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LA MASACRE DE LAS BANANERAS

Danna Patricia Olivella Molina


INTRODUCCIÓN

En el presente ensayo se busca demostrar la incidencia en la historia política y


social del acontecimiento conocido como la masacre de las bananeras. Ocurrida
en la madrugada del 6 de diciembre de 1928 en Ciénaga, Magdalena, dónde las
Fuerzas Armadas de Colombia bajo mandato presidencial de Miguel Abadía
Méndez ejecutado bajo orden del general Cortés Vargas dispararon contra
huelguistas trabajadores de la United Fruit Company.

En un contexto político autoritario y dictatorial, denominado hegemonía


Conservadora, bajo el gobierno de Miguel Abadía Méndez, se impulsaba la
industrialización del país, en un contexto de hacienda extensiva unificada con una
economía de enclave. Allí extensas zonas del territorio nacional estaban bajo el
dominio de terratenientes y el provecho de multinacionales que desarrollaban
actividades ganaderas, extractivas y agroindustriales, y que a la par sometían a
los trabajadores de sus compañías a una fuerte explotación.
En cuanto a este suceso, la década de los veinte la clase obrera colombiana libró
múltiples batallas en defesa de sus derechos y reivindicaciones, tanto frente al
sector privado, como al público, pero lo fundamental fueron luchas antimperialistas
contra la codicia de las agencias monopólicas gringas, que fuera de saquear los
recursos naturales, impusieron con la complacencia apátrida de los gobiernos de
turno un régimen esclavista contra los trabajadores. De esta lucha se destaca
principalmente la huelga de noviembre de 1928 por parte de los trabajadores de la
zona bananera contra la United Fruit Company. Por donde a través de un pliego
de peticiones llamaban al cumplimiento de leyes colombianas sobre el seguro
colectivo y obligatorio para los trabajadores, accidentes de trabajo, habitaciones
higiénicas; luego se exigía aumento salarial del cincuenta por ciento, cesación de
los comisariatos y de préstamos por vales, pago semanal, contratación colectiva y
establecimiento de más hospitales. Ante el pliego de peticiones presentado por la
organización de los trabajadores, la empresa se negó constantemente a negociar,
por lo cual los obreros, el 11 noviembre, declararon la Huelga. La empresa envió
esquiroles a las plantaciones, amparados por piquetes del ejército y la policía.

El 5 de diciembre, el comité ejecutivo de la Unión Obrera citó a los huelguistas a


una concentración en la ciudad de Ciénaga, donde se anunció la llegada del
gobernador, funcionario que no se presentó. Los obreros comenzaron a preparar
para el día 6 de diciembre una marcha hacia Santa Marta, la capital. En ese
momento, las fuerzas armadas al mando del general Cortes Vargas dieron la
orden de desalojo en 5 minutos, que fue desobedecida por los trabajadores
quienes gritaban lemas contra la multinacional y el gobierno.

En la noche del día 5 se presentó en la plaza de Ciénaga una tropa al mando del
general Carlos Cortés Vargas, que informó a los huelguistas que la zona se
declaraba bajo estado de sitio y ordenó dispersarse a los manifestantes. En ese
momento las fuerzas armadas dieron la orden de desalojo que fue desobedecida
por los trabajadores quienes furiosos gritaban a la multinacional y al gobierno; se
dio cinco minutos para que la multitud que ocupaban la plaza la de desalojaran, el
general Cortés ordenó abrir fuego Al final de este espantoso episodio, el gobierno
de Miguel Abadía Méndez anunció oficialmente que los acontecimientos de
Ciénaga habían dejado 13 muertos y 19 heridos.

La propagación de la masacre fue amplia en los medios de comunicación de la


época, y provocó innumerables debates éticos y políticos. El más llamativo fue el
organizado por el Partido Liberal que envió a Jorge Eliécer Gaitán al lugar de los
hechos para realizar una investigación detallada de lo sucedido. En donde
presentó su informe al Congreso, que generó un intenso debate en relación con la
decisión de disparar a una manifestación desarmada donde se encontraban
mujeres y niños.

En conclusión, se entiende que la masacre de las bananeras quedo en la


impunidad puesto que, no tuvo ningún acusado, responsabilidad penal y política a
Cortes Vargas, general de entonces, y permanecerá en un recuerdo muy
dolorosos de la historia de Colombia. Así mismo, se dio a Conocer que con la
Masacre, junto a la Gran Depresión del 29. Acabo la hegemonía conservadora que
tuvo Colombia desde 1886 a 1930, con la elección de Enrique Olaya Herrera
“Liberal”.

Colombia ha vivido la Explotación de empresas nacionales como Internacionales,


las cuales solo roban a los colombianos llevándose todos los bienes y recursos
más Preciosos.

WEBGRAFIA

https://www.colombiainforma.info/5-y-6-de-diciembre-la-masacre-de-las-
bananeras-la-matanza-que-si-ocurrio/

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