Reseña: Scalabrini Ortiz Alumno: Acst Ivan 3º de Historia

En su obra Política Británica en el Rio de La Plata1Scalabrini Ortiz realizo una

investigación que propone como planteo que la crisis en 1930, que dio inicio con el jueves
negro de 1929 en la bolsa de Nueva York, no fue tan generalizada ni homogénea en todo el
mundo como las voces del momento querían que creamos que eran. Los países ubicados en
la periferia del mundo fueron los que sufrieron directamente el impacto de la crisis
mundial.

La Argentina con mucho pesar para el autor funciona como un apéndice de Gran Bretaña
“Es triste confesarlo, pero la historia de entretelones dice que siempre fuimos un
organismo colonial inglés, tan hábilmente tramado que solo los entendidos podrían
entender las conexiones de nuestras fianzas y de nuestra política con las decisiones e
intereses de la metrópoli”2 a consecuencia de esto nuestro país fue quien tuvo que atravesar
este calamitoso momento económico que afectaría de manera desastrosa a nuestra
población y su calidad de vida.

Ante una establecida relación desigual comercial con las islas este crac económico
generaría en nuestro territorio una superproducción por falta de compradores extranjeros.
Nuestro principal comprador que era Inglaterra aprovecharía esta situación y con la excusa
de la crisis tiraría por la borda el valor de nuestra producción. Argentina, como muestran
distintos cuadros de la obra seguía vendiendo a los británicos la misma cantidad de
productos exportados pero que al pagarnos muy por debajo de su valor ellos se
beneficiaban mientras aumentaban nuestras exportaciones debido a esta disparidad en los
precios lo que afectaría gravemente a nuestra economía. “Los diarios anuncian como signo
auspicioso que nuestra exportación aumenta. Las ganancias provenientes de ese
incremento exportado, servirán ante todo, para aumentar las ganancias girables de los
capitales ingleses invertidos”3
El autor afirma que la crisis sustentada solamente en números y estadísticas superficiales
busca banalizar las quejas de la situación Argentina comparando la situación con Inglaterra
que no hace más que desviar el foco la crisis a la población. Si aquella potencia mundial se
encuentra en crisis: ¿Por qué deberíamos quejarnos nosotros? ”Si Inglaterra, una de las
naciones más poderosas del mundo atraviesa quebrantajos semejantes, ¿A nosotros no nos
queda más recurso que resignarnos”4. La realidad es que el único sector afectado o que
recibió una baja en su sueldo o se vieron perjudicados fueron los gremios de Navegación y

1
Scalabrini Ortiz Raul, Politica Britanica en el Rio de La Plata.2009. Argentina,
2
Scalabrini Ortiz Raul, Politica Britanica en el Rio de La Plata.2009. Argentina. Pag. 206
3
Scalabrini Ortiz Raul, Politica Britanica en el Rio de La Plata.2009. Argentina. Pag. 217
4
Scalabrini Ortiz Raul, Politica Britanica en el Rio de La Plata.2009. Argentina. Pag. 207
Construcción pero estos descuentos son más aparentes que acertados. Ya que el costo de
vida ha descendido muy por debajo de los descuentos. El autor tendrá en cuenta distintas
estadísticas de consumo para realizar un análisis más real que el simple dato que sin un
análisis claro puede confundir o dar una idea errónea de aquel momento.

La situación sobre los desocupados en ambos países muestra que sin un análisis trabajoso
se nos pueden dar datos distorsionados sobre el valor y grado que la desocupación presenta
en este contexto. Los desocupados en Inglaterra ascienden al millón, pero las islas se
encargan de mantener y vestir a su masa flotante. El desocupado aquí es un pensionista
oficial del gobierno, que tiene derecho a poder trabajar al menos 2 veces por semana y
seguir manteniendo este beneficio. En nuestras tierras la cantidad de desocupados que
muestra las estadísticas son casi 3 veces más bajas que en Inglaterra pero con datos
erróneos no reflejan del todo la realidad. Los censos de desocupación fueron realizados por
autoridades policiales puerta a puerta y la mayoría temía decir o reconocerse sin empleo por
miedo a represalias.

Al aumentar la capacidad de importación Argentina tampoco estaría demostrando su gran

capacidad productora ni un excedente real. No es que Argentina está cubriendo las
necesidades alimentarias de su pueblo y exportando el sobrante. Sino que acosté del hambre
de nuestro pueblo Inglaterra crece y aumenta la esperanza de vida. En provincias como
Catamarca o Santiago del Estero se consume un promedio anual menor a 25kg de carne por
cabeza. El déficit de consumo de carne y otros alimentos básicos tiene consecuencias
directas en la genética. Esta situación se hace muy visible en los exámenes médicos de
ingreso al servicio militar, donde claramente se revelan características degenerativas como
consecuencia de la subalimentación. El promedio de vida humana en Bs As es de 38,4
meses mientras que el de Londres es casi de 60 años. Para el autor esto no es producto solo
de esta crisis, si no de la subalimentación de los padres y abuelos, del pasado colonial y
esclavista del territorio.

Inglaterra si formo parte de la crisis, pero tomaron medidas eficaces para su devenir y
sostener su nivel de vida a costa de las demás naciones como llama Scalabrini “ingenuas”
como la nuestra. El orgullo Nacional y de potencia fuerte que ellos tenían no les permitía
como posibilidad bajar el volumen de importaciones. El “arma” que tiene en la mano
Inglaterra para seguir importando y no bajar su nivel de vida es Argentina, quien depende
enteramente de la nación inglesa, los capitales invertidos en el territorio son ingleses, la
mayoría de la deuda publica reside en Inglaterra, los ferrocarriles son ingleses y quienes
asumieron el poder al derrocar al jefe de estado argentino son reconocidos partidarios de las
islas británicas.

Estas situaciones irregulares y fuga de capitales se van describiendo en el texto, como a

privatización de los ferrocarriles y fueron encubiertas por los hombres que prefirieron callar
y por distintos motivos clientelismo, conveniencia, otros que prefirieron callar por miedo,
los políticos que querían mantener su relación con Inglaterra cueste lo que cueste y el
periodismo que dependiese por quien fuesen estimulados desvirtuaban la realidad que se
transmitía.

El autor comienza a escribir esta obra exiliado en Europa, luego de participar en el

levantamiento de 1933 en favor del radicalismo yrigoyenista. Retorna a la Argentina en
1934 autorizado por el presidente Justo, pero la publicación del libro se demorara hasta
1940. En su retorno a la Argentina colabora en el diario Señales y milito en las filas de
Fuerza de Orientación Radical de la Joven Argentina (FORJA) cuyo órgano de prensa
denuncio diversos negociones, particularmente relacionados al ferrocarril.
En estos años Argentina se encuentra atravesando un crecimiento interno notable por la
situación de entre guerras y se encamina a la sustitución de importaciones, insertándose en
el nacionalismo dándole mayor impulso a los sectores productivos internos y volcando sus
ganancias de exportación para darle mayor fuerza al sector industrial

Nacionalista y de izquierda, se inscribe en el revisionismo historiográfico ofreciendo una

mirada opuesta y critica a la historia tradicional. Con su visión anti-imperialista deunciara a
políticos y sectores que apoyen la intervención económica que impida el crecimiento de
Argentina.
Su ideología nacionalista choca con el impulso colonial que adoptan los dirigentes
argentinos durante el crac. Critica a los sectores dominantes que quieren continuar bajo el
mando ingles sin importarles su pueblo ni las consecuencias catastróficas económicas que
esto generaría. Denuncia también que los presidentes son impuestos directa o
indirectamente por la gran influencia británica.

El análisis de las estadísticas que realiza en profundidad es digno de respeto. Deja en

evidencia que cuadros y números sin análisis pueden llevar a deducciones erróneas. Su
trabajo invita a mirar de una forma más analíticas las estadísticas que buscan distraer y
justificar ideas que benefician a los sectores dirigentes y perjudican al pueblo.