Elementos de Derecho Comercial-UBA-

Cátedra: Gebhardt-Gigglberger
Comisiones 8731 y 8732

Unidad n° 8: Títulos de crédito.

ACCIONES CAMBIARIAS

Con motivo de la circulación del título mediante el referido endoso, cobra

relevancia la solidaridad cambiaria a la que alude el artículo 51 del decreto-ley que
establece que todos los que firman el título de crédito como libradores, aceptantes,
endosantes o avalistas, quedan solidariamente obligados hacia el portador legítimo del
título.

Esta solidaridad cambiaria es una garantía con la que cuenta el portador legítimo
en su condición de acreedor del crédito incorporado en el título mediante la cual podrá
reclamar indistintamente y sin orden de prelación el cobro de la totalidad del crédito en
cuestión a uno, algunos o a todos los firmantes del título.

Una acción cambiaria es la posibilidad de hacer valer ante un órgano jurisdiccional

y frente a un obligado cambiario una pretensión jurídica que tiene como base una relación
instrumentada en un título de crédito y siendo necesaria la posesión material de ese
documento cambiario para su ejercicio a fin de hacer valer el derecho incorporado en él.

Las acciones cambiarias se distinguen en principio por el sujeto pasivo al cual se

dirigen. Veamos cuáles son:

 ACCIÓN DIRECTA

Se dirige contra el aceptante y sus avalistas.

El legitimado activo es el beneficiario de la letra de cambio. Si fue endosada y
transmitida, será el portador legitimado (beneficiario del último endoso).
Sólo cuando el aceptante pague, se extinguen los derechos cambiarios derivados
del documento.
En la letra NO aceptada, o no aceptable, no hay acción directa sino sólo acción de
regreso.
En el pagaré, siempre hay acción directa, pues se dirige contra el librador que es el
principal obligado, ya que no hay aceptante.
Se la puede ejercer al vencimiento del plazo y ante la falta de pago.
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Para ejercer la acción directa sólo es necesario contar con el documento aceptado,
que se haya producido el vencimiento, y la falta de pago. No es necesario realizar el
protesto.
El art. 51 establece el contenido del reclamo, en cuanto al capital del título, los
intereses tanto compensatorios como moratorios, los gastos de protesto y aviso, y otros
gastos.
Prescripción: el término es de 3 años desde la fecha de vencimiento del título.

 ACCIÓN DE REGRESO

Se dirige contra los demás obligados cambiarios: librador, endosantes y sus

respectivos avalistas. En el pagaré, será contra endosantes y avalistas, ya que contra el
librador se ejerce la acción directa.
Al igual que en la acción directa, el legitimado activo es el beneficiario de la letra
de cambio. Si fue endosada y transmitida, será el portador legitimado (beneficiario del
último endoso).
Es requisito necesario para su ejercicio la presentación al pago, y el levantamiento
del protesto útil ante la falta de pago. La falta de cumplimento trae como consecuencia la
pérdida del derecho a ejercitar la acción (art. 57 del decreto ley 5965/63).
La falta de aviso, si bien puede acarrearle consecuencias extracambiarias a quien
lo omita, no es causal de caducidad de la acción de regreso, como ocurre cuando se omite
realizar la carga de presentación al pago ante el librado o el correspondiente protesto útil.
Existen ciertas situaciones en las que no será necesario levantar el protesto para
accionar. Como supuestos de dispensa de protesto se puede mencionar –a modo de
ejemplo– los casos en que el título circule con la cláusula “sin protesto”; o cuando se
verifique una circunstancia de fuerza mayor que le impidan al portador legítimo cumplirlo
(artículo 58 del decreto-ley); o el supuesto de concurso o quiebra del sujeto contra el que
se va a dirigir la acción.
Fuera de estos casos, la omisión del protesto produce la caducidad de la acción de
regreso.
El art. 52 establece el contenido del reclamo, en cuanto al importe de la letra, los
intereses moratorios, los gastos de protesto y otros gastos.
Prescripción: el término es de 1 año desde el protesto útil.

La acción de regreso podrá ser:

 A TÉRMINO
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Se ejerce al vencimiento, si el pago no se realizó.

 ANTICIPADA
Se ejerce antes del vencimiento:
*si no fue aceptada (en todo o en parte).
*en caso de concurso del girado –haya o no aceptado- o de
cesación de pagos.
*cuando hubiese resultado infructuoso el pedido de embargo.
*en caso de concurso del librador en una letra no aceptable.

 ACCIÓN DE REEMBOLSO o ULTERIOR REGRESO

La podrán ejercer los endosantes y avalistas que pagaron el documento o fueron

demandados judicialmente. NO pueden ejercerla el aceptante -ya que si paga se
extinguen los efectos-, su avalista -pues solo tendría acción directa- y el Librador, ya que
tendría acción directa contra el aceptante. Tampoco el endosante que incluyó la cláusula
SIN GARANTIA -es solo a los efectos traslativos-.
Los legitimados pasivos son todos los obligados de regreso que garantizaron en el
nexo cambiario al portador de la letra que la pagó o fueron notificados de la demanda
judicial por una acción de regreso.
Son requisitos para ejercerla:
 haber pagado la letra judicial o extrajudicialmente
 la letra base de la acción no debe estar perjudicada, o sea, se deben
haber cumplido con las cargas de PRESENTACION AL PAGO y
PROTESTO.
 El deudor de regreso que fue notificado de la demanda judicial en su
contra está habilitado para iniciar a su vez el reembolso contra los
obligados regresivos que la garantizan en el nexo cambiario.
 NO es necesario poseer la letra para ejercer la acción. Se permite la
promoción de la demanda de quien fue demandado por el exiguo
plazo de prescripción de 6 meses, al solo efecto de interrumpirla
acompañando la documentación recibida.

Prescripción: 6 MESES desde que el legitimado activo pagó o desde que se le

notificó de la demanda.

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Tanto la acción directa como la de regreso pueden ser ejercidas simultáneamente.

Para poder promover cualquier acción judicial, es necesario que los sujetos
intervinientes estén legitimados; esto es, que sean los sujetos habilitados por la ley para
iniciar la acción –legitimación activa– o para ser demandados –legitimación pasiva–.
La principal forma de acreditar la legitimación es con la presentación del título.
Ello se deriva del carácter de “necesarios” que revisten los títulos de crédito ya que para
reclamar el crédito en el incorporado el portador legítimo necesita tener el documento en
su poder.
Puede suceder que el título se pierda, se sustraiga o se destruya. Para esos casos el
decreto-ley prevé entre el artículo 89 y el 95 un procedimiento de cancelación mediante el
cual, a través de un pronunciamiento judicial, se declara cancelado el título por lo que el
mismo se vuelve ineficaz y el promotor de la acción de cancelación podrá ejercer los
derechos cartulares provenientes del título aun sin tenerlo.
Por ello, en caso de pérdida, sustracción o destrucción del título, para acreditar la
legitimación, deberá presentarse una copia certificada de la sentencia de cancelación.
A su vez, si la acción cambiaria se promoviera contra un avalista y el aval se hubiera
instrumentado en un documento separado al título de crédito en cuestión, será necesario
acompañar la constancia de ese aval para acreditar la legitimación pasiva del avalista.
Por último, si la acción a promoverse fuera de regreso debe acompañarse el acta con
intervención del notario que acredite el protesto; salvo que se trata de un supuesto de dispensa
de protesto en cuyo caso deberá acreditárselo, por ejemplo con el propio título del que surgirá
que circula con la cláusula “sin protesto” o con copia certificada de la sentencia de apertura del
concurso o mediante la que se decretó la quiebra.

VÍAS PARA EL COBRO DE LOS TÍTULOS DE CRÉDITO

El ejercicio de las pretensiones cambiarias puede hacerse indistintamente a

elección del actor a través de:

 JUICIO DE CONOCIMIENTO ORDINARIO

- Menos utilizado para perseguir el cobro de documentos cambiarios.

- Tiene amplitud temporal, probatoria y de defensas por parte del demandado (x ej.
personales o vinculadas a la relación causal que dio origen al libramiento o transmisión del
título).

- VENTAJA: si bien es un proceso más extenso, como contrapartida del juicio

ejecutivo, presenta la ventaja de conducir a la COSA JUZGADA MATERIAL, que por ende
resulta irrevisable. Es decir, que lo que se decida otorga efectos extintivos o definitivos a la
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sentencia y ni el acreedor ni el deudor podrán debatir nuevamente en otro juicio sobre

esa misma pretensión que fue objeto del proceso concluido.

 JUICIO EJECUTIVO (art. 60 Dec.-Ley 5965/63, además lo habilita el art. 523, inc. 5,
del CPCC para los títulos ejecutivos que hemos visto)

- En la práctica es el más utilizado, ya que se corre con la ventaja de que las defensas
que el ejecutado puede oponer son más acotadas y es una vía que ofrece un rápido cobro
del crédito.

- Esto se debe a su estrecho marco cognoscitivo, el cual se caracteriza por su

limitación temporal, probatoria y de defensas acotadas a las previstas en el art. 544 del
CPCC, lo que hace que el alcance de lo decidido pueda ser revisado mediante un juicio
ordinario posterior que inicie el ejecutado para repetir lo pagado indebidamente.

- La utilización de esta vía ejecutiva encuentra su fundamento en la necesidad de

CELERIDAD que se persigue tanto en la circulación como el cobro de los documentos
cambiarios.

- El art. 544 del CPCC menciona las UNICAS excepciones admisibles para este tipo de
proceso:

1- INCOMPETENCIA
2- FALTA DE PERSONERIA Por sus efectos son Defensas DILATORIAS
3- LITISPENDENCIA
4- FALSEDAD E INHABILIDAD DE TITULO
5- PRESCRIPCIÓN
6- PAGO DOCUMENTADO TOTAL O PARCIAL
7- COMPENSACION Defensas
8- QUITA, ESPERA, REMISIÓN, NOVACIÓN, TRANSACCION,
CONCILIACION O COMPROMISO DOCUMENTADO PERENTORIAS
9- COSA JUZGADA