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Facturación de licores.

En nuestro territorio nacional y en el ámbito contable, más específicamente en el área tributaria, los licores
representan una de las áreas más especiales en cuanto a su facturación debido a la manera en que la
Administración Tributaria (SENIAT) ha decidido la recaudación del impuesto al valor agregado (IVA) que se
causa por la compra-venta de las especies alcohólicas, a diferencia de cualquier otro producto donde
normalmente este impuesto se encuentra reflejado en la factura emitida desde el productor hasta el minorista que
vende al consumidor final.

En este sentido, tomando en consideración que la cadena de comercialización de los licores está dividida en tres
niveles; siendo el primero en la cadena el productor o importador de licores, el cual se encarga de surtir al
siguiente nivel el cual es conocido como mayorista o distribuidor y por último el minorista, que se encarga de
vender el producto (licor) a su consumidor final. La Administración Tributaria promulgó en la Gaceta Oficial N°
40.656, de fecha 08 de Mayo de 2015, la Providencia Administrativa SNAT/2015/0018, donde califica al primer
nivel de la cadena de comercialización; es decir, a los fabricantes, productores artesanales e importadores de
licores como agentes de percepción del IVA. Por esta razón a nivel de los fabricantes, productores e
importadores de licores, la factura debe reflejar tanto el IVA del productor o importador como el IVA de
percepción.

Agentes Responsables

Normalmente, los sujetos responsables en materia de IVA designados por la administración tributaria son dos:
los agentes de retención y los agentes de percepción. Los primeros son aquellos que deben retener en la fuente
un porcentaje del impuesto causado por la venta de los bienes o servicios gravados y los segundos son los
encargados de percibir el tributo que deba devengarse por ventas posteriores del producto, y luego enterar dicho
tributo a la Administración Tributaria.

En este orden de ideas, se indica la manera en el que el agente de percepción afecta al resto de los niveles de la
cadena licorera, desde el punto de vista de la facturación, registro contable, recaudación y enteramiento del
impuesto al valor agregado (IVA).

Es de gran importancia, exponer ampliamente las definiciones y establecer las diferencias entre los dos agentes
responsables, es decir, los de retención y percepción en materia de IVA, con el fin de indicar los cambios que se
ocasionan tanto en la emisión de facturas, como en el registro de IVA para dicho sector. Con respecto a los
agentes de retención estos se encargan de retener una parte del IVA al momento de pagar la adquisición de un
bien o servicios gravado; pero en este caso, la retención constituye un anticipo de impuesto, el cual podrá ser
descontado del impuesto a pagar por parte del proveedor del bien o servicio a la hora de realizar su declaración
definitiva. Por otra parte, en el caso de los agentes de percepción, a los cuales se refiere la providencia
SNAT/2015/0018, el impuesto percibido, será el total que se cause por las ventas posteriores, es decir, los
productores e importadores de bebidas alcohólicas, se encargarán de recibir el impuesto que deben cobrar los
siguientes agentes de la cadena de comercialización, que vendrían siendo los mayoristas y los minoristas del
producto, a los cuales no se les admitirá realizar ninguna compensación por concepto del IVA percibido; a razón
de esto dicha percepción pasara a ser parte del costo del producto para la siguiente cadena, y estos a la hora de
vender, emitirán la factura de ventas sin IVA, ya que fue este impuesto fue cobrado por anticipado por parte del
agente de percepción designado por ley por la administración tributaria.

¿Cómo se calcula el IVA percibido?

Considerando lo mencionado en los puntos anteriores, se explica la manera que el agente de percepción percibe
el IVA: Se debe cumplir con lo establecido en la providencia SNAT/2015/0018, en su artículo 2, el cual indica
que la percepción del impuesto será del 100% del IVA, y se calculará tomando como base la diferencia entre el
precio de venta al público (PVP) sin impuestos marcado en la etiqueta o en el cuerpo de los envases, menos el
precio total facturado por el responsable sin impuestos. Igualmente, se debe hacer referencia a la providencia
SNAT/2015/0017, ya que esta obliga a los productores de licores a marcar en sus envases el precio de venta al
público más impuestos (PVP + IMP) indicado en etiqueta fiscal: Es importante mencionar que para el momento
de la emisión de la providencia SNAT/2015/0017, los licoreros solicitaron una prórroga para cumplir con esta
obligación; sin embargo, hasta los momentos no se está cumpliendo por razones de inflación y ajustes en los
precios: Actualmente los fabricantes se encargan de dar una lista de PVP más impuestos (PVP + IMP)
actualizada a los mayoristas y minoristas para que estos realicen sus operaciones de venta.

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