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UNIVERSIDAD PONTIFICIA BOLIVARIANA

CURSO: INTRODUCCIÓN A LA LITERATURA


DOCENTE: LUCAS VARGAS SIERRA
ESTUDIANTE: MIGUEL ANGEL SANDOVAL TEQUIA

EL DESCENSO UN VIAJE:
la ruta de Dante Alighieri y la travesía científica de Julio Verne

La propuesta de abordar el descenso a los infiernos como un viaje, surgió luego de indagar
las experiencias de descenso descritas en las obras de La Divina Comedia de Dante
Alighieri y El Viaje al centro de la tierra de Julio Verne. Por tal razón me propuse
encaminarme por este rumbo, entendiendo principalmente viaje en el panorama que
presenta la Real Academia de la Lengua, que define: traslado de un lugar a otro por aire,
mar o tierra; camino por donde se hace; ida a cualquier parte y carga o peso que se lleva de
un lugar a otro de una vez. En un sentido más profundo concretizo el concepto de viaje
como el recorrido que hace un personaje de un lugar a otro, siendo este una experiencia de
transformación puesto que su forma de ver el mundo se va cambiando desde el inicio hasta
el final del trayecto.
 El proceso de cambio y transformación que enfrentan los personajes viajeros
durante el descenso les da el carácter de héroes, puesto que se encaminan hacia
lugares desconocidos, enfrentándose a la incertidumbre de no saber si podrán lograr
su acometido, de este modo también multiplican su heroísmo al afrontar las
adversidades que ellos ya intuyen o saben qué les toca enfrentar. A pesar de que las
diferencias entre un viaje y el otro son notorias a primera vista, las semejanzas
también lo son. Ambas formas de descenso están basadas en la Eneida de Virgilio, y
aquella que se acerca más a la obra del poeta latino es la propuesta por Julio Verne,
aunque Dante Alighieri recopila elementos que aparecen en esta epopeya, como la
presencia de Caronte, y el río por el que se debe cruzar para llegar al Inframundo.

 Cuando los viajeros han cruzado el umbral que inicia su recorrido aún pueden
apreciar el cielo, pero la puerta hacia el descenso no es sólo la primera parte del
camino, sino que también funciona como una forma de conexión con la superficie.
Las formas de contemplar el firmamento también son un indicador que muestra los
rasgos que van a marcar el viaje. Por un lado, tenemos a Dante y Virgilio que
contemplan el cielo nocturno completamente estrellado antes de llegar al punto
donde se encuentra Minos1.

1
Cfr Alighieri, Biblioteca El Tiempo, 21-23: Infierno, Canto IV, versos 148-151; Canto V, versos 1-3.
Por otro lado, a los viajeros al centro de la Tierra, es Axel quien parece mostrarse
más escéptico con respecto a la hazaña que se propone el profesor Lidenbrock, pero
ese escepticismo va acompañado del temor y la incertidumbre ante lo que
encuentren a su paso por el volcán. Cuando están a punto de realizar el descenso por
la fumarola central, el joven contempla por última vez firmamento antes de dejar
atrás la superficie2.

 Los protagonistas de los viajes saben cómo deben entrar (aunque la forma de entrar
es más difusa en el caso de Dante), pero desconocen la forma de salir, motivo por el
que se precisa un guía. El viajero sólo espera regresar al sendero correcto, pero eso
sólo es posible gracias a la intervención de Virgilio.

En el caso de los exploradores de Hamburgo, la entrada para llegar al centro de la


Tierra es dada por el manuscrito, pero también es develada por la propia naturaleza.
Una vez dentro del volcán, los viajeros (en ocasiones) deben recorrer al azar para
definir la ruta por la que van a descender, ya que el manuscrito no describe el viaje
en su totalidad, lo que hace que el profesor Lidenbrock construya su propio camino
hacia el centro de la Tierra, pero el papel de guía no es del todo propio del
científico.

 En ambos casos el descenso es mayormente vertical, pero la forma como está


dispuesto el camino es la que diferencia ambos trayectos. Dante y Virgilio deben
viajar por el Infierno describiendo espirales concéntricas de diámetro descendente,
debido a la disposición en la que se encuentran los círculos de este lugar.

Caso contrario Lidenbrock, su sobrino y el cazador hacen primero un viaje vertical a


través de los dos primeros cráteres del volcán y el laberinto conformado por las
cuevas; más tarde, se desplazan de manera horizontal a través del pasillo y el
océano que se encuentra en la bóveda principal y, por último, hacen un descenso
completamente vertical impulsados por el agua contenida en el Sneffels. En ambos
trayectos se denota el cambio que sufre el escenario, este evidenciado en la
transformación de los espacios en donde los personajes se desarrollan.

 Entre otros rasgos importantes vale resaltar que los viajes emprendidos por los dos
personajes no son simples movimientos de un lugar a otro, si no antes bien se
convierten en oportunidades de cambio que animan al viajero a buscar un propósito
del cual sacar provecho al final del trayecto. Los viajes expuestos someramente
tienen en común el elemento de los viajes iniciáticos, los cuales radican en el
aprendizaje obtenido a lo largo de este y no en el recorrido en sí mismo. Los
aprendizajes obtenidos son de una u otra forma compartidos con la sociedad con el
fin de un progreso, al igual que una invitación a todo aquel que lo lea.

2
Verne, Biblioteca El Tiempo, 90.

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