Como sabemos, el universo se encuentra formado por materia. La materia es
posible encontrarse en 3 diferentes estados físicos o de agregación: solido, líquido y gaseoso. Esta materia está compuesta por átomos. Estos átomos al poseer poca energía interactúan entre ellos y tienden a “encerrarse” y no interactuar con otros átomos. Por lo tanto, en colectivo, estos átomos forman una sustancia dura, lo que llamamos sólido. Por el contrario, si estos átomos poseen mucha energía se moverán libremente volando en un espacio y forman lo que llamamos gas. Los gases se forman cuando la energía del sistema exceda a las fuerzas de atracción de las moléculas. Los gases se expanden para llenar sus contenedores y poseen una densidad baja. Gracias a que las moléculas están muy separadas y pueden circular libremente en el estado gaseoso, los gases pueden ser fácilmente comprimidos y pueden tener una forma indefinida. La disminución y el aumento en los volúmenes de los gases se aplican en todo tipo de formas y aparatos en la vida cotidiana y en la industria, por ejemplo, en los motores de combustión y en las armas de fuego. El comportamiento de todo gas se ajusta a tres conocidas leyes, las cuales relacionan el volumen de un gas con su temperatura y presión. Los gases que obedecen estas leyes son llamados gases ideales o perfectos. El presente informe tiene por objetivos poder entender correctamente las leyes del comportamiento de gases ideales, a la par de, conocer el volumen molar de un gas calculando su valor a condiciones normales de presión y temperatura.