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Los nutrientes son todos aquellos elementos que necesita el cuerpo humano para garantizar el
normal desarrollo de sus funciones. Son productos que ingerimos y que son captados por las
células para luego transformarlos y procesarlos.
Según la FAO, los nutrientes más importantes para realizar dichas funciones corporales son las
proteínas, las grasas, el calcio, el hierro, las vitaminas A y C, la riboflavina, el folato, la tiamina y la
niacina, los cuales integran la tabla de composición nutricional básica para cualquier persona.
Los nutrientes cumplen básicamente con tres funciones en el organismo: proporcionan energía
para las actividades diarias, reparan y renuevan el organismo y, por último, regulan las reacciones
químicas que se producen en la célula
Ahora bien, si se trata de describir los tipos de nutrientes que existen y sus principales cualidades,
dicha lista debe incluir algunos como:
fruta y jugo.
leche y yogur.
Los podemos encontrar en los siguientes alimentos: nata, yema de huevo, manteca, tocino,
mantequilla, leche, aceite de coco, carne magra, frutos secos, aguacate, aceites de oliva, de
semillas, etcétera. Pescado azul, como el salmón, la trucha, las sardinas, el atún.
Proteínas: son uno de los componentes básicos para dar forma a los huesos y los músculos, así
como para suministrar energía al organismo. Están relacionadas también con el control del peso y
la regulación del colesterol.
1. Maní
Los cacahuetes son un “snack” ideal con gran contenido en proteínas. Pero, además, son ricos en
fibra o magnesio. Muchos estudios sugieren que es un alimento óptimo para perder grasa, y esto
se debe a que poseen una gran cantidad de grasas mono insaturadas, conocidas como grasas
buenas.
También es posible beneficiarse de este alimento consumiendo mantequilla de mani, que, además
de ser igual de nutritiva, está deliciosa. Contiene un 16% de sus calorías en proteínas: en 28
gramos del producto (159 calorías) 7 gramos son proteínas.
2. Gamba
las gambas, además de ser un alimento muy sabroso, son ricas en proteína. Las gambas son bajas
en calorías, no obstante, contienen numerosos nutrientes. Por ejemplo: selenio, vitamina B12 y
grasa omega 3. El contenido en proteínas es del 90%. En 85g (84 calorías), 18 son proteínas.
3. Soja
4. Leche
La soja es posible consumirla como semillas de soja o como leche de soja. Pero la leche normal
también contiene gran cantidad de proteínas. De hecho, la leche de vaca contiene gran cantidad
de nutrientes necesarios para nuestro organismo. Es rica en calcio, fósforo y riboflavina. 149
calorías contienen 8 gramos de proteínas.
5. Salmón
El salmón está compuesto por gran cantidad de proteínas y, además, aporta grasas poliinsaturadas
como los ácidos grasos omega-3. Ahora bien, esto también es aplicable con el resto de pescados,
pues todos tienen un alto contenido proteico. Algunos contienen más grasas, por ejemplo la
caballa, y otros menos, como la merluza. 85g de salmón contienen 19g de proteína.
6. Pechuga de pavo
La pechuga de pavo es un excelente alimento con gran contenido en proteínas. Puesto que
contiene poca grasa, también es un alimento ideal para la pérdida de peso.
7. Pechuga de pollo
Otra opción, igualmente saludable que la anterior, es la pechuga de pollo, un alimento rico en
proteínas y con un bajo contenido calórico. Prácticamente el 80% de sus calorías provienen de las
proteínas. 100g de pechuga de pollo contienen 22g de este macronutriente.
8. Avena
La avena es un cereal con un tiene un alto contenido en fibra, lo causa que el metabolismo se
acelere y te sientas más lleno. Pero, asimismo, este delicioso cereal también es rico proteínas y
contiene numerosos minerales y antioxidantes. En media taza de avena hay 13g de proteínas.
9. Huevos
Vitaminas o sales minerales: las encontramos principalmente en las frutas y las verduras.
Intervienen en las funciones nerviosas y en la buena función y el correcto desarrollo de los
músculos.
Agua: es el principal componente del cuerpo humano, además de ser al que le corresponde
facilitar funciones como la digestión o la eliminación de residuos. Se puede consumir directamente
o en productos derivados.