Está en la página 1de 1

Algunos aseguran que los nombres propios no se traducen, sino que se

TRANSLITERAN.

Si se tomara en cuenta "tal" aseveración nuestros nombres cambiarían de cultura en


cultura, de lengua en lengua, de país en país, de Nación en Nación . Pero lo cierto es
que la TRANSLITERACIÓN se aprecia como una herramienta para "traducir" una
palabra sufriendo una leve transformación y muy ligera variante dependiendo de la
lingüística y los sonidos fonéticos de cada lengua/idioma.
Bien, tomando como PREMISA la aseveración de la "Transliteración" de nombres
propios, naveguemos en un "ASUNTO TRIVIAL" dentro de la religión popular.
Cuando el Rabí y Mesías del Mundo: Yahshúa fué tomado preso y fué presentado
delante de un pueblo acusador. Se les dió la oportunidad de escoger entre un hombre
acusado de "Sedición" para ser puesto en libertad, o el Mesías, acusado falsamente.
Hagamos una pausa...
-El Mesías era llamado: Yahshúa BenYosef; otros le decían: Yahshúa BenDavid. Otros
lo nombraban: Yahshúa BenElohim.
Y lo era.Pues bien si su nombre se hubiera traducido TRANSLITERADO
correctamente, su nombre sería: JOSUÉ, ó bien: JOSÉ.
-El Sedicionista y Bandolero que fué puesto a la par del Mesías como opción para ser
LIBERADO, se llamaba: Yeshúa BarAbba, otros le decían: Yeshúa Barrabás. Era
conocido simplemente como:"Barrabás".
Si el nombre de Yeshúa BarAbba se hubiera traducido TRANSLITERADO
correctamente, y se hubiera mantenido en los escritos evangélicos sería:"JESÚS"...
PERO COMO NO ERA CONVENIENTE PARA EL CLERO, NI PARA LA IGLESIA,
NI PARA SATANÁS. Simplemente eliminaron su nombre, dejando solo su apelativo:
BARRABÁS.
UNA VEZ MAS después de más de 2000 años la gente vuelve a elegir a Jesús Barrabás
contra Yahshúa HaMashiah...

También podría gustarte