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El corrido del Pichacas Robledo

Voy a cantar un corrido, para los que están presentes.

Es la historia de un amigo, que del Banco es Gerente.

Él es Salvador Robledo, muy querido de la gente.

El Pichacas por apodo, sus amigos lo llamaban,

y llegando a las cantinas, tres botellas invitaba.

El precio no le importaba, pues el Banco lo pagaba.

Sus amigos asombrados, ninguno le quería creer,

que siendo tan chaparrito, fuera bueno pa’ beber.

Y por eso en ese ambiente, muy pocos podían con él.

Don Rafa allá en la cantina, los recibían con honores,

pues era su comitiva, los banqueros y doctores.

Se la pasaban cantando, tomando buenos licores.

Ese Salvador Robledo, un hombre de mucha acción,

en Cortazar le decían, Pichacas de corazón.

Nosotros te seguiremos, allá a tu Banco de León.

En el Banco que trabaja, todito se hace bien hecho,

porque cuenta con la leyenda del “Güero” Jesús Pacheco.

El mismo Pichacas dice, que él es su brazo derecho.

La bebida preferida, es Viejo con mineral

y cuando se sienten buenos, todos rompen a cantar.

Canciones que le dedican, al gran Banco Nacional.

Por todito el Barrio arriba, el Pichacas se paseaba,

buscando buenos moñoños, hasta que al n encontraba.

No le importaba el peligro, pues todos lo respetaban.

Ya con esta me despido, no se les vaya a olvidar,

abrir su cuenta de ahorros, en el Banco Nacional,

dirigido por Pichacas, y por un gran personal.

Letra de Teó lo Godínez (El Colmeno)


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