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RESUMEN

INTERVENCIONES FAMILIARES

Un análisis cercano de las cuatro tareas revela que estas dimensiones pueden proveer una
estructura para las intervenciones familiares. Esto se efectúa al tomar en cuenta el
funcionamiento físico de la familia, el control familiar de los sentimientos, el dominio cognoscitivo
de la familia, y las adaptaciones conductuales e interpersonales la misma.

Como soporte para esta indicación, considérese la “terapia breve familiar", modelo descrito por
Watzlawick y otros (1974), el cual distingue entre cambios superficiales de primera instancia
(dentro del sistema en lugar de cambiar al sistema familiar en sí mismo) y cambios de segunda
instancia (que se pretende que logren que el sistema familiar opere de modo diferente).

Como un ejemplo de la relación entre el comportamiento del individuo y de la familia, existen tres
vías dentro de las cuales las familias pueden manejar mal las acciones conductuales, cualquiera de
las cuales puede volverse manifiesta en una crisis familiar, y, a partir de ello, convertirse en el
objeto de la intervención durante la terapia para crisis:

1. La acción puede no tomarse aun cuando sea necesaria.

2. Se puede emprender una acción cuando no es necesario hacerlo

3. Puede emprenderse una acción en el nivel equivocado (Cuando un miembro del


matrimonio está de acuerdo con ‘esforzarse aún más’ con enviar flores después de una
pelea, en lugar de analizar las estructuras y comunicación básica y toma de decisiones que
condujeron al conflicto)

Los repetidos fracasos conducen a aturdimiento y a "más de lo mismo", hasta que el sistema total
del comportamiento se pone al descubierto y cae en un colapso durante una crisis.

Al aplicar las 4 tareas de resolución de crisis:

1. Las familias deben sobrevivir físicamente a las crisis (Al no decaer en lo financiero y al
preservar la salud física propia)

2. Deben lidiar con un complicado conjunto de sentimientos con frecuencia conflictivos entre
los distintos miembros. ¿Cuál es el modo o el tono de la vida familiar, y cómo se compara
esto con los estados afectivos de cada uno de los miembros? ¿Los sentimientos fuertes se
derraman hacia los sistemas sociales o de pareja o se ocultan, para que más tarde se
manifiesten como males somáticos de un "paciente identificado"? ¿Cómo opera la
disfunción en el sistema emocional de la familia a través de las generaciones?

3. Con respecto al dominio cognoscitivo ¿cuáles mitologías familiares se manifiestan por la


crisis? ¿Cuáles normas y valores antiguos y ocultos en la familia se vuelven abiertos?

4. ¿Cuáles cambios conductuales e interpersonales se requerirán en la vida de la familia, con


el fin de acabar con la crisis en curso? ¿Cuáles estructura y acuerdos se necesitarán para
crear cambios significativos en la división de responsabilidades, la disciplina de los hijos o
el fortalecimiento de la intimidad sexual?
DETERMINACIÓN DE PRIORIDADES

Es importante recordar que cada paciente presentará problemas y desafíos únicos y que el orden
de la consumación de las tareas (y la cantidad de tiempo requerido) variará de un caso a otro.
(importante la negociación entre el terapeuta y paciente). Debe considerarse lo siguiente:

1. Determinar cuáles problemas son los más relevantes para el paciente en ese momento.

2. Considerar, al comienzo de una actividad para la resolución de crisis, que la misma es la


más fácil de tratar, esto es, la más susceptible de cambiar.

3. Buscar la actividad para la resolución de la crisis que parezca responder a la mayoría de las
variantes en la desorganización total del paciente. Es posible que una cognición malograda
sea tratada de manera directa para de este modo abrir la puerta para sentimientos más
grandes de autoestima y rápido cambio conductual.

EVALUACIÓN DEL RESULTADO

La evaluación incluye más que la simple verificación del estado de cada una de las modalidades de
la personalidad o subsistemas, aunque es en ello que comienza la valoración del seguimiento.

Aquí se encauzan varios problemas:

1. ¿Ha habido un regreso al equilibrio y una reorganización de los subsistemas CASIC de la


personalidad? En tanto que la teoría de la crisis médica que tal reorganización o regreso al estado
de estabilidad tendrá lugar en cuestión de semanas, las preguntas en el seguimiento son:

a) ¿en qué sentido?, y b) ¿con qué ganancias y pérdidas? ¿La reorganización ha ido en una
dirección de apertura al futuro, o la persona ha reorganizado su vida al apartarse de las
actividades vitales (modalidad conductual)? ¿La reducción de los sentimientos
insatisfactorios ha ocurrido mediante un incremento en el dominio de la situación, o al
establecerse en una estrecha y pesimista visión de la vida? Al verificar el estado de las
distintas modalidades, y las relaciones de una con otra, se analizan los componentes de la
terapia para crisis sobre la re-obtención de equilibrio y la apertura al futuro.

2. Pues que un colapso en el enfrentamiento provoca el estado de crisis, necesitamos valorar


el alcance al que las capacidades para el enfrentamiento se han re-obtenido. En particular, al
seguir el modelo de Lazarus (1980), hasta que alcance: a) no es posible la resolución de problemas,
y b) se controla la inquietud subjetiva?

La primera se evalúa de principalmente al analizar el funcionamiento cognoscitivo y conductual, la


segunda al considerar las modalidades afectiva, somática e interpersonal.

3. ¿Hasta qué punto se han translaborado o incluido en el seguimiento cualquier conflicto


resuelto previos a la crisis? La teoría de la crisis sostiene que el incidente de crisis podría disparar
previos conflictos resueltos de la personalidad. En el seguimiento tenemos una oportunidad para
verificar la resolución de estos conflictos. El trastorno por estrés postraumáuco (TEP) de los
veteranos de guerra, por ejemplo, puede parecer latente ante ellos, hasta que lo desencadena
algún acontecimiento de la vida, tal como un divorcio o el desempleo. En el seguimiento, la
valoración no es sólo acerca de la resolución de la crisis, sino también sobre si se ha logrado el
progreso hacia la resolución del conflicto anterior.

4. Se ha integrado el incidente a lattama de la vida? ¿Hasta qué punto el incidente de más ha


tomado su lugar al lado de otros acontecimientos de la vida, que dentro de no mucho requerirán
una intensa atención?

5. ¿La persona está abierta a encarar el futuro, lista para trabajar, interactuar y relacionarse
con otros? ¿Ésta ha sido para el debilitamiento o el crecimiento, Y por qué vías? ¿Cuáles han sido
las ganancias y pérdidas en cada ea del funcionamiento de la persona: conductual, afectiva,
somática, interpersonal y cognoscitiva? Sólo con la valoración del estado del funcionamiento
CASIC en el seguimiento, junto con las mismas dimensiones como las valoraciones en los periodos
de crisis y pre-crisis, es que somos capaces de decir si la crisis se ha resuelto o no, y en qué
dirección.

INVESTIGACIÓN DE LA TERAPIA PARA CRISIS

Algunos teóricos han apuntado a la ausencia de investigación que enlaza las variables del
procedimiento con el resultado en la terapia para crisis. Nuestra meta debe ser definir las variables
relevantes de una manera tan específica como sea posible. La estructura que se presenta en este
capítulo tiene posibilidades para proyectos de investigación que especifiquen estrategias de
tratamiento, Y las vinculen con distintas medidas de resultados. Las áreas que merecen la
atención de los investigadores incluyen lo siguiente:

1. Se necesita recopilar información que utilice el perfil de personalidad CASIC, para depurar
de modo más amplio nuestra comprensión de los conceptos clave de la teoría de la crisis,
como son, la desorganización/ desequilibrio del estado de crisis, el colapso en el
entrenamiento, la utilización de suministros personales y sociales, la resolución de la crisis
y otros semejantes

2. La hipótesis de Lazarus (1976) en cuanto a que la durabilidad de los resultados pueden


predecirse por el número de modalidades que tratan, necesita ser puesto a prueba en el
contexto de la teoría de la crisis. E incluso es posible, antes de recopilar nuevos datos,
volver a analizar información de otros estudios sobre crisis para extraer información en
numerosas modalidades tratadas por medio de varia estrategias.

3. Una base empírica más fuerte se necesita para una de las más intrigantes observaciones
clínicas en situaciones de crisis a saber, que las víctimas de crisis progresan a través de
ciertas etapas o bases. La idea es nativa en el sentido de que, si las etapas pueden
identificarse, también es posible especificar los tratamientos más apropiados para las
etapas. Será importante recopilar los perfiles de la personalidad CASIC de los pacientes en
varios puntos del tiempo, para ver si surgen las etapas y, si así es, cuáles son sus
características en términos del funcionamiento CASIC de la personalidad.

4. Se hizo notar antes que muchas crisis se resuelven sin la ventaja de la terapia. La
investigación que analiza la resolución exitosa ele la crisis se necesita para evaluar qué
factores ambientales han sido útiles en el proceso de translaboración. Al observar la
adaptación en cada una de estas modalidades, nuestra comprensión de los mecanismos
implicados en el enfrentamiento puede enriquecerse.

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