EL ESP{RITU CONSOLADOR,
6 REFLEXIONES
SOBRE ALGUNAS PALABRAS DEL ESP{nI<
TV SANTO, MUY PROPIAS PARA CONSO<
LAR LAS ALMAS AFLIGIDAS.
TRADUCIDO DEL FRANCES
POR DON MANUEL VELA fT OLMO.
SEGUNDA EDICION.
PARTE PRIMERA
QUE GONTIENE LAS REFLEXIONES PARA,
TODOS LOS DIAS DEL ME&
TGMO PRIMERO.
MADRID
EN LA IMPRENTA DE. REPULLES,
JUNTO 4 LA PLAZUELA DE LUDONES.
1802,Us possimus Ww ipsi consolari eos, qui in om
. ni pressura sunt, per exhortationem qua
exhortamur W ipsi 4 Deo. 2. Cor. 1. 4.EL TRADUCTOR.
N o hay ninguni hombre en
este mundo sea de la clase 6 con-
dicioni que quiera, que no tenga
Mucho que padecer y sufrir. El
mismo Dios 4 que por su infini-
ta misericordia no pierde jamas de
vista los altos é incomprehensibles
designios de santificacion que tiene
sobre nosotros, lo ha dispuesto y
ordenado asi, para darnos aun en
ésto mismo una prueba eficaz de
la ternura con que nos aina. Es
verdad que el hombre; dominado
de su amor propio , y poseido
siempre de .aquel espiritu.de se-
*2a
dicion que le es innato, como con~
seqiiencia indispensable de la pri-
mera culpa, parece como que in-
tenta levantarse muchasveces cons
tra el mismo que le aflige, 6 4
lo ménos sufre'con impaciencia a~
quellos trabajos que Dios le en-
via, quiz como el unico y seguro
medio de.obrar su-salvacion; pero
- & pesar de su resistencia Iegara -el
dia en que se le descubra la eco+
nomia de esta providencia admi-
rable, y besara con amor y reco-
nocimiento aquella misma mano
que ahora le castiga. El cainino.
del sufrimiento es el camino:del
Cielo, y para entrar-en-el Reyno.
. de Dios es necesario haber pasado
antes por muchas tribulaciones,.
eomo decia el Apéstol.mt
Los Santos.no de’ otro: mo-
do mereciéron la corona‘y:\ da te~
compensa que Dios les tertia:prd-
metida, y que nos ofréce tambien
.4-nosotros ,. que. correspondiendo
4 los designios de su infinita mise-
ricordia, y padeciendo con‘humil-
dad y resignacion aquelias:-aflic-
-ciones y trabajos que‘ les ‘envid
-‘miéatras viviéron en este mundo,
chaciendo siempre. d¢ su. cuerpo,
como exhortaba San Bernardo,
una ‘hostia y:sacrificio wpradable
4 Dios. Maria Santisima,'tio - obs-
tante su qualidad de~Madre de
Divs ,. la santidad ‘de -Dios , -la
santidad de su vida, y el. gran cti-
mnulo de gracias:y privilegios’ de
que. fué dotadg su alma., no fué
exénta de padecer, y. sufrid.en es~Iv
te mundo Jas mayores penas y a-
-Hlicciones; pero qué hay que ad~
-miratse de esto, quando. sabemes
.que.el mismo Jesu-Christo.,..el
-mismo Hijo de Dios,. justo, sax~
to éimpecable, de quien decia el
mismo.:Dios que éra su Hijo a-
4mado,;que tenia en él todas sis
-delicias; antes de entrar en el Rey-
no desi Padre did su vida clavado
en-una crazy en medio de los mas
erpeles¢armentos? A vista de esto
-No parece yergonzeso el persuadir
4 un. Christiano la: necésidad :de
padecer?:No hay ‘que ‘gansarse: ef
camino del Cielo ésiet de la tribu-
lacion: Ja'corona de la immortali-
dad :no esta prometida sino 4 los
que:se unen con jJesu-Christo, a
los que. se crucifiquen y mueran
con él,v
Siendo pues indispensable al
‘Christiano la necesidad de vivir ro-
‘deado de trabajos y miserias, qué
otro partido le resta que el de su-
frir con paciencia y resignacion,
sometiéndose con humildad 4 la
conducta de un Padre’ lleno de
ternura y compasion, que le cas-
tiga y le aflige Unicamente por el
amor excesivo que Je tiene ? Pue-
de acaso un padre amoroso y tier-
no \evantar el azote contra un
hijo querido sino 4 impulsos del
amor? Si4 pesar de nuestra rebel-
dia la voluntad de Dios ha de te-
ner su efecto, y hemos de perma-
necer, mal que nos pese, en a-
quel estado de afliccion en que su
infinita providencia nos ha colo~
cado; por qué pues no haremos,vi .
en quanto esté de nuestra parte,
este sacrificio voluntario, alivian-
do, mediante nuestra conformidad
can Dios, el peso de las mismas
cadenas que nos aprisionan? Aque-
llas mismas penas 4 que el Sefor
As sujeta en este mundo son. las
" que mas nos convienen para nues-
tra santificacion , y seria ciertar
mente una pretension vana y te~
meraria de parte de los hombres,
un atentado contra el ser supre+
mo y altos designios de su infini-
ta sabiduria el intentar privarle
de la eleccion del sacrificio que le
serg mas agradable. Siempre .ha
sido Dios un Sefior zeloso de sus
atributos; y no consentira jamas
que las criaturas le defrauden, ni
en la mas pequefia parte, los deVIE
rechos de ‘sw soberania.
Pero no, ho- se diga ‘por esto
que Dies es.un Sefor inexérable,
qite.se complace .con ver padecer
-4°-sus. erjaturas,:y que !se ideléy~
.ta en. eastigarlas:.No por: ciertos
Mpa, tal conducta: es: privativa i
nicamente dedos:hijds de tos hom-
bres,- Dios 3 tin Padre/ Ilene de
mispricordia. -y de -boniigds, 2qtte
conore. nyestras necesidades 3 y-sa«
be mejor que. nosotros Jo:que nos
conviene: lo que exige de. nOsotros
65, guc le pidamgs;. pera “que sea
con amory confiariza: que lz grire~
mos como el Gnico-Tecurs®,-capaz
de dar alivio y consuelo 4las penas
que padecemas; pera que acompa-
he siempre 4nuestra ésperanza una
voluntad pronta, humilde y.sin-VII
cera de suftir con resignacion
.pasiencia ‘en aquel estado en que
nos ha puesto su infinita sabiduria,
perspadiéndonos «eficazmente- de
gué.Aquello es to. que mas convié
nea nuestra santificacion, y lo mas
conforme @ su vatuntad soberana.
-.,.< deste, es. el. objeto: ique: se’ pro-
puso:el Autor’ dela Obra que da
mos abpiiblico, ‘Conociendo: bien
gue, ek. hombre. miéntras ‘vive en
este mundo miserable no se ve ja-
mas libre de una infinidad de pe-
nas -y: trabajos , ‘que le rodean’
siempre en qualquiera situacionen
que se. halle: viendo con dolor y
seatimiehto que muchos infelices,
iludidos por los..atractivos de’ este
mundo sengafioso , solo consiguen
hacer. suS penas mas amargas y: ' . ik
-aumentar el peso de sus fatigas
en donde creen ehcontrar el ali-
-vio de sus males: y. sabiendo, co-
‘mo verdad -infalible-verificada én
si. propio, que solo “Dios es‘el ver=
daderg consuelo y nuestro tnicod
Tecurso:,- dispuso sus- reflexiones
con animode inspirar’a los Chris#
tianos’ estas .saludables maximas,
excitandoles 4 la restgnacion en
medio:desus penas,y manifestan~
doles 1a necesidad de: pedir y clas
-Mar'a4 Dios como-A la fuente ‘de
todas las. gracias, El autor asi én
esta primera parte dé‘sus reflexio—
nes distributivas para todos los
dias del mes, como en la segun=
da, en la qual trata de los senti-
mientos afectuosos de. una alma
con su Dios, liend sin duda elx