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PARADOJAS DE LACAN Lo que les ensefia un andlisis no se obtiene por ningiin otro camino, ni porla ensetianza, i por nin- agiin otro ejercicio espiritual. Sino, gpara qué serviria? Exto significa que hay que callar ese saber? Por muy particular que sea de cada uno, zno habria forma de ensefiarlo, de transmitir por los menos sus principios y algunas de sus consecuencias? Lacan se lo pregun- t6y respondi6 de distintas maneras. En su Seminario, argumenta a sus anchas. En sus Esoritos, pretende demostrar y tormenta Ia letra a su antojo. Pero tam bin estan sus conferencias, sus entrevista, sus obras improvisadas, donde todo avanza més rapido. Se trata de sorprender las opiniones para seducirlas mejor. Esto es lo que lamamos sus Peradojas. eQuién habla? Un maestro de sabiduria, pero de tuna sabidrfa sin resignacién, una antissbidurta, sar cistica, sardGnica. Cada uno es libre de trazarse una cconducta seysin su parecer, Esta serie, primero consagrada a inéditos, publicae ria continuaci6n fragmentos escogidos de la obra JACQUES LACAN HABLO A LAS PAREDES ® PAIDOS Buenos Aires - Barcelona - México “Timo tgs fpr mare. ie dee Cpl Sine, lonetiacn HS Sea as {apo Fn, Cae gla ue ath Taductin: Dor Ska evs Gracey Disco de cubits: Gustavo Mac Lazan,Jaoquee Hai ales paredes-1* 0d Buenos Aires: Pais, 2012. 128 pp 1x11 om. “eaducdo por Dora Gladys Sara Ban 978-550-12:95552 4. Psicologia. L Sara, Dora Gladys, ta I. Tule 600 150 1 ei pire de 2012 Reserids todo lot derechos. Quads rigutosimente prohbida sin Jn suorlacion cs de lov ular del epg sj ts sancioes abled en ls eye, a eprodtn parla ott de eta ore por Sisqo rin chin pray canto ‘nfo. 8 ie Bee a nt 8 Bid Wits leben: Bre re? Pots a Pur ipcpnen 688s A= Agen Er tenement opamp ts a depo gue pete aL 11.723 Bpcecna geen ile gai Iimpreso ca MPS, Saag dl Baer 38, ‘Gal Provincia de Buenos Aes cn ago de 2012, “Tras: 3.000 eemplanes ISEN'978.950°12 5655.2 indice Nota sobre el texto. SABER, IGNORANCIA, VERDAD ¥ GOCE.. DE LA INCOMPRENSION ¥ OTROS TEMAS... HABLO A LAS PAREDES. 121 os Nota sobre el texto Invitado a dictar una sve de seminarias mensualesen a hospital SainteAnne destinados aos residentes de psiquia- ‘ria, Lacan eligié como titulo “El saber del psicoanalista’. Algunos de sus aluranas, tal vex inspivados en la lectura de Bataille, enarbolabun en aquellaépocn la bandera del "no a ‘Si bien las tes primeras de esas “chara, como las llams Lacan, respondieron més 0 menos a su idea inicial, las cua- tro siguientes, en cambio, giraron alrededor de as cuestiones que se discutian on el gran seminario que impartia en la ‘plaza del Pantein, en las alas de la Facultad de Derecho, camel stu de *..0 peor Respeté esa separacion incluyendo esas cuatro “charlas” en orden cromoligico en el libro XIX del seminario, donde se notaria su falta si no estuvieran. Las tres primeras, por el contraria, desviarian ta atencién. Son las que reuni en ese pequerio volumen. Fueron pronunciadas en ta copia det hospital el + de noviewtre de 1971, e2 de diciembre del mismo avo e 6 de ‘nero de 1972. JacquesAlain Miller Saber, ignorancia, verdad y goce I volver a hablar en Sainte-Anne espe~ raba que hubiera residentes; en mi época se los llamaba “residentes de Ios asilos”, que en Ia actualidad son los hospi tales psiquiatricos, dejando de lado los dems, Al volver a Sainte-Anne apuntaba a este piiblico, Tenfa la esperanza de que alguno de ellos se hubiera tomado la molestia de venir. Si hay algunos aqui -me refiero a residentes en actividad-, gme harian el favor de levantar la ‘mano? Es una aplastante minor‘a, pero en fin, ‘me basta ampliamente. A partir de ahora y en la medida en que pueda sostener el aliento, voy a intentar deci les algunas palabras. Estas palabras, como siempre, son impro- visadas, lo que no quiere decir que no tenga algunas anotaciones. Son improvisadas desde 13 JACQUES LACAN esta mafiana porque trabajo mucho. No se sientan obligados a hacer lo mismo. He insistido sobre la distancia que existe centre el trabajo y el saber. No nos olvidemos jue esta noche lo que les anuncio se refie~ re al saber; por Io tanto, no hace falta que se cansen. Veran por qué, algunos lo sospechan ya por haber asistido a eso que se llama mi seminario, Para volver al saber, yo habia seialado, en un tiempo ya lejano, que la ignorancia, en el budismo, puede ser considerada como una pasién. Es un hecho que se justifica con un poco de meditacién. Pero como la meditacién no es nuestro fuerte, solo contamos con una experiencia para hacerlo conocer. Es una experiencia memorable que tave hace mucho tiempo, en la sala de guardia, porque hace una pila de afios que frecuento estas murallas, aunque no eran especialmen- te estas en aquella época, Esto se remonta a 1925-1926. En aquella época, los residen- tes -no hablo de Io que son ahora-, en lo que conciere a Ja ignorancia, no andaban lejos. Se trataba sin duda de un efecto de SABER, IGNORANCIA, VERDAD Y GOCE grupo. Podemos considerar que aquel era tun momento de la medicina al que tuvo que seguir necesariamente la vacilai6n actual. ‘Acabo de decir que fa ignorancia cs una pasion, No es para mf una minusvalfa, mi tame poco és un déficit. Es otra cosa. La ignorancia est Tigada al saber. Es una manera de estable- ido. Por gemplo, cuando alguien querta ser snédico en aquel tiempo, que era con seguri dad el final de una época, pues bien, era nor mal que quisiera manifestar una ignorancia i me permiten consolidada, Después de lo que acabo de decrles sobre la ignorancia, no se sorprenderan de que les haga notar que cierto cardenal, en tiempos en que el titulo no era un certificado de ignorancia, Ila maba “docta ignorancia al saber mas elevado, Para recordarlo de paso, era Nicolis de Cusa ‘De este modo, debemos partir de la correlacion entre la ignorancia y el saber. Si la ignorancia, a Taignorancia sino ms bien lo contrao no es lo suficientemente docta en la medici- 5 JACQUES LACAN ‘na como para que esta sobreviva por otra cosa que no sea la supersticién, Sobre el sentido de este término, y precisamente, llegado el caso, en lo que respecta a la medicina, volveré luego si tengo tiempo. Pero, para sefialar un hecho que proviene de esta experiencia de la cual ‘me interesa mucho retomar el hilo después de cerca de cuarenta y cinco aiios de frecuentar estas murallas (no es para vanagloriarme, pero después que entregué algunos de mis eseri- tos a la poubeltication! todo el mundo conoce mi edad, es uno de los inconvenientes del asunto), debo decir que es mejor no evocar el grado de ignorancia apasionada que reinaba centonces en la sala de guardia de Sainte-Anne. Es verdad que se trataba de gente que tenfa vocacién y, en aquel momento, tener vocacién por el asilo era algo bastante particular. A esta misma sala de guardia legaron al mismo tiempo cuatro personas cuyos nombres no me parece desdeftable volver a recordar, puesto que soy una de ellas, La otra, que me 1. Neologismo a partir de pouble [tacho de basural y ublication {publicacion). {N. dela T} 16 SABER, IGNORANCIA, VERDAD Y GOCE complazco en hacer resurgir esta noche, era Henri Ey, Se puede decir, con el espacis transcurrido, que de esta ignorancia, Ey fue de tiempo ¢l civilizador, Rindo homenaje a su trabajo. Como lo hizo notar Freud, la civilizaciénna nos desembaraza de ningiin malestar, sino estar= pero, en fin, esto tlencun_aspecto valioso. Si ereen que hay una minima ironia en 1o que acabo de decir, se equivocan seriamente, pero no pueden mas que equivocarse, por- que no pueden imaginar lo que era la igno- rancia en el ambiente asilar antes de que Fy metiera las manos all, Era algo absolutamen- te increible ‘Actualmente la historia avanz6, y acabo de recibir una circular que sefiala la inquietud que existe en cierta zona de dicho ambiente en relaci6n con ese movimiento que prome- te todo tipo de chispas, llamado antipsiquia- tria, Pretenden que yo tome partido en este asunto. Se puede tomar partido en algo que ya es una oposicin? Sin dudas seria conveniente "7 JACQUES LACAN que sobre este asunto haga algunas observa- ciones inspiradas en mi antigua experiencia, la que acabo de evocar, diferenciando en esta oportunidad la psiquiatria y la psiguiatreria. La cuestién de los enfermos meniales 0, para decirlo mejor, de las psicosis no es resuel- ten absoluto por I antipsiquiara, cuales aura que sean as lusiones que mantienen al zespecio algunos emprendimientos locales Me atrevo a expresar que la sntpsiguiata es un movimiento cay sentido es a Hiberacién del psiquiatra, yes seguro que no esté bien encaminado No esti bien encaminado debido a que 10 Habra que olvidar en aquello gue seTlama evoluciones, y es que este término est admi rablementeclegido, puesto que quiere dec retomo al punto de parte. Fl aleance de todo esto ya era conocido, pero esté ampliamente demostrado en el libro titulado Historia de ta locura, de Michel Foucault. En efecto, el psi- quiatra cumple un servicio social. Es una crea- cién de cierto giro histérico. El que estamos atravesando no va a aliviar esta carga ni a redu- cir su lugar, es lo menos que se puede decir, y 18 SABER, IGNORANGIA, VERDAD Y GOCE esto deja las cuestiones de la antipsiquiatria un poco fuera de lugar. Esta es una indicacién introductoria, pero quisiera destacar que, en lo que respecta a las salas de guardia, hay algo que es sin embar- go sorprendente y que a mi juicio constituye tuna continuidad entre las antiguas y las ms recientes: se trata de comprobar hasta qué punto, en relacién con el sesgo que alli toman los saberes, el psicoandlisis no hizo ninguna mejora. EI psicoanalista -planteé la cuestién en los aiios 1967-1968 cuando introduje la nocién del psicoanalista precedido por el articulo definido, articulo definido cuyo valor légico intentaba recordar ante un auditorio bastante amplio-, el psicoanalista no parece haber cam- biado nada en cierto soporte del saber. Todo esto tiene una regularidad. No suce- de de un dia para otro que se cambie el sopor- te del saber. El porvenir esté en manos de Dios, como se dice, esto es, en la buena suer te, Ia buena suerte de aquellos que tuvieron la buena inspiracién de seguirme. Algo surgir’ de ellos silos chanchitos no se los comen, Esto ‘es Io que llamo buena suerte, Para los otros, 19 JACQUES LACAN no es cuestion de buena suerte. Su asunto sera resuelto por el automatism, que es lo contra- rio de la suerte, buena o mala. Para aquellos a quienes el psicoanalista al que recurren no les deja ninguna chance, qui- siera esta noche evitar un malentendido que podria instalarse en nombre de algo que es efecto de la buena voluntad de algunos de los que me siguen. Estos escucharon bastante bien -en fin, como pueden- lo que dije acerca del saber como correlato de la ignorancia, y es0 los ator- menté un poco. A algunos de ellos no sé qué ‘mosca les pic6, una mosca literaria por supues to, algunas cositas que circulan en los escritos de Georges Bataille, por ejemplo, porque de otro modo no creo que se les hubiera ocurri- do, Se trata del no sab Georges Bataille pronuncié un dfa una conferencia sobre el no saber, y es0 circula tal vez en dos o tres rincones de sus escritos. Pero sabe Dios que no se estaba burlando. Muy especialmente, el dia de su conferencia en la Sala de geografia de Saint-Germain-desPrés, que ustedes conocen muy bien porque es un sitio de la cultura, no dijo ni una palabra, lo 20 SABER, IGNORANCIA, VERDAD Y GOCE «jue no era una mala manera de hacer ostenta- ci6n del no saber. Se le ricron y se equivocaron, porque ahora resulta chic el no saber. Es algo que circula un poco por todas partes entre los misticos, gno ¢s cierto?, incluso nos llega de ellos, incluso es entre ellos donde esto tiene un sentido. Ade- mis, es sabido que insisti sobre la diferencia entre saber y verdad, Por lo tanto, sila verdad no ¢s el saber, es el no saber. Logica aristotéli- Gaz todo lo que no es negro es no negro. Como articulé que el discurso analitico se sostiene en la frontera sensible entre la verdad el saber, pues entonces, levantar Ia bande- ra del no saber ¢s un buen camino. No ¢s un mal estandarte. Puede servir como convocato- ria para aquello que no resulta excesivamen- te raro reclutar como clientela, la ignorancia crasa, por ejemplo. Eso también existe pero, en fin, es cada vez més raro. Sin embargo, hay otras cosas, otras verti tes, la pereza por ejemplo, de la que hablo desde hace mucho tiempo. ¥ademés hay algu- nas formas de institucionalizacién ~“campos de concentracién de Dios”, como se dijo en otra época~ dentro de la Universidad, donde a JACQUES LACAN esas cosas son bien recibidas porque eso es chic. En intesis, se dedican a toda una panto- ‘mima: “Pase usted primero, sefiora Verdad, el agujero esta ahi, ese es su lugar”. En fin, este no saber es un hallazgo. No hay nada mejor para introducir una confusién definitiva en un tema delicado, el punto en cuestién para el psicoanalisis, eso que lamé la frontera sensible entre verdad y saber. Diez afios antes habian hecho otro hallaz- g0 que tampoco estaba nada mal respecto a lo que bien debo Hamar mi discurso. Lo habia comenzado diciendo que el inconsciente esti estructurado como un lenguaje. Encontraron ‘una cosa formidable; a los dos tipos que mejor habrian podido trabajar en esta Kinea, hilar este hilo, les encomendaron un flor de traba- jo, un diccionario de filosofia. ¢Qué dije? Dic- cionario de psicoandlisis. Vean el lapsus. En fin, esto bien vale el Lalande? Alguien pregunta: gLalangue (Jalengua]? 2 Nombre de un conocido diccionario de filosoia (dela T] 2 SABER, IGNORANCIA, VERDAD Y GOCE No, no es gue, es de, Lalengua, tal como la escribo ahora, en una sola palabra, es otra cosa. (Miren que cultivados son! No dije que el inconsciente esté estructu- rado como lalengua, sino como un lenguaje, voy a retomar esto mas tarde, Pero cuando se cencargé a los “responsivos"® que mencioné recién la tarea de un vocabulario de psicoanili- sis, fue evidentemente porque yo habia puesto a la orden del dia ese término saussureano, la lengua, que, lo repito, voy a escribir de ahora en mas en una sola palabra, y voy a justificar por qué, Pues bien, lalengua no tiene nada que ver con el diccionario, cualquiera que sea. ~ Eidiccionario tiene que ver con la diccién, es decir, por ejemplo, con la poesia y con la retérica, No €s poca cosa, zeh? Eso va desde la invencién hasta la persuasi6n. Es muy impor- tante, salvo que no es este aspecto justamente el que tiene que ver con el inconsciente. Con- 8, En el uso irénico del término respons [responsi- vos] tambin se puede escuchar una condensacién entre msponsables {responsables} y poncis{triviales, banales} [N-delaT] JACQUES LACAN trariamente a lo que piensa la masa de asis: tentes, oo con la gramatica. De todos modos, una parte importante ya lo sabe si escuché esos pocos | inconsciente tiene que ver ante todo témminos con los cuales intento hacer pasar lo que digo del inconsciente. Este tambign-tiene un poco que ver, mucho que ver, todo que ver, con Ia repeticiOn, es G&G, Ta vertiente total mente contraria a aquello para lo que sirve un. diccionario, De modo que poner a confeccio- nar un diccionario a quienes habrian podido en aquel momento ayudarme a hacer mi cami- no fue una manera bastante buena de des- viarlos. La gramética y la repeticién son una vertiente totalmente diferente a la que recién sefialaba como invencién, que sin duda no es poca cosa, y tampoco lo es la persuasién. Contrariamente a lo que todavia no sé por qué esté muy difundido, la vertiente i funcién de lalengua ~atil para nosotros, psi- coanalistas, para aquellos que se las tienen que ver con el inconsciente~ es la lgica. Este es un pequefio paréntesis que se conec- ta con el riesgo de pé mocién absolutamente improvisada y endeble del no saber, a la que en verdad no di jamas lida que conlleva la pro- “ SABER, [GNORANGIA, VERDAD ¥ GOCE ninguna ocasién de error, ¢Es necesario demos- rar que en el psicoanzlisis, de manera funda- mental y primera, esti el saber? Sin embargo, es lo que voy a tener que demostrarles. ‘Tomemos por una punta este cardcter pri- mero, macizo, de la primacta del saber en él Hace falta recordarles que, cuando Freud intenta dar cuenta de las dificultades que hay para el avance del psicoanilisis, publica en Imago, en 1917 si recuerdo bien, un articulo que fue traducido y publicado en el primer niimero del International Journal of Psycho- Analysis con el titulo “Una dificultad del psi- coaniliss", Ocurre que el saber que est en juego no es aceptado con icilidad. Freud lo explica como puede, y por 630 mismo se pres taal malentendido. No es casual ese famoso término resistencia, com el que creo haber lograslo que ya no nos taladren los ofdos, al menos en cierto sector. Pero es cierto que hay uno, no lo dudo, donde todavia florece este término, que es para el psicoanalista una aprensian permanente. :Por qué no atreverse a decitlo? Todos tenemos 25 JACQUES LACAN nuestros deslices y sobre todo son las resis: tencias las que los favorecen. Se lo descubrir dentro de un tiempo en Jo que yo digo... aun- que después de todo no es algo tan seguro. En resumen, Freud incurre en un desacier ‘cosa para hacer: la revolucion, Pero entonces To que esta en juego, asaber, la dificultad muy “especifica que hay para hacer intervenir cier- ta funcién del saber. La confunde con aquello que se sefiala como revolucion en el saber. En ese pequefio articulo ~Io retomara des- pués en “El malestar en la cultura’ esti el primer gran fragmento acerca de la revol- cién copernicana. Era algo tillado en el saber Universitario de la época. Copérnico ~pobre Copérico- habfa hecho la revolucién. Fue ét como dicen en los manuales~ quien ubic6 al Sol en el centro ya la Tierra girando alrededor. Queda totalmente claro que a pesar del esquema que muestra muy bien esto, efectivae mente, en De revotutionibus, etc., Copérnico no habia tomado absolutamente ningiin partido en el tema, y nadie hubiera pensado en fasti- diarlo por eso. 6 SABER, IGNORANCIA, VERDAD ¥ GOCE Pero, en fin, es un hecho, en efecto, que pasamos del geo al heliocentrismo, y se supo- ne que esto asest6 un golpe, un blow, como se expresa el texto inglés, a vaya a saber qué pre- tendido narcisismo cosmologico. El segundo blow es biolégico. Freud nos 1o evoca én el nivel de Darwin, con el pretex- to de que, en lo que concierne a la Tierra, la gente tardé cierto tiempo en reponerse de la novedad que ubicaba al hombre en relaciGn de parentesco con los primates modernos. Freud explica la resistencia _al_psicoan: To siguiente: lo que esta afectado es esa consisten- ia del saber que hace que, cuando uno sabe al i e ires que uno sabe que lo sabe, Ese es el nudo de la cuestién. Alrededor de eso se hizo un pintarrajo en forma de yo. Hay que saber que el que sabe que sabe, pues bien, soy yo. Esté claro que esta referencia al yo es segunda en relacién con Io nov siguiente: que un saber se sabe, y que dad que revela el psicoandlisis es que «s un saber no sabido para si mismo. Pero, les pre- gunto qué habria ahi de novedoso, capaz de provocar resistencia, si este saber fuera natural? En todo el mundo animal, nadie puede so- Fg JACQUES LACAN prenderse de que ef animal sepa grosso modo lo que le hace falta, Si se trata de un animal de vida terrestre, no va a ir a sumergirse en el agua més que un tiempo limitado, sabe que €s0 no Te vale de nada. Si el inconsciente es algo sor- prendente, se debe a que ese saber es diferen- te, De ese saber tenemos desde siempre una idea, muy infundada por otra parte, porque fueron evocados la inspiracién, el entusiasmo. Elsaber no sabido del que se trata en el psicoa- nilisis es un saber que efectivamente se articu- Ia, que esti como un lenguaje. Resulta de este modo que én argumentada por Freud vende a encubric Jo revolucié s 10° luce en Ja funcién, en la estructura del saber, En verdad, fuera de las molestias que oca- sionaba a algunos doctores de la Iglesia, no puede decirse que la revolucién cosmolégica ‘estuviera encaminada a que el hombre, como se dice, se sienta de ningtin modo humillado. Si el uso del término revolucién es tan poco convincente, es porque el hecho mismo de que haya habido revoluci6n en ese punto es més Dien exaltante en Io que ataite al narcisismo. 28 SABER. 1GNORANCIA, VERDAD ¥ GOCE Lo mismo ocurre en cuanto al darwinismo. No hay ninguna doctrina que encumbre més Ja produccién del ser humano que el evolucio- nismo. Tanto en un caso como en el otro, cosmo- légico o biol6gico, todas esas revoluciones ‘mantienen al hombre en el lugar de la flor y nata de la creacién, Por esto mismo esta referencia de Freud esta realmente mal inspirada, Tal vez sea que esté hecha justamente para encubrir y hacer pasar lo que esta en juego, a saber, que este nuevo estatus del saber debe generar un tipo de discurso completamente nuevo, el cual no es facil de sostener y que hasta cierto punto todavia no ha comenzado, Dije que el inconsciente esté estructurado como un Ienguaje. ¢Pero cual?

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