha a través de las conexiones telefónicas existentes (xDSL)


La Línea/Bucle de abonado digital (DSL por sus siglas en inglés) es el nombre de servicio genérico
utilizado para designar el conjunto de tecnologías que permiten el uso de las líneas de telefonía
existentes para transferir datos de banda ancha (multi-megabits-por-segundo). En este contexto, la línea
telefónica utilizada es un Par trenzado telefónico (TTP) formado por dos cables de cobre conectados
(con una configuración punto a punto) entre la central y el usuario final. Habitualmente dicho usuario
final es una vivienda particular o una pequeña empresa, pero puede tratarse de cualquier tipo de
ubicación que disponga de teléfono analógico. En muchos países, el ADSL es la tecnología predominante
para el acceso a Internet de banda ancha.

Existen diversos protocolos DSL. Cuando se habla de xDSL, la “x” se utiliza para referirse a cualquiera de
los componentes de la familia genérica de protocolos. El DSL más extendido es el ADSL (Línea de
abonado digital asimétrica). Se denomina asimétrica porque dependiendo de la dirección en que se
envíen los datos la velocidad es diferente. En el diagrama de la Figura 2 se muestra su configuración. Lo
más destacable es que el TTP que conecta al usuario con la central es lo ÚNICO compartido por la red
telefónica y la conexión de datos de banda ancha.
Se trata de una característica muy importante. Los circuitos telefónicos “de extensión” (o “bucle local”)
se diseñaron en el siglo XX con el fin de ofrecer conexiones para los teléfonos analógicos. Todas las
características de estos circuitos (longitud máxima, topología física, grosor del cableado, material
aislante, etc.) fueron determinadas por el aspecto económico en relación con la comunicación telefónica
del momento. Como soporte de señales digitales de banda ancha y alta velocidad, este sistema está de
alguna forma lejos de ser ideal.
Cada protocolo tiene unas características específicas. Algunas de ellas se resumen a continuación:

Línea de abonado digital asimétrica (ADSL)


El ADSL se diseñó en principio para ofrecer conexión de banda ancha en residencias. La velocidad de
transmisión de datos máxima especificada en el estándar es de 6 Mbps de bajada y 640 Kbps de subida.
Sin embargo, dicho estándar ofrece a los fabricantes de equipos cierta libertad para proporcionar
velocidades superiores. No obstante, el potencial máximo de la velocidad real alcanzable a menudo se
ve reducido por la distancia o la calidad de la línea. Cuanto mayor es la distancia, menor es la velocidad
de transmisión de datos máxima. La velocidad real de la que dispone un usuario puede disminuir
también dependiendo del servicio contratado. Por ejemplo, un proveedor de servicios puede ofrecer
servicios de 1,5 Mbps, 3 Mbps y 6 Mbps a un precio diferente.

ADSL-Lite
Un problema del ADSL es que el teléfono analógico y los datos de banda ancha permanecen en el mismo
enlace. En las construcciones en las que existen diferentes salidas de teléfono, esto significa que es
necesario tener un divisor (pasivo), para separar la voz de los datos, en la entrada de la misma, y por
tanto se necesita un nuevo cableado para los datos. El inconveniente es que para instalar dicho divisor y
el nuevo cableado en necesario acudir a un técnico, por lo que el coste adicional es considerable.
El protocolo ADSL-Lite fue diseñado para permitir la instalación directa en el equipo del usuario (por
ejemplo el teléfono y el módem) de unos sencillos filtros proporcionados. En algunas ocasiones ni
siquiera se necesitan dichos filtros. De esta forma, no se debe acudir a un técnico (y por tanto el coste es
menor), AUNQUE la velocidad de transmisión de datos también se reduce en gran medida. La velocidad
máxima definida es de 1,5 Mbps de bajada y 512 Kbps de subida.

Redes de televisión por cable (HFC)


En la Figura 3 se muestra la arquitectura de la red estándar necesaria para ofrecer televisión por cable.
Ésta se denomina red HFC (red híbrida de fibra y cable coaxial):

- Se extienden fibras desde la central a una cabina situada en la calle. La conexión entre ésta y la central
se realiza con un par simple de fibra óptica monomodo3.
- La señal de radiofrecuencia (RF) se transporta por la fibra como si se tratase de una señal analógica.
Esto reduce la cantidad de equipamiento necesario en el nodo de fibra, aunque requiere un receptor-
transmisor óptico bastante especial (con respuesta lineal).
- En el nodo de fibra, se recupera la señal de la fibra, se amplifica y se envía a un cable coaxial.
- En la ubicación del usuario, se “pincha” el cable y se dirige parte de la señal hacia el usuario final a
través de un corto recorrido de cable coaxial dedicado.
- La distancia entre el nodo de fibra y la central puede ser de hasta 50-70 km y por lo tanto sólo se
necesitan una o dos centrales aunque se trate de una gran ciudad.
- Los nodos de fibra contienen determinados elementos electrónicos activos, es decir, que contienen
energía eléctrica. Así, cuando se sospecha que existe algún problema, los técnicos deben revisar el nodo
para saber de qué se trata.
- Un aspecto sin relación con la tecnología, pero fundamental en lo que a características de las redes de
TV por cable se refiere, es el hecho de que su objetivo fundamental es ofrecer entretenimiento, por lo
que la mayoría de los usuarios sólo invertirán una cantidad de dinero limitada en ellas. En muchos
países, esto ha llevado a instalaciones de bajo coste y a un concomitante servicio de baja calidad que
habitualmente se refleja en largos períodos de reparación tras un corte. “Al fin y al cabo, es sólo
entretenimiento”.
- Se debe señalar que la presente estructura no es muy diferente de la de las redes VDSL o PON, que se
comentarán más adelante. La única diferencia es la conexión de los “últimos 500 metros” hasta llegar al
usuario.

Conexiones de banda ancha a través de redes HFC


El cable coaxial utilizado para conectar a los usuarios con las redes HFC es un método de comunicación
realmente adecuado. Es capaz de tratar un ancho de banda de señal muy amplio. Actualmente, los
operadores de cable ofrecen conexiones de banda ancha (Internet) y servicios de telefonía tradicionales
a través de los cables existentes de forma habitual.
Los servicios de banda ancha se consiguen asignándoles bandas de frecuencia inutilizadas del cable. El
principal problema técnico que debe solucionarse para proporcionar el acceso es que estos cables son
“buses”. Esto significa que muchos usuarios comparten un solo canal y que debe existir un protocolo de
arbitraje del acceso en la dirección de subida. Aunque la velocidad ofrecida normalmente es de 30
Mbps, ésta es la velocidad total compartida disponible para todo un grupo de usuarios. Para simplificar
la cuestión y ser justos, por lo general se limita la velocidad de subida de los usuarios a 128 Kbps. Por
supuesto, cada cable puede tener diversos canales compartidos, con un grupo de usuarios asociado a
cada uno de ellos, YA QUE en caso de estar sobrecargados, existe una forma relativamente fácil para
que el operador de red “corte un segmento del cable en dos” con el fin de ofrecer dos conexiones de
fibra de subida en lugar de una sola. El sistema funciona muy bien con un pequeño número de usuarios
pero el servicio puede sufrir importantes problemas de calidad en caso de sobrecarga.

Conexiones de radiofrecuencia
La conexión de banda ancha a la red se puede realizar también mediante tecnología de radio, de hecho
en muchos lugares ya se hace. El problema de la tecnología de radio es que el espectro de
radiofrecuencia disponible es realmente pequeño, por lo que un uso de radio a gran escala saturaría
rápidamente el ancho de banda disponible. Sin embargo, existe la posibilidad de construir una red
celular (similar a la red de telefonía móvil). Utilizando poca energía en distancias cortas, podría hacerse
uso de las mismas frecuencias una y otra vez. Una estructura como ésta necesitaría una arquitectura
parecida a la del FTTx, y también utilizaría fibra para conectar un gran número de estaciones base con el
fin de crear una gran red. No obstante, la propagación de radio da problemas en las áreas urbanas en las
que existen edificios altos, en zonas montañosas, etc. En la práctica, a menudo es difícil ubicar las
antenas.

Entorno de red actual


La primera red de comunicaciones disponible de forma general de la historia fue la red telefónica.
Incluso hoy en día, ésta puede verse como la máquina más grande y compleja que el hombre haya
creado jamás. Por el contrario, las redes de TV por cable fueron desarrolladas en principio por pequeñas
comunidades que querían mejorar su recepción de TV y para ello instalaban antenas compartidas. En
EE.UU. estas redes aún se siguen denominando CATV (TV de antena comunitaria por sus siglas en
inglés).
Cuando llegaron las redes informáticas, los primeros usuarios eran grandes empresas dispuestas a pagar
por servicios especiales “a la medida”. El acceso universal era lento y utilizaba los canales de telefonía
habituales. Para obtener una velocidad mayor (banda ancha), se construyeron nuevas redes instalando
equipos en la mayoría de las centrales. El acceso se logró compartiendo el “último kilómetro” de cable
de la central para el nuevo servicio de datos y para el servicio de cable o teléfono existente.

El problema principal actualmente es que los usuarios quieren aún más velocidad, por lo que el acceso
compartido con los servicios existentes ya no es adecuado. No obstante, el coste de la instalación de
cableado nuevo (de cualquier tipo) en las ubicaciones de los usuarios es elevado y la sustitución de
todos los cables existentes sería muy complicada. Las obras exteriores (levantar calles, etc.) son
extremadamente costosas. Las tecnologías basadas en radio podrían ser viables, pero las limitaciones
del ancho de banda disponible parecen hacer que sea imposible su generalización en zonas urbanas.

A largo plazo (20 años), en principio no quedará otra alternativa que sustituir completamente el
cableado de cobre existente por fibra óptica. Sin embargo, es posible actualizar las instalaciones
existentes por medio de tecnologías como el FTTc (Fibra a cabina). Esto es muy importante puesto que
se satisfará la demanda actual a un coste significativamente menor que mediante la solución ideal,
mientras que todo el cableado nuevo podrá ser reutilizado en el futuro cuando la actualización hacia
una solución “final” sea imprescindible.
Es importante recordar que cualquier solución propuesta debe poder utilizarse en un futuro infinito y
actualizarse en caso de ser necesario. Por otra parte, las soluciones propuestas se deben instalar de
forma progresiva y paralelamente a otros servicios (cables de suministro eléctrico, por ejemplo).

Entorno físico
Al considerar las necesidades de las redes, muchos piensan sólo en viviendas unifamiliares construidas
en parcelas individuales. Pero en gran parte de países, este tipo de residencia es más la excepción que la
regla.

- Actualmente muchas personas viven en bloques o edificios plurifamiliares.


- En América y Europa existen grandes zonas semirurales, situadas fuera de las ciudades, en las que las
viviendas están separadas unas de otras por cientos e incluso miles de metros.
- De forma potencial, el coste para dar servicio a un gran bloque de apartamentos es más bajo puesto
que se comparten gastos. No obstante, los grandes bloques a menudo se encuentran en calles en las
que el coste de la instalación de cables para el acceso es muy elevado. Además, en muchos países, la
instalación de los equipos de los proveedores en las viviendas de los clientes se ve afectada por
cuestiones legales.
- Las pequeñas empresas tienen características similares a las de las viviendas.
- Muchas grandes empresas situadas fuera de las principales zonas metropolitanas también requieren
servicios.
Entorno legal, político y empresarial
En la mayoría de los países, las restricciones legales influyen en las características de la red. Por ejemplo,
en EE.UU. existen diversas leyes que definen y limitan el papel de las “Empresas de cable” y de los
“Operadores de telefonía”. En otros países, el gobierno ha establecido leyes dirigidas a promover la
competencia entre proveedores. Estas normas y leyes asumen que la tecnología disponible en la
actualidad se va a utilizar en el futuro y, en gran medida, determinan también las posibles opciones de
desarrollo de las redes.

FTTx-DSL de muy alyta velocidad de transmisión (VDSL)


Las redes ADSL existentes funcionan muy bien, pero muchos usuarios piensan que es necesaria una
velocidad bastante mayor. Como se ha mencionado anteriormente, la velocidad máxima que se puede
conseguir en un enlace ADSL depende en gran medida de la longitud de dicho enlace (una de las
características del entorno de cables de cobre). ¿Y entonces por qué no reducir la longitud del enlace?
La idea aquí es que haya cabina con equipamiento activo situado en alguna parte de la trayectoria del
cable existente. Se sustituye el cable de cobre (multipar) de subida por un par de fibra y se deja la
conexión de cable de cobre que llega hasta el usuario intacta. El equipamiento DSL se sitúa en la cabina.
Esta arquitectura a menudo se llama FTTx, “x” que puede equivaler a cualquiera de las letras del
abecedario (Cabina, Acera, Bordillo, Nodo…).
El VDSL opera en distancias relativamente cortas, entre 350 metros y 1,5 km, y a velocidades de hasta 52
Mbps de bajada y 2,3 Mbps de subida. El VDSL-2, tecnología líder en la actualidad, ofrece velocidades
aún más altas y distancias algo mayores, y además, y lo que es muy importante, es compatible con los
equipos ADSL actuales de los usuarios.
Debemos recordar que las velocidades y distancias indicadas anteriormente dependen en gran medida
de las características del cable existente. En algunas situaciones las distancias pueden ser un poco
mayores a las señaladas, en otras pueden ser considerablemente más cortas. Además, no debemos
olvidar que las características de transmisión de un par en un cable multipar pueden ser diferentes a las
de un par adyacente.

La gran ventaja de la tecnología FTTx es que, aunque requiere fibra desde la central hasta la cabina, hace
que se ahorren los costes de la instalación de nuevo cable en la ubicación del cliente.
Sin embargo, no es del todo ideal porque:

- Requiere la instalación de cabinas para equipamiento con suministro eléctrico en “cada esquina”. Dado
que se necesita acceso telefónico, estas cabinas deben contar con un suministro eléctrico de alta
fiabilidad.
- Probablemente el coste sea elevado porque para dar servicio a cualquiera de las 50 ciudades más
grandes del mundo se necesitan entre 2.000 y 5.000 cabinas. No obstante, aunque esta estructura no
esta hecha “a prueba del futuro”, si se instala teniendo en cuenta de forma inteligente la migración
futura hacia una estructura únicamente de fibra, se pueden minimizar los gastos innecesarios.
- La existencia de equipamiento activo instalado en las calles significa altos costes continuados para el
mantenimiento.
- En muchos casos el cable de cobre existente puede ser adecuado para transportar las velocidades
propuestas, pero en otros por el contrario no será así. Existen grandes dudas sobre si el sistema
funcionará correctamente cuando un gran número de usuarios estén utilizando VDSL. Hoy en día, los
técnicos seleccionan los pares de más calidad de los cables para ADSL o VDSL, y los de menor calidad se
reservan para los usuarios del teléfono tradicional. Si todo el mundo utilizara xDSL, se cree que no
podría hacerse uso de muchos (o la mayoría) de los cables existentes.

Fibra a casa (FTTH) o ubicación    PON

Si se necesita ofrecer servicios a un gran bloque de apartamentos con cerca de 100 viviendas, ¿por qué
no llevar la fibra hasta el edificio y colocar un nodo VDSL en el mismo? Esto eliminaría la necesidad de
instalar de nuevo cables en el interior del edificio, algo que puede llegar a resultar muy costoso. Por
supuesto, los propietarios del edificio deben cooperar y reservar una habitación segura para instalar el
equipamiento.
A menudo denominada FTTH o FTTB, esta solución es idéntica a la solución FTTC, excepto por la
ubicación de la cabina. Sin embargo, dado que los enlaces finales hacia el usuario son cortos y
compuestos habitualmente por cables individuales, la calidad será muy buena y el servicio excelente. El
coste, quizá demasiado alto para viviendas unifamiliares, puede ser bastante atractivo cuando se presta
servicios a un gran número de viviendas.

Redes ópticas pasivas


Como se ha mencionado anteriormente, una conexión de fibra punto a punto desde cada usuario hasta
la central sería la solución técnica ideal desde la mayoría de puntos de vista, exceptuando el coste. Una
solución de este tipo ofrecería a cada usuario una capacidad de muchos gigabits de datos por segundo.
Ésta satisfaría cualquier necesidad previsible. Una solución que ofrece una capacidad más que adecuada
y que se puede conseguir a un precio inferior es la Red óptica pasiva (PON).
La idea de una PON es construir una estructura de red óptica que utilice divisores ópticos pasivos para
conectar a muchos usuarios a una sola fibra a su llegada a la central.

En el diagrama de la Figura 4 diagrama anterior se muestra la configuración PON básica. Los divisores
fraccionan la señal y envían una parte de ella a cada usuario. No obstante, es importante tener en
cuenta que la luz no es electricidad. Los divisores son muy diferentes de un regulador de tensión. Sin
embargo, de forma general se pueden considerar similares dado que reducen la señal óptica (en ambas
direcciones) de forma considerable. Si la configuración anterior fuera electrónica en lugar de óptica, se
podrían asociar a ella cientos o incluso miles de usuarios. Al ser óptica, el límite actual
se sitúa en 32, aunque 64 (GPON) es posible en determinadas circunstancias.

Las características más importantes de esta arquitectura son las siguientes:

- Dado que no se necesitan cabinas exteriores, la configuración y funcionamiento de la red son más
simples. Los divisores se podrían instalar de forma similar a la que se instalan actualmente los cuadros
de conexiones.
- No es necesaria la modificación de las unidades/terminaciones de red óptica (ONU/ONT por sus siglas
en inglés) para actualizar las capacidades de acceso a la red con el fin de adaptarse a la evolución de la
banda ancha y los servicios multimedia en el futuro.
- El mantenimiento es sencillo dado que el sistema no cuenta con elementos electrónicos activos “sobre
el terreno”. Una vez que se instala la fibra, seguirá funcionando a menos y hasta que exista un factor
externo que le pueda afectar.
- Dependiendo del sistema PON concreto, el usuario final puede estar hasta a 20 km de la Terminación
de línea óptica (OLT). En la actualidad, en una gran ciudad pueden existir hasta 500 centrales. Con un
sistema PON se necesitarían muchas menos, entre 12 y 20. Esto podría significar un ahorro importante
de gastos de funcionamiento.

Protocolos operativos PON


Todos los sistemas PON actuales utilizan de alguna forma la fibra compartida. Desde la perspectiva de la
central de conmutación, muchos usuarios finales están conectados a la misma fibra. Esto supone una
gran ventaja en cuanto a gastos, ya que hacen falta muchas menos terminaciones de línea en la central.
Sin embargo, en esta situación se necesita disciplina para utilizar y administrar los enlaces. Aunque sería
posible hacer uso de longitudes de onda de luz múltiples (Multiplexión por división de longitud de onda)
para “canalizar” la fibra, si se hace de forma electrónica el coste es bastante más bajo. Por ejemplo,
dado que todos los usuarios transmiten datos de subida por el mismo canal, se necesita un protocolo de
control para garantizar que sólo transmite datos un usuario cada vez. Además, también se requiere un
protocolo para el diagnóstico de problemas y el mantenimiento del equipamiento.

También podría gustarte