La Mujer

Un cuerpo casi perfecto,

con curvas delineadas,
que superan en belleza
a toda cosa creada.

Así se presentan ellas

en perfecta armonía,
¡La mujer es primavera
convertida en poesías!

Mujer, en tu vientre llevas

las semillas de la vida,
esas que nutren la tierra
y la siembran de alegría.

Son el fiel reflejo de Dios

esposas, madres y amigas
van marcando el camino,
¡Y son fuente de alegrías!

Así Son Ellas

¡Son luna que brilla en lo alto!
¡son el sol que alumbra el sendero!
Así son todas las mujeres,
habitantes de este suelo.

Son agua pura y cristalina,

¡en sus rostros verás la creación!
Dios las eligió para dar vida
¡y sus manos contienen amor!

La fuerza y la vida
¡Eres la fuerza y la vida!
¡Mujer, tú eres nuestra esencia! 
Al amor estas unida
y a toda nuestra existencia.

Eres lenguaje de tierra

que se eleva en las alturas,
a la familia te aferras
¡enalteces tu figura!

Tus raíces son profundas,

el universo es tu savia,
tu felicidad fecunda,
y tus retoños te atavían.

Eres sol de primavera,

¡entibias con tu mirada!
Mujer, sabia consejera,
que acaricias con palabras.

Eres perla de diamante,

de muy preciado valor,
de belleza fulgurante,
¡de este mundo lo mejor!

Mujer trabajadora
Eres jardín de ternura,
cultivadora de frutos,
donde florece la gloria,
el presente y el futuro.

No te doblas, ni te cansas,
con tu ilusión avanzas
empuñando las auroras,
reflejando esperanzas.

Y el azul del firmamento

se enorgullece de tu obra,
bella mujer  hacendosa,
¡la humanidad te corona!

Mujer espléndida
Eres un caudal de agua,
y sembradora de sueños,
arquitecta de palabras,
¡protectora de pequeños!

Eres radiante, gloriosa, 

elegante, femenina,
mujer sabia, generosa,
¡tu imagen todo ilumina!

Eres resplandor de estrellas,

el descanso del guerrero,
quien va marcando las huellas
del amor puro y sincero.

Te coronan los ángeles

como valioso tesoro,
te llevaste los laureles
¡porque vales más que el oro!