Toda la historia comenzó una noche, cuando un muchacho aburrido de la vida y ya asimilando su
soledad, miro por una ventana a una linda chica que pronto llegara a su vida. con un cuerpo sensual y un
erotismo que desprendía por su piel, un andar sublime como el de una princesa se acercaba a no más de
tres metros de su habitación, todo eso lo llevo a creer que había otra vida y que podía forjar un nuevo
sentimiento para llenar su alma completamente de amor, dónde él destino les tenía preparado muchas
sorpresas para su posterioridad en la vida de ellos, el sueño de cada noche se estaba por cumplir y el
anhelo de gozar y disfrutar del placer más intenso se estaba por desarrollar en una noche de inmenso
placer de juegos y erotismo.
El inicio de todo.
La Historia cuenta que un muchacho solitario que solo vivía de su trabajo, y de su afán de la escritura y
sus libros no tenía más vida que esa, oculto entre cuatro paredes que solo dejaba entrar la luz por algunas
ventanas cubiertas por unas cortinas oscuras, su infelicidad solo lo llevaba a escribir poemas y sueños de
amor que él los cumplía cada noche al dormir. Y como cada mañana al irse nuevamente a su trabajo vio
algo extraño en el hogar que se encontraba desocupado al lado del suyo, ver cortinas y una luz encendida
se fue intrigado sin saber quién sería el habitante de ese lugar. tomo su vehículo y se alejó sin mirar hacia
atrás, como todos los días. llegando a su lugar de trabajo con la mirada siempre perdida y con la tristeza
que emanaba por su mirada, sus compañeros de trabajo siempre lo saludaban y trataban de alegrar su
vida. el de vez en cuando soltaba una risa tímida que la fusionaba con una mirada perdida, su elegancia y
distinción lo llevaron hacer siempre el mejor compañero a pesar de ser solitario tenía su encanto que sus
compañeras lo admiraban, pero el guardaba un dolor en su corazón y ese dolor era de amor, un amor por
el cual el ya no hablaba y no quería recordar ya que le causaba mucho dolor. Ya luego de un día agotador
de trabajo se dirige como todos los días a su hogar haciendo su rutina, pasar a comprar algo de comer, al
llegar ya muy cerca de su hogar nota que la casa de al lado se encontraba con luz pero no sabía aun quien
era su habitante, pero a él eso no le importaba hasta ese momento, estaciona se vehículo saca su llave y
entra a su hogar, enciende sus luces se va a la cocina saca un plato y su vaso los deja sobre la mesa, y se
dirige al baño se mira al espejo y ve el mismo reflejo de todos los días, se lava sus manos y su cara se las
seca y se queda unos minutos con la mira hacia él piso, se da vuelta y se dirige a su mesa a comer algo,
antes de sentarse coloca un poco de música para para disfrutar de su cena. Después de un momento de
haber disfrutado de su cena siente un ruido fuera de su hogar, que lo lleva a mirar por su ventana pero no
logra ver nada, se devuelve y levanta sus trastes de la mesa y se dirige a la cocina a lavarlos, los seca y
los deja ordenados como todos los días, su rutina se repetía cada noche, estando en eso vuelve a sentir él
ruido fuera de su hogar ya con la intriga al máximo enciende su luz del farol y mira a través de su
ventana y lo que ve lo deja confundido sin saber si era verdad lo que veían sus ojos o era solo una
ilusión, vio llegar a la casa de al lado a una chica y él noto que unos ojos miraron su rostro, cuando miro
por su ventana. Vio a una linda mujer que entraba a la casa que tanto tiempo estuvo abandonada y que
esa noche desapareció detrás de una puerta, apago la luz de su farol asustado se da vuelta y se esconde
tras su puerta y en su cabeza le daba vuelta esa imagen de esos ojos que lo vieron, se calma luego de un
rato y se dirige a su habitación. se recuesta en su cama el cansancio lo agota y lo lleva a un sueño
profundo, él estando dormido ya de pronto despierta de sobresalto porque algo le molesta en sus ojos, lo
que lo despertó fue una luz muy fuerte que entro por su ventana cual intruso entra por las noches y eso lo
llevo a ver, cuando se acercó a la ventana y logro por fin ver de dónde venía esa luz que no lo había
dejado descansar y no pudo creer lo que sus ojos veían. Y lo que vio no sabía si eso era una realidad o un
sueño, mirar más allá de su ventana fue él principio de todo y lo que vio fue un paraíso en la tierra, fue
algo maravilloso lo cual esa noche no pudo dormir, esa imagen lo perturbaba cada vez que cerraba los
ojos solo veía la imagen de aquella mujer morena color canela, su cabello castaño brillaba con el reflejo
de la luz. Y esa imagen lo perturbo por muchas noches y no lo dejaba dormir tranquilo, se repetía cada
vez que el serraba los ojos, se sentaba en su escritorio a escribir y beber sin dejar de pensar en ella, pero
los miedos lo acosaban y lo torturaban; ¿pero ese miedo de que? perder todo sin aun tener nada de ella,
pero eso lo mantenía entre un sueño ficticio y una realidad que él nunca se lo esperada. El destino le
tenía una gran sorpresa guardada sin que ellos lo supieran, sin aun conocerse y sin saber de ellos aún, el
destino los uniría en un fuerte amor y que él muy adentro presentía algo sin explicarse aun que es lo que
era, y a cada momento del día o noche solo la imagen de ella lo atormentaba y solo esperaba el momento
de terminar con su agonía y desolación.
El sueño húmedo
Ya los días pasaban y el solo recordaba aquella noche de haberla visto por
unos segundos y ver ese cuerpo que lo llevo a soñar despierto, y que los ojos
de ella quedaron pegados en los de él, él sintió como lo miraron a través de
una oscura sombra y desde aquella noche no dejo de pensar en ella, fue
tanto su anhelo que llego al extremo que una noche soñó tanto con ella que
sintió como entre sus piernas se levantaba algo y despertó mirando que un
fluido de calidez salía de su parte más íntima que lo hizo que se mojara, pero
no fue impedimento para sentir con esa sensación tan agradable que ya
años no la había sentido, y eso lo dejo en un éxtasis que nunca lo imagino y
todo provocado por aquella linda morena, que solo en sus sueños había de
ver, pero su mente no la podía olvidar y menos alejar. Cada vez que llegaba
la noche y el de su trabajo agotado y cansado solo se sentaba a descansar y
esperar que ella llegara quien sabe de dónde pero eso no importaba, ya
pasaban los minutos y no sé veía llegar, pero él aun así esperaba y miraba
por la ventana para poder verla nuevamente aquella linda figura de aquella
mujer morena, y mirar a escondida con una luz muy baja y escondido tras
una cortina así poder mirar con mayor detenimiento ese cuerpo que una
noche vio, mirar esa mujer con esas curvas y ese color de piel fue
maravilloso para él, que lo llevo a pensar que esa imagen solo se ve en los
sueños. pero esto era más que sueños eróticos y sensuales que uno puede
tener, cuando llega la noche corre a su habitación y se pone a esperar
nuevamente como todas las noches anteriores la llegada de aquella hermosa
mujer. Luego de unas horas y sus ojos ya cansados casi a punto de cerrarlos
vio llegar una silueta en la a lejanía de la oscuridad rezando que fuera ella y
mirando al cielo con sus ojos cerrados lo pedía, luego de un momento los
abrió y se dio cuenta de quién era, era ella su morena de cada noche que él
esperaba y que con solo verla nuevamente él se sentía ya vivo y comenzó a
sentir que la vida le estaba dando una segunda oportunidad en el amor y
que debía de luchar por ella, solo pensar en ella como mujer y verla cada
noche que podía ya esto le provocaba un placer y una excitación en su
cuerpo pero él no se tocaba ni acariciaba sus partes íntimas porque
aguantaba el momento de mayor excitación para poder compartirlo con ella
en una lejana o cercana noche y en la oscuridad de ese momento más
erótico y sensual que tanto esperaba, donde solo quedan dos almas solas y
completamente desnudas a merced de un placer y del fuego de la pasión,
pero ella solo llegaba a descansar a su cuarto recostándose en su cama
agotada sin saber porque me preguntaba, yo sin tener respuesta aun y ella
siempre a si tan sensual se recostaba yo ya sufría con solo ver esa silueta tan
maravillosa a la distancia y sin poder tocarla aun, ya pasaban los días y solo
veía lo que el destino me podía otorgar de ella, pero ella se ocultaba por las
noches tras una cortina de seda blanca que solo dejaba ver una silueta
hermosa, ya el éxtasis y la provocación de ver y sin tocar encendía todos sus
instintos de animal con las ganas de procrear, aun sin poder ver más allá
que su cuerpo tras toda esa ropa en momentos más claros miraba la figura
de sus senos atreves de una cortina y de su ropa los veía tan maravillosos,
tan bien formados y marcados en ella con unas curvas muy impresionantes
y en su mayor esplendor, que eso lo ponía muy excitado no hallaba la hora
de poder verla con menos ropa y así poder ver un poco más allá, los días y
las noches pasaban que yo solo esperaba el momento adecuado o que el
destino me lo diera. Un día siendo fin de semana yo descansando en mi
hogar y solo escuchando música como lo hacía diariamente y sin estar
pendiente de ella subo a mi cuarto a buscar mis libros, y en ese momento
siento un ruido que me lleva a mirar por la ventana a la distancia y la veo
era ella que se estaba colocando una blusa blanca muy ajustada al cuerpo
que se llegaban a marcar sus pechos yo a distancia llegue a ver su delicado y
hermoso pezón talvez fue mi desesperación por verla que lo imagine o lo vi,
pero todo eso me llevo a quedarme observando con mucha tranquilidad y
oculto, como ella cual mujer sensual y con mucha excitación le provocaba
tocarse yo sin saber si era por erotismo o para ver que su ropa le quedara
muy perfecta en su cuerpo que ella con una sensualidad acariciaba con sus
manos sus pechos de un lado a otro y recorría toda su figura de ella que la
llevaba a recorrer la esfera redonda de su pecho llena de placer y erotismo,
tocando incluso su mayor dulzura que era su pezón con una delicadeza que
hacía erizar la piel y sentir un escalofrió que recorría todo el cuerpo, luego
bajaba sus manos por aquellas curvas impresionantes con una finesa y una
delicadeza que estremecía el alma y provocaba un erotismo que llegaba a
dar miedo y todo esto lo veía yo desde mi ventana oculto atrás de una
cortina, luego de todo eso ella desaparece dejando solo un lindo recuerdo de
sensualidad y el sueño de esa noche se acabó en un instante. Ya los días
continuaban y yo seguía con mi vida, cada momento que pasaba sin ella era
más la ansiedad y los deseos de poder volver a verla, que yo llagaba a mi
hogar cada tarde de mi trabajo que hacía ya mi rutina como siempre sin
descuidar nada, luego de eso solo subía a mi cuarto y me sentaba tras mi
escritorio a escribir como cada noche pensando en ella y luego me ponía a
esperar, de vez en cuando mirando por mi Ventana de mi dormitorio si la
veía llegar o tan solo me ponía a esperar y ver llegar la noche, mis ojos se
cerraban de cansancio pero yo seguía esperando, mirando cómo la hora
pasaba, los minutos eternos me agobiaban eran los más largos de la vida
pero fiel esperaba a mi amada morena, cuando no podía verla era un dolor
en el alma y una tristeza en mi corazón que solo me hacía recordar los días
que no lograba verla, ya la ansiedad me consumía y la soledad me embarga,
que cuando mí cabeza se inclinaba ya de cansancio siento un ruido que me
hizo inclinar de un salto, y miro para ver si era ella la que venía por algún
lugar, ya esperaba esa luz que se encendiera en esa habitación de un
momento a otro que era lo que anhelaba y que yo esperaba con cada minuto
que pasaba..
La desesperación.
El pobre hombre sufría de pena y desolación cada vez que ella no estaba y
no se veía en el hogar, ya luego de unos días de no haber estado ella
apareció en esa ventada y que él destino le había puesto al frente suyo, y él
se preguntaba que le habría sucedido a ella que no estuvo por días en su
hogar y no pudo verla eso me tenía agobiado. Pero como saberlo si ella aun
no me conocía, meditando en la oscuridad de su habitación él por temor a la
decepción y al rechazo del amor no le hablaba, sus miedos lo paralizaban y
lo dejaban temblando en su habitación con una luz muy baja que solo
dejaba ver sus pasos en la penumbra, pero su felicidad y tranquilidad
llegaba con solo mirarla y saber que ella había vuelto quien sabe de dónde
pero ya estaba en su hogar, luego de observarla por un rato sentada en su
cama con la mirada perdida y ella sin hacer completamente nada que lo
pudiera provocar o estimular al gozo ella solo miraba el piso con su cabeza
baja. Ya el pobre hombre desesperado sin poder acercarse a ella de pronto
pensó en como poder llegar a ella sin que ella lo supiera comenzó a pensar y
planear como hacerlo, entonces como una lampara se le presento una muy
buena idea de cómo poder llegar a ella y la mejor forma fue como solo él
sabía, y era escribiendo. Si escribiendo poemas de amor e historias sobre
ella, pero como entregarlas se preguntó luego de un rato solo se dijo basta y
se lanzó a su gran aventura y a la hazaña de escribirle a si él podía llegar a
ella y a su corazón eso sería lo más lindo para él, así comenzó su aventura
de escribir cada vez que ella se iba el guardaba sus imágenes y recuerdos de
cada noche y cada día que la veía salir o llegar, y comenzó su gran desafió
cada palabra que el escribía esto le hacía temblar su cuerpo cada vez que
recordaba algún momento lindo o más erótico, como aquella ves que
llegando a su hogar sintió correr agua asustado no sabía que sucedía,
mirando por su ventana y no viendo nada en su hogar, pero poniendo más
cuidado noto algo extraño que le llamo su atención. Se puso muy fijo a
mirar y por un espacio que dejaban las ramas de un árbol que se encontraba
justo al frente de su ventana y comenzó a mirar fijamente y de pronto
observo una extraña figura que lo llevo al asombro y desconcierto de no
saber qué era lo que veía, al extremo de posicionarse de tal manera de poder
ver bien, hasta que logro ver algo que lo dejo perplejo que esa noche no
pudo conciliar el sueño, se retorcía de ansiedad, placer, erotismo, y
excitación en su cama. Y solo recordaba esa maravillosa imagen que ya era
nueva en su mente. Si era ella mi hermosa morena que se estaba bañando él
solo le podía ver su rostro como le caía el agua y por su larga cabellera de
color castaño, mirar un poco de esa piel color canela cubierta por el brillo
del agua eso fue lo que más le impacto al pobre hombre, estaba como niño
asustado mirando, su estomagó se revolvía como un enjambre de abejas él
se escondía para no ser descubierto por ella y a la vez que no lo fuera a
escuchar, al hombre no le quedo más que dejar a su imaginación lo que no
pudo ver y que las ramas de ese árbol no lo dejaban ver más allá , pero el
árbol solo lo dejaba ver lo que él quería, y ese tormento de no poder ver más
lo dejaba temblando sus manos no las podía controlar fue tanto lo que él
sufrió en esos momentos que casi llego al desmayo y toda la sensualidad de
ella lo tenía muy agobiado y desesperado, corrió a su cama se tiró en ella
como si fuera una piscina, luego de un buen rato dándole vueltas esa
imagen por su cabeza, comenzó a escribir lo que vio pero a su estilo e
imaginación con cada palabra que él ponía su piel se erizaba y su mente
trabajaba más rápida para que las palabras salieran solas y su imaginación
más crecía...
Cualquier Consulta a mi correo; jmraiven@gmail.com ( criticas cosntructivas, esta historia aun continua
ya que tiene segunda parte que aun esta en desarrollo y se esta revisando)