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Nombre:
Milicen del Rosario
Apellido:
Morillo Pérez
Matrícula:
17-5709
Facilitador/a:
Altagracia de Jesus Martínez
Materia:
Gestión Humana I
Fecha:
4/8/2021
Introducción
La remuneración puede ser vista como todo pago o contrapartida entre dos o más
partes por la cesión de algún factor necesario. Es decir, es el precio que una
parte abona a otra por haberle prestado unos servicios o activos. Generalmente,
1. La remuneración puede ser vista como todo pago o contrapartida entre dos
o más partes por la cesión de algún factor necesario. Es decir, es el precio
que una parte abona a otra por haberle prestado unos servicios o activos.
El salario real y el salario nominal son la cara y la cruz de una misma moneda y
de hecho hacen referencia a la misma cantidad de dinero (ya sea el salario bruto
nominal y real o el salario neto nominal y real), pero es su valoración lo que los
hace diferentes, aunque el cálculo de uno se hace en base al valor del otro.
Con el salario real hacemos referencia a los bienes y servicios que se pueden
obtener con el dinero que se refleja en el salario nominal, y es el índice que se
utiliza para determinar el poder adquisitivo de los trabajadores de un determinado
país, de manera que a mayor salario real mayor poder adquisitivo.
Pero, si por el contrario, el sueldo nominal aumenta por encima del IPC,
tendríamos un sueldo real mayor, ya que el poder adquisitivo del trabajador sería
superior, es decir, podría adquirir más bienes y servicios en base a su salario
nominal.
Así que el salario mínimo nominal y real no tienen que ser coincidentes y de
hecho no suelen serlo (a no ser que estemos en un país cuyo gobierno
intervenga en la economía para mantener el equilibrio entre salario nominal y
salario real controlando la subida o bajada de los precios).
D. Elaboración de un esquema conceptual con los tipos de salarios.
Salario nominal
Tipos de Salarios Este es uno de los salarios
más habituales que existen y
se refiere a la retribución que
recibe el empleado por una
jornada de trabajo. Es lo que
comúnmente denominamos
‘nómina’.
Salario mixto:
Nos referimos a aquel salario que se
encuentra en un punto intermedio entre
el salario por unidad de obra y el
salario por unidad de tiempo, y
consiste en remunerar al trabajador con
una cantidad fija por tiempo de trabajo
más una serie de variables en función a
la cantidad de trabajo que lleven a
cabo en ese tiempo.
E. Explicar los criterios para preparar un plan de remuneración y su
importancia para la organización y los empleados.
Hay que fijar cuatro o cinco varia- bles clave, en función de las necesidades de la
empresa. Y explicar bien al equipo cuáles son estos objetivos y cómo se van a
premiar.
• Revisar el cumplimiento.
El plan no debe ser nunca rígido. “De las cuatro o cinco variables que se fijen al
principio, hay que poder cambiar alguna en función de las necesidades de la
empresa, bien porque cambien los objetivos a alcanzar o porque haya que rea-
lizar ajustes en la retribución variable. Lo normal es mantener el parámetro de
volumen de ventas y adaptar los demás. Si la empresa pierde clientes, puede
incentivar más la fidelización de éstos, por ejemplo”, explica Flor Expósito. Qué
debe valorar el plan. “No se trata sólo de ver cuánto vende, sino de cómo y
dónde. El plan de remuneración debe tener en cuenta la dinámica de los clientes
(cuántos se pierden, cuántos se captan); la rentabilidad de las ventas; la actividad
del comercial (cuántas visitas realiza… )”, recomienda Flor Expósito.
• No poner topes.
“Es un error fijar las comisiones hasta un tope y a partir de ahí no tener en cuenta
lo que se vende porque, cuando el comercial llega a ese tope, no se esfuerza por
vender más”, comenta Alberto Rodríguez.
• Objetivos de grupo.
Otra duda razonable es si todos los comerciales deben cobrar lo mismo. Para
Alberto Rodríguez, “la parte fija debe retribuir el perfil del comercial, si es más o
menos junior o senior, y en la variable valorar la parte cuantitativa, la cifra de
ventas pura y dura y la excelencia en los objetivos alcanzados: margen de
ventas, satisfacción del cliente, impagados…”.
Proporción de fijo y variable. ”Lo habitual es poner en fijo entre el 60% y el 70%
del salario, y el resto, el 30% o el 40%, en variable. El porcentaje está ligado a la
política de salarios fijos. Si son muy altos, el variable es menor, y viceversa”,
explica Mercedes Grandes.
• 2752.pdf (unan.edu.ni)