BORROMINI Y EL NACIMIENTO DEL BARROCO

ROMA
Borromini en el siglo XVII, este célebre
arquitecto construyó iglesias y palacios que
fascinan aún hoy, como San Carlo alle
Quattro Fontane y Sant Ivo alla Sapienza.

ARQUITECTURA
Sus edificios parecen estar siempre moviéndose,
inquietos, como si tuvieran vida propia. Se
comprueba sentándose por un rato en el interior
de la iglesia San Carlo alle Quattro Fontane, una
de sus obras maestras. Cuentan que eso hizo
Frank Gehry, una estrella de la arquitectura
mundial del siglo XX, quien, luego, proclamó
que esta iglesia era el edificio mejor diseñado del
mundo.

MAESTRO Y DISCÍPULO
Los que saben de arquitectura dicen que Borromini admiraba a Miguel Angel
y comprendió como nadie las claves de su herencia artística: gran invención
en el trazado de las plantas de los edificios, un tratamiento creativo de los
muros – pensados como esculturas– además de detalles originales bien
pensados. Todo esto, unido a un gran conocimiento de la mecánica y mucha
sabiduría técnica en la construcción. Por eso, anota Blunt, los detalles
arquitectónicos que
asombran a la vista y parecen una salida ingeniosa son, casi siempre, la solución
de un problema técnico o práctico.

Gerardo Nazareth Luna Macedo.