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Indice:
Ira R.Buchler & Michael McKinlay: Los procesos de decisión en la cultura, 1969.
Anexos I-III.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 2
PRÓLOGO
Introducción
Uno de los grandes temas que cruza por el corazón mismo de la Etnografía de
México y conduce a una diversidad temática extensa, es el los sistemas de cargos. El
reconocimiento de los autores que han trabajado los problemas derivados de su
análisis abarca una notable diversidad de posiciones teóricas y nos ilustra con
elocuencia sobre la riqueza de una discusión que no sólo ha conocido los más variados
derroteros, sino que también nos depara todavía muchas sorpresas. La primera de
ellas, visualizable en la propia Antología, es la magnitud de la producciòn y la variedad
de los enfoques; hay otras más, como las nuevas tendencias que se advierten en la
comunidad antropológica mexicana y se expresan en los puntos de vista de los
antropólogos indios, o en las muy sugerentes propuestas de Alfredo López Austin y
Jacques Galinier.
El campo teórico del sistema de cargos tiene un acceso, no siempre advertido
por quienes lo transitan, en el tema de la fiesta. Prácticamente todo aquel escritor,
cronista o reportero que visita las regiones rurales del país no deja de describir con
asombro y entusiasmo las expresiones intensas de las ceremonias comunitarias,
plenas de color, música, danza y multitudes eufóricas. La fiesta mexicana sólo es
posible en la tradición rural por la existen- cia de una estructura organizativa que esta
en el meollo mismo de la comunidad, el sistema de cargos, y en la que se articulan de
una manera compleja y original los procesos socioeconómicos, políticos, religiosos y
étnicos que constituyen a la comunidad tradicional, pero principalmente la india, de raíz
mesoamericana.
En la fiesta comunal es posible reconocer la riqueza de un simbolismo que nos
remite a concepciones fundamentales del pensamiento mesoamericano, las que
configuran la cosmovisión, y nos muestran vívidamente, no el anacronismo de sus
supervivencias, como nos lo sugiere eso que Galinier llama atinadamente una
“etnografía de superficie”, sino el esfuerzo desplegado por la comunidad en un largo
proceso de resistencia, para actualizarse, frente a las presiones múltiples de una
sociedad envolvente que se niega a reconocer la pluriculturalidad desde una suicida
perspectiva eurpeizante, a lo que Guillermo Bonfíl habría de referirse como el “México
imaginario”.
En este Prólogo haré algunas anotaciones a propósito de esta riquísima veta de
temas que genera el sistema de cargos; anotaciones que han surgido como una
reacción a la lectura de los textos de Leif Korsbaek, tanto los propios como los que
constituyen el cuerpo de la Antología. Esto, evidentemente, no agota el tema, y no es
esa la intención. De lo que se trata es de señalar cuestiones no consideradas o
también aportar datos que, de muchas maneras, nos indican la trama compleja del
tópico.
muchas formas por los énfasis, las insistencias y los olvidos en los escritos de los
estudiosos mexicanos. Tal reflexión remite de lleno a los procesos de construcción y
reinterpretación de la identidad nacional, específicamente al papel que juega la
poblaciòn india, tanto en el pasado como en el presente, en la constitución de lo
mexicano, cuestión ciertamente densa que llena con sus gritería desde las polémicas y
disertaciones de los criollos nacionalistas del siglo XVIII, pasando por los afanes
liberales, atormentados con el racismo imperante en las ideologías de moda, hasta
llegar a los textos contemporáneos, incisivos, de Octavio Paz, en El laberinto de la
soledad, y de Guillermo Bonfil, en El México profundo.
La discusión no acaba de resolverse. como nos lo habría de mostrar
dramáticamente el levantamiento zapatista del 1o. de enero de 1994; y sigue viva en
las ambiguas definiciones de los partidos políticos frente a la cuestión étnico-nacional,
involucrada tanto en las reformas a los Artículos Constitucionales 4 y 27, como en los
reclamos de autonomìa. Y no menos encendida y acuciante la temática de lo étnico se
ubica en el centro de buena parte de la antropología mexicana, pues no acaba de
definirse dónde radica la etnicidad de los indios y como construir desde ella una serie
de propuestas que reivindiquen su derecho a la diferencia, para refundar así la nación
pluriétnica, multilingüe y pluricultural que somos.
Así pues, en la definición del estatuto teórico y político de los pueblos indios
ocupa un lugar privilegiado la temática del sistema de cargos; básicamente porque es
desde esta estructura que habrá de manifestarse la especificidad histórica y cultural del
poder, de los sistemas de relaciones asentados, inscritos, en una tradición que se
arraiga en el pasado mesoamericano. En este sentido, los estudios etnográficos han
jugado un papel decisivo al situar en el terreno de lo real y lo histórico el carácter de la
población india; ante las pretensiones románticas del etnicismo (tanto el de Barbados
como el marxista) que ha inventado a los grupos étnicos y a las minorías subordinadas,
lo que aparece como una evidencia rotunda y de una complejidad inesperada es la
comunidad, el espacio fundamental en el que se da la reproducción social de las
identidades étnicas indias.
La comunidad es la unidad social básica que contiene el sistema, los principios
económicos y políticos a partir de los cuales se constituyen sistemas mayores. Y aquí
es necesario introducir una aclaración. ante las propuestas de Tax, de homologar
comunidad y municipio, de acuerdo con su experiencia guatemalteca; en México la
situación no sólo es diferente, sino incluso muestra situaciones de mayor complejidad,
como lo deja ver fácilmente la conflictiva política que viven los pueblos indios de
Guerrero y de Oaxaca. Con los datos de Chiapas, sin embargo, más cercanos a las
evidencias guatemaltecas, lo que se explica luego del largo período colonial en el que,
Chiapas y Guatemala, forman parte de una misma jurisdicción política, la Capitanía
General de Guatemala, podremos apuntar a algunas de las complejas relaciones entre
comunidad y municipio.
Antes de aportar los ejemplos chiapanecos permítaseme insistir en el carácter
tendencialmente autosuficiente y autónoma de las comunidades indias, las que tienen
tanto un territorio definido, marcado profundamente por una geografía sagrada, como
su propia estructura político-religiosa, su santo patrón particular y un ciclo ceremonial,
también específico; esto, entre otras características que todavía se mantienen y
reproducen, como la posesión de una variante dialectal de la lengua india hablada y el
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 4
La cosmovisión
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 10
Comentario último
La amplitud y complejidad del campo teórico del sistema de cargos queda
mostrado más que elocuentemente con la amplia bibliografía que acompaña a esta
antología, así como por la diversidad de las cuestiones abordadas por los notables
autores que han tratado el tema. Es evidente, así mismo, que el estudioso de la
sociedad y la historia mesoamericanas no puede dejar de remitirse en sus
observaciones, reflexiones y generalizaciones, al espacio teórico del sistema de
cargos. Esto significa, también, que una revisión somera de la sucesión de
monografías, propuestas teóricas y polémicas nos acerca a la historia de la
antropología desde una perspectiva inusitada.
Así pues, al poner a disposición del investigador y del estudioso una bien
pensada antología de textos, una amplia biblio- grafía y diversos comentarios y
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 13
Andrés Medina
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LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 15
Leif Korsbaek
Notas
1.
Las denominaciones aquí citadas son, respectivamente, de Waldemar R.
Smith, 1981; Harry Tscopik, 1947; Pedro Carrasco, 1979; Frank Cancian, 1967;
y Fernando Cámara Barbachano, 1952. Las referencias son a la bibliografía al
final de la antología.
2.
En Sol Tax, 1937.
3.
Según Frank Cancian, 1967:293.
4.
Según Frank Cancian, 1967, Fernando Cámara Barbachano, 1952, entre otros.
5.
Manning Nash, 1958.
6.
Oliver La Farge, 1947; Oliver LaFarge & Douglas Byers, 1931; Charles
Wagley, 1949; y Maud Oakes, 1951.
7.
Betty Starr, 1949.
8.
Judith Friedlander, 1981; y Michael Kearney, 1971.
9.
Notablemente Henning Siverts, 1960, 1964, 1965, 1969
10.
Notablemente Frank Cancian, 1965, 1967
11.
Frank Cancian, 1964, 1965.
12
Fernando Cámara Barbachano, 1952.
13
R. Wasserstrom, 1977, 1983; Waldemar R. Smith, 1981
14
Buchler & McKinlay, 1969.
15
Michael Kearney, 1971.
16
Gonzalo Aguirre Beltrán, 1967.
17.
Ricardo Falla S.J., 1969.
18
Ulrich Köhler, 1975.
19.
Chance & Taylor, 1987.
20.
Barbara Price, 1974.
21.
Pedro Carrasco, 1979.
22.
Leif Korsbaek, 1987.
23.
Thomas Kuhn: La estructura de las revoluciones científicas “formas de
gobierno indígena”, Fondo de Cultura Económica, Breviario No.213, 1971; la
traducción al español es de la primera edición en inglés, de 1962, y no tiene
el importante prefacio de Thomas Kuhn a la segunda edición de 1971.
24.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 32
Sobre todo critica Frank Cancian a Sol Tax, 1953, con base en las cifras
proporcionadas por el mismo Sol Tax.
55.
En lo referente al sistema de cargos, esta visión ha sido criticada en
Leif Korsbaek, 1987, 1990.
56.
La interpretación que Frank Cancian lleva a cabo del aspecto económico
del sistema de cargos ha sido criticada en Waldemar R. Smith, 1981, y en
George Greenberg, 1987.
57.
Frank Cancian, 1965.
58.
El trabajo de Buchler & McKinlay se inscribe en la tradición de la teoría
de los juegos, y el consecuente estudio de la racionalidad ind ividual, que en
la antropología ha recibido un fuerte impulso en los estudios de Fredrik
Barth: “Political leasrship among Swat Pathans”, Londres, 1959, y “Models of
Social organization”, Londres: Royal Anthropological Institute, Occasional
Paper No. 23, 1966; en la antropología política ha sido utilizado por toda
una escuela alrededor de los trabajos de F.G.Bailey: “Stratagems and Spoils”,
Oxford, 1970, y Jeremy Boissevain: “Friends of Friends”, Oxford, 1974; en los
años recientes está resurgiendo una viva discusión en la filosofía de las
ciencias sociales, donde tal vez el ejemplo más interesante es la obra de Jon
Elster, ya que se declara como seguidor de Carlos Marx: Una introducción a
Marx, Siglo XXI, 1990.
59.
Para una introducción al individualismo metodológico, basado en el
pensamiento de Max Weber, véase Steven Lukes: El individualismo, Ed.
Península, 1975: 137-150; la interpretación más extrema de este punto de
vista es probablemente Peter Winch: The idea of a social science and its
implications for philosophy, Blackwell, 1954.
60.
Como se desprende de los trabajos clásicos de la antropología económica
formalista de LeClair, Scott Cook, y Robbins Burling. El análisis más logrado
es probablemente el de R.F.Salisbury: “From Stone to Steel”, Melbourne, 1962.
61.
La genealogía de la discusión acerca del método comparativo en la
antropología es larga:
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 35
Leif Korsbaek.
Sobre todo en los trabajos de María Ana Portal encontramos muy claramente
un sistema de cargos urbano, en la Ciudad de México. Escribe de sus investigaciones
que "uno de los aspectos que más nos llamó la atención durante el trabajo de campo
en la zona sur del D. F. fue la fuerte presencia del sistema de cargos en toda la
región"60. María Ana Portal sugiere que se estudie este sistema de cargos urbano
prestando atención a cuatro planos: el plano histórico, el de la cosmovisión, el social y
el ritual, plantea como los rasgos que más inmediatamente lo distingue del sistema de
cargos indígena y rural: 1) encontramos sólo dos cargos que se ejercen en ciclos
anuales: los fiscales y los mayordomos, 2) hay tantos mayordomos como conforman la
fiesta patronal, 3) los cargos son complementados por asociaciones y otras formas de
agrupaciones públicas y privadas que posibilitan una amplia participación de los
pobladores, 4) los cargos son más fácilmente accesibles para jóvenes y mujeres, 5) los
requisitos para ocupar un cargo son menos estrictos, 6) la forma de financiamiento de
la fiesta pasó del ámbito individual al de participación amplia, 7) el ámbito cívi co está
totalmente separado del religioso, 8) hay una amplia articulación entre las diferentes
colonias, barrios o comunidades a través del intercambio de santos, y 9) los
mayordomos y fiscales llevan un minucioso registro de quiénes cooperan y con cuánto.
Es muy claro que muchas de las diferencias que se observan aquí entre el sistema de
cargos indígena y rural y el urbano aquí presentado coinciden con diferencias en la
orientación teórica y metodológica que se ha obrado en años recientes en la
antropología mesoamericana, de manera que es difícil decidir si las diferencias son
sustanciales y se encuentran realmente en los sistema de cargos, o se deben al
cambio de perspectiva y orientación.
El argumento terco y obstinado de que las instituciones "tradicionales" no
sobreviven al proceso de "modernización" que implica la urbanización no sobrevive una
inspección más detenida. La brujería es al menos una institución tan tradicional como el
sistema de cargos y parece sobrevivir excelentemente en algunos contextos urbanos61.
La brujería parece tener una función a cumplir en las condiciones urbanas tan bien
como en las condiciones rurales, así que se deja facilmente transplantar a la ciudad,
siendo tradicional o nó. El sistema de cargos, por lo contrario, parece perder una parte
esencial de su función cuando lo cambiamos del contexto rural a un urbano, y así
simplemente se marchita62.
Recientemente se ha estado haciendo énfasis sobre el estudio de uno de los
elementos del sistema de cargos: la cofradía. Y la cofradía sí parece prosperar en el
contexto de la ciudad tan bien como en el contexto rural. La cantidad de estudios de la
cofradía en el ambiente urbano está creciendo y el acervo de estudios es ya
considerable, incluyendo tanto las condiciones urbanas en la actualidad como en
tiempos pasados63.
Finalmente, acerca de la tercera pregunta - si solamente encontramos el
sistema de cargos en en el area cultural de Mesoamérica, y no fuera de esta parte del
mundo - tendremos que responder de la misma manera categórica y en lo afirmativo: el
sistema de cargos no existe sólo en el area cultural de Mesoamérica, sinó también en
otras partes del mundo.
Como se mencionó al principio de este capítulo, los antropólogos han llegado a
asociar el sistema de cargos con la región cultural de Mesoamérica, tanto que esta
institución es realmente hoy un elemento importante en la mayoría de las definiciones
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 39
de esta area cultural64. Pero Waldemar R.Smith va mucho más lejos: "Las aldeas
campesinas a través de las regiones indias de América Latina organizan su vida ritual
sobre el principio de mayordomía y padrinazgo" 65, y las discusiones de Gonzalo Aguirre
Beltrán del sistema de cargos incluyen toda América Latina, hasta la Tierra del Fuego 66.
Con abundancia de detalles etnográficos el sistema de cargos ha sido descrito
en el Peru por Harry Tschopik, bajo el nombre de "el sistema de vara", así nombrado
debido a la vara ceremonial que allá, como en casi todos los demás lugares, es el signo
visible de la dignidad y autoridad del oficio en el sistema de cargos67. De Bolivia
tenemos una descripción igualmente detallada de unos veinte sistemas de cargos,
discutidos con énfasis en el aspecto económico y comparados con sistemas de cargos
similares en el noroeste de México 68.
Será mencionado también que Eric Wolf ha sugerido la semejanza en
estructura entre "comunidades cerradas corporativas de campesinos" en partes del
mundo tan lejos una de la otra como Mesoamérica y Java Central. Implícito en su
comparación de estas comunidades campesinas está su suposición de la existencia de
equivalencia funcional de distintas formas culturales de las instituciones las cuales son
encontradas en la estructura total de estas villas. Es decir, podemos esperar encontrar
diferentes instituciones las cuales, en una semejante estructura total, realizan la misma
función.
En pocas palabras, está bien documentado que el sistema de cargos existe no
solo en el área cultural de Mesoamérica, sino es encontrado sobre una amplia area
geográfica, al menos sobre América Latina. Si aceptamos el punto de vista que el
sistema de cargos consiste principalmente de elementos culturales europeos nada hay
de misterioso acerca de esto. En ese caso sería más natural asociar su existencia en
una determinada región o en una determinada comunidad con la presencia de
colonizadores españoles y portugueses que con la persistencia de las culturas
indígenas precolombinas, una posición la cual es de hecho mantenida por varios
antropólogos.
La situación general está entonces, aproximadamente, como sigue: la gran
mayoría de los antropólogos opinan que el sistema de cargos es un fenómeno que
existe en el area cultural de Mesoamérica, que se encuentra en comunidades
campesinas en esta area y que se relaciona intimamente con la población indígena en
estas comunidades. Eso no obstante que es ampliamente comprobado - como se
acaba de ver en detalles - que el sistema de cargos existe fuera del area cultural de
Mesoamérica, que se encuentra también en comunidades con una población no
campesina y que también es generosamente representado en comunidades con
población mestiza o ladina, es decir no indígena.
El propósito de los siguientes capítulos es presentar los rasgos generales del
típico sistema de cargos, aceptando por el momento la existencia y realidad de
semejante institución genérica. Hacia este fin podemos escoger entre varios diferentes
enfoques.
Podríamos seguir la sugerencia de Eric Wolf y trazar las diferentes formas
culturales que los mecanismos de nivelación socio-económica han asumido en
diferentes clases de "comunidades cerradas corporativas de campesinos" en las
diferentes partes del mundo donde encontramos este tipo de estructura comunitaria.
Eso ha sido sugerido por un número de antropólogos y metodologicamente no tendría
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 40
ninguna objeción, solamente nos llevaría más allá del alcance y las intenciones de este
trabajo que son más modestos: contribuir al estudio antropológico del sistema de
cargos como una institución social y cultural en el proceso histórico en una parte
geográfica concreta en el mundo: Mesoamérica69.
Podríamos limitar este enfoque siguiendo las sugerencias de E.R. Service,
considerando solamente los casos donde colonizadores españoles y portugueses han
tropezado con las altas culturas en lo que hoy es América Latina 70. Eso correspondería
en efecto al primer enfoque, sólo limitandonos a América Latina y excluyendo otras
partes del mundo como Egipto, Indonesia, Rusia, el Medio Oriente etc. Tampoco
tendría objeciones contra esta linea de trabajo, solamente desbordaría también los
límites del presente trabajo.
O podríamos seguir las pistas de un enfoque más histórico de G.M.Foster y
Charles Gibson y estudiar las formas de las instituciones españolas y portugueses que
han cruzado el Atlántico, adaptandose a las nuevas y diferentes condiciones en el
nuevo Mundo71.
Como una alternativa podríamos considerar el sistema de cargos como la
herencia cultural específica de una cultura histórica concreta que a través de los siglos
ha logrado guardar sus rasgos básicos y su identidad, luchando contra la imposición de
una cultura dominante "moderna". Este enfoque sería una especie de teoría de
aculturación y tendría mucho en común con el enfoque conocido como "el modelo
genético-histórico" que ha sido formulado, defendido y utilizado por Tatyana
Proskuryakoff, Sol Tax y Evon Z.Vogt, entre otros72. Como he mencionado en otros
lugares yo estoy en contra de esta linea de pensamiento, por un número de razones 73.
En resumen, a pesar de la abrumadora documentación de la amplia extensión
del sistema de cargos fuera del area cultural de mesoamérica, fuera de las
comunidades campesinas y fuera del ambiente indígena en el presente trabajo se
limitará la atención a cubrir solamente las manifestaciones del sistema de cargos en
comunidades campesinas en Mesoamérica con población indígena.
La razón de esta limitación no es que considere al sistema de cargos como una
herencia cultural precolombina, una posición firmemente representada por Evon Z.Vogt
a través de su cuantitativamente impresionante producción, en consecuencia
excluyendo las comunidades ladinas y mestizas de nuestra esfera de interés.
No estoy en desacuerdo con Antonio García de León, por ejemplo, en que los
campesinos indígenas y no indígenas son igualmente explotados y tienen el mismo
interés objetivo74.
Pero dentro de la visión y el nivel de abstracción de este trabajo la unidad
fundamental del sistema de cargos tiene que buscarse en la definición individual que
esta institución produce de la comunidad y de sus habitantes, así como la rígida
separación de la comunidad del mundo alrededor que también produce. Es mi opinión
que una buena parte de la vitalidad y viabilidad del sistema de cargos se tiene que
buscar en la coincidencia entre la auto-identificación indígena en base al sistema de
cargos, por un lado, y la legislación discriminatoria española que trazó una linea
igualmente rígida entre la población indígena y la española, entre "la República de los
Yndios" y "la República de los Españoles", por otro lado 75.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 41
Por esa razón tenemos que excluir los sistemas de cargos en las comunidades
ladinas y mestizas de nuestro estudio, no obstante la abundancia y la solidez de la
documentación de su existencia en estas comunidades.
No estoy de acuerdo con Evon Z.Vogt en su opinión tan frecuentemente
expresada de que el sistema de cargos debe de tener antecedentes directos en las
culturas precolombinas, pero no rechazo las proposiciones de G.M.Foster y Charles
Gibson de que los sistemas de cargos de hoy en las comunidades indígenas son
construidos de cultura europea, tabiques impuestos sobre los cimentos de la cultura
indígena y sistemas sociales, y tampoco las proposiciones cautelosamente formuladas
por Pedro Carrasco de que existía una vez una institución precolombina, o varias,
funcionalmente similar al sistema de cargos. Pero dondequiera que las instituciones
españolas y portugueses fueran implantadas sobre los sistemas sociales indígenas,
fueron implantadas por grupos particulares de colonizadores, con sus particulares
posibilidades, prejuicios y perspectivas, a pesar de la unificación y estandardización de
ambiciones de la Corona española. Y dondequiera que estas instituciones fueran
implantadas sobre los sistemas sociales indígenas, estos sistemas sociales fueron
particulares y concretos, con una identidad histórica de sus propios, no exactamente
"cultura indígena" o "estructura social indígena", una construcción un tanto dudosa.
Cualquier manera que nos imaginemos el proceso que condujo al dramático
encuentro entre conquistadores y conquistados, cada uno con su acervo cultural, a
través de un proceso de combinación para las manifestaciones del presente día, este
fue un proceso que tuvo lugar en un espacio histórico concreto, determinado y limitado
por los medios de producción material, los canales y límites de comunicación, y por la
similitud de ideología y sistemas sociales, el sistema de cargos - también como otro
fenómeno historicamente desarrollando en América Latina cuya víctima del bien
conocido regionalismo en esta parte del mundo.
Desde este punto de vista es mi opinión que Mesoamérica manifiesta bastantes
rasgos comunes de un punto de vista ideológico, de un punto de vista político y de un
punto de vista económico, para justificar una discusión del sistema de cargos en esta
región sin sacrificar la concretización histórica del proceso. Pero es mi opinión también
que inevitablemente aflojamos esta concretización histórica si incluimos toda
Latinoamérica en esta discusión.
Finalmente, el sistema de cargos está situado en la tenebrosa area donde los
procesos internos - procesos en el interior de la comunidad - se funden con los
procesos externos - procesos que se inscriben en el contexto nacional e internacional y
en algún modo tocan el armazón de la comunidad local. Los antropólogos han
frecuentemente tratado "la pequeña comunidad" que ellos estudian como autónoma y
como un pequeño mundo autosuficiente. De esta manera han frecuentemente
malentendido la influencia de los poderes exteriores que influencian y modifican la
estructura y el funcionamiento de la pequeña comunidad local. Sociólogos e
historiadores, por otra parte, frecuentemente han tomado "el gran mundo" y sus
invesntarios no solamente por dado, sino postulando una omnipotencia de esa forma
privando a la pequeña comunidad de cualquier papel dinámico en el desarrollo global.
De esa manera casi siempre han entendido mal la interacción entre el mundo interior
de la comunidad y el gran mundo exterior, de escala nacional e internacional, por lo
menos hasta recientemente.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 42
escalando cada vez más alto: en esta progresión se alternan la jerarquía secular y la
sacra, de tal manera que las dos están efectivamente vinculadas. Cuando han pasado
por todos los oficios, el individuo llega a ser principal, un anciano de la comunidad que
queda exento de todo nuevo servicio al pueblo" 84.
En esta breve descripción del sistema de cargos, que es la más temprana
descripción completa y explícita del sistema de cargos que existe, encontramos
virtualmente todos los rasgos importantes de esta institución, a excepción de uno. Este
último rasgo fue añadido por Manning Nash y Eric Wolf unos veinte años después, en
una serie de artículos que no le quitan nada de lo excelente del trabajo temprano de
Sol Tax de 1937:
"Los oficios son gratuitos y ocupan, dependiendo de la tarea, de la mitad a la
totalidad del tiempo de trabajo de un individuo. Es por esto que los puestos se llaman
cargos, y en un sentido literal son una carga, ya que la familia pierde tiempo de trabajo
y abandona ventajas para cumplir con las obligaciones del oficio" 85. Con esta breve
afirmación Manning Nash agregó una nueva dimensión al retrato antropológico del
típico sistema de cargos: el exorbitante costo de los cargos.
Las consecuencias para el sistema de este rasgo ya han sido analizadas por
Eric Wolf en una serie de artículos de los mismos años: "El sistema de cargos toma de
los que tienen, para hacer todos los hombres iguales en la pobreza" 86. Desde la
agregación de este último rasgo del típico sistema de cargos esta institución se ha
quedado bien firme y sin mayores cambios en las mentes antropológicas y en la
tradición antropológica de Mesoamérica 87.
En el siguiente diagrama aparece una representación gráfica del típico sistema
de cargos, dandonos una impresión visual de su estructura 88:
vida, están los legos que toman un cargo por un año en lasä hermandades religiosas
llamadas cofradías" 99.
De la península de Yucatán tenemos una descripción en uno de los clásicos de
la antropología mesoamericana: "No se espera que el mimso hombre continue
asumiendo el cargo en los años subsiguientes el cargo debe ser tomado por algún otro
hombre"100.
12. Después de haber asumido todos los oficios del sistema de cargos, o
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 51
Sol Tax
Los indígenas de hoy que hablan dialectos de una lengua (como quiché y
cakchiquel) no están en sentido alguino organizados como un grupo social, lo cual se
hace evidente por medio de un estudio, aunque somero, de Guatemala. No hay
evidencia, además, sobre una mayor analogía en la cultura de dos comunidades que
hablan quiché, po ejemplo, que la que existe entre una comunidad quiché y una
cakchiquel. Tampoco está claro que los términos lingüisticos, como quiché, representan
grupos políticos y culturales que existieron en la época de la conquista. En resumen, no
hay razón para pensar que la cultura, la nacionalidad y la lengua estén más
estrechamente enlazadas en Guatemala que en otros lugares. Los términos lingüisticos
no pueden ser usados incontrovertiblemente, por tanto, para designar grupos étnicos.
En este caso la coincidencia entre las lenguas y las divisiones culturales es algo que no
puede darse como un supuesto sino que debe ser determinado. Para estos fines, por
fortuna, es posible aislar -rápídamente y con certeza- grupos de gente que representan,
sin lugar a dudas, unidades sociales y culturales, y es posible citar y definir sus tipos de
organización así como describir sus correspondientes culturas. La gente de Guatemala
vive en municipios que son divisiones territoriales administrativas, generalmente
reconocidas en todos los estudios gubernamentales, pero que también son -como
ocurre en efecto- las divisiones étnicas básicas y los grupos culturales en los que esta
dividido el país. La descripción de estos municipios en una región del territorio, lo cual
constituye el propósito de este estudio demostraría con suficientes razones que los
estudios sobre la etnología de Guatemala deben comenzar con los estudios de las
culturas de los municipios como entidades individuales.
Tipos de municipios.
Están indicadas en el mapa (fig.2) y resumidas en el cuadro 1, ciertas
diferencias fundamentales en los sistemas sociales de los municipios. En primer lugar,
hay diferencias en cuanto a la ubicación de los habitantes, y esto depende de los
porcentajes de quienes viven en los poblados y de quienes viven en los campos que
rodean a éstos; en segundo lugar, hay diferencias en la constitución social, según los
números relativos de indígenas y de ladinos. Las dos clases de diferencias, aunque
casi relacionadas funcionalmente, se combinan en diversas formas, y la manera en que
se combinan en un municipio particular proporciona la información primaria sobre su
sociología básica.
Cada municipio tiene su pueblo, o sea su centro urbano, que es tal, tenga o no
residentes permanentes. Un municipio cuyo pueblo no tiene , en rigor, indígenas
residentes permanentes, puede ser llamado un "pueblo vacío" y tales municipios siguen
un patrón definido que podría describirse en términos de Chichicastenango, que
también en lo que concierne a su población indígena es un ejemplo típico:
El municipios de Chichicastenango tiene una población de unos 25,000
habitantes. De los indígenas nativos todos, excepto una docena de familias o algo así,
tienen hogares en sus terrenos distribuidos en la campiña que rodea al poblado: aquí
viven y trabajan o bien aquí tienen su base si se trata de comerciantes ambulantes o
trabajadores por día empleados en cualquier parte. Los espacidos hogares consisten
de simples familias o varios tipos de extensas familias. Puesto que las tierras son
heredadas a los hijos, dividiendolas entre éstos, los vecinos más cercanos de una
familia son considerados parientes. Aun así, los contactos de familias aquí en el campo
son casuales y poco frecuentes.
En el pueblo están la iglesia (o mejor dicho, dos iglesias en este caso), el
"juzgado" y el lugar del mercado. Muchos indígenas tienen casas propias en el pueblo,
así como en el campo, pero en los días correintes esas casas están desocupadas. Los
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 58
indígenas que tienen cargo público viven en el pueblo durante el período de sus
funciones; los otros vienen a él, cuando mucho, en los días de mercado (domingos y
jueves) que es cuando utilizan sus casas como centros de operaciones, y para las
fiestas religiosas (especialmente en la semana de diciembre en que se celebra el día
del patrón Santo Tomás), y en esta ocasión ocupan sus casas o las de sus amigos.
Los individuos van y vienen de su hogar del pueblo a su hogar del campo y el
ritmo de la ctividad cultural - semanalmente en lo económico, anualmente en lo
religioso, y por toda la vida en lo que atañe a la organización política y religiosa -
corresponde exactamente al movimiento periódico de la gente del campo al pueblo y
viceversa. De este modo los productos son cultivados y cosechados en el campo y
llevados al pueblo para su venta. Otras mercancías son compradas en el pueblo y
llevadas al campo para su consumo. Cuando un niño naceen el campo, el padre va al
pueblo para registrar el nacimiento y allí pide al que va a ser padrino que bautice al
niño; el padrino va al hogar del niño en el campo, un sábado, y celebra un rito; la familia
se traslada al pueblo el domingo siguiente y aquí el padrino llega a la casa de la familia
para llevar al niño que será bautizado; la familia retorna al campo por la noche. Cuando
un hombre muere en el campo se organiza un velorio y al día siguiente se lleva el
cadáver al cementerio del pueblo; los deudos y sus amigos van entonces, por la noche,
a la casa que la familia del difunto tiene en el pueblo y consumen bebidas. Así ocurre
también con los noviazgos y los matrimonios y lo mismo en la vida de los que tienen
funciones políticas y religiosas y en casi todos los aspectos de la cultura. Una dualidad
geográfica parece ser típica de los municipios de "pueblo vacío".
Una variante de este tipo ocurre cuando, debido a la introducción de factores
raciales y políticos externos, el pueblo es grande y tiene importancia considerable para
otros municipios (por ejemplo una cabecera departamental). Este es todavía un "pueblo
vacío" en lo que respecta a los indígenas locales, pero con su gran población de
ladinos dificilmente tiene esa apariencia. El pueblo grande, sin embargo, también afecta
la residencia de los indígenas ya que proporciona ocupación permanente a un número
de elloos, quienes, en consecuencia, vienen a vivir allí en forma regular.
Un municipio en que practicamente toda la gente vive en el pueblo, podemos
llamarlo un municipio con "nucleo poblado" y el tipo puede ser descrito tomando como
ejemplo a Santiago Atitlán, el cual es su mayor modelo si no el más típico:
Todos, excepto algunos centenares de los 7,700 habitantes del municipio de
Atitlán, viven en un pueblo grande, en grupos compactos de casas alineadas
regularmente a lo largo de calles bastante rectas. La gente tiene sus terrenos en los
campos de los alrededores (principalmente en los lados de los volcanes) y los hombres
dejan su hogar temprano por la mañana; cuando es necesario trabajan en el campo
todo el día y regresan al hogar por la noche a dormir. No hay casas en los campos ni
cerca de ellos y los hombres llevan consigo su almuerzo. Muchos de los hombres son
comerciantes y pueden ausentarse varios días de la semana, pero por supuesto,
retornan a sus hogares que están en el pueblo.
Como los hombres se ausentan generalmente durante el día, las mujeres
constituyen la mayor parte de la población visible. Hay ciertos lugares a la orilla del
lago, señalados para proveerse de agua y lavar, y aquí se congregan las mujeres en
horas determinadas para hacer sus tareas e intercambiar chismes. Las mujereres rara
vez dejan el pueblo y algunas pasan su vida entera dentro de sus límites. Dos veces al
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 59
día, en la plaza, funciona el mercado durante dos o tres horas y ellas vienen (los
hombres no compran ni venden en el mercado) y se sitúan en grupos o en filas,
exhibiedo sus mercancías y de nuevo entragadas a sus comadreos. El tiempo que las
mujeres no invierten en la oriulla del lago o en la plaza, lo ocupan cocinando o tejiendo
en casa; pero como la gente vive en familias compuestas - las cuales están unidas
entre sí - hay no poca vida social en el hogar también.
Naturalmente, la mayoría de las actividades normales de la vida - individual y
social - están confinadas al pueblo. El ritmo de vida, no estorbado por movimientos
coincidentes en el espacio, es al mismo tiempo más caelerado y menos enfático que en
los municipios de "pueblo vacío". El ciclo de la semana pierde la mayor parte de su
significado y no hay así uniformidad para todos los individuos. Tener cargo público por
un año, afecta el tiempo de uno, pero no su residencia ni todo su modo de vida. La
fiesta anual es importante pero se concede más atención a las imágenes de la iglesia
durante todo el año, y la fiesta en sí no necesita un movimiento masivo de toda la
gente. No hay dualidad y la vida sigue un curso constante.
Una diferencia apreciable entre los dos tipos, es que mientras en el primero los
límites del municipio son importantes y el término "pueblo" es usado para referirse a
todo el municipio, en el segundo el pueblo en sí lo es todo y los límites municipales son
comparativamente incidentales.
Hay una importante variación en el tipo de "nucleo poblado": en unos municipios
el pueblo contiene toda la gente, y ella trabaja en los campos circundantes, pero los
hogares en el pueblo están distribuídos sobre una area considerable de modo que hay
espacio para un limitado cultivo de frutas, legumbres y otros productos. Aquí la gente
no lleva una existencia dual sin embargo, y el resultado principal es que el hogar único
es más importante tanto para los hombres como para las mujeres, que en el tipo puro.
El tercer tipo de municipio es una combinación de los otros dos. Quizás la mitad
de la gente vive en el pueblo y trabaja sus campos cercanos de los alrededores, pero la
otra mitad vive en sus terrenos y viene al pueblo (donde pueda que posea casas)
solamente en las ocasiones acostumbradas. Un municipio de uno de estos tres tipos
puede tener otros poblados - pequeñas aldeas o caseríos - como adición al pueblo;
estos poblados pueden tener sus propias iglesias, juzgados menores y aún mercados;
pero en general la gente de estos lugares depende del pueblo (aunque en menor
grado) en su economía y en su organización política y religiosa.
Quedan por definir las clases de gente que vive en estos varios tipos de
municipios. Presumiblemente un indígena es un descendiente directo de los habitantes
precolombinos de Guatemala y la mayoría de ellos probablemente lo son. Un ladino,
por otra parte, debe representar - así se sipone - una mezcla de tiempos remotos de
indígenas y españoles. En realidad la distinción se basa comunmente en la lengua y la
cultura más bien que en el tipo físico; los indígenas hablan algunas lenguas nativas,
usan trajes típicos, tienen apellidos indígenas y viven como indígenas. Un ladino tiene
apellido español y su lengua materna es el español; usa traje al estilo europeo, usa
zapatos, vive en una casa con ventanas, comunmente sabe leer y escribir, y tiene en
general un mejor nivel de vida que sus vecinos indígenas. Estos criterios no pueden
aplicarse en forma universal, pero con base en todos ellos se puede por lo general
formular un juicio seguro.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 60
los pueblos del lago. La comparación va de Panajachel, y sigue alrededor del lago,
hasta cerrar en Santa Cruz, incluyendo los dialectos cakchiquel y tzutujil. Existe una
diferencia, es cierto, pero que ésta no es grande es también evidente, si se considera la
lista de palabras del cuadro como indicativa. Pero lo que resalta son las diferencias,
aún dentro de cada grupo lingüístico, conforme uno va de un pueblo a otro. Las
diferencias son en realidad más grandes en la lengua coloquial que como aparecen en
el cuadro, pues no sólo existen en los sistemas fonéticos, vocabulario y gramática, sino
que las entonaciones varían de modo notable y afectan fuertemente el mutuo
entendimiento. Atitlán es un ejemplo extraordinario de ésto: los atitecos no sólo hablan
más alto (en especialo cuando están aunque sea levemente excitados) y con distintas
entonaciones, sino que es normal que hablen a un ritmo marcadamente más rápido
que sus vecinos. La gente de algunos de los otros pueblos dice que no puede entender
a los atitecos en modo alguno y piensa que la lengua de Atitlán es del todo diferente.
Es curioso, sin embargo, que los atitecospuedan entender bastante bien algo de los
otros, que hablan "más claro" que ellos mismos, seún su propia confesión.
Aunque los dialectos que se hablan en los pueblos alrededor del lago, no son
por completo ininteligibles entre sí, las diferencias en cada caso son suficientes para
hacer difícil su comprensión. Los indígenas, no obstante, se las arreglan para
comunicarse en todos los asuntos ordinarios y esto en cierto modo se logra por su
conocimiento parcial de las lenguas de los otros. El hecho de que ellos se las ingenien
para comunicarse, de ninguna manera reduce la importancia de las diferencias, las
cuales, si bien no se hacen sentir en otra forma, continuamente mantienen en los
indígenas de cada municipio la conciencia de su unidad y su singularidad.
Quizás no haya en toda el area un caso tan marcado como el de los cuatro
pueblos de San Pedro, San Juan, San Pablo y San Marcos, cada uno de los cuales
está al alcance de la vista de los otros; San pedro y San Juan están separados sólo por
una caminata de pocos minutos, y la mayor parte de la tierra en San Juan es propiedad
de los pedranos y trabajada por ellos. Que haya alguna diferencia entre sus lenguas
sorprende bastante, pero que las dieferncias sean tan grandes es poco menos que
maravilloso. El hecho de que estos cuatro municipios difieran en lengua como ocurre
en realidad, respalda el aserto de que no son los grupos conocidos como cakchiquel y
tzutujil, sino los municipios individuales, las unidades lingüísticas que deben ser
estudiadas principalmente en el area. Lo dicho para la región del lago es más o menos
cierto para toda la zona del altiplano mesooccidental. En otras partes los centros
urbanos de los municipios no están tan cercanos; de este modo el caso no aparece tan
marcado. Con todo, en alguna forma los hechos son aún más significativos, ya que
entre los indígenas que viven en el campo hay muchos casos de vecinos próximos (en
distintos lados de los límites municipales) que hablan diferentes dialectos.
Si los municipios están tipicamente separados entre sí por su lengua, sus trajes
y una conciencia de singularidad racial, cultural e histórica, tanto como por diferentes
composiciones ecológicas y elementos de población, ellos constituyen también
unidades económicas, políticas y religiosas.
1. En los municipios donde hay ladinos, éstos están adaptados en varias formas
al sistema político, no así al religioso. En los grandes pueblos de ladinos hay
organizaciones independientes y la reconocida en lo oficial cuenta con ladinos en los
cargos superiores. Pero paralela a ella hay una organización indígena completa que es
extraoficial cuando entra en conflicta con la otra, como por ejemplo, en el caso de los
cargos superiores, y oficial en lo que toca a los cargos inferiores que siempre son
desempeñados por indígenas. En los centros municipales más pequeños, y en los
municipios del lago, hay solamente un sistema de cargos altos alternables entre ladinos
e indígenas;sin embargo, aún aquí (como por ejemplo en Panajachel) los indígenas
tienen un registro completo de funcionarios, pero en el caso de aquellos que entran en
conflicto con los ladinos, dichos funcionarios existen unicamente en la tradición
indígena.
2. En los municipios grandes (como Chichicastenango) se agrega a la
organización central vertical una serie de funcionarios escogidos en subdivisiones
territoriales y que operan en ellas. El municipio (y en Atitlán el pueblo mismo) está
dividido en cantones, cada uno con un funcionario local subsidiario de los funcionarios
del municipio, para efectos administrativos. En dichos municipios los principales tienen
bases y funciones territoriales y en algunos casos hay grupos de más altos princi pales
funcionando para todo el municipio.
3. En los municipios pequeños cada hombre tiene su turno para ocupar muchos
de los cargos. En los municipios grandes (donde hay más hombres que cargos) se
hace alguna selección supervisada por los más altos cargos, y los otros dan su servicio
al municipio en tareas más modestas. Hay así más honor y prestigio conectado con los
más altos cargos, tanto en el aspecto político como en el religioso.
4. Las tareas de los funcionarios seculares son también religiosas en grados
diversos; ellos toman parte como un grupo en las ceremonias supervisadas por los
funcionarios religiosos. En algunos casos (Panajachel, por ejemplo) los funcionarios
seculares tienen un santo a su cargo, pero entonces desempeñan funciones religiosas
en el mismo sentido que los funcionarios religiosos.
5. Cada municipio tiene su propia lista de santos, y el día del nombre de cada
uno es la ocasión de una fiesta. Por tanto, cada municipio hace celebraciones de
acuerdo con su propio calendario particular. Además, puesto que cada santo tiene sus
particulares conotaciones y requiere su celebración en una forma peculiar, los detalles
de las fiestas difieren con los municipios.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 68
Introducción.
El presente trabajo intenta describir, interpretar y clasificar la estructura y función
de los organismos religiosos y políticos en algunas comunidades mesoamericanas con
el propósito de encontrar características comunes - y señalar las diferencias - que
pueden ser utilizadas como proposiciones en una investigación más amplia que incluya
otros tipos culturales y sociales del area mencionada, y de otras areas americanas.
La posición teórica que se mantiene no es de ninguna manera original. Refierese
a conceptos, postulados e hipótesis bien conocidos en investigaciones sobre cambio
cultural y social.
El punto de vista presupone, en primer término, la existencia de tres niveles
culturales: pre-colombino, europeo y contemporaneo. De allí que en este ensayo se
estudian comunidades rurales de "indios" y no indios iii.
Otra idea que se asume válida y general es la que postula una constante
modificación, con mayor o menor intensidad, de la estructura, contenido y significado
de los organismos religiosos y políticos desde un tipo "primitivo", tradicional, antiguo,
rural o "Folk", hacia otro contemporaneo, moderno y semi-urbano, debido a los
contactos, directos o indirectos, que se tienen con elementos de la ciudad.
La hipótesis teórica y de trabajo se formula en el sentido de que es posible
interpretar y clasificar las características religiosas y políticas para llegar así a
establecer dos diferentes grupos o marcos referenciales. Estos núcleos de
características incluirían: uno, modalidades pre-colombinas y aquellas de procedencia
europea (siglos XVI-XIX), mientras el otro tendría principalmente esas formas europeas
antiguas además de contemporaneas y modernas.
Si se aceptan algunos de los significados que tiene el concepto de "sistema"
(Combinación de partes en un todo, o arreglo ordenado según una ley común) y este
se utiliza como un paso inicial en la interpretación de la sociedad y la cultura, el autor
cree estar justificado para usar términos tales como organización "centrípeta" y
"centrífuga" según la tendencia o causa que impulsa hacia un centro o hacia fuera,
respectivamente.
En la clasificación que llevé a cabo de las carcaterísticas de la organización
religiosa y política en algunas comunidades de Mesoamérica hago uso de esos
términos (centrípeta y centrífuga) aúnque no con su exacto significado, sinó más bien
ii El presente ensayo, traducido al inglés, fue escrito para el Seminario de Etnología y Antropología Social
de Mesoamérica que, patrocinado por the Viking Fund, se celebró conjuntamente con el XXIX Congreso
Internacional de Americanistas del 28 de agosto al 3 de septiembre de 1949, en la Ciudad de New York.
Posteriormente (en 1952), aumentado con las notas de crítica provenientes de su discusión, apareció
publicado (p. 142-173) en "Heritage of Conquest", editado por Sol Tax en the Free Press, Glencoe,
Illinois. Parte de la versión original en español se publicó en 19.... en la revista de la Universidad
Veracruzana "El hombre y la palabra", pero la presente es la primera publicación del ensayo completo en
español, incluyendo las mencionadas notas críticas de la discusión durante el Congreso de
Americanistas. La presente traducción al español es de Leif Korsbaek.
iii .....
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 70
por la idea general que convergen y sus implicaciones. Así una organización centrípeta
lleva la idea de una estructura cuya forma, contenido y simbolismo se orientan hacia la
conservación de un orden socio-cultural ya establecido; este orden, que interpreto
como un "centro", o central, aparentemente es de naturaleza tradicional, homogeneo,
colectivista, bien integrado, comandatorio y en donde, cuando menos teóricamente, el
bienestar de la comunidad debe anteponerse siempre al del individuo. Creemos así que
una organización religiosa y política de este tipo se encuentra en comunidades donde
las necesidades emocionales y utilitarias de los miembros son homogeneas y
recíprocas y donde una buena parte de los estímuli culturales parecen ser
determinados por la tradición y por la comunidad. La comunidad (por lo general el
municipio) es considerado teóricamente - y, por los miembros, en la práctica también -
como la unidad social y cultural.
Una organización centrífuga posee una estructura cuyo contenido y simbolismo
no van dirigidos hacia la conservación de algún orden de creencia y costumbres; es
cambiante, heterogenea, debilmente integrada y voluntaria. En ella el bienestar del
individuo o de un grupo determinado se considera como más importante que él de la
comunidad, por lo menos teóricamente. En las comunidades que poseen este tipo de
organización las necesidades emocionales y utilitarias de sus miembros son variables;
los estímuli culturales tienden a ser seleccionados y modificados en función del
beneficio al individuo, primero, a su grupo de familiares, luego, y finalmente al pueblo, a
la comunidad, a la aldea o a la cabecera (la unidad social y política más importante en
el municipio). Es este tercer nivel que se considera como la unidad social y cultural que
puede cambiar y a veces forzosamente debe de cambiar.
Relacionados con la anterior clasificación se presentan dos problemas. El
primero tiene que ver con la naturaleza del material disponible, cuya calidad y cantidad
varía de acuerdo a: (a) los objetivos y los intereses del autor, (b) el período en qué la
investigación fue llevado a cabo, (c) el tiempo de qué disponía el investigador y (d) las
condiciones bajo las cuales el trabajo de campo fue ejecutado. El segundo tiene que
ver con lo difícil que a veces puede ser distinguir entre una estructura o función ideal y
la que existe en la realidad. En consecuencia los autores pueden haberle concedido
demasiado peso a ciertos aspectos de la cultura y pueden haber subestimado otros.
Sin embargo, no obstante la existencia de estas dificultades es posible notar ciertas
tendencias principales en la organización religiosa y política en Mesoamérica.
El uso de palabras idénticas con diferentes sentidos y de palabras diferentes con
sentido idéntico nos produce otro problema, en particular con el uso de términos como
"indio", "nativo", "ladino", "blanco", "mexicano", etc. Una solución parcial a este
problema será el subrayar las características funcionales de los elementos étnicos de
acuerdo a su correspondencia con uno de los dos tipos ideales.
Las comunidades discutidas se encuentran presentadas en la siguiente tabla.
Mitontic Dzitás
Oxchuc Mitla
Tenejapa* Soteapan
X-Cacal Tehuantepec
Zinacantán* Tepoztlán
Tzintzuntzan
Yalalag
Las comunidades marcadas con un asterisco * son lás donde el autor Fernando
Cámara Barbechano ha hecho trabajo de campo.
oficiales supera ampliamente el número de puestos y oficios. Los ladinos y los mestizos
pueden o no tener su propia organización.
En las comunidades con organización centrífuga donde los habitantes ladinos o
mestizos constituyen una parte considerable de la población total indígena, las
organizaciones religiosa y política son mutuamente independientes, estructural y
funcionalmente, aúnque en ciertas ocasiones colaboran estrechamente. En las
organizaciones políticas los indígenas ocupan los puestos inferiores, en su caso,
mientras que los oficios religiosos son exclusivamente para indígenas o para no
indígenas. En ambas organizaciones el sistema jeráraquico viene siendo menos impor-
tante y los individuos que ocupan un puesto político o un oficio religioso lo hace de
manera voluntaria (status adquirido) y sin compulsión formal de parte de la comunidad
local (la cabecera, la villa o el pueblo). En estas comunidades el número de posibles
candidatos para los oficios es mayor que el número de oficios a la disposición. Mitla y
Yalalag son excepciones al respecto, ya que ambas comunidades cuentan con una
sóla jerarquía que integra tanto al cuerpo religioso como al cuerpo político, y los
puestos políticos igual que los oficios religiosos tienen carácter obligatorio; en Cherán
y en Chilchota existe una selección y una organización jerárquica en lo que se refiere a
algunos de los oficios religiosos.
En ninguna de las comunidades estudiadas sucede que determinadas familias
hereden el derecho a ocupar puestos y oficios específicos; en general ambos son de
una duración limitada y teóricamente acceibles a cualquier persona. Sin embargo, por
lo menos para acceder a los más importantes puestos y oficios se exige, como ideal,
honradez, juicio, fluidez de habla, energía, tiempo a la disposición, solvencia
económica y conocimiento de las funciones que se desempeñan en los cargos.
En las comunidades centrípetas existe un dado intervalo de tiempo entre el
desempeño de un servicio determinado y el siguiente; sin embargo, el conocimiento de
español, conocimientos matemáticos o el soborno les permite a algunos cumplir más
rapidamente con sus obligaciones y acelera su promoción a través de la jerarquía.
Existen importantes variaciones en Oxchuk, donde es importante la posesión de
poderes supernaturales; en X-Cacal y en Oxchuk el oficio de jefe supremo es vitalicio;
en Socotz "la mayordomía del santo" es también un oficio de toda la vida. En
comunidades donde hay músicos especializados su nombramiento es también vitalicio,
por lo menos teóricamente.
En las comunidades con organización centrífuga así como en los grupos mestizo
y ladino en las comunidades centrípetas, el deseo personal y la solvencia económica
son más importantes que otras cualidades, de manera que solamente unos pocos
alcanzan sus objetivos. En algunas de estas comunidades ciertos actores en las
ceremonias y festividades católicas tienen su función allá para toda la vida; los
maestros y especialistas de danza, dramatización y organización ceremonial van
perdiendo prestigio y los músicos trabajan comercialmente. En Chacaltianguis, Chan
Kom y Soteapan existen variaciones debido a la falta de interés por las ceremonias
católicas.
En todas las comunidades hay tareas de un carácter material que tienen que
ejecutarse para el beneficio del municipio o de la cabecera. Esta socupaciones
temporales, que pueden o no ser económicamente remunaradas, son también
consideradas como servicio e incluyen la vigilancia y el aseo de las plazas, las calles y
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 75
destacan, son respetados y son obedecidos. Por lo general son hombres maduros de
experiencia. En comunidades con organización centrípeta (haciendo excepción de X-
Cacal) y en algunos comunidades centrífugas, este grupo de indígenas se conoce
como los principales, los pasados o los cabildos; en la realidad constituyen una
gerontocracia y su estatus se debe a su conocimiento de los ritos político-religiosos (y a
veces mágicos) que practican para el beneficio de la comunidad. En otras comunidades
centrífugas (Chacaltianguis, Chan Kom, Dzitás y Soteapan) un principal tiene prestigio
principalmente porque ha logrado prosperar económicamente, tiene dones particulares
de liderazgo o es un sabio. Estas mismas características empiezan a tener valor en los
grupos centrípetas en el lugar que tenía antes el conocimiento ritual y mágico y la
experiencia de la vida.
En general, factores como la edad y el estado civil juegan un papel importante
en la selección, la elección y la promoción en la jerarquía de los puestos y los oficios.
Esta tendencia se observa con mayor claridad en las comunidades centrípetas, ya que
en las comunidades centrífugas los intereses personales son más importantes que los
requisitos tradicionalmente establecidos. Los servicios que son considerados inferiores
- el servicio de policía, mensajero, cargador, aseadores de centros públicos y
ayudantes secundarios en las ceremonias - son obligaciones principalmente de los
jóvenes. Los puestos y los oficios que son de considerable importancia - los puestos de
regidores, jueces, capitanes y mayordomos - son ocupados por adultos, generalmente
casados que organizan y dirigen tareas de naturaleza política tales como la ejecución
de ceremonias religiosas. Finalmente, las funciones que son consideradas de mayor
responsabilidad (la toma de decisiones en la justicia secular y religiosa y la planeación
y ejecución de las ceremonias relevantes) son reservadas para los alcaldes, los
jueces, los gobernadores y los jefes quienes casi siempre son de edad madura y son
casados. A este respecto las organizaciones centrífugas muestran importantes
excepciones.
En todas las comunidades existe una fuerte tendencia a relacionar prestigio
social con el oficial o el puesto o el oficio que ocupa, incrementando según se suba en
la jerarquía. Los oficios religiosos se consideran como mejores que los puestos
políticos, debido a su carácter sagrado y al dinero que se gasta en las funciones
religiosas, no obstante que los puestos políticos ofrecen mejores oportunidades para el
ejercicio de autoridad práctica. Sin embargo, existe en las comunidades centrípetas
una tendencia a que los individuos evaden los puestos y los oficios, o los rechazan,
invocando su pobreza, falta de interés, incapacidad, falta de tiempo o sus derechos
como un ciudadano libre. Casos extremos se hallan en Oxchuk, donde los funcionarios
indígenas más altos salen de sus oficios totalmente arruinados, y en Nebaj, donde los
"nuevos ricos" ocupan los puestos y los oficios más importantes. En todas las
comunidades las jerarquías políticas y religiosas muestran inseguridad e ineficiencia,
tal vez debido a la confusión de valores e ideales del pasado y del presente. Es
frecuente la irresponsabilidad para con las necesidades de la comunidad y la violación
de reglas legales y tradicionales. Esta ineficiencia y desorganización existe
probablemente desde el siglo XVI, pero se ha aumentado durante las últimas décadas.
Los conflictos que surgen dentro de la familia ya no se resuelven entre las partes
que se quejan y los jefes de familia, posiblemente debido a la mayor influencia de los
mestizos o ladinos en la organización política o de4bido al mayor grado de ladinización
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 77
de la comunidad. Existe ahora una tendencia a llevar los casos ante las autoridades en
la cabecera, en particular durante los días de fiesta. Esta práctica es menos común
entre las gentes que viven en los parajes, pero aún entre ellos ya se empieza a
entender que las decisiones de los jefes de familia carecen de validez ya que
contradicen a otras tomadas por las autoridades políticas constitucionales. Además, en
muchas ocasiones los jefes de familia ya no muestra disposición para resolver estas
disputas. En las comunidades centrífugas ya es difícil encontyrar casos de consejo de
familia y teóricamente la justicia está en las manos de las organizaciones estatales y
locales. Las formas de reverencia y de costumbre que todavía se sigue en las
comunidades centrípetas, donde el proceso de resolución de un conflicto incluye la
invitación a tomar trago, ya no tiene ni sentido ni función en las comunidades
centrífugas. Los conflictos entre familias diferentes son más comunes en las
comunidades centrípetas, mientras que los conflictos entre personas fuera de las
familias son más comunes en las comunidades centrífugas.
La confianza en lo supernatural parece ser general en ambos tipos de
comunidad. no obstante que se notan las siguientes variaciones: en Ayutla y X-Cacal
existen diferenciaciones básicas entre lo católico y lo pagano; en las demás
comunidades centrípetas, así como en Chan Kom, Cherán, Jilotepec y Soteapan, las
costumbres de culto representan una estrecha mezcla de rasgos católicos y paganos,
mientras que en las demás comunidades centrífugas la confianza en lo supernatural se
manifiesta principalmente en las ceremonias católicas. Las creencias mágicas y las
prácticas mágicas (brujería), aúnque se supone que son de importancia en toda la
región, tienen más ingerencia en Ayutla, Oxchuk, Chacaltianguis y Dzitás.
La veneración de un santo patrón (una imagen católica que representa "el
patrón" de la comunidad) es general en todas las comunidades, igual que la veneración
de las demás imágenes del panteón católico y de las cruces. Hay, sin embargo,
diferencias significativas, según la importancia relativa que se le dé a una u otra
imagen, y según las distinciones que se hagan entre el santo patrón y el Dios supremo.
En las comunidades centrípetas, con la excepción de las del Norroeste de Guatemala y
X-Cacal, donde se les dedican más plegarias a las cruces, el culto a las imágenes tiene
precedencia al culto a las cruces. En la mayoría de estas comunidades el santo patrón
parece ser identificado con el Dios supremo; puede haber una dicotomía, sin embargo,
en lñugares donde el imagen del patrón es una virgen y no un santo. Aparentemente la
mayor importancia atribuída a los santos patrones tiene como consecuencia la pérdida
del culto a las otras imágenes. En casi todas las comunidades centrífugas el santo
patrón ya no es la figura central, exceptuando tán sólo las festividades en su día en el
calendario; para ciertos grupos de los habitantes otras imágenes son de extrema
importancia; la veneración de la cruz se encuentra integrada en el culto general; la
distinción entre el santo patrón y el Dios supremo en general en mayor grado.
En todas las comunidades existen centros especiales dedicados a las
ceremonias religiosas, tales como igelsias, templos y otros lugares considerados como
sagrados, tanto en las cabeceras como fuera, pero existen variaciones según el uso
que se haga de los lugares sagrados. En las comunidades centrípetas encontramos
entre diez y veinte imágenes en la iglesia, incluyendo la del santo patrón; existen
templos privados, como por ejemplo las capillas en los calebales de Chemelso y Nebaj,
y en las aldeas de X-Cacal; los altares domésticos o de familia no son muy comunes y
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 78
carecen de imágenes; ciertos arroyos, cuevas o encrucijadas, así como otros lugares
naturales o artificiales con un sentido esotérico constituyen sitios propicios para
presentar peticiones y ofrendas a los poderes que controlan el relámpago, la lluvia, los
vientos, el sol, etc. En las iglesias, las capillas y los altares las actividades de culto
tienen más carácter católico y menos mágico, pero en otros lugares sagrados sucede
ocasionalmente lo contrario; en las iglesias, las capillas y los altares se requiere un
mayor grado de cuidado y de limpieza; la decoración más común constituyen las
flores. En las comunidades centrífugas, con la excepción de Chan Kom y Soteapan, la
iglesia es el principal centro del culto católico y el número de santos que se guardan
allá es casi siempre superior a veinte; las capillas existen principalmente en las
comunidades que poseen barrios, y allá se guardan las imágenes del santo patrón o
de la virgen (del barrio), así como otras imágenes. Altares de familia son comunes, con
o sin imágenes; pueden contener cuadros, grabados, velas y, por lo regular, flores.
Puede ser que existen lugares sagrados, pero con funciones pagano-católicas o
mágicas.
Cuando no reside permanentemente un sacerdote en la comunidad, la dirección
y la ejecución del ritual religioso están en las manos de especialistas (rezadores,
cantores, sacristanes, maestros, capellanos, cabildos o principales), mientras que las
tareas administrativas se les asignan a topilillos, semaneros, sacristanes, "bishcales",
acolitos, campaneros, mayordomos, etc. En las comunidades centrípetas, excepción
hecha en el caso del sacerdote residente en Chichicastenango, los mencionados
especialistas ocupan su oficio permanente o temporalmente, no reciben ninguna
remuneración por sus servicios y son expertos en rituales católicos y paganos,
haciendo plegaris, rezando y oficiando "misas" con el fin de ingratiar a los seres
supernaturales (tanto los católicos como los paganos) que controlan el mundo. los
sacerdotes católicos visitan estas comunidades dos o tres veces al año, oficiando
misas, bautismos y, ocasionalmente, una boda. X-Cacal presenta una excepción ya
que en esta comunidad el culto pagano y el católico están estrictamente separados. La
población ladina puede contar con sus propios especialistas. En las pocas
comunidades centrífugas donde hay un sacerdote católico residente, éste esta
encargado del culto ortodoxo; sin embargo, existen rezadores y otros ayudantes
nomnbrados para un período específico que, en las cabeceras que carecen de un
sacerdote, llegan a ocupar un oficio permanente, reciben un aremuneración financiera y
por ende se pueden considerar como empleados. El ritual paganop tiende a quedarse
totalmente fuera de esta organización.
Las personas encargadas de las ceremonias católico-paganas, consideradas en
muchos lugares como "el grupo indígena", tienen como su tarea y obligación principal
el suplicar o repelar los efectos de los fenómenos naturales para el beneficio de la
comunidad igual que la familia específica o los grupos locales que los llamaron para
este objetivo. En general estas ceremonias están perdiendo su sentido e importancia.
Sus ejecutores - casi siempre poseedores de poderes supernaturales, de
temparamento místico y expertos en rituales mágicos - se dedican a brujería saturada
con elementos de ritual católico. En las comunidades indígenas centrípetas del medio
occidente de Guatemala y Ayutla, no se llevan a cabo actos con el fin dbeneficiar a
todo el grupo; en el area Ixil y en el norroeste de Guatemala el uso del calendario
indígena (tzolkin) es excepcional y notable; en las demás comunidades, con la
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 79
controlan la venta de aguardiente que representa el gasto más fuerte relacionado con
cualquier festividad.
En las comunidades centrífugas que cuentan con mayordomías la ocupación de
un sólo oficio es por lo regular suficiente para adquirir algún prestigio en la comunidad,
ya que estos oficios se asumen voluntariamente. En comunidades con barrios puede
haber cierta coerción ya que aquí el individuo mantiene una relación más íntima con su
santo y con sus vecinos. La ocupación de esta clase de oficios normalmente no lleva a
la ruina económica pero puede a veces llevar a algún grado de inseguridad en lo que
se refiere al estatus social.
Hay cierta tendencia a asignar las imágenes a una jerarquía y también formular
juicios evaluativos respecto a la importancia de sus fiestas y, en consecuencia, a la
persona responsable. Sin embargo, la ordenación jerárquica de los diferentes santos es
casi siempre disputada y con frecuencia la posición jerárquica de una imagen se
establece o se cambia según el éxito de su fiesta.
Este éxito se establece según el número de participantes formales, el monto de
dinero gastado y las posibilidades de diveritrse y cumplir con las obligaciones
religiosas, tanto para los directamente responsables como para los demás
participantes. En las comunidades donde los mayordomos y los capitanes conforman
un sólo grupo, la esposa de un oficial también adquiere oficio y merece respeto; cuando
los mayordomos y los capitanes forman grupos distintos, solamente las esposas de
aquellos son consideradas como oficiales (mayordomas). En las comunidades con
organización ................... la evaluación de las imágenes es más homogenea, lo que
está estrechamente relacionado con que el sistema jerárquica todavía en vigencia. En
las comunidades centrífugas, con la excepción de Mitla, y entre los mestizos o ladinos
de las comunidades centrípetas, donde el oficio religioso es un asunto voluntario, la
jerarquización de las imágenes, de sus fiestas y de las personas responsables de sus
fiestas, es un asunto que reviste importancia sólamente para un pequeño número de
personas. Encontramos excepciones a esta regla en comunidades donde hay barrios,
ya que aquí surgen conflictos sobre el rango atribuido a las diferentes imágenes y a las
personas responsables de sus fiestas.
Durante las fiestas se encuentran en todas las comunidades personas con
máscara, grupos de payasos, actores de pantomime y músicos comunes. En la
mayoría de las comunidades indígenas con organización centrípeta, las personas
responsables de las fiestas religiosas se distinguen, por lo menos en algunas
ocasiones, por su vestimiento particular y por sus adornos; hay además grupos de
personas que, debido a motivos personales, se pasean disfrazados de ladinos, mujeres
indígenas o mestizas), soldados o animales, mientras otras representan toros y
vaqueros. Estos enmasquerados pueden o no actuar de manera permanente. Cuando
actuan permanentemente están extentos de ocupar oficios político-religiosos, a menos
que decidan hacerlo voluntariamente. Los músicos tocan flautas de junquillo, tambores,
cuernos, violines, guitarras y, a veces, harpas de acuerdo a ciertas ocasiones y
ceremonias. Su trabajo constituye un oficio en la organización y representa su servicio
a la comunidad; son distinguidos y respetados. La competencia por el prestigio
profesional y promoción económica en las bandas de música de Ayutla constituyen un
caso particular en las comunidades centrípetas. No hay bailerines especializados;
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 82
En todas las comunidades bajo estudio las fiestas y las ceremonias tienen una
duración de varios días que se acomodan a la actividad principal que se lleva a cabo
durante este período. Por lo general las comunidades que son pequeños y pobres
tienden a tener un mayor número de fiestas que las comunidades que son más
grandes y menos pobres, aúnque hay excepciones. El número de los participantes
activos, responsables y espectadores varía según la importancia de la imagen en
cuestión o de la fiesta. Las fiestas más importantes son las dedicadas al santo patrón;
las fiestas dedicadas a otros santos tiene una importancia secundaria. En México las
festividades del carnaval y de la navidad son más importantes, y el cuaresma se
celebra con regularidad; en ciertas partes de México lasd fiestas de semana santa
contienen espctaculares dramatizaciones. En las comunidades de organización
centrípeta las festividades dedicadas a las imágenes pueden representar la integración
de los habitantes con los dioses. Solamente raras veces se busca ayuda de los pocos
exitosos que podrían contribuir económicamente con el objetivo de mejorar las
condiciones materiales en la comunidad. En las comunidades centrífugas la ayuda así
ofrecida aumenta el estatus de la comunidad; además hace posible la ganancia de
ciertas autoridades, por supuesto. Si se toma en consideración los ingresos totales de
la población, puede ser que en las comunidades centrípetas se lleva a cabo un mayor
número de fiestas y se gasta más dinero y tiempo en ceremonias religiosas.
Aparentemente se observan también diferencias entre las comunidades centrípetas
según haya una población indígena en las cabeceras, según las festividades coincidan
con importantes días de mercado - o vice versa - y según el éxito de una fiesta esté
correlacionado con un período particular del ciclo agrícola. Las ceremonias de noche
buena y de año nuevo son más comunes entre los ladinos que las festejan en la familia
o con amigos.
Celebraciones de un carácter religioso se hacen también en los parajes, las
congregaciones o las rancherías. Involucran un menor número de gentes y sin
embargo los gastos pueden ser muy elevados. Pero en general estasd celebraciones,
aúnque menos ritualísticas, menos externalizadas y nunca espectaculares,
corresponden en gran medida al patrón anteriormente descrito. En Mitla y en Cherán,
así como en las comunidades centrípetas, el cambio de oficiales religiosos y políticos
ocasionan también ceremonias y fiestas religiosas; en ellas participan tanto los
miembros de la jerarquía constitucional como los jerarcos rituales, ya que su
interrelación con los demás grupos es tanto estructural como funcional. En las
comunidades centrífugas el cambio de oficiales puede o no ser acompañado por
fiestas. En las comunidades centrífugas y en X-Cacal las romerías y las visitas a
santuarios fuera del municipio adquieren gran importancia, aúnque en X-Cacal parece
que estas actividades ya están perdiendo peso.
Solamente pequeños grupos en las comunidades centrífugas parecen intersarse
por las celebraciones nacionales y las festividades patrióticas, y menos aún entienden
su significado. Los habitantes de comunidades indígenas que participan en ellas lo
hacen por lo regular obligados fisica o políticamente por las autoridades ladinas o
mestizas. La participación en tales ocasiones por parte de los habitantes de
comunidades centrífugas se debe casi siempre a la esperanza de una ventaja
comercial.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 84
CONCLUSION.
Estos datos presentados aquí podrían ser juntados para formar un cuadro
general de los tipos de orgnaización religiosa y política que se encuentran en
Mesoamérica. No ha habido un intento por analizar el origen de los complejos
elementos culturales. Tal problema requiere del uso de otro tipo de materiales y
necesita diferentes técnicas analíticas. En general las monografíoas usadas no tienen
reconstrucción histórica como su primer objetivo. El problema fue hacer
comparaciones (con datos de comunidades específicas) que permitan la visualización
de la totalidad de la cultura mesoamericana, en lo que respecta a su organización
religiosa y política, teniendo en mente siempre que dicha organización es parte de un
sistema total social y cultural.
Algunos problemas surgen debido a diferencias en el tiempo en que los estudios
originales fueron hechos, por ejemplo, los datos de Socotz y Tepoztlán fueron
compilados hace más de 20 años; los de Chan Kom, Dzitas, Mitla, Jacaltenango,
Jocotán, Santa Eulalia y X-Cacal fueron colectados hace más de 15 años. La gran
mayoría de los estudios fueron hechos durante la época pasada. Empero algunas de
las situaciones descritas para un tiempo anterior han dejado de ser o han sido
modificadas considerablemente. Otra dificultad concierne a la delimitación precisa de la
comunidad, considerando la presencia de mestizos y ladinos en las comunidades
centrípetas, así como la existencia de indios en las comunidades centrífugas. Aislando
indios de mestizos con el propósito de hacer los materiales homogéneos para la clasifi -
cación, la abstracción resultante niega la realidad socio-cultural, en la cual indios y no
indios comparten muchas experiencias vitales.
Una multiplicidad de hechos pueden constituir factores causales exponiendo
diferencias o similitudes de organziaciones religiosas y políticas en Mesoamérica. En
este documento, por ejemplo, sólo se ha hecho referencia pasajera a ciertas caracte-
rísticas económicas que son significativas para la total comprensión de dichas
organizaciones. Menciones de impuestos, propiedad y uso de la tierra, localización
geográfica de las comunidades en regiones altas o bajas; la distancia que separa las
comunidades locales de los grandes centros (ciudades) y mercados, existentes desde
tiempos anteriores o desarrollados contemporaneamente; diferencias en fuentes
naturales, tecnologías y especialización. Por ejemplo, una gran parte de la vida
religiosa y política de una comunidad puede cambiar de acuerdo a la nueva importancia
que un producto pueda adquirir en el mercado local, estatal, nacional o mundial. En
relación a similitudes y diferencias en la estructura y función de los cuerpos religiosos y
políticos en Mesoamérica, es posible que los mestizos y ladinos de un municipio sean
en muchas formas responsables por el cambio hacia patrones ya establecidos en la
sodiedad moderna. Si la organización religiosa posee un buen número de complejos
culturales prehispánicos, la distinción entre indios y no indios es grande; y mientras
menos mestizos y ladinos hayan, mayor es la participación nativa comunal en
actividades religiosas y políticas.
Sin embargo, el tamaño de una comunidad, su ecología y número de habitantes,
sus relaciones sociales, su producción, contactos económicos, su estandar de vida y su
concepción del mundo, podrían cambiar esta generalización. A mayor número de
cofradías y mayordomías, aunque aparezcan en comunidades preponderantemente
"nativas", no siempre está asociado con actividades agro-culturales; festividades de
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 85
culto pueden ser llavadas a cabo en menor número por ciertos grupos, pero hechas
con mejor elaboración, con participación activa y pasiva, etc. y pueden tener
consecuencias significativas en la comunidad. Comunidades más pequeñas y más
pobres tienen proporcionalmente un gran número de fiestas y la responsabilidad oficial
tanto en la organización política como religiosa.
Esta generalización puede no ser válida cuando la comunidad lleva a cabo
regularmente ceremonias católicas, de acurdo a las fases de la vida, como el bautismo,
la comunión, matrimonios y funerales, o bien en otras relaciones rituales, recreaciones
seculares, viajes o subsistencia de consumo. Tomando en consideración la función y
estructura de las organizaciones políticas de las comunidades estudiadas, es probable
que la forma prehispánica ha sido un cuerpo sencillo, algunos de sus oficios fueron
reclutados y otros seleccionados y nombrados de acuerdo a su función y lugar en la
jerarquía, considerando teóricamente a todos los miembros para estas posiciones.
Aquellos dedicados a prácticas mágicas y esotéricas pueden estar dentro o
fuera de la organización. Esta situación particular no se ha encontrado hasdta ahora,
pero el grupo de comunidades en la organización centrífuga es similar a ésta.
El proceso de aculturación en Mesoamérica, ladinización, se ha acelerado en los
últimos años, donde ocurre esto es posible señalar los cambios siguientes, en la
organización política y religiosa:
fugas, probablemente dando brillo a una serie de cambios como aquellos que han
resultado en el orden presente, con nuevos símbolos, cualidades y valores.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 87
DISCUSIÓN:
(1) Tax: Nosotros deberíamos tener más claro las organizaciones centrífugas y
centrípetas.
Cámara: Los términos no son tan importantes sino su concepto. La segunda es
aquella donde la organización política y religiosa están interrelacionadas y operan
como una unidad para el beneficio de las comunidades. Estas son más indígenas. Yo
lo he visto desde el p/v de la organización político-religiosa. En el primer esquema las
organizaciones políticas y religiosas forman un sólo cuerpo. En el otro éstas están
separadas no sólo encuerpo sino en función.
Tumin: Usted está trabajando con un tipo ideal constante de diferentes
comunidades.
Cámara: en ninguna comunidad puede aplicarse un modelo exacto.
Asentimiento general.
Tumin: Esto sería cierto aún en comunidades mixtas. Aquellas que fueran
menos mezcladas, mostrarían una relación más estrecha entre las estructuras políticas
y religiosas.
Taxa: Más indígenas más interdigitación; menos indígenas, menos
interdigitación.
Paul: Usted tiene que tener razones para ponerlos en el segundo tipo.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 89
Tax: Existe otra que es casi contradictoria. En donde se tiene el sistema por el
cual todos deben pasar. Existe una motivación de pasar y ya lograrlo.
Beals: Puedo citar un caso de motivación emocional en Ayutla, en donde uno de
los hombres mas ricos ha tenido voluntariamente una mayordomía durante muchos
años y en la que ha puesto muchoo dinero.
Cámara: Cherán también tiene su pertenencia familiar, el santo milagroso.
Tax: Hay otra cosa, las creencias compensatorias. Es considerado de buena
suerte tener un santo en la casa.
Cámara:En la organización política y religiosa, la función primordial es el
beneficio de la comunidad. En la otra el objetivo primordial es el beneficio de la
comunidad. En la otra el objetivo principal es la adquisición del poder político.
Beals: Yo creo que esta necesidad emocioal, es potencialmente una motivación
individual.
Tumin: Usted quiere decir que la mentalidad de la gente es que lo que hagan
sea alrededor de la comunidad. La satisfacción primordial son los de la comunidad.
Paul: La comunidad no tiene emocionalidad, es individual. El punto es: ¿fallaría
el individuo al aceptar (el correo?) (the post). Debería sentir que está injuriendo el buen
desarrollo de la comunidad?
Beals: Entremos en detalles. En Cherán por ejemplo, las ceremonias no están
abiertas al público.
Cámara: Esto está relacionado con la cuestión del sistema de servicio. En el
primer caso, uno encuentra servicio. En el otro oportunidad personal.
Tumin: Hay sus excepciones, o esto es generalmente verdad para todo el
cuerpo de esta área? Yo voy porque no hay excepciones. Establecerá otro punto de
diferencia.
Cámara: La elaboración de ceremonias y de la estructura misma, es mucho mas
larga en las comunidades centrípetas que en las centrífugas.
Tumin: Proporcionalmente a la población?
Cámara: Si, Mitla tiene un cuerpo, pero lo he clasificado como centrípeta,
algunos otros aspectos de la organización político religiosa son centrífugas
De la Fuente: San Juan la Laguna y otras villas, en las que las ceremonias son
altamente elaboradas, se distinguen de muchas comunidades que no pueden tener
demasiadas fiestas porque son muy pobres.
Cámara: No es solamente el No. de fiestas sino la clase de fiestas, cuanta gente
toma parte en ellas. En las comunidades centrípetas, la mayoría de la población viaja a
las cabeceras para participar en las fiestas.
Tumin: Hay un gran No. de ceremonias?
Tax: Cuando las dos organizaciones son una, podemos hacer una distinción
entre ambas.
Tumin: Está usted diciendo que la distinción no se hace?
Tax: No creo que así sea. Dos veces al año todos realizan su Semana Santa y
la fiesta del Santo Patrón. Sin embargo, todos los rituales son tomados con sumo
cuidado por los miembros de la organización que están en el oficio ese año y se
observa que el sentimiento es fuerte, tanto como el contexto de la ceremonia interese,
todo ellos manifiestan el sentimiento que esto merece y pueden continuar sus trabajos.
Tumin: ¿Esto es general?
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 93
¡Asentimiento General!
(11) Gillin: ¿No es cierto que exista una actitud ambivalente? Me parece que un
cargo puede ser llevado por cualquier persona. La forma es cortesmente rechazada en
algunos lugares. En San Luis Jilotepeque mucha gente, hoy, no quiere el cargo.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 95
Tax: En Guatemala hay otra forma. Se incorporan con los militares. Una vez
que han hecho su servicio de un año, seguirán durante toda su vida, exceptuando los
domingos.
Tumin: Qué otras razones existen para rechazar un cargo?
Guiteras: La ladinización de la gente es principalmente la causante. Jóvenes
que tienen que ir a la escuela lejos de la comunidad. Una vez que vuelven de la
escuela, esperan ser síndicos o presidentes. Rechazan cargos de menor jerarquía.
Tumin: ¿Qué razones dan las comunidades más tradicionales para el rechazo
del cargo?
Tax: Enfermedad y pobreza.
Tumin: Y que hay de exigir que uno es incapaz de evitar el cargo?
Tax: Eso si usted es el único que cosecha la milpa. Que equivale a pobreza.
Gillin: Hay un interesante caso en San Luis Jilotepeque. La vieja combinación
es que usted puede ser un principal, pero la calificación es fundamental es la sabiduría
y la calidad personal. La posición democráticamente elegida entre ellos, pero aun
tienen la vieja tradición de ser cualificado.
Tumin: En este caso algunos indios pueden pasar por la oficina, pero dicen que
no quieren porque no están capacitados.
Tumin: Diría usted que son justificaciones para escapar a su responsabilidad?
Gillin: Puede ser.
(14) Beals: En algunas comunidades las ideas paganas tienen de todo, pero
desaparecieron......
desde una parte de Oaxaca hasta el resto de México no hay una dependencia
de la agricultura en las actividades ceremoniales. No existen cultos específicos
relacionados con la agricultura.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 97
(15) Paul: Altares domésticos no hay en San Pedro. Ellos no usan altares, no
existen cultos familiares.
Tumin: Es cierto que en una comunidad que está más ladinizada, las imágenes
religiosas desaparecen de las casas?
Tax: No, no existen más.
Tumin: Es una característica más ladina?
Tax: Son mas elaboradas.
(16) Villa: En X-Cacal no tienen sacerdote y las ceremonias son más ortodoxas.
Whetten: Hay sacerdotes escasos en comparación a estas pequeñas
comunidades?
Cámara: Sí
Wisdom: En los municipios norteños Chortís, no existen sacerdotes residente.
En Quetzaltepeque son menos católicos que en cualquier otro lugar. Tienen Santos no
católicos.
Beals: Persons dicque que existe un No. de comunidades donde han tenido
sacerdote por años y donde un nuevo sacerdote hace el ritual adaptado a la forma del
lugar.
Whetten: Habría menor o mas tendencias para encontrar un sacerdote en las
comunidades centrífugas? O tienden a gravitar mas en las comunidades ladinas.
Cámara: Si es sencillamente verdad.
Eric R. Wolfvi
v La presente traducción es tomada de Eric Wolf: "Una tipología del campesinado latinoamericano",
Buenos Aires, Nueva Visión, 1977: 66-100. La traducción al español es de Mariano I. Garreta &
Guillermo Colombres Casado.
vi Este artículo es un esfuerzo para contribuir a los fines y métodos del Proyecto de Investigación sobre
Regularidades Interculturales dirigido por Julian Steward en la Universidad de Illinois. El autor fue
investigador asociado en dicho Proyecto durante el periodo 1954-55. Agradece los comentarios y
sugerencias de Julian Steward, Robert Murphy y Charles Erasmus, como también a l os amigos del
Proyecto que escucharon la lectura del primer bosquejo de este artículo en el Simposio sobre
Regularidades Interculturales realizado en la Universidad de Illinois el 16 de julio de 1955.
vii Para una definición de Mesoamérica en términos de área cultural, véase Kirchhoff, 1952, páginas 17-
30. En este artículo se utiliza el término limitado a las comunidades de México y Guatemala que se
adaptan a la configuración que se examina
viii Java Central es una región de aldeas arroceras nucleadas con una t endencia a la tenencia comunal
de la tierra. Fue también el principal centro comercial del azúcar y de la producción de índigo, que
promovió la tenencia comunal y densas poblaciones. Java Occidental se caracteriza por la cría de
ganado más que por la agricultura; Java Oriental está ocupada por pequeños pueblos esparcidos entre
arrozales de propiedad individual. (Furnivall, 1939, p. 386) El término Java Central se utiliza limitado a las
comunidades javanesas que se adaptan a la configuración que se examina.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 100
Alguna vez fue general la tenencia comunal directa en ambas áreas. En Java,
esta tenencia aún sobrevivía en un tercio de todas las comunidades en 1927, mientras
que en más de la sexta parte de todas las comunidades la tierra aún se distribuía
anualmente. Esta tierra consistía en los terrenos más valiosos de la comunidad: los
arrozales irrigadosix . Sin embargo, aun donde la tenencia comunal ha caducado, la
jurisdicción de la tierra por la comunidad continúa siendo importante. Las comunidades
pueden denegar o confirmar los derechos de los herederos que han dejado la aldea, a
heredar tierras de la misma x ; pueden revocar los derechos y entregar la tierra a algún
otro, si un miembro abandona la comunidad xi; o pueden retomar la tierra entregada si
un miembro comete un crimenxii. Los forasteros pueden afincarse en esa comunidad
como aparceros, pero no pueden heredar o comprar la tierra que trabajanxiii. Los
miembros de la comunidad tienen prioridad en la compra de las tierras de la aldeaxiv y
no tienen el derecho de comprometer la tierra en garantía xv .
Las estimaciones concernientes a la supervivencia de comunidades con
tenencia de tierras comunales en Mesoamérica varían grandemente. McBride estimó
que en México en 1854 existían cerca de 5.000 "corporaciones agrarias" en posesión
de 11,6 millones de hectáreas, pero que en 1923 las comunidades con tenencia de
tierras sobrevivieron sólo "en ciertas partes alejadas del país" xvi. A su vez Tannenbaum
calculó que en 1910 cerca del 16% de todas las aldeas mexicanas y el 51% de la
población rural de México vivía en "aldeas libres", es decir, que no estaban incluidas en
algún gran fundoxvii. Este cómputo fue criticado por Simpson, quien sigue a Luis
Cabrera al afirmar que "hacia el final del régimen de Díaz [en 1910]... el 90% de las
aldeas y ciudades del altiplano central no poseían tierras comunales de ninguna
clase"xviii. Una estimación reciente considera que en 1910 el 41% de las comunidades
con retención de tierras aún mantenía la tenencia comunal aunque sobre una base
ilegalxix . En la actualidad hay una tendencia general a mantener la tenencia comunal en
los flancos de las colinas y forestas, pero permitiendo la propiedad privada en los
fondos de los valles y en las huertas xx . Aun en tales casos, sin embargo, las
comunidades pueden, y así lo hacen, prohibir la venta de tierra como garantía de
préstamosxxi. En contraste con Java Central, las periódicas redistribuciones de tierra a
los miembros de la comunidad parecen ser algo raras en Mesoamérica xxii.
ix Boeke, 1953, p. 65
x S'Jacob, 1951, p. 144.
xi Haar, 1948, p. 85; Oei, 1948, pp. 24-25.
xii Haar, 1948, p. 85.
xiii Haar, 1948, p. 119; S'Jacob, 1951, p. 143.
xiv Boeke, 1953, p. 31; Haar, 1948, p. 97
xv Haar, 1948, p. 113.
xvi McBride, 1923, pp. 133, 135.
xvii Tannenbaum, 1929, pp. 30-37.
xviii Simpson, 1937, p.31
xix González Navarro, 1954, p. 129.
xx Aguirre y Pozas, 1854; pp. 192-198; Carrasco, 1951, pp. 101-102; Tax, 1952, p. 61.
xxi Aguirre, 1952a, p. 149; Carrasco, 1951, p. 102, Carrasco, 1952, p. 17; Lewis, 1951, p. 124; Tax, 1953,
pp. 68-69; Wagley, 1941, p.65.
xxii Tax, 1952, p. 60.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 101
xxiii Haar, 1948, pp. 51, 71; Lekkerkerker, 1938, página 568; Guiteras, 1952, pp. 99-100; Redfield y Tax,
1952, p. 33.
xxiv Haar, 1948, p. 155; Redfield y Tax, 1952, p. 31.
xxv S'Jacob, 1951, p. 140.
xxvi Haar, 1948, pp. 24, 28; Kattenburg, 1951, p. 16; Ploegsma, 1936, p. 4; Supatmo, 1943, p. 9.
xxvii Haar, 1948, pp. 91-92.
xxviii Ibíd.
xxix Me gustaría conjeturar que un trabajo de campo más amplio puede invertir esta afirmación. Es
posible, por ejemplo, que el cementerio juegue un rol mucho más simbólico en la vida de Mesoamérica
que lo que realmente se supone. Los mazatecas del valle del Río Papaloapan tuvieron buen cuidado de
transferir los huesos de sus muertos de las viejas aldeas a las nuevas (Pozas, comunicación personal.)
Es probable que la fiesta anual de los difuntos haya tenido una función más comunal de lo que en
general se supone.
xxx Cámara, 1952; Redfield y Tax, 1952, pp. 36-38.
xxxi Boeke, 1953, p. 46
xxxii Geertz, 1956, pp. 138-140; Landon, 1949, pp. 156-158; Supatmo, 1943, p. 9.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 102
De tal manera, los excedentes de riqueza tienden más bien a ser desagotados
que orientados hacia la compra de nuevas mercaderías xxxviii.
Es necesario además señalar que las comunidades corporativas cerradas de
ambas áreas están aisladas social y culturalmente de la sociedad mayor en la cual
existen. La naturaleza de este aislamiento se examinará más adelante. Dicho
aislamiento general de la comunidad campesina en relación con la sociedad mayor
está reforzado por las actitudes parroquiales y de centralismo local de la comunidad.
En Mesoamérica, cada comunidad tiende a mantener un sistema económico, social,
lingüístico y político-religioso relativamente autónomo, como también un conjunto de
costumbres y prácticas hasta cierto punto exclusivas xxxix . Según las palabras de Gillin,
"el universo indio está espacialmente limitado y su horizonte, típicamente, no se
extiende más allá de los límites de la comunidad local o región"xl. De la misma manera,
en Java Central cada comunidad es un universo sociocultural separado xli. Ese
centralismo local es una forma de "ignorancia que desempeña funciones especificables
en la estructura y la acción social" xlii. Sirve para excluir las alternativas culturales,
loimitando los "incentivos en parte de los individuos del grupo en interacción social
para aprender las costumbres de sus vecinos, porque el aprendizaje es el más
importante problema psicológico de la aculturación" xliii. En Mesoamérica tal exclusión
de alternativas culturalesxliv es más fuerte en el área de las costumbres*, esos rasgos
relligiosos y sociales de la comunidad que --en los términos de éste artículo-- ayudan a
mantener su carácter cerrado y corporativo xlv . De modo similar, en Java, las
comunidades manifiestan una tendencia a:
..."preservar el equiliblrio previniendo y combatiendo toda desviación del modelo
tradicional".
..."cuando el aldeano busca contacto económico con la sociedad occidental, no
goza del apoyo de su comunidad. Muy por el contrario. Al hacerlo, el aldeano sale de
los límites de la comunidad, se aísla de ella, pierde su apoyo moral y se encuentra
librado a sus propios recursos" xlvi.
De tal modo, las comunidades campesinas de ambas áreas demuestran ciertas
semejanzas. Ambas conservan, en alguna medida, una jurisdicción comunal sobre la
tierra. Ambas restringen la pertenencia, mantienen un sistema religioso, refuerzan
mecanismos que aseguran la redistribución o destrucción del excedente de riquezas y
elevan barreras contra el ingreso de mercaderías e ideas generadas fuera de la
comunidadxlvii. Estas semejanzas también marcan sus diferencias respecto de otras
181-182). No he analizado estas semejanzas en este artículo porque creo que la organización de
comunidades corporativas cerradas puede coexistir con diversos tipos de familias y diferentes sistemas
de herencia, mientras que ellos no impliquen la pérdida de la tierra en favor de los forasteros. Por
ejemplo, éste es el caso, aun donde hubiera familias extensas o linajes, cuando solamente los hijos
heredan derechos sobre la tierra y la residencia, luego de su casamiento, es patrilocal.
xlviii Wolf, 1955, pp. 461-466.
xlix Roscoe, 1911, pp. 13 y 269.
l Véase Fei, 1953; Fried, 1953; Fukutake, 1951; Hu, 1948, p. 91; Wittfgel, 1935; Wittfogel, 1938; Yang,
pp. 132-142.
li Wolf, 1955: 462.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 105
individuales con sus habitantes. Como el azúcar podía rotarse con el arroz, esos
acuerdos especifiaban que el cultivo del azúcar por la empresa colonial podía ser
continuado por una producción de alimentos en esa misma tierra por parte de los
agricultores nativos, en un ciclo de rotación ordenado. De esta manera,
"... el cultivo del azúcar, del arroz y otros productos de la población son, por
decirlo así, coordinados en una empresa agrícola de gran escala cuyo control está
prácticamente en manos de la fábrica de azúcar" lxxi.
En los años anteriores a la Segunda Guerra Mundial, el área total de tierra
arrendada a las comunidades corporativas nativas no excedía de las 100,000 ha., o del
3% de la tierra irrigada para el arroz. En años de prosperidad debió de heber sido el
6%. Pero la producción de azúcar se concentró en Java Central cubriendo gran parte
de la superficie arablelxxii. En otra parte he comentado que una relación en cierto modo
simbiótica similar entre la comunidad corporativa de agricultores y la empresa colonial
podía encontrarse en Mesoamérica. Allí, aun las haciendas voraces llegaron a un punto
en su crecimiento en el que la absorción de las comunidades corporativas de
campesinos en las fincas ocasionó un esfuerzo demasiado grande sobre los
mecanismos de control a su disposición, por lo que establecieron relaciones
sistemáticas, útiles y beneficiosas, con las comunidades marginales lxxiii.
Dentro del sector nativo, las cargas administrativas en ambas áreas recayeron,
de tal manera, sobre la comunidad como un todo y sólo secundariamente sobre el
individuo. Ello fue especialmente cierto en el pago de los tributos y los servicios
laborales. En Java Central, las demandas sobre los dueños de tierras fue tan grande
"... que la propiedad de la tierra no fue ya un privilegio sino una carga que los
ocupantes trataban de compartir con otros... Nuevamente en muchas partes de Java la
responsabilidad de servir en las obras públicas se delegó, por costumbre, en los
propietarios de las tierras; y como los funcionarios deseaban aumentar el número de
manos disponibles para obras públicas y el pueblo quería distribuir y reducir la carga de
prestar servicios en tales obras, fue del interés tanto de los funcionarios como de los
dueños de las tierras que la ocupación de tierras se compartiera ampliamente. Esto
alentó la posesión comunal y extinguió las distinciones sociales hereditarias" lxxiv .
En Mesoamérica también los tributos y cargos laborales fueron impuestos a toda
la comunidad durante los siglos XVI y XVII. Sólo hacia los comienzos del siglo XVIII los
gravámenes se impusieron en forma individuallxxv .
El constante decrecimiento de la población indígena hasta la mitad del siglo XVII,
la huida de los indiaos para refugiarse en zonas remotas, su éxodo hacia la periferia
norte de Mesoamérica y el permanente establecimiento de empresas coloniales,
hicieron que se dejara el pago de los tributos fijos y de las prestaciones personales en
manos del resto de la población. Es razonable suponer que esta prestaciones
económicas apresuraron las tendencias hacia un mayor igualitarismo y nivelación, tanto
en Mesoamérica como en Java. Es posible que la desaparición de las distinciones de
lxxi Kolff, 1929: 111. Véase también Haar, 1948: 85; Kolff, 1929: 122-124; Pieters, 1951: 130; S'Jacob,
1951: 144-145.
lxxii Pieters, 1951: 131.
lxxiii Wolf, 1956.
lxxiv Furnivall, 1939: 140-141.
lxxv Furnivall, 1939: 140-141.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 109
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Miranda
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Moore
Oei
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Pozas
Redfield
Roscoe
Schriecke
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Supatmo
Tannenbaum
Tax
Tax
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Tumin
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LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 115
Eric R. Wolflxxviii
lxxvii La presente traducción es tomada de Eric Wolf: "Una tipología del campesinado latinoamericano",
Buenos Aires, Nueva Visión, 1977: 66-100. La traducción al español es de Mariano I. Garreta &
Guillermo Colombres Casado.
lxxviii Este artículo es un esfuerzo para contribuir a los fines y métodos del Proyecto de Investigación
sobre Regularidades Interculturales dirigido por Julian Steward en la Universidad de Illinois. El autor fue
investigador asociado en dicho Proyecto durante el periodo 1954-55. Agradece los comentarios y
sugerencias de Julian Steward, Robert Murphy y Charles Erasmus, como también a los amigos del
Proyecto que escucharon la lectura del primer bosquejo de este artículo en el Simposio sobre
Regularidades Interculturales realizado en la Universidad de Illinois el 16 de julio de 1955.
lxxix Para una definición de Mesoamérica en términos de área cultural, véase Kirchhoff, 1952, páginas
17-30. En este artículo se utiliza el término limitado a las comunidades de México y Guatemala que se
adaptan a la configuración que se examina
lxxx Java Central es una región de aldeas arroceras nucleadas con una tendencia a la tenencia comunal
de la tierra. Fue también el principal centro comercial del azúcar y de la producción de índigo, que
promovió la tenencia comunal y densas poblaciones. Java Occidental se caracteriza por l a cría de
ganado más que por la agricultura; Java Oriental está ocupada por pequeños pueblos esparcidos entre
arrozales de propiedad individual. (Furnivall, 1939, p. 386) El término Java Central se utiliza limitado a las
comunidades javanesas que se adaptan a la configuración que se examina.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 116
Alguna vez fue general la tenencia comunal directa en ambas áreas. En Java,
esta tenencia aún sobrevivía en un tercio de todas las comunidades en 1927, mientras
que en más de la sexta parte de todas las comunidades la tierra aún se distribuía
anualmente. Esta tierra consistía en los terrenos más valiosos de la comunidad: los
arrozales irrigadoslxxxi. Sin embargo, aun donde la tenencia comunal ha caducado, la
jurisdicción de la tierra por la comunidad continúa siendo importante. Las comunidades
pueden denegar o confirmar los derechos de los herederos que han dejado la aldea, a
heredar tierras de la misma lxxxii; pueden revocar los derechos y entregar la tierra a
algún otro, si un miembro abandona la comunidadlxxxiii; o pueden retomar la tierra
entregada si un miembro comete un crimenlxxxiv . Los forasteros pueden afincarse en
esa comunidad como aparceros, pero no pueden heredar o comprar la tierra que
trabajanlxxxv . Los miembros de la comunidad tienen prioridad en la compra de las tierras
de la aldealxxxvi y no tienen el derecho de comprometer la tierra en garantía lxxxvii.
Las estimaciones concernientes a la supervivencia de comunidades con
tenencia de tierras comunales en Mesoamérica varían grandemente. McBride estimó
que en México en 1854 existían cerca de 5.000 "corporaciones agrarias" en posesión
de 11,6 millones de hectáreas, pero que en 1923 las comunidades con tenencia de
tierras sobrevivieron sólo "en ciertas partes alejadas del país" lxxxviii. A su vez
Tannenbaum calculó que en 1910 cerca del 16% de todas las aldeas mexicanas y el
51% de la población rural de México vivía en "aldeas libres", es decir, que no estaban
incluidas en algún gran fundo lxxxix . Este cómputo fue criticado por Simpson, quien sigue
a Luis Cabrera al afirmar que "hacia el final del régimen de Díaz [en 1910]... el 90% de
las aldeas y ciudades del altiplano central no poseían tierras comunales de ninguna
clase"xc . Una estimación reciente considera que en 1910 el 41% de las comunidades
con retención de tierras aún mantenía la tenencia comunal aunque sobre una base
ilegalxci. En la actualidad hay una tendencia general a mantener la tenencia comunal en
los flancos de las colinas y forestas, pero permitiendo la propiedad privada en los
fondos de los valles y en las huertas xcii. Aun en tales casos, sin embargo, las
comunidades pueden, y así lo hacen, prohibir la venta de tierra como garantía de
préstamosxciii. En contraste con Java Central, las periódicas redistribuciones de tierra a
los miembros de la comunidad parecen ser algo raras en Mesoaméricaxciv .
xcv Haar, 1948, pp. 51, 71; Lekkerkerker, 1938, página 568; Guiteras, 1952, pp. 99-100; Redfield y Tax,
1952, p. 33.
xcvi Haar, 1948, p. 155; Redfield y Tax, 1952, p. 31.
xcvii S'Jacob, 1951, p. 140.
xcviii Haar, 1948, pp. 24, 28; Kattenburg, 1951, p. 16; Ploegsma, 1936, p. 4; Supatmo, 1943, p. 9.
xcix Haar, 1948, pp. 91-92.
c Ibíd.
ci Me gustaría conjeturar que un trabajo de campo más amplio puede invertir esta afirmación. Es posible,
por ejemplo, que el cementerio juegue un rol mucho más simbólico en la vida de Mesoamérica que lo
que realmente se supone. Los mazatecas del valle del Río Papaloapan tuvieron buen cuidado de
transferir los huesos de sus muertos de las viejas aldeas a las nuevas (Pozas, comunicación personal.)
Es probable que la fiesta anual de los difuntos haya tenido una función más comunal de lo que en
general se supone.
cii Cámara, 1952; Redfield y Tax, 1952, pp. 36-38.
ciii Boeke, 1953, p. 46
civ Geertz, 1956, pp. 138-140; Landon, 1949, pp. 156-158; Supatmo, 1943, p. 9.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 118
De tal manera, los excedentes de riqueza tienden más bien a ser desagotados
que orientados hacia la compra de nuevas mercaderíascx .
Es necesario además señalar que las comunidades corporativas cerradas de
ambas áreas están aisladas social y culturalmente de la sociedad mayor en la cual
existen. La naturaleza de este aislamiento se examinará más adelante. Dicho
aislamiento general de la comunidad campesina en relación con la sociedad mayor
está reforzado por las actitudes parroquiales y de centralismo local de la comunidad.
En Mesoamérica, cada comunidad tiende a mantener un sistema económico, social,
lingüístico y político-religioso relativamente autónomo, como también un conjunto de
costumbres y prácticas hasta cierto punto exclusivas cxi. Según las palabras de Gillin,
"el universo indio está espacialmente limitado y su horizonte, típicamente, no se
extiende más allá de los límites de la comunidad local o región" cxii. De la misma
manera, en Java Central cada comunidad es un universo sociocultural separado cxiii.
Ese centralismo local es una forma de "ignorancia que desempeña funciones
especificables en la estructura y la acción social"cxiv . Sirve para excluir las alternativas
culturales, loimitando los "incentivos en parte de los individuos del grupo en interacción
social para aprender las costumbres de sus vecinos, porque el aprendizaje es el más
importante problema psicológico de la aculturación"cxv . En Mesoamérica tal exclusión
de alternativas culturalescxvi es más fuerte en el área de las costumbres*, esos rasgos
relligiosos y sociales de la comunidad que --en los términos de éste artículo-- ayudan a
mantener su carácter cerrado y corporativocxvii. De modo similar, en Java, las
comunidades manifiestan una tendencia a:
..."preservar el equiliblrio previniendo y combatiendo toda desviación del modelo
tradicional".
..."cuando el aldeano busca contacto económico con la sociedad occidental, no
goza del apoyo de su comunidad. Muy por el contrario. Al hacerlo, el aldeano sale de
los límites de la comunidad, se aísla de ella, pierde su apoyo moral y se encuentra
librado a sus propios recursos" cxviii.
De tal modo, las comunidades campesinas de ambas áreas demuestran ciertas
semejanzas. Ambas conservan, en alguna medida, una jurisdicción comunal sobre la
tierra. Ambas restringen la pertenencia, mantienen un sistema religioso, refuerzan
mecanismos que aseguran la redistribución o destrucción del excedente de riquezas y
elevan barreras contra el ingreso de mercaderías e ideas generadas fuera de la
comunidadcxix . Estas semejanzas también marcan sus diferencias respecto de otras
181-182). No he analizado estas semejanzas en este artículo porque creo que la organización de
comunidades corporativas cerradas puede coexistir con diversos tipos de familias y diferentes sistemas
de herencia, mientras que ellos no impliquen la pérdida de la tierra en favor de los forasteros. Por
ejemplo, éste es el caso, aun donde hubiera familias extensas o linajes, cuando solamente los hijos
heredan derechos sobre la tierra y la residencia, luego de su casamiento, es patrilocal.
cxx Wolf, 1955, pp. 461-466.
cxxi Roscoe, 1911, pp. 13 y 269.
cxxii Véase Fei, 1953; Fried, 1953; Fukutake, 1951; Hu, 1948, p. 91; Wittfgel, 1935; Wittfogel, 1938; Yang,
pp. 132-142.
cxxiii Wolf, 1955: 462.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 121
individuales con sus habitantes. Como el azúcar podía rotarse con el arroz, esos
acuerdos especifiaban que el cultivo del azúcar por la empresa colonial podía ser
continuado por una producción de alimentos en esa misma tierra por parte de los
agricultores nativos, en un ciclo de rotación ordenado. De esta manera,
"... el cultivo del azúcar, del arroz y otros productos de la población son, por
decirlo así, coordinados en una empresa agrícola de gran escala cuyo control está
prácticamente en manos de la fábrica de azúcar" cxliii.
En los años anteriores a la Segunda Guerra Mundial, el área total de tierra
arrendada a las comunidades corporativas nativas no excedía de las 100,000 ha., o del
3% de la tierra irrigada para el arroz. En años de prosperidad debió de heber sido el
6%. Pero la producción de azúcar se concentró en Java Central cubriendo gran parte
de la superficie arablecxliv . En otra parte he comentado que una relación en cierto modo
simbiótica similar entre la comunidad corporativa de agricultores y la empresa colonial
podía encontrarse en Mesoamérica. Allí, aun las haciendas voraces llegaron a un punto
en su crecimiento en el que la absorción de las comunidades corporativas de
campesinos en las fincas ocasionó un esfuerzo demasiado grande sobre los
mecanismos de control a su disposición, por lo que establecieron relaciones
sistemáticas, útiles y beneficiosas, con las comunidades marginales cxlv .
Dentro del sector nativo, las cargas administrativas en ambas áreas recayeron,
de tal manera, sobre la comunidad como un todo y sólo secundariamente sobre el
individuo. Ello fue especialmente cierto en el pago de los tributos y los servicios
laborales. En Java Central, las demandas sobre los dueños de tierras fue tan grande
"... que la propiedad de la tierra no fue ya un privilegio sino una carga que los
ocupantes trataban de compartir con otros... Nuevamente en muchas partes de Java la
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propietarios de las tierras; y como los funcionarios deseaban aumentar el número de
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prestar servicios en tales obras, fue del interés tanto de los funcionarios como de los
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alentó la posesión comunal y extinguió las distinciones sociales hereditarias" cxlvi.
En Mesoamérica también los tributos y cargos laborales fueron impuestos a toda
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1951: 144-145.
cxliv Pieters, 1951: 131.
cxlv Wolf, 1956.
cxlvi Furnivall, 1939: 140-141.
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Manning Nash
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de Leif Korsbaek.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 132
entonces, todas las familias de la comunidad son calificadas de acuerdo con la edad, y
son evaluadas en cuanto a prestigio a través de la operación de la jerarquía. Llevar a
cabo los deberes u obligaciones asociados con los cargos de la jerarquía es la manera
como se conducen los asuntos públicos de la comunidad. Los trabajos en las tareas
cooperativas, tales como limpiar los cementerios o reparar los caminos, se hacen
basados en la acción de los principales a través de los jefes de la jerarquía. La justicia
es dispensada por el alcalde indio (asesor jurídico), de acuerdo con la interpretación
que se haga de la ley nacional, de acuerdo con la situación local. Las disputas entre
parientes, derechos de propiedad, facturas o cuentas sin pagar, así como alegatos por
difamación, son conciliados por medio de los oficiales de la jerarquía. La jerarquía es el
mecanismo para tabular la opinión comunitaria: además que a través de las sesiones
abiertas en las que se reunen los principales con los oficilaes de la jerarquía, se decide
sobre las actividades de la comunidad, así como los recursos comunales o particulares
a utilizar. Así es como los indios mantienen y regulan el orden público y establecen el
canal a través del cual se toman las decisiones de grupo.
Los aspectos religiosos o sagrados de la jerarquía relacionan la comunidad
entera con lo sobrenatural, a través de sus representantes. Para ocupar un puesto
religioso un individuo actua para la comunidad manteniendo sus relaciones con lo
sobrenatural, cuidando del templo de la iglesia y de la exactitud de las ceremonias de
los santos y del calendario religioso. La jerarquía organiza las fiestas comunitarias para
la celebración del santo patrón a través de cualquier día especial de culto que se marca
en el calendario ceremonial o religioso. La impersonalidad de la religión india parece
originarse en el hecho de que es una responsabilidad para los oficiales cuidar y guardar
la comunicación con lo sobrenatural, y esta no es una tarea de los individuos en
particular.
Además de las funciones descritas arriba, hay varias consecuencias de la
operación de la jerarquía que tienen cierta importancia política y que no se notan
facilmente, e inclusive algunas veces no son conocidas o no se intuyen enteramente
por los miembros de la comunidad. El funcionamiento de la jerarqiuía sirve como un
mecanismo nivelador en cuanto a la riqueza y como un canal para el control social de
los individuos. Utilizando los ingresos y los recursos de los individuos y de la
comunidad, la jerarquía impide que una familia acumule dinero o propiedades. Esta
canalización comunal de la riqueza personal, en conjunto con el sistema de herencia y
el bajo nivel tecnológico y las tierras marginales, evita que se desdarrolle una clase de
personas adineradas. Y aún las personas que son más ricas que sus vecinos tienen
que gastar sus riquezas en los oficios de la jerarquía, y en ocasiones gastan más que
el puro requisito de la recepción ritual del oficio. Los que son ricos según las normas
locales, no pueden gastar su riqueza para fines de manifestación personal y tampoco
pueden construir casas que sean abiertamente superiores a las habitaciones promedio.
Por supuesto que los ricos son capaces de pasar más rapidamente por las peldañas de
la jerarquía que los pobres, ya que se pueden permitir asumir sus oficios sin mayores
pausas. Así que los acomodados pueden convertirse en principales a una edad más
temprana que los menos adinerados, y por lo regular lo hacen. Pero normalmente la
jerarquía funciona de manera efectiva como un freno, asegurando que no se cristalice
una distinción de clases sociales y bloqueando la polarización dea riqueza; es un
mecanismo efectivo para mantener a la sociedad socialmente bastante homogenea y
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 135
jerarquía funcionaría como parte del partido político o se ignoraría a favor de personas
pertenecientes a un partido político. Los oficiales fueron elegidos para los oficios
políticos a pesar de su servicio anterior o su edad. Esta reformulación del papel de la
jerarquía causó conflictos dentro de la comunidad, girando alrededor de las tensiones
relacionadas con los mecanismos de elección, la participación voluntaria en los oficios
públicos y la separación de los oficios religiosos de los políticos. Se le pidió a la
población indígena, ahora percibida como una base de masas del gobierno, que
actuaran como individuos, que se dejaran reclutar para las organizaciones, que
participaran en desfiles, que votaran erquía causó conflictos dentro de la comunidad,
girando alrededor de las tensiones relacionadas con los mecanismos de elección, la
participación voluntaria en los oficios públicos y la separación de los oficios religiosos
de los políticos. Como ocupantes de los puestos superiores los jóvenes gobernaban de
acuerdo a los ideales del gobierno nacional más que de acuerdo a la costumbre local.
Las decisiones comunales fueron tomadas por la corporación municipal debidamente
constituída más que por los principales después de una consulta a la jerarquía.
Vieron la vida política como separada de la vida religiosa, y en consecuencia no
prestaron su apoyo político al reclutamiento de cofrades y tampoco participaron en la
instalación ritual de los alcaldes de las cofradías con ningún grado de regularidad.
Consideraban al sistema de cofradías como separado de las tareas del gobierno. Las
actividades políticas de los jóvenes del sindicato hicieron surgir una actividad política
entre los otros miembros del municipio. El PAR, principalmente compuesto por
campesinos y bajo los líderes locales de la Unión de los Campesinos, compitió en la
arena política con el PRG y el sindicato de la fábrica, y un pequeño grupo de personas
apoyadas por el PIACO. Después de una década de actividades políticas los oficios
superiores fueron definidos como abiertos a la competencia y dependientes del apoyo
popular más que a la edad y al servicio; los oficios políticos y religiosos ya no eran
entrelazados y las cofradías tuvieron que acudir a comités voluntarios para buscar
cofrades. Las decisiones fueron tomadas por oficiales elegidos más que por
principales, y los hombres raras veces sirvieron en los oficios inferiores antes de
alcanzar a los superiores. La definición del servicio a la comunidad había sido
convertida, dejó de tener un carácter de costumbre y obligatoriedad moral para adquirir
un carácter legal y voluntario. La mayoría de los indios de Cantel quedaron fuera de la
contienda política, con sólo 900 de los 3000 votantes potenciales a expresar su opinión
política. La comunidad estaba internamente dividida por la violación de los canales
tradicionales para la adquisición de prestigio y por las demandas opuestas de los
partidos y aún por la competencia entre las dos organizaciones del gobierno nacional
que surgió en Cantel.
La jerarquía civico-religiosa se transformó ampliamente por esta actividad
política, y pareció como un sistema de organización social que no podía integrar una
población dividida por lealtades en conflicto.
En otras comunidades la política nacional tuvo repercusiones tanto para los
indígenas como para los ladinos. En casi todos los lugares donde el gobierno nacional
tuvo éxito al implementar su política se desarrollaron facciones en la sociedad local. En
San Luis Jilotepeque los indios y los ladinos formaron grupos faccionales separados,
como hicieron también en Xenacoj y San Miguel Acatán. Este resultado cismático
parece ser relacionado con el cambio en la relación de super y subordinación entre
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 138
Frank Cancian
LA JERARQUIA CIVICO-RELIGIOSA
Los rasgos fundamentales de la jerarquía cívico-religiosa han sido resumido en
muchos lugares (Sol Tax, 1937:442-444, Manning Nash, 1958b:67, P.Carrasco,
1961:483). La jerarquía abarca un número de cargos que los hombres de la comunidad
cl Originalmente publicado en Handbook of Middle American Indians, Austin, University of Texas Press,
Vol. 6: 283-298. Traducción: Leif Korsbaek.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 140
asumen por un período de un año. Los cargos son ordenados de dos maneras:
primero, son organizados en niveles de servicio de manera que un hombre tiene que
servir en un cargo de primer nivel antes de ser eligible para uno de segundo nivel, etc.,
y segundo, la autoridad tiende a concentrarse en los niveles superiores, creando de
esta manera una jerarquía de autoridad al mismo tiempo que de servicio.
Frecuentemente se llama el sistema de "escalafón".
Los oficios individuales se llaman "cargos". Un hombre tiene normalmente lo que
se puede llamar una "carrera de cargos". Empieza con un cargo de nivel inferior,
regularmente antes de casarse, y con años de descanso separando los períodos de
servicio, desempeñará un número de cargos durante su vida. Los que logran pasar por
todos los niveles de la jerarquía se convierten en los ancianos, o "los principales", de la
comunidad. Normalmente son exentos de pagar impuestos y de obligaciones
comunitarias y ejercen considerable influencia sobre la toma de decisiones en la
comunidad.
La jerarqía normalmente incluye cargos tanto del lado cívico o político como del
religioso o ceremonial de la vida comunitaria. Como lo perciben normalmente los
antropólogos de la región el avance por la jerarquía incluye una alternación entre losd
lados cívico y religioso como un miembro de la comunidad asciende a través del
sistema. Caracteristicamente hay solamente uno o dos cargos en el nivel superior pero
muchos en los niveles inferiores dandole a la jerarquía el carácter de pirámide. Se
espera que todos los hombres de una comunidad participen en la jerarquía, por lo
menos en los cargos més bajos; se ejerce mucha presión sobre los que resisten. El
servicio no causa ninguna remuneración y puede implicar para el incumbente gastos
sustanciales.
En las comunidades con barrios u otras subdivisiones locales los oficiales se
seleccionan frecuentemente de una manera que los distribuye equitativamente entre
estas subdivisiones.
Este resumen es solamente una aproximación. En lo que respecta a los Altos
Occidentales de Guatemala señaló Sol Tax (1937:443) que "hay casi tantas
variaciones....como hay municipios". Los factores económicos y demográficos, las
acciones de los gobiernos de México y Guatemala, y muchos eventos que tenemos hoy
que relegar al occidente histórico han producido muchas variaciones sobre este patrón
En el texto que sigue se indica un número de fuentes que describen estas
variaciones. Las fuentes generales serán discutidas en el apéndice donde se
encuentran también las tablas de los rasgos pertinentes y su distribución sobre ocho
comunidades.
que se llaman "regidor" o "alcalde" (P.Carrasco, 1952:30). En México los nuevos cargos
civiles se llaman normalmente "presidente", "síndico", "regidor" y "alcalde" (juéz).
Algunas comunidades integran los nuevos oficiales totalmente en el antiguo sistema
jerárquico (C.Guiteras Holmes, 1951).
La distinción conceptual que hacen los antropólogos hace referencia a las
diferencias que se manifiestan en las obligaciones. Las obligaciones de los oficiales de
la jerarquía política son: (1) representar a la comunidad en relaciones con los ladinos
en el mundo exterior y (2) impartir justicia dentro de la comunidad. Los oficiales de la
jerarquía religiosa se encargan del cuidado de los santos de la iglesia católica, del
mantenimeiento de la iglesia y de la celebración de las fiestas de los santos. La
integración de las funciones políticas y religiosas es más estrecha en los cargos
superiores; los cargos inferiores son normalmente más especializados ó hacia el lado
civil ó hacia el lado religioso.
1. ALGUACIL.
Tipicamente al casarse o alcanzar la edad de 21 años un joven se convierte en
miembro de la comunidad de adultos definida como las personas que pagan impuesto.
Antes sirve por lo menos en un cargo del tipo de alguacil: como responsable de los
edificios públicos, mensajero para las autoridades superiores o policía. Cada
comunidad tiene muchos de estos cargos, las comunidades grandes tienen más. El
servicio se desempeña en grupos durante un año, normalmente hay pares de grupos
que se turnan entre semanas. A veces este servicio se considera como un tiempo sin
preocupaciones donde el joven "aprende a tomar". Normalmente no se relaciona
ningún gasto para el financiamiento de ceremonias con estos cargos. Sucede que
jóvenes que se han portado mal serán nombrados alguaciles como una medida de
corrección y castigo.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 142
2. MAYORDOMO.
Cuando ya se haya casado y fincado casa, un homre ya está eligible para los
cargos de mayordomo, que son casi por completo de carácter religioso. Implican el
patrocinio de fiestas y la responsabilidad de santos. Frecuentemente el incumbente
tiene en su hogar la imagen de un santo o algún otro objeto sagrado durante su período
de servicio y tiene la responsabilidad de que las velas y otras ofrendas se coloquen en
su altar. En algunas comunidades parte de sus obligaciones incluye la abstinencia
sexual antes de llevbar a cabo rituales importantes. Su oficio normalmente lleva
consigo gastos considerables para la bebida y la comida consumida por los demás
cargueros y los miembros de la comunidad durante las fiestas.
Normalmente hay varios niveles de estos cargos en la comunidad, así que se
espera que un hombre ocupe en su pasaje por la jerarquía una serie de estos puestos
de mayordomo. Tienen otros nombres alternativos, como capitán, pasionero, alfárez o
cofrade. El término cofrade se encuentra solamente en las comunidades que tienen
cofradías, un tipo de sodalidades dedicadas a los santos individuales. Normalmente
estas comunidades tienen una cofradía encargada del entierro de los muertos. Estas
cofradás pueden ser jerarquizadas y además los puestos individuales dentro de la
cofradía pueden ser jerarquizados. En su paso por la jerarquía un individua puede
ascender a través de los puestos individuales de su propia cofradía, o se puede mover
de una cofradía inferior a una superior. En otras comunidades los cargos de
mayordomos se encuentran jerarquizados individualmente y un hombre de la
comunidad tiene que asumir una mayordomía de cada nivel, según la costumbre del
lugar.
Aúnque el servicio en este tipo de cargos normalmente se inicia como muy
joven, a veces puede continuar hasta alcanzar una edad muy madura y hombres que
son ya casi ancianos en la comunidad pueden servir en los cargos superiores de
mayordomo. A veces el servicio en este tipo de cargos coincide temporalmente con
servicio en el tercer tipo de cargos.
3. REGIDOR.
Los cargos del tercer nivel (y del cuarto) por lo regular contienen tanto
obligaciones religiosas como políticas, necesariamente acomodandose a los
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 143
4. ALCALDE.
Los alcaldes son los jefes ejecutivos de la jerarquía político-religiosa. Donde sea
que no haya sido impuesto durante los últimos año algún otro tipo de gobierno, eso es
la principal autoridad que tiene a su disposición el gobierno ladino para comunicarse
con la población indígena, y dentro de la comunidad es la última instancia de apelación
en disputos internos. Frecuentemente nombran a otros cargueros, y normalmente
tienen ciertas responsabilidades para con los santos y supervisan las ceremonias de
toma de oficio de los nuevos cargueros y las transferencias de parafernalia que le
acompaña. En la mayoría de las comunidades hay uno o dos alcaldes; donde hay dos,
uno es primero y el otro segundo, el primero siendo la mayor autoridad. A veces se
espera que el alcalde sea en la comunidad el hombre bueno ejemplar e ideal. Tiende a
ser un indígena tradicional y conservador con un excelente record de cargos anteriores.
Tiende a ser también un hombre rico, ya que el gran número de cargos deben de
haberle causado grandes desembolsas.
5. PRINCIPAL.
Cuando un hombre ha pasado alcalde (o, a veces, un mayordomo muy elevado)
se convierte en principal, un anciano respetado de la comunidad. Parece que estos
hombres, debido a la virtud que se manifiesta en su servicio a la comunidad y su
abilidad para ascender en la jerarquía, representan el locus permanente de autoridad.
Todas las comunidades tienen sus alcaldes pasados que pueden ser llamados
"pasados" o "ancianos", o bien principales. Sin embargo, hay una distinción básica
entre las comunidades que poseen un grupo formal de principales, de un número
determinado y limitado y elegidos de entre los alcaldes pasados, y las comunidades
que tienen ungrupo informal de principales que son sencillamente ancianos con
experiencia política y propencia para la política dedicando su energía y tiempo a la
política de acuerdo a sus intereses, inclinaciones y abilidades. En Chimaltenango, por
ejemplo, hay cuatro principales del pueblo (Wagley, 1949:95) que constituyen el
consejo formal de ancianos y se distinguen de otros alcaldes pasados. Su
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 144
6. SACRISTAN.
Muchas comunidades poseen un sexto tipo de cargo, el de sacristán, que no
forma parte formalmente de la jerarquía pero sí se encuentra estrechamente
relacionado con ella. Los sacristanes son especialistas rituales relacionados con los
cargos de mayordomo, y por lo regular son cinco o menos. Pueden ser ayudantes de
un sacerdote residente o visitante. En muchas comunidades es una posición de por
vida que exente al individuo de la obligación de servir en la jerarquía regular. De esa
manera constituye una manera alternativa de servir para la persona que tiene
inclinaciones religiosas y no posee los recursos económicos o las cualidades
personales necesarios para desempeñarse en las alas religiosas y políticas de la
jearrquía.
El individuo y la jerarquía.
En la mayoría de las comunidades los cargos y los niveles que deben ser
pasados antes de llegar a ser alcalde no son estrioctamente definidos, a pesar de que
muchos etnógrafos mencionan que los informantes tienen una concepción de la carrera
ideal a través del sistema de cargos. Los individuos en ocasiones saltan niveles o
repiten niveles, como estos son definidos por la comunidad. Parece, sin embargo, que
la mayoría de los hombres quienes llegan a principales, pasan al menos por uno de los
cargos de los cuatro tipos ya mencionados. La rigidez del sistema puede variar con la
balance entre la población y los cargos disponibles así como la inclinación de los
individuos.
En mi opinión las características importantes de la jerarquía político-religiosa,
como ejemplificada en los tipos de cargos arriba definidos, son: servir a la comunidad
para todos al nivel más bajo (alguacil); servicio religioso de alto costo para aquellos
que deseen el respeto de sus seguidores y aspiren a ser lideres en la comunidad
(mayordomo); servicio en una posición administrativa de responsabilidad para aquellos
quienes han demostrado su compromiso con la comunidad y su valía para servir al
mayordomo (regidor), y finalmente servicio en una posición de última autoridad formal
para un limitado número de aquellos quienes se han desempeñado en oficios menores
(alcalde). Todas estas posiciones son por un año, hasta que el servicio como alcalde
abra el camino hacia el estatus de anciano. Por último, el puesto de sacristán ofrece
una alternativa para el individuo que no se sienta inclinado a competir en el sistema
jerárquico.
de la comida ritual. Más allá de la ayuda formal o informal de su esposa, cada oficial
tiene asistentes quienes recogen las flores, sirven la comida y sirven de mensajeros.
Esta gente puede ser del grupo familiar no cercano.
La familia nuclear es normalmente la unidad que se considera para el
reclutamiento para el sistema de cargos. Es decir que si un miembro de una famiulia
nuclear está desempeñando un cargo se considera que todos los demás miembros
están cumpliendo su deber de cargos y no son eligibles para otors cargos. Así que un
hijo está exento del servicio como alguacil si su padre ocupa actualmente una
mayordomía. El prestigio que uhombre adquiere a través de su servicio en la jerarquía
se extiende por lo regular a su esposa.
o (3) con fondos proporcionados individualmente por el poseedor cargo quien patrocina
la fiesta. El tercer método es el más importante en los tiempos modernos.
Los gastos a menudo representan una muy substancial inversión para el
patrocinador. Sol Tax (1953) muestra que el cargo más caro cuesta considerablemente
más de lo que un hombre podría ganar en su salario, de un año completo de trabajo.
Ralph Beals (1946:85) nota costosas que representan el sueldo de alrededor de 2 años
de trabajo. En Zinacantan (F.Cancian, 1965) el cargo más caro cuesta lo eauivalente al
sueldo de 10 años de trabajo. Guiteras Holmes (1961:58) registra que el cargo más
caro es relativo a los sueldos locales: "uno de los más bajos oficios religiosos...implica
un desembolso el cual es equivalente a...entre tres y cuatro años de salario diario de un
hombre, la posición más alta demanda que el pedrano gaste cuatro o cinco veces la
cantidad mencionada".
Esto es fácil verlo, porque mas etnografías reportan que las posiciones del cargo
son a menudo grandes cargos económicos, para quienes pasan por ellos.
En la mayoría de las comunidades, los más ricos toman los cargos más caros,
los hombres pasansolamente por los menos caros. Normalmente los cargos de alguacil
no lleva consigo gastos significativos (vease Sol Tax, 1953:179). De acuerdo a los
datos de Sol Tax y Guiteras Holmes, aún los cargos a nivel de mayordomo implican
gastos muy variados. Aparentemente los gastos de los cargos de regidor y alcalde son
más elevados en las comunidades tradicionales donde implican el patrocinio de fiestas
importantes, es decir donde implican fuertes obligaciones "religiosas".
Aparte de eso cualquier cargo, por supuesto, implica el gasto de mucho tiempo
que se podría dedicar a actividades económicas.
Como un todo el sistema de cargos, distinguiendolo de la carrera de un
individuo, puede representar también para la comunidad una carga real, ocupando una
parte considerable del excedente económico de la comunidad. Eso ha sido discutido
por Sol Tax (1937:443; 1952c:57 ss.) y muchos otros.
LA JERARQUIA Y LA COMUNIDAD.
Durante el estudio de la jerarquía político-religiosa y sus consecuencias sobre la
estructura social de la comunidad será preciso tener en mente tres factores: 1) que
virtualmente todos los hombres adultos en cierto grado participan, 2) que el servicio en
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 147
todos los puestos, con la sóla excepción de los más bajos, implica una inversión
económica, y 3) que el prestigio y las posiciones de liderazgo y respeto son adquiridas
a través del servicio en la jerarquía. La mayor parte de las interpretaciones de las
funciones o las consecuencias de la jerarquía son muy similares, y las posteriores se
basan explicitamente en las anteriormente publicadas (Sol Tax, 1953; Eric Wolf, 1955,
1957; Manning Nash, 1958a, 1958b; P.Carrasco, 1961). Manning Nash ha introducido
la distinción entre las funciones manifiestas y latentes de la jerarquía, es decir entre las
consecuencias intencionales y directas, por un lado y, por otro lado, las no
intencionadas.
Funciones manifiestas.
Las observaciones de Manning Nash de Cantel (1958a:100) nos proporciona
una declaración concisa:
"Desde el puento de vista público la jerarquía cumplía la función manifiesta de
cuidar el orden administrativo en la comunidad, asegurar protección policial, impartir
justicia, mantener la iglesia, hospedar a los santos, cumplir con las obligaciones de la
comunidad para con los poderes supernaturales asegurando que los días festivos
importantes se celebraran por una organización debidamente constituída, y
proporcionar el cuerpo de ancianos que conforman ahora el gobierno de la comunidad.
La jerarquía es la articulación entre la comunidad local y la nación, por un lado y,
por otro, entre la visión del mundo local y la iglesia católica. Las solicitudes y las
demandas del gobierno nacional de Guatemala se hacen llegar a las comunidades
indígenas a través de la jerarquía". También en otro lugar nos da Manning Nash un
excelente resumen de las funciones manifiestas de la jerarquía (1958b).
Funciones latentes.
La jerarquía patrocina las ceremonias que reunen a los habitantes de la
comunidad rituales compartidos. Eso es particularmente importante en comunidades
donde el patrón de asentamiento es disperso, ya que las gentes en muchas ocasiones
no se ven durante largos períodos (E.Z.Vogt, 1961).
La jerarquía permite la simbólica confirmación de "la fuerza y la integridad de la
estructura comunitaria ante los ojos de sus miembros" (E.Wolf, 1955b:458). Y permite
al individuo expresar su compromiso con la comunidad.
Proporciona también una definición clara de membresía de la comunidad. Nash
(1958b:68) dice que "el funcionamiento regular de la jerarquía civil-religiosa define los
límites y la membresía de la comunidad local. Una persona es un panajacheleño o un
maxeño solamente en cuanto sea eligible para y de hecho participe en la jerarquía.
Nash señala también (ibid:69) que la jerarquía sirve como "un canal para los
modos socialmente controlados de demostración personal" y "que es una herramienta
efectiva para indicar con claridad los caminos y los métodos para adquirir respeto e
influencia política en una comunidad".
Wolf ha enfatizado el rol de la "envidia institucionalizada" en cargos individuales
dentro del patrón tradicional de comportamiento en la comunidad corporativa. El miedo
a la brujería puede ser visto como inductor para participar en la jerarquía. Por otro lado,
la participación es una forma pública de declarar su buena fé para aquellos que han
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 148
acumulado mucha riqueza y que se podrían ver amenazados por la envidia de los
demás.
Dos otras interpretaciones de las consecuencias latentes son, en cieta medida,
incompatibles. La primera enfatiza la igualdad del estatus económico mediante el
funcionamiento de la jerarquía, es decir las consecuencias "niveladoras"; la segunda
enfatiza la separación de la población en un número de estatus sociales, es decir las
consecuencias "estratificadoras". Otros autores han subrayado la primera
interpretación y la tendencia hacia la homogeneización socio-económica en
comunidades tradicionales con jerarquía, pero en mi estudio de Zinacantán yó he
subrayado la segunda interpretación y el patrón de estratificación socio-económica. Las
dos posiciones tienden a invocar diferentes tipos de evidencia, aúnque los partidarios
de ambas prestan atención a los factores económicos tanto como a los sociales.
El complejo igualitario.
La interpretación de la jerarquía como un "mecanismo nivelador" dice que
"utilizando los ingresos y los recursos de los individuos y de la comunidad la jerarquía
prohibe que las familias individuales acumulen dinero o propiedad" (M.Nash, 1958b:69;
vease también Sol Tax, 1953:206; P.Carrasco, 1961:493). Esa opinión se basa en el
hecho de que los cargos representan para los individuos pesadas cargas económicas y
para "el bajo nivel absoluto de riqueza de la comunidad. Aún siendo relativamente
ricas, las principales familias solo se alejan un poco del límite de subsistencia. Tienen
un margen de seguridad muy estrecho y una racha de mala suerte (enfermedad,
alcoholismo, etc.) puede acabar con ellos. Además, nadie es lo bastante rico como
para establecer a sus descendientes" (Sol Tax, 1953:206).
Wolf (1955b:457) y Nash (1958b:69) especificamente ponen énfasis en el papel
que juegan la tecnología tradicional y las tierras marginales; Nash menciona un patrón
de herencia que tiende a fragmentar las tierras de la familia. Sol Tax nota que en
Panajachel el valor económico de las mujeres también se opone a la creación de
clases sociales basadas en la riqueza, ya que los hombres buscan mujeres que son
buenas trabajadoras más que de familias ricas; pero eso es un rasgo peculiar de esta
comunidad que no se encuentra en las otras (Sol Tax, 1953:206).
Dada la esencial pobreza de la comunidad, la jerarquía ayuda a mantener la
homogeneidad socio-económica. Además tanto Wolf (1955b:458) como Nash
(1958b:69) y Carrasco (1961:493) consideran a este efecto nivelador como un
importante factor de integración; y según su interpretación una diferenciación social y
económica en el seno de la comunidad, que la jerarquía mantiene a raya,
desmoronaría la estructura corporativa de la comunidad.
El segundo aspecto del complejo egalitario hace énfasis en lo social más que en
los factores económicos. Nash (1958a:68) es el partidario más comprometido de esta
posición (1958a:68): "Todas las familias se encuentran colocadas en una escala de
rangos, de acuerdo a la posición en la escalera que han alcanzado, y al mismo tiempo
ocupan una posición de respeto según los cargos pasados. Así que en cualquier
momento todas las familias de la comunidad se encuentran colocadas jerarquicamente
de acuerdo a su edad y al prestigio mediante el funcionamiento de la jerarquía".
Weitlaner & Hoogshagen (1960) han llamado los grupos de edad en la jerarquía
en Oaxaca "grados de edad". En relación con esta clasificación de edades, estan los
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 149
postulados de que todos los hombres adultos tendrán que pasar por la jerarquía y
convertirse en principales a una edad avanzada (Nash, 1958a:69), y que la jerarquía es
simplemente una manera de repartir la carga de servicio a la comunidad entre todos los
hombres de la comunidad (Carrasco, 1961:493). Sol Tax (1953:206) y Pedro Carrasco
(1961:484) mencionan que eso sucede en la realidad solamente en las comunidades
pequeñas. Tax y Nash observan que los ricos por lo regular alcanzan el estatus de
principal más pronto, ya que para ellos es más fácil sufragar los gastos necesarios para
la promoción en la jerarquía. En términos generales, sin embargo, la edad es
considerada como la variable independiente, el prestigio como la variable dependiente
y la jerarquía como el mecanismo que permite expresar la relación entre las dos.
El complejo de estratificacón.
El complejo de estratificación enfatiza la diferenciación social que surge como
resultado del funcionamiento de la jerarquía. No obstante que los autores que ponen
énfasis en el complejo egalitario reconocen también el complejo de estratificación,
aparentemente le dan a este menos importancia. En mi trabajo sobre Zinacantán
(Cancian, 1965) y en mi interpretación de la información etnográfica de otras
comunidades he concluido que el complejo de estratificación tiene más importancia
porque 1) la estructura formal de la jerarquía inevitablemente estratifica a las gentes y
2) tenemos ya a nuestra disposición una considerable documentación de la existencia
de una diferenciación económica dentro de las comunidades estudiadas.
Primero, como nota Carrasco (1961:483) la jerarquía tiene muchas posiciones
en las peldañas inferiores y pocas en las cúspeda. Sin tomar en cuenta otros factores,
la pirámide produce una diferenciación social ya que no todos los que participan
pueden llegar a servir en los puestos superiores. Cada año solamente un hombre
puede llegar a ocupar el puesto más alto como Primer Alcalde. Si la población es
pequeña este hombre representará un porcentaje más alto de los hombres adultos que
es el caso en una comunidad más grande. En consecuencia podemos decir que la
pequeña comunidad es menos estratificada ya que su grupo de alcaldes pasados será
menos exclusivo en comparación a la población total.
Hasta hace poco, en Zinacantán virtualmente cada hombre tuvo que ocupar uno
de los 34 puestos del primer nivel. En el segundo nivel hay solamente posiciones para
12 de estos 34 hombres, y en el tercer nivel hay solamente posiciones para 6 de los 12,
y el cuarto y último nivel no contiene más que el puesto del Primer Alcalde y dos
posiciones más (Cancian, 1965). Así que muchos entran el servicio pero pocos
alcanzan la cúspide. La diferenciación es inevitable.
En su repòrte de Panajachel, uno de los municipios indígenas más pequeñas
(con una población de alrededor de 800), Sol Tax escribe que "cada hombre puede
esperar ser alcalde, eventualmente" (1953:206). Dada la población de Panajachel (o
aún los datos del propiuo Sol Tax sobre la distribución según edad) es difícil aceptar
este postulado. Haciendo un cálculo aproximado en base a una longevidad promedio
de los indígenas de América Central, un hombre de cada 160 de la población alcanzará
cada año la edad de 45 años. Así que alrededor de cinco hombres cumplen cada año
45 años, y solamente uno de ellos puede ocupar el puesto de alcalde. Es probable que
no todos hayan servido en todos los cargos anteriores, de todos modos. Aún en una
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 150
La ladinización.
La ladinización de las comunidades indígenas en Mesoamérica es un proceso
que se está llevando a cabo desde hace mucho tiempo. Ruben Reina ha llegado a
sugerir que la mayor parte de los cambios que el observó en Chinautla pueden ser
sencillamente "el resultado de un proceso contínuo desde la conquista" (1960:101). Sin
embargo, parece que nuevos factores están acelerando el cambio. La expansión del
sistema de carreteras y de escuelas acerca a la población indígena a las culturas
nacionales de México y Guatemala. Las comunicaciones están mejorando
radicalmente. Las nuevas leyes que protegen a los indígenas de una buena parte de
las formas de explotación que ocurrían generalmente en el pasado sin ninguna duda
los inducen a circular más libremente en el ámbito ladino. En términos generales las
alternativas a la vida tradicional en la comunidad indígena se están multiplicando.
Yó pienso que el hecho de que los cargos políticos muy costosos constituyen un
rasgo esencial del sistema tradicional nos proporciona un muy alto potencial para la
disrupción. Mientras que a todos los miembros de una comunidad indígena ofrezcan
poca atracción, la jerarquía aparentamente constituye un modo altamente satisfactorio
para la conversión de excedente económico en posición social. Sin embargo, cuando
las normas se debilitan y el ambiente no indígena se hace menos hostil, los costos de
un cargo tienen que sumarse a la motivación individual para rechazar el sistema
tradicional.
Paul & Paul (1963) han descrito dos factores que socavaron la solidez del
sistema tradicional de cofradías en San Pedro de la Laguna. El éxito de los misioneros
protestantes redujo el número de hombres a la disposición para el servicio religioso. No
obstante lo que haya sido la tensión que les permitió a los protestantes entrada a la
comunidad, su éxito contribuyó todavía más a la división de la opinión pública sobre el
valor de las actividades reliogiosas tradicionales. Totalmente independientemente de
este factor, el llamado a servicio militar nacional otra vez redujo el número de hombres
dispuestos a participar. Los que regresaron del servicio militar pudieron razonar - aún
de acuerdo a las normas tradicionales - que ya habían cumplido con sus obligaciónes a
la comunidad y no deberían ser llamados a servir en la jerarquía.
Antiguas tendencias hacia la ladinización han, en su forma acelerada, debilitado
los lazos tradicionales a la vida indígena y, al mismo tiempo, el mundo no indígena se
ha hecho más atractivo al indígena. En esta situación las repelentes perspectivas
económicas del sistema de cargos tradicional han abierto todavía más la brecha por la
cual modos de vida alternativas podrían introducirse en la vida de un indígena.
Ya que la política gubernamental ha sido diferente en los dos países será considerada
por separado en lo siguiente. No obstante las diferencias en la acción política los
efectos han sido aproximadamente idénticos. Las alas política y religiosa de la jerarquía
se han separado y la manera tradicional de adquirir poder político, comprobando su
capacidad en el servicio religioso muy costoso, ha sido socavada.
Las acciones del gobierno nacional en Guatemala han sido discutido en un
simposio (R.N.Adams, 1957b). "Antes de 1936 los principales oficiales eran los jefes
políticos de departamentos (gobernadores) que eran nombrados por el presidente y
responsables de todos los municipios en sus respectivos departamentos" (ibid:4). El
jefe político controlaba la elección de los oficiales en los municipios pero
aparentemente, en comunidades con una población enteramente indígena, era posible
selaccionar a los candidatos para los cargos según las normas tradicionales mientras
los seleccionados fueran aceptados por el jefe político. Las comunidades indígenas
eran aisladas y el contacto con el sistema nacional de gobierno era lñimitado. Como lo
ha notado Charles Wagley en el caso de Chimaltenango, las gentes preferirían a un
hombre conservador con escasoso conocimientos del español ya que sólo podría tener
poco contacto con los ladinos (1949:96). De la misma manera comenta Ruth Bunzel
que el gobierno indígena de Chicgicastenango (antes de 1936) se mantenía
relativamente independiente de influencia ladina "mediante la selección para el puesto
de alcalde de un hombre que no hablaba español" (1952:174).
Bajo el sistema de intendente que fue introducido en 1935 un oficial nombrado,
normalmente un ladino de fuera de la comunidad, era el dirigente de cada municipio"
(R.N.Adams, 1957b:4). Hasta donde yo sepa este cambio en el gobierno no hizo
necesario ningún cambio de importancia en la jerarquía tradicional. Acercó más a la
comunidad al agente ladino en control pero permitió que los indígenas siguieran sus
modos tradicionales.
Los cambios importantes llegaron después de la revolución de 1944 cuando fué
abolido el sistema de intendente. R.N.Adams comenta al respecto: "Se restablecieron
presidentes municipales y consejos elegidos pero con la diferencia que se deseaba que
las elecciones fueran competitivas" (1957b:6). "Hacia este fin fueron promovidos los
partidos políticos". Los partidos políticos, igual que la religión protestante,
proporcionaron una oportunidad para la expresión formal de diferencias de opinión
dentro de la comunidad. Los elementos mal contentos con el antiguo sistema recibieron
desde fuera de la comunidad un apoyo abierto y entusiasta, y el antiguo sistema fue
socavado (vease los artículos en R.N.Adams, 1957b).
En México, no obstante el cambio fue menos agudo, se observaron muchos de
los mismos resultados. El estudio histórico de Pedro Carrasco de las comunidades
tarascas muestra los efectos de la política de la iglesia así como del estado desde la
conquista (1952b). Hace alrededor de 50 años que un nuevo sistema de oficios
políticos - consistiendo de presidente, síndico y regidores (ayuntamiento constitucional)
- sustituyó a los tradicionales alcaldes y regidores como oficiales superiores
(ayuntamiento regional). Ya que los nuevos oficios eran políticos, sin embargo, no
constituyeron una amenaza directa a la autoridad religiosa de los antiguos alcaldes y
regidores. Los antiguos oficios se podían mantener al lado de los nuevos, lo que no era
posible en las comunidades en Guatemala donde fue introducido un nuevo
procedimiento de elección para los antiguos oficios.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 155
económicos. En cuanto un cambio hacia los valores ladinos reduzca la disposición para
cometer un excedente de ingreso a la jerarquía o reduzca el número de personas
dispuestas a participar en el sistema tradicional trastorna el postulado balance de una
manera muy similar a la que causa un cambio directo en riqueza o tamaño de
población.
RESUMEN.
Este artículo describe la jerarquía civico-religiosa como la organización político-
religiosa característica en la comunidad indígena en Mesoamérica. Han sido
examinados la jerarquía tradicional y sus rasgos fundamentales, se han discutido las
interpretaciones de sus funciones en la comunidad y se ha recomendado una mayor
énfasis en sus consecuencias estratificadoras; finalmente se ha visto el colapso de la
jerarquía como el resultado de varios factores actuando simultaneamente: la acción
directa por parte de los gobiernos nacionales desmorona la combinación de servicio
religioso y político que caracteriza la jerarquía tradicional. Tanto la ladinización como
los factores demográficos y económicos amenazan los dos otros factores que son
esenciales para el sistema tradicional: la carga económica del servicio y la participación
por todos los miembros de la comunidad.
APÉNDICE.
Las generalizaciones en el texto se fundamentan en las siguientes fuentes para
los grupos indicados: Beals (1946) y Carrasco (1952b) para los tarascos; Beals (1945b)
para los Mixe, Parsons (1936) y De la Fuente (1949) para los zapotecos; Guiteras
Holmes (1961) y Cancian (1965) para los maya de México; Wagley (1949), Bunzel
(1952), Tax (1953), Manning Nash (1958a), y Rubén Reina (1960) para los maya de
Guatemala. Información valiosa se encuentra en Zingg (1938b) para los huicholes;
Leslie (1960a) para los zapoteca; Pozas (1959a) y Zabala Cubillas (1961) para los
maya mexicanos; Wisdom (1940), LaFarge (1947), Oakes (1951), y McArthur (1961)
para los maya de Guatemala. Los estudios de la jerarquía en muchas otras regiones no
incluyen información suficiente para apoyar o refutar estas generalizaciones.
En seguida se encuentran tabulados un número de rasgos importantes de ocho
comunidades.
En la tabulación X indica la presencia, O la ausencia de un rasgo determinado, si
va con mayúscula significa que una información clara en la monografía citada, mientras
que minúsculas indican que mi evaluación se basa en información ambígua, o que no
hay información que la fundamente en una situación donde el rasgo en cuestión casi
seguramente habría sido mencionado si hubiera estado presente. Un rubro en blanco
indica la ausencia de la información necesaria para una evaluación. En unos pocos
casos, la mayoría evidentes del ordenamiento de la lista, un rubro en blanco significa
que la "cuestión" es irrelevante.
La lista corresponde a la exposición en el texto del artículo.
Monografía Comunidad
A P. Carrasco, 1952b Tarasca (histórica)
B R. Beals, 1945b Ayutla
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 157
Rasgo Comunidad
A B C D E F G H
ALGUACIL
Primer servicio
antes de casarse X X X x X X X x
Intendente, mensa-
jero, policía X X X X X X X X
Servicio en grupo X X O X X X X X
Tiempo despreocupado X X x
Dos grupos X X O X X O X
Semanas alternantes X X O O X O X
Sin gastos sustanciales o x x X x x x
Nombrado por mala conducta X X
Cargos civiles separados
de cargos religiosos X X o O X X X
Dos tipos de alguaciles
civiles X X X O X X X
Cargo civil más bajo
arriba de religioso X X O O X
Todos los jóvenes par-
ticipan X x O X X X
Alguacil superior arriba
de mayordomos inferiores o O O O O X
MAYORDOMO
Primer servicio después
de casarse x x x X X x X X
100% religioso x x X X X X X X
Objetos sagrados en
la casa x X X X X X
Abstención sexual X X O X
Gastos consider. X X X X X X X X
Varios niveles X X X X X x X X
Cofradías X O O O O O X X
Ancianos pueden servir x X X X X X
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 158
Algunos después de
servicio de regidoro x X X X O X X
REGIDOR
Combina obligaciones
religiosas y
civiles X X X X x X x x
Hombres maduros x X X X X X
Ha pasado cargo de
mayordomo X X X X X x X X
Tareas administr. X X X X X X X x
Influencia sobre
nombramientos X X X X X X
Servicio una vez X x X O x x
ALCALDE
Principal lider
religioso x x o X x x X
Principal lider
civil x x x x O X X X
Contacto oficial
con mundo mestizo x x x O X X x
Última instancia in-
dígena de apelación x x O X X X
Principales poderes
de nombramiento o o x x X O O O
Tareas rituales X x X X X
Vigila instalaciones X x x X o X X
Uno de éllos X x x x O X O O
Hombres ricos X X X X X
PRINCIPAL
Pasado cargo alto X X x X X X X
Autoridad permanenteX X x O X X X
Grupo formal O x O X X o
Servicio por vida x X X
Se autoperpetuye x X X
Grupo informal X X X X X X X
Influencia sobre
nombramientos X o O X X X
SACRISTÁN
No miembro formal X X X X X X O
Especialista ritual x X x X O
Rel. con mayordomos o o X X o o
Son cinco o menos X X X X x O X
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 159
Asistan al sacerdote X x X X x X X
Cargo de larga duración X X x X x X O
No tienen que asumir
otros cargos X X x X X
Sin gastos sustanciales X x x X x X
RECLUTAMIENTO
Principalmente por
alcaldes o o x x X O O O
Principalmente por
principales X o o O X X X
Voluntario X o X o X o o o
Se espera que todos
sirvan X X X X X X X
La mayoría sirven X x x X X X X
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 160
Referencias:
R.N.Adams, 1957b
Gonzalo Aguirre Beltrán, 1953
R.Beals, 1945b, 1946
Bennett & Zingg, 1935
Bunzel, 1952
Cámara, 1952c
Frank Cancian, 1964, 1965
De la Fuente, 1949
Foster, 1960a
Guiteras Holmes, 1961
LaFarge, 1947
Leslie, 1960a
McArthur, 1961
Manning Nash, 1957b, 1958a, 1958b
Maud Oakes, 1951
Elsie Clews Parsons, 1936
Paul & Paul, 1963
Ricardo Pozas, 1959a
Rubén Reina, 1960
Sol Tax, 1937, 1952a, 1952c, 1953
United Nations, 1954, 1956
Alfonso Villa Rojas, 1945
Evon Z. Vogt, 1961, 1963
Charles Wagley, 1941, 1949
Weitlaner & Hoogshagen, 1960
Charles Wisdom, 1940
Eric Wolf, 1955b, 1957
Silvio Zabala Cubillas, 1961
Zingg, 1938b
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 161
Las flechas en la figura indican las tres rutas que llevan a la posición de regidor
decano.
Ruta 1.
1.1 Mayor de cabildo o de iglesia
1.2 Regidor de gastos
1.3 Alcalde de gastos
4 Mayordomía de San Francisco de Asís o del Santo Entierro de Cristo
5 Regidor decano
Ruta 2.
2.1 Escribano
2.2 Fiscal teniente
cli Originalmente publicado en la antología compilada por Ira R.Buckler & Hugo Nutini: "Game Theory in
the Behavioral Sciences", Pittsburg, 1969: 191-211. Traducción de Hector Manuel Díaz Pineda & Leif
Korsbaek.
clii La elaboración de este trabajo fue apoyada por una beca de la división de psicología social, la agencia
de investigación naval. Varios gastos relacionados con su elaboración fueron cubiertos mediante una
beca del Instituto de Estudios Latinoamericanos de la Universidad de Texas.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 162
Ruta 3.
3.1 Auxiliar
1.2 Regidor de gastos
1.3 Alcalde de gastos
4 Mayordomía de San Francisco de Asís o del Santo Entierro de Cristo
5 Regidor decano
Este enfoque nos presenta los siguientes problemas: ¿Cuáles son los criterios
significativos (es decir decisivos) que son procvesuados al tomar decisiones
culturalmente apropiadas de movilidad? ¿Cómo evaluan los que toman las decisiones,
es decir los huei tahtuani, estrategias alternativas? ¿Qué son los valores numéricos
asociados a las estrategias individuales en la evaluación de estrategias mixtas? ¿Se
utilizan umbrales numéricos en la evaluación de estrategias? Nos interesaría, por
ejemplo, determinar si existe una diferencia significativa en la movilidad futura dentro
del sistema ceremonial, entre el caso de un individuo que gasta el equivalente de $
4,000 en un cargo del segundo nivel y un individuo que gasta $ 3,000 o $ 5,000.
Nuestro interés por los umbrales numéricos deriva de los casos individuales del mismo
tipo que los que se muestran en la tabla número 1 (Buchler 1967).
FUNCIONES DE GRATIFICACION.
Este enfoque dirige nuestra atención hacia otros problemas de decisión que no
se pueden tratar en detalle en este trabajo, por ejemplo cambios temporales en las
funciones de gratificación.
En la teoría de los juegos, se indica, según Shubik (1964:13):
el conjunto de todas las posibles estrategias que pueden ser utilizadas por un
jugador dado, cuyo nombre es i, por el símbolo S. Eso es el conjunto de todo posible
plan de acción que el jugador número i puede tener, tomando en cuenta sus recursos,
los recursos de sus contrincantes, y las reglas del juego. Supongamos que este jugador
escige una estrategia específica que llamamos s,i de entre todas las estrategias que
están a su alcance. Supongamos que participan n jugadores. El resultado del juego
dependerá de la estrategia que cada una escoja. Para cada resultado del juego, cada
jugador tendrá una evaluación. Llamaremos la tabla que proporciona las evaluaciones
de un jugador pasra todos los resultados del juego su función de gratificación.
Denotamos la función de gratificación del jugador número i como Pi (s1, s2, s3,...., sn).
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 164
FIGURA 3
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 165
PROGRAMACION LINEAR.
Naylor y Byrne (1963: 18-19) definen el problema fundamental de la
programación linear como la optimización (maximización o minimización) de una
función objetiva de la siguiente forma:
donde
xj = la cantidad de la variable número j del interés del que toma las decisiones, donde
se consideran n variables: xj o es un 1 integral si y solamente si el individuo j obtiene un
cargo y x = 0 si eso no es el caso.
APLICACIONES
La aplicación de los métodos de programación linear al sistema de cargos en
Atempan nos puede ayudar a descubrir el criterio y los pesos relativos que se utilizan
en la selección de personas para los cargos de su jerarquía religiosa. Si logramos
cuantificar adecuadamente este criterio, puede mostrarse útil para fines de predicción.
Por lo que este modelo sería de gran relevancia para el estudio de similares procesos
en la antropología política.
El modelo que utilizaremos es el del problema de la asignación óptima utilizado
por Gale (1960: 133ff). En la terminología de Gale, el problema se puede formular
como el que enfrenta a la dirección de una fábrica al asignar m individuos I1, I2, I3, ....,
Im, a n tareas: J1, J2, J3,..., Jn. Designamos con qi,j el valor (en formulación numérica)
del individuo Ii para la tarea Jj. Se puede suponer que la dirección desea asignar los
individuos a las tareas de tal manera que se maximice su efectividad como medida
mediante los valores arriba citados.
Pongamos ahora X = (x11, x12,...., xln, x21, xmn), donde cada xij es 1 si Ii es
asignado a Ji, y es 0 si Ii no es asignado a Ji.
Si suponemos que (1) que ningún individuo puede ocupar más de una tarea y (2)
que ningún tarea es ocupada por más de un individuo, esos dos hechos se pueden
expresar mediante las siguientes restricciones:
independientemente de las selecciones para los demás niveles. Así que el problema de
la asignación óptima a una tarea dada ahora se encuentra disuelto en cinco problemas
separados de asignación óptima para tareas - uno a cada nivel de la jerarquía. Eso es
afortunado, ya que la jerarquía entera considerada como un sólo sistema requiere un
cómputo bastante más complejo que él que ahora enfrentamos.
Ahora podemos formular los problemas de optimización en los siguientes
términos generales: al nivel k de la jerarquía tenemos n cargos: J1, ...., Jn, cada uno de
los cuales será ocupado por una de las m personas que anteriormente han ocupado
cargos al nivel k - 1. Las calificaciones que posee el individuo Ii para ocupar el cargo Jj
se designa por un número integral no negativo, qij (más adelante discutiremos la
determinación de qij). Como antes, pongamos que xij = 1 si Ii es seleccionado para Jj;
en otro caso xij = 0.
Además suponemos que cada cargo será ocupado. Como ya se mencionó, por
lo regular hay más solicitantes que cargos. Así que las restricciones (1) y (2) se pueden
escribir de la siguiente manera:
Ya que ya establecimos valores para Q = (qij), la solución del problema se
convierte en una solución mecánica (y extremadamente aburrida), y el problema crítico
será él de asignarles valores numéricos a cada uno de los qij. Para hacer eso tenemos
que buscar los criterios que los huei tahtuani utilizan al tomar sus decisiones para la
selección de personas. Luego tenemos que decidir cuál es el peso relativo de estos
criterios y así combinarlos conformando un número para cada uno (i,j).
Podemos simplificar todavía más el problema, si suponemos que un individuo Ii
tenga la misma calificación para cada cargo para él que sea considerado. De esa
manera tendríamos ahora que
___m!______ (4)
n! (m - n)!
I2 54 4 (10) 49 (0) 64
I3 41 3 (10) 46 (0) 51
I4 37 2 (5) 44 (*) 0
I5 45 4 (10) 48 (0) 55
I6 50 1 (*) 47 (0) 0
I7 47 5 (0) 51 (*) 0
I8 51 5 (0) 52 (*) 0
I9 34 3 (10) 47 (0) 44
I10 58 2 (5) 50 (0) 63
* Véase el texto.
DIMENSION KUAL (30), IGETZ (20), IGOT (20), ITIME (30), IAGE (30), ISPENT
(30)
COMMON KUAL IGETZ, IGETZ, ITIME, IAGE, ISPENT, IGOT, M, ITIMX, ITIMN,
IAGEMX, IAGEM, N, KWATE
1 FORMAT (1514)
READ 1, M, ITIMX, ITIMN, N, IAGEMX, IAGEMN, KWATE
READ 1, (IGOT (I), I = 1, N)
READ (ITIME(I), IAGE(I), ISPENT(I), I= 1,M)
15 CALL SUBROUTINE WEIGHT
CALL SUBROUTINE ASSIGN
CALL SUBROUTINE MATCH
IF (KWATE - 30) 15, 15, 20
20 KKK = 0
END
SUBROUTINE WEIGHT.
Esta subrutina sopesa los criterios y calcula las calificaciones (véase figura 5).
SUBROUTINE WEIGHT
COMMON KUAL, IGETZ, ITIME, IAGE, ISPENT, IGOT, M, ITIMX, ITIMN,
N, IAGEMX, IAGEMN, KWATE
DO 10I = 1,M
IF (ITIMN - ITIME(I)) 1,1,5
1 IF (ITIME (I) - ITIMX) 2,2,5
2 IF (IAGEMN - IAGE (I)) 3,3,5
3 IF (IAGE(I) - IAGEMX) 4,4,5
4 KUAL (I) + KWATE
GO TO 10
5 KUAL (I) = 0
10 CONTINUE
RETURN
END
SUBROUTINE ASSIGN
COMMON KUAL, IGETZ, ITIME, IAGE, ISPENT, ICOT, M, ITIMX, ITIMN,
N, IAGEMX, IAGEMN, KWATE
DIMENSION K (30)
DO 10 I = 1,M
K(I) = KUAL(I)
10 CONTINUE
DO 20 I = 1,N
KK = IBIG (K,M,N)
IGETZ(I) = KK
K(KK) = 0
20 CONTINUE
RETURN
END
FUNCTION IBIG
DIMENSION K(1)
IBIG = 1
ITEMP = K(1)
J=2
DO 10 I = J,M
IF (K(I) - ITEMP) 10,10,5
5 IBIG = I
ITEMP = K(I)
10 CONTINUE
RETURN
END
Subrutina MATCH.
Esta subrutina asegura que la selección está de acuerdo con los datos
empíricos. Si eso no es el caso, regresa al programa principal (véase fig. 8).
SUBROUTINE MATCH
COMMON KUAL, IGETZ, ITIME, IAGE, ISPENT, IGOT, M, ITIMX, ITIMN,
N, IAGEMX, IAGEMN, KWATE
1 FORMAT (43 H &&&THE WEIGHT USED FOR THE ASSIGNMENT WAS
&&,I2)
DO 15I = 1,N
DO 10J = 1,N
IF (IGOT(I) - IGETZ(J)) 5,15,5
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 172
5 MISS = J
10 CONTINUE
IF (MISS - N) 15, 25, 15
15 CONTINUE
PRINT 1,KWATE
DO 20I = 1,N
K = IGETZ(I)
2 FORMAT (10X, 14, 4X, I4)
20 CONTINUE
GO TO 30
5 KWATE = KWATE + 5
IF (KWATE - 30) 30, 26, 26
26 PRINT 3
3 FORMAT (48 GO DIRECTLY TO JAIL, DO NOT COLLECT 200 DOLLARS)
30 KKK = 0
RETURN
END
Conclusión.
El programa plantea los importantes problemas de replicabilidad y de
predictabilidad. El criterio culturalmente relevante de movilidad que puede proponer el
etnógrafo puede ser contrapuesto facilmente a historias individuales de carrera en la
subrutina call/match (replicabilidad); y los criterios pueden ser reevaluados y
redefinidos o se pueden simular nuevos criterios para acercar relativamente los valores
de IGOT e IGETZ. Una vez que los criterios estén adecuadamente definidos el
programa puede ser de alguna utilidad para fines de predicción.
Nos hemos ocupado principalmente de la tarea de reducir las relaciones sociales
(movilidad individual, manipulación económica y política etc.) a procesos intelectuales
simulados, y en eso hemos seguido el camino metodológico propuesto por Levi-Strauss
(1962).
El lector interesado puede captar algunas de las relaciones que rigen entre la
teoría de los juegos, la teoría de grafos (Atkins & Curtis, Livingstone) y los métodos de
programación lineal que han sido presentados en este volumen consultando la
demostración de Luce & Raiffa (1957:408-23), utilizando el teorema de dualidad, que el
problema general de programación lineal se puede interpretar como un jmuego de
suma-zero entre dos personas, así como también la solución de Berghe (1962:71-85)
dentro del marco de la teoría de grafos de un problema clásico de programación lineal
(flujo máximo en una red de transporte).
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 173
Referencias:
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Buchler, I.R., 1967. La organización ceremonial de una aldea mexicana. América
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Cámara, F., 1952. Religious and Political Organization en Heritage of Conquest:
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Hymes, d. (ed.), 1965. The Use of Computers in Anthropology. The Hague:
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Levi-Strauss, C. 1962. La Pensée Sauvage. Paris: Librairie Plon.
Luce, R.D. & H.Raiffa. 1957. Games and Decisions: Introduc-tion and Critical
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LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 174
Billie R. DeWaltcliv
En los últimos veinte años han habido tres intentos diferentes de sintetizar el
gran cuerpo de información que se ha reunido en relación con los sistemas de cargo (o
jerarquías civil-religiosas) en Mesoamérica. Aunque todos han sido útiles, no han
podido lograr el estudio comparativo que puede hacerse en base a los datos existentes.
El esfuerzo de Cámara (1952) estuvo dirigido primordialmente a la descripción de las
características generales de las organizaciones políticas y religiosas "centrípetas"
(orientadas hacia la conservación de un orden socio-cultural establecido); y
"centrífugas" (heterogéneas, débilmente integradas y cambiantes). Aunque identificó
cierto número de concomitantes de estos tipos ideales, no intentó sistemáticamente la
determinación de porqué estas variaciones existían en las organizaciones político-
religiosas que consideró. El volumen de Adams (1957) fue una colección de estudios
sobre los efectos de los cambios políticos nacionales en Guatemala sobre las
comunidades de ese país. Fue un estudio de respuesta a un cambio específico y no
intentó registrar la persistencia o cambio del sistema de cargos debido a otros factores.
Cancian (1967) tiene una versión mucho más amplia, aunque su trabajo se dirigió
primordialmente a la descripción de organizaciones políticas y religiosas en las
comunidades mesoamericanas. Intentó identificar factores generales asociados con el
derrumbamiento de los sistemas de cargos. Desgraciadamente, su discusión se limitó a
ocho casos solamente.
En suma, aunque estos estudios han asentado cierto número de factores
asociados con cambios en las jerarquías civil-religiosas, pienso que, como hipótesis,
los factores que estos autores asientan no han sido probados adecuadamente. En las
páginas siguientes presentaré los resultados de un estudio comparativo de veintiseis
estudios de comunidad en el area cultural de Mesoamérica163. Las hipótesis de los tres
etudios mencionados, así como las hipótesis sugeridas en algunos de los estudios
individuales de comunidad, se peobarán para determinar los factores que han sido de
importancia general en el cambio de la estructura de sistemas de cargos en estas
comunidades.
SISTEMAS DE CARGOS.
Los rasgos esenciales del sistema de cargos son los siguientes: 1) entrañan
servicio voluntario sin remuneración (aunque en la mayoría de las comunidadesexisten
fuertes presiones sociales y/o físicas sobre los individuos para participar en el sistema);
2) los poseedores de cargos civiles o religiosos representan la mayoría de todas las
cliii Traducción del inglés de Demetrio Sodi. Versiones anteriores de este trabajo fueron leídas en la 70.
reunión anual de la American Anthropological Association en New York, en noviembre de 1971, y en las
reuniones de la American Ethnological Society en Montreal, en abril de 1972, com o finalista para el
Premio Elsie Clews Parsons que otorga esa organización. Estoy agradecido a Robert Bee, Scott Cook,
Kathleen DeWalt y Eleanor Swanson, por leer y comentar los primeros borradores del trabajo. debo
especial agradecimiento a Pertti J. Pelto por su ayuda y sugerencias invalorables.
cliv Universidad de Connecticut.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 175
MAPA
TABLA I
Estudios de comunidades usados como casos
...el progreso a través de la jerarquía entraña cierta alteración entre las facciones
civil y religiosa conforme el individuo desarrolla su carrera. Como característica, existen
solamente uno o dos cargos en la cima, muchos en el fondo, dando a la jerarquía un
aspecto piramidal. Se espera que todos los hombres de una comunidad sirvan en la
jerarquía, al menos en el nivel del fondo; la presión social sobre los que dudan es
grande. El servicio es sin pago y, en los cargos religiosos, pueden entrañar gastos
substanciales para el interesado (Cancian, 1965:284).
Tradicionalmente, el pase a través del sistema completo de jerarquía basado en
cargos ha sido el medio más importante para adquirir prestigio en la comunidad.
Las comunidades con jerarquías tradicionales son conocidas no solo por las
descripciones de los primeros etnógrafos, sino también por las descripciones de
algunas comunidades indígenas que han conservado estos sistemas relativamente
intactos hasta el tiempo presente. Aquellas comunidades que he considerado tienen
una "jerarquía tradicional" son aquellas en las que 1)el progreso a través de la jerarquía
todavía entrañacierta alteración entre los campos civil y religioso durantela carrera del
individuo; 2)existe gran presión social sobre todos los hombres para que sirvan en el
sistema, y 3)los poseedores de los cargos civiles y religiosos llevan a cabo los deberes
necesarios para la operación de la iglesia y de el gobierno local. Las comunidades
jerarquías tradicionales aparecen en la parte superior de la Tabla II.
Por otra parte, en muchas comunidades es fácil reconocer que los sistemas de
cargos ya no tienen varios de los rasgos principales señalados. Quiza las adaptaciones
más conservadoras han ocurrido en cierto número de comunidades que poseen lo que
llamaré una "jerarquía acéfala". Estas comunidades han mantenido cierto grado de
integración de los sistemas civil y religioso, aunque la alternatividad entre los dos
campos no pueda seguirse rígidamente más tiempo. El rasgo definitivo, sin embargo,
es el de que la jerarquía se debilita en la cima. Los cargos civiles más altos ya no
requieren el paso a través del resto del sistema como prerequisito. En su lugar, otras
habilidades, tales como el alfabetismo o la habilidad para hablar español se han vuelto
más importantes. En estos casos, el método para alcanzar estos altos puestos civiles
es por elección o por nombramiento gubernamental. Estos cambios han tenido lugar
por la intervención del estado y de los gobiernos nacionales. Las comunidades están
hechas para conformarse a un tipo uniforme de gobierno civil. Los líderes pilíticos más
altos ya no tienen obligaciones rituales. En los niveles más bajos, sin embargo, el
sistema de cargos funciona a la manera tradicional con una gran cantidad de ligas
entre las esferas civil y religiosa. En estas comunidades (que aparecen en la Tabla II),
una cantidad mínima de modificación ha ocurrido al conformar las normas impuestas
desde el exterior.
Los cambios más extensivos han ocurrido en otras comunidades, las cuales han
tenido que aceptar nuevos puestos, cargueros, o elecciones que les han sido
impuestos. A pesar de haber tenido que hacer estos cambios, los que con frecuencia
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 177
TABLA II
"Acéfalas"
Tolimán 3,975 <1/4 3 2 X 0
Jilotepeque 10,000 <1/3 2 2 0 0
Chenalho 5,500 <1/10 1 1 0 0
Yalalag 3,020 <1/10 3 2 X X
Amatenango 3,105 <1/10 3 4 X X
Medias 5,120 2.4 2.2
"Ornatos religiosos"
Zinacantán 7,650 <1/10 2 2 0 X
Contla 10,699 >2/10 4 4 X X
Atempán - - - - X X
Medias 9,175 3 3
"Más tradicional"
Medias 4,020 2.3 1.7
"Debilitadas"
Juquila 1,800 <1/10 2 1 0 0
Talea 2,400 <1/10 3 3 X 0
El Puente 1,150 <2/3 4 2 0 0
Cantel 8,277 <1/10 4 4 X 0b
Tepoztlán 3,517 >9/10 5 3 X 0
Tzintzuntzan 1,877 >9/10 5 3 X Xc
Tonalá 5,428 - 5 5 X 0
Canajo 2,200 >1/10 5 3 X 0
Medias 3,331 4.1d 3.0e
- = Insuficiente información
0 = Ausente
X = Presente
forma tradicional. En otra parte, Nash afirma que el campo civil de la jerarquía ya no
está integrado con el religioso, y que las cofradías han tenido problemas para encontrar
gente dispuesta a aceptar los cargos. Esto parecería indicar que ya no existe acceso
diferencial a los cargos.
c Para algunos nuevos ricos, participar en el sistema de cargos es una forma de
ganar prestigio en la esfera tradicional, así como en la esfera del consumo conspícuo
(Foster, 1967: 314-320).
d Haciendo uso de la comprobación (test) del significado de la diferencia de las
medias de dos muestras pequeñas no relacionadas, encontramos: T = 3.7, p<.01. La
diferencia entre las medias de los sistemas "más tradicionales" y "debilitados" es
significativa estadísticamente.
e El uso de la comprobación (test) del significado de la diferencia entre las medias
de dos muestras pequeñas, no relacionadas, encontramos que: T = 3.5, p<.01. La
diferencia entre las medias de los sistemas "más tradicionales" y "debilitados" es
significativa estadísticamente.
contacto que el etnólogo ha registrado para la comunidad. Una escala de 5 puntos fue
usada con el 5 indicando contacto intenso. Entre los indicadores que usé para codificar
el contacto estuvieron: grado de la morabilidad geográfica de la población; distancia de
una ciudad grande; ligas económicas y sociales con ciudades grandes; el número de
trabajadores a sueldo que salen de la comunidad a otras áreas del estado o de la
nación, y los tipos de facilidades de transporte con que cuenta la comunidad (por
ejemplo, todas las carreteras temporales, ferrocarril y líneas de autobuses). Haciendo
una comparación entre las medias de las comunidades "más tradicionales" en su
sistema de cargos (X=2.3) con el de las comunidades con "sistemas debilitados"
(X=4.1), parece que podemos concluir que el grado de contacto está asociado con la
declinación relativa de los sistemas de cargos. Aquellas comunidades que han tenido
más contacto tienden a poseer un sistema de cargos menos elaborado que otras
comunidades que han tenido menos contacto (cf. Tabla II).
Como otro indicador de la articulación en incremento con la nación, también he
analizado el "grado de especialización ocupacional" en una escala de 5 puntos en la
que el 5 indica un alto grado der especialización. Esta variable fue analizada en base a
las afirmaciones de los etnógrafos respecto al número de roles de trabajo
ocupacionales dentro de la comunidad. Una vez más, comparando las medidas de las
comunidades "más tradicionales" (X=1.7) con las de las comunidades de "sistemas
debilitados" (X=3.0), podemos ver que existe una especialización ocupacional mayor en
las comunidades que han hecho modificaciones mayores en sus sistemas de cargos
que en las comunidades con jerarquías más tradicionales.
La presencia o ausencia de sacerdotes de tiempo completo en la comunidad
puede tener consecuencias importantes para el mantenimiento de los rasgos
tradicionales de la comunidad. Acheson (1970) en su estudio de Cuanajo, Foster (l967)
en Tzintzuntzan, y Díaz (1970) en su estudio de Tonalá, todos han anotado que los
sacerdotes en estos pueblos estaban completamente opuestos a lo que ellos veían
como costumbres paganas. Por otra parte, otros pueblos (por ejemplo, Ayutla, Mitla y
Amatenango) parecen haber tenido secerdotes que interfirieron muy poco con la gente
que lleva a cabo sus deberes tradicionales. En la Tabla II vemos que en 6 de 8
comunidades en las que los sistemas de cargos han sufrido cambios considerables,
había un sacerdote presente de tiempo completo. Sin embargo, un sacerdote estaba
también presente en 9 de las 18 comunidades donde había tenido lugar pequeños
cambios. Por lo tanto, parece que los secerdotes , en una acción respecto al sistema
de cargos, han seguido los dictados de sus propias creencias (o a su buen juicio frente
a las fuertes convicciones locales) más que alguna política de la iglesia mayor. Por otra
parte Adams (1970:296) anota que, recientemente, los padres de Maryknoll en
Guatemala han tratado de interferir con los trabajos del sistema de fiesta con
resultados en cierto modo mixtos. May Díaz (1970:119) también señala que los clérigos
en todo el estado de Jalisco (en México) generalmente se oponen al sistema de cargos.
Es también muy especulativo predecir en qué época el sistema se enfrenta al reto de la
iglesia, tanto en Guatemala como en México, y más todavía el especular sobre los
resultados de tal enfrentamiento.
Se ha sugerido que la variable más importante que afecta a las jerarquías civil-
religiosas es el "grado de ladinización" de la comunidad (Cancian, 1967; Cámara,
1952). El argumento es que en tanto la gente se vuelva menos indígena y más ladina o
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 181
exhibición de la riqueza. Uno de los medios de hacer ésto, por parte de algunos nuevos
ricos, ha sido el tomar un cargo. Así, parece que aunque Tzintzuntzan es una
comunidad muy mestiza, el sistema de cargos puede estar experimentando una
especie de renacimiento. Este, sin embargo, probablemente continuará hasta que
aparezca otro medio alternativo de adquirir prestigio. Estas alternativas pueden existir
inclusive en el mundo religioso, puesto que, como señala Foster, las lápidas
sepulcrales, los "nacimientos" y las tarjetas de felicitación de año nuevo, están entre los
nuevos medios de expresar la posición que se tiene en la comunidad.
Aunque este trabajo se interesa principalmente en los elementos generales
responsables de los cambios en los sistemas de cargos, hay otros factores locales más
específicos que han tenido sus efectos. Un examen de las historias particulares de
varias comunidades identificaría muchos de éllos. Por ejemplo, Acheson (1970) ha
notado que la escasez de hombres adultos en Cuanajo durante la Revolución Mexicana
puede haber sido la causa importante del principio de la decadencia del sistema de
cargos en ese lugar. En otras comunidades, tales como Tzintzuntzan, el movimiento
bracero fue importante. Enterados de las costumbres de otros lugares más opulentes,
muchos rehusaron el servicio en los cargos al volver a sus comunidades. Nash (1958)
ha comprobado los efectos de una nueva fábrica en Cantel. El programa ejidal en
México, que distribuyó tierras entre los campesinos después de la revolución,
ciertamente debe haber tenido efectos puesto que creó otra jerarquía y organización
que tenía que conformarse con los lineamientos del gobierno nacional. La organización
del ejido proporcionó un medio alternativo de servicio a la comunidad.
DISCUSION.
Este estudio fue provocado principalmente por una reacción a lo que pienso es
una tendencia muy común en la literatura antropológica: la generalización a un universo
mucho más amplio en base a un sólo caso de estudio. Lo que yo he hecho en este
trabajo es tomar un cierto número de proposiciones que otras gentes han avanzado
respecto a cambios en los sistemas de cargos, y les he puesto a prueba usando un
gran número de casos. Mi examen de esta institución político-religiosa identificó una
amplia gama de variaciones en los tipos de sistemas de cargos descritos en la literatura
antropológica. La correlación de estos distintos tipos de sistemas con factores
hipotetizados por otros investigadores como responsables de cambios en sistemas,
encontró apoyo general para algunos de éllos, pero para otros nó. Específicamente se
encontró que el contacto con el mundo exterior y el incremento de la especialización
ocupacional están altamente asociados con los cambios de los sistemas de cargos. La
presencia de un sacerdote en la comunidad recibió un poco menos de apoyo. Se
encontró que muchas comunidades no habían sido afectadas por la presencia de un
sacerdote y habían logrado conservar muchos o todos los rasgos del sistema
tradicional. En otras comunidades, por otra parte, se encontró que los sacerdotes
efectivamente habían desalentado la continuación de las fiestas en forma tradicional.
En tanto que la ladinización (entérminos del incremento de la identificación de la gente
con este grupo étnico) no parece haber sido un concomitante o antecedente de
cambios en los sistemas de cargos en estas 26 comunidades; la falta de interés en la
literatura antropológica en las comunidades mestizas es notable. Se encontró que el
número de la población no está relacionado con cambios en estas instituciones.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 184
En tanto que ninguno de los factores discutidos puede de hecho ser importante
como causa de cambios en los sistemas de cargos en comunidades particulares (y en
la mayoría de los casos tenemos que aceptar la palabra de los etnógrafos de lo
ocurrido en la comunidad estudiado), encontramos apoyo solamente para unos cuantos
como factores generales de cambios en los sistemas de cargos a lo largo de
Mesoamérica. Tal como sucede en verdad en el cambio social, puede encontrarse que
ciertos factores generales operan en la mayoría de los casos. En otros necesitan
proponerse explicaciones más particulares, que tienen poca validez general, como
significativas en casos específicos. Sólo por medio de estudiso comparativos pueden
descubrirse los factores más generales (y por lo tanto importantes).
La importancia de los cambios en las jerarquías civil-religiosas de Mesoamérica
no puede ser subestimada. En el pasado, los campesinos que habitaban esta región
fueron descritos como viviendo en "comunidades cerradas y corporadas". Tales
comunidades ".... están aisladas social y culturalmente de la sociedad mayor dentro de
la que éllas existen" (Wolf, 1957: 5). La jerarquía civil-religiosa ha sido la institución
principalmente responsable de que se mantenga la separación de la comunidad
campesina del mundo exterior. Adams señaló que cuando empiezan a ocurrir los
cambios en este sistema "... la resistencia del indígena al cambio cultural empieza a
desintegrarse. Su aislamiento se ha ido" (1957: 48).
Aunque estaría de acuerdo con el uso del concepto "comunidad cerrada,
corporada" como descriptivo de un extremo de un contínuum que muestra (y mostró)
una amplia gama de diversificación, los datos que han sido presentados aquí señalan
no solamente el cambio de una institución, sino también la emergencia de
comunidades que habiendo sido relativamente más cerradas y corporadas, ahora son
más abiertas y receptivas al cambio. Este proceso, que podríamos llamar de
incorporación, tienen muchos aspectos distintos, algunos de los cuales fueron
discutidos antes. El contacto con el mundo exterior, el incremento en la especialización
ocupacional, el tener un sacerdote presente y la ladinización, todos implican entradas
de dinero del exterior a la comunidad local. El hecho de que se haya encontrado que
algunos de estos factores están más altamente asociados con otros con los cambios en
los sistemas de cargos, simplemente indica que algunas de estas influencias han sido
más prominentes y diseminadas que otras.
Los efectos de estas influencias externas probablemente no pronosticarán el fin
de estas fiestas pueblerinas tan llenas de colorido. Mientras que los sistemas de cargos
han perdido mucha de su importancia política e inclusive algo de su significado
religioso, otros aspectos de los sistemas no han sdio afectados visiblemente. La
oportunidad de utilizar parte del tiempo de una rutina diaria frecuentemente tediosa,
visitando amigos y vecinos, dando la bienvenida a las familias que han emigrado a las
ciudades, y otros aspectos sociales de las fiestas (cf. DeWalt, Bee & Pelto, 1973: 79),
probablemente continuará asegurando su existencia. Como lo han anotado, sin
embargo, los costos de estas fiestas expezarán sin duda a repartirse entre porciones
mayores de miembros de la comunidad, como ya ha sucedido en Tonalá, Tepoztlán, y
El Puente. La práctica de que el individuo soporte los gastos de los cargos y fiestas no
continuará. En algunas de las comunidades mayores podemos ver inclusive un
incremento en los intereses comerciales, incluído en el patrocinio de las fiestas.
Erasmus ha señalado que en Venezuela: "frecuentemente son los mercaderes locales
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 185
los que contribuyen más generosamente ... porque son bien conscientes de que una
fiesta atrae mucha gente de las granjas y pueblos vecinos, con un ánimo festivo de
derroche" (1967: 371). Así, en tanto que los roles políticos y aún religiosos pueden
decaer, los aspectos sociales y económicos indican un futuro seguro para los sistemas
de fiestas, aunque organizadas en forma diferente de la que ha existido en el pasado.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 186
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LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 187
EL PARADIGMA DE CARGOS
Leif Korsbaek
Después del nacimiento del sistema de cargos en el artículo de Sol Tax de 1937,
como concepto y como objeto de estudio de la antropología mesoamericana, los años
siguientes se emplearon principalmente en establecer con seguridad la forma del
sistema de cargos como lo observaron espontáneamente los etnógrafos en sus
comunidades de estudio.
La siguiente fecha importante en el proceso del estudio antropológico del
sistema de cargos será el artículo de Fernando Cámara Barbechano "Organización
religiosa y política en Mesoamérica" que fue presentado en Nueva York en 1949. Los Cámara Barbachano
años entre estas dos fechas - entre 1937 y 1949 - nos dieron "el típico sistema de
cargos" que marca el abrumador consenso que rige entre los antropólogos
mesoamericanos respecto de la forma del sistema de cargos "normal".
Como ya se ha mencionado, el artículo de Fernando Cámara Barbechano marca
el inicio de un nuevo proceso: el proceso de elaboración de un consenso alrededor de
la explicación del sistema de cargos. Lo que realmente presenciamos en los años
después de 1949 es la creación de una "ciencia normal" - con base en la introducción
del sistema de cargos como la institución principal en las comunidades indígenas - la
larga marcha hacia una situación "normal" donde el objeto ya está bien definido y
donde entonces se puede empezar a buscar una "explicación normal" de este objeto.
Tomando prestada la terminología de Thomas S. Kuhn, ya se puede empezar a
desarrollar un paradigma.
Es el objetivo de este trabajo seguir el proceso histórico de creación de este
paradigma antropológico - que, por razones más que obvias, he escogido llamar "el
paradigma de cargos" - precisar su forma y composición y, finalmente, comprobar su
influencia y posición dominante en la antropología mesoamericana. Primero caben
unos comentarios al respecto.
En primer lugar, es evidente que la inspiración proviene de la obra "La estructura
de las revoluciones científicas" de Thomas S. Kuhn: a él se deben las expresiones
"revolución científica", "paradigma" y también - término que podría ser relevante en el
contexto del estudio antropológico del sistema de cargos, "escándalo científico" clv . Y no
soy, de ninguna manera, el único que haya sido inspirado por el libro de Thomas Kuhn
(y de sus demás trabajos): "quizás no sea exagerado sostener que ese libro se
encuentra en el origen de una profunda revolución en la filosofía de las ciencias
anglosajonas" clvi.
Es mi opinión que el pensamiento de Thomas S. Kuhn es cristalino en su
claridad, la lógica de sus planteamientos es tan transparente que no es posible perder
el hilo. Eso es una suerte, ya que su terminología es de lo más confusa que se haya
visto. Como lo ha mostrado una investigadora discutiendo la obra de Thomas S.
clv Thomas S. Kuhn: "La estructura de las revoluciones científicas", FCE, 19.. La traducción al espanõl es
de la segunda edición, con un largo comentario de Thomas Kuhn.
clvi Rafael Farfán: "La repercusión de los conceptos de paradigma y ciencia normal de Thomas S. Kuhn
en las ciencias sociales", Sociológicas, Año 3, # 7-8, 1988: 45.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 190
de "paradigma" podemos formar dos grupos de científicos: por un lado los que aceptan
clvii Margaret Masterman: "La naturaleza de los paradigmas", en I.Lakatos & A.Musgrave, comps.: "La
crítica y el desarrollo del conocimiento", Grijalbo, Barcelona, 1975: 159-202; Margaret Masterman
desarrolla su crítica en las páginas 162-168.
clviii Prueba de la necesaria claridad se puede buscar en el efecto que el libro ha tenido sobre la
discusión entre los filósofos, los sociólogos y los historiadores de la ciencia, una discusión que se
desprende del volumen publicado por I.Lakatos & A.Musgrave: "La crítica y el desarrollo del
conocimiento", Grijalbo, 1975, de "Revoluciones científicas" de Ian Hacking, FCE, 1985, de Barry Barnes:
"Kuhn y las ciencias sociales", FCE, 1986, y del artículo de Rafael Farfán aquí citado, para mencionar
solamente los más accesibles.
clix Me parece que los trabajos de su profesor Alexandre Koyré, aunque comparten las defencias de la
obra de Thomas Kuhn, son más logrados: "Estudios galileanos", "Estudios de la historia del pensamiento
científico" y "Del mundo cerrado al universo infínito", todos Siglo XXI.
clx Como he señalado en "Chiapas, tierra de conquista: la triste e increible historia de la antropología en
Chiapas", en "Yucatan: Historia y Economía", Universidad de Yucatán, Nr. 27, 1981, en 1940 empieza en
serio la hegemonía de los EEUU en América Latina, en México termina el populismo de Lázaro
Cárdenas, y en la antropología salen los antropólogos Ricardo Pozas, Fernando Cámara y Calixta
Guiteras, formados por Sol Tax.
clxi Véase al respecto "La quiebra política de la antropología social en México, antología de una polémica,
I-II" de Carlos García Mora & Andrés Medina, UNAM, 1986.
clxii Como lo menciona Guillermo Bonfil:
clxiii Véase Andrés Medina: "Los grupos étnicos y los sistemas tradicionales de poder en México", Nueva
Antropología, # 20, 1984: 79-101.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 191
clxiv Véase Barry Barnes: "Thomas Kuhn y las ciencias sociales", FCE, 1983.
clxv Como creo que es necesario, se están encontrando caminos intermedios, como por ejemplo en Finn
Collin: "Theory and Understanding: A Critique of Interpretive Social Science", Blackwell, Oxford, 1985.
clxvi La tripatición aludida sigue como elemento ordenador currícular en la mayor part e de las escuelas de
antropología, y de por sí no tiene nada de malo, solamente que se tome como una medida práctica y
analítica y no como la naturaleza inherente de los problemas; siguen también saliendo excelentes libros
de texto organizados según este principio. En lo político conviene señalar "Power and its Disguises:
Anthropological Perspectives on Politics" (Pluto Press, Londres, 1994), de John Gledhill, y en lo
económico merece mención "Antropología económica" (CNCA/Alianza, 1991) de Stuart Plattner.
clxvii La monografía de Michael Kearney: "Los vientos de Ixtepeji -la visión del mundo de una comunidad
zapoteca", Instituto Indigenista Interamericano, México, 19.., pertenece muy claramente al dominio de lo
religioso, mientras que prácticamente toda la producción de Frank Cancian - "Economía y prestigio en
una comunidad maya", INI SEP-INI No. 50, 1976, "Political and Religious Organization", en "Handbook of
Middle American Indians, University of Texas Press, Austin, 1967, Vol. 6: 283-298, "New Patterns of
Stratification in the Zinacantan Cargo System", Journal of Anthropological Research, 1974: 164-173, "The
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cia del simposio "40 años de antropología en Chiapas", San Cristobal de las Casas, Chapas, 1982, "The
Decline of Community in Zinacantan. Economy, Public Life, and Social Stratification, 1960 -1987",
Stanford University Press, 1992 - pertenece al dominio de la antropología económica (la única excepción
en el caso suyo sería tal vez "Algunos aspectos de la organización social y religiosa de una sociedad
Maya", en E.Z. Vogt, ed.: "Los Zinacantecos", Instituto Nacional Indigenista, SEP-INI No. 7, 1966 :315--
326, que gira en torno a lo político y más bien da la impresión de ser un trabajo etsudiantil, cuyo objetivo
principal ha sido aprobar una materia), y la mayor parte de la producción de Henning Siverts va dirigida
hacía lo político: "Political Organization in a Tzeltal Community in Chiapas, Mexico", Alpha Kappa Deltan,
Vol.XXX No.1, 1960: 14-28, "On Politicas and Leadership in Highland Chiapas", en Evon Z.Vogt &
Alberto Rus L.,eds.: "Desarrollo Cultural de los Mayas", UNAM, 1964: 363-384, "The Cacique of Kancuk:
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"Oxchuk: Una tribu maya de México", Instituto Indigenista Interamericano, Ediciones Especiales No.52,
México, 1969, con algunas excepciones, como por ejemplo "Some Economi c Implications of Plural
Society", FOLK, Vol.7, Copenhague, 1965.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 192
clxxi Eric R. Wolf: "Types of Latin American Peasantry: A Preliminary Discussion", American
Anthropologist, Vol.57, 1955: 1452-1471, y "Closed Corporate Peasant Communities in Mesoamerica and
Central Java", Soutwestern Journal of Anthropology, Vol.13, 1957: 1-18 (los dos se encuentran en un
pequeño volumen de Nueva Visión, Buenos Aires); "Sons of the Shaking Earth", Universit y of Chicago
Press, 1959 (existe en epsañol bajo el título de "Pueblos y culturas de Mesoamérica", Ed. ERA, 1979).
clxxii Nash, Manning: "The Reaction of a Civil-Religious Hierarchy to a Factory in Guatemala", Human
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Community", Memoirs of the American Anthropological Association No. 87, 1955 (también bajo el mismo
título de University of Chicago Press, Phoenix Books, 1967); "Political Relations in Guatemala", Social
and Economic Studies, Vol. 7, Kingston, 1958:65-75, el último incluído en esta antología.
clxxiii Pedro Carrasco: "The Civil-Religious Hierarchy in Mesoamerican Communities: Pre-Spanish
Background and Colonial Development", American Anthropologist, Vol. 63, 1961: 483-497; en español
como "La jerarquía cívicorreligiosa en las comunidades de Mesoamérica: antecedentes precolombinos y
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clxxiv Cancian, Frank: "Political and Religious Organization", en "Handbook of Middle American Indians,
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clxxv Aguirre Beltrán, Gonzalo: "Regiones de refugio. El desarrollo de la comunidad y el proceso
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(Instituto Nacional Indigenista, Monografías de Antropología Social # 17, 1973).
clxxvi Evon Z. Vogt: "Some Aspects of Zinacantan Settlement Pattern and Ceremonial Organization",
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Religion", VI Congreso Internacional de las Ciencias Etnológicas y Antropológicas, Paris, 1964, Vol.II;
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and Chamula", Ethnology, Vol.12 No.2, 1973:99-113, publicado en español en Evon Z. Vogt: "Tortillas
para los dioses", FCE.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 194
"Notas sobre el homicidio entre los chamulas", de 1964, y "Le Travail saisonnier des
chamulas", de 1965clxxvii.
Con dos notables excepciones creo que ésta es una lista completa de los
trabajos comparativos que tratan el sistema de cargosclxxviii. La primera excepción es la
antología "Political Change in Guatemalan Indian Communities" de 1957. Como reza el
título se trata solamente del aspecto político de las comunidades y del sistema de
cargos y por esta razón no ha sido utilizado aquí. Sin embargo, me he permitido hacer
uso de la antología de R. N. Adams en unos pocos casos clxxix . La otra excepción es el
artículo "Cambios en los sistemas de cargos de Mesoamérica" de 1974 de Billy DeWalt,
que sí pretende tratar de una manera global todos los aspectos del sistema de cargos.
Es mi experiencia con este trabajo que no expresa con mucha claridad los aspectos
que se tratan aquí, y por eso me he permitido dejarlo fuera - como Billy DeWalt deja
fuera el sistema de cargos de Chichicastenango, cuando calcula el promedio de
número de habitantes en las comunidades con sistemas de cargos, y el de San Juan
Chamulaclxxx .
Habiendo de esta manera presentado con claridad las fuentes podemos
empezar a definir el paradigma de cargos.
Primero tenemos el aspecto económico del sistema de cargos. El paradigma de
cargos es, en lo que se refiere a este aspecto, claro y sencillo y se desprende con
facilidad
de la etiqueta que los antropólogos le han otorgado al sistema de cargos en su
calidad de institución económica: se conoce como "mecanismo nivelador" ("levelling Esto
evidentement
mechanism", clxxxi). e podría ser
claro aunque
Como regla general se supone que el sistema de cargos cumple la función de es verdad que
en la
redistribuir la riqueza producida en la comunidad entre sus miembros y de esta manera actualidad, el
sistema de
cargos, sobre
obstaculizar la acumulación de capital y la monopolización de la riqueza. La gran todo el
político, tiene
mayoría de los antropólogos que han estudiado el sistema de cargos expresan esta una función
mucho más
opinión, con muy diferentes grados de generalidad y de claridad y a diferentes niveles comunitaria,
de cohesión y
de abstracción.
búsqueda de
proyectos
comunes
Con mayor firmeza se expresa esta interpretación niveladora en los trabajos de
Eric Wolf y de Manning Nash. Eric Wolf escribe con su elegancia acostumbrada,
clxxvii Henri Favre: "Cambio y continuidad entre los mayas de México", Ed. siglo XXI, México, 1973;
"L'Integration socio-économique des communautés indiennes au Mexique", Tiers -Monde, Vol. 4 No. 15,
1963; "Quelques obstacles sociaux au developpment de l'economie traditionelle", Cahiers de Sociologie
Economique, No. 9, 1963;
Favre, Henri: "Notas sobre el homicidio entre los chamulas", Estudios de Cultura Maya, Vol. 4, 1964; "Le
travail saisonnier des Chamulas", Cahiers de l'Insitut des Hautes Etudes d'Amerique Latine No. 7, 1965.
clxxviii Para evitar malentendidos deseo subrayar que a raíz del período crítico han surgido otros trabajos
analíticos, los aquí discutidos pertenecen a la ortodoxia del estudio antropológico del sistema de cargos;
los posteriores serán tratados en un artículo aparte.
clxxix Ya he comentado la antología de R.N.Adams, de 1957, en la introducción a esta antología.
clxxx Por supuesto es una molestia, cuando úno se adhiere a la visión de "La pequeña comunidad" (al
estilo de Robert Redfield, "The Little Community", University of Uppsala, 1953), que San Juan Chamula
tiene, de acuerdo a la información de Robert Wasserstrom y de James Nations, una población total entre
100,000 y 150,000 personas.
clxxxi El concepto de "levelling mechanism" ("mecanismo nivelador") fue desarrollado en dos significativos
trabajos del mismo año: Eric Wolf: "The Peasants", Prentice Hall, 1966, y Manning Nash: "Primitive and
Peasant Economic Systems", Chandler, San Francisco, 1966.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 195
No todo
haciendo referencia al sistema de cargos en general: "este sistema religioso (tenía el
sistema
además otras funciones) aseguraba que se mantuviera el equilibrio económico de la de
cargos
es
comunidad. La participación de los gastos de orden religioso absorbía anualamente prepond
eranteme
cantidades considerables de mercancías y dinero. Al liquidar los excedentes, nte
religioso.
transforma a los hombres ricos en pobres en el sentido material, pero les da una
experiencia sagrada; y al nivelar las diferencias de riqueza impide el crecimiento de las
diferencias de clase basadas en la riqueza" clxxxii. Manning Nash se expresa en términos
muy similares en uno de los artículos más importantes en la literatura antropológica de Insisto en que
la región: "El funcionamiento del sistema de cargos sirve como mecanismo nivelador, eso se puede
discutir, había
que dejar de
en términos de riqueza, y como un canal para los modos socialmente controlados de pensar en las
comunidades
ostentación personal. Gastando los ingresos y los recursos de los individuos y de la como espacos
donde todas y
comunidad, la jerarquía impide que una familia cualquiera acumule mucho dinero o todos son
exactamente
iguales, aún ahí
mucha propiedad. Esta demanda comunitaria de la riqueza personal, en combinación hay diferencias,
como es el caso
con el sistema de herencia, el bajo nivel de tecnología y las tierras marginales prohibe de los
comuneros y los
que se desarrolle una clase de personas ricas" clxxxiii. avecindados.
La misma posición asume Gonzalo Aguirre Beltrán, con admirable claridad y sin
ambigüedad alguna: "La función redistributiva actúa como mecanismo nivelador al
canalizar el uso de los excedentes conforme a patrones de ostentación socialmente Esto si lo
pensamos en
controlados; obliga a las familias a consumir sus recursos y sus ingresos en actos
términos de las
comundiades que
estudió Aguirre
ceremoniales que benefician a la colectividad y, al hacerlo, aleja la posibilidad de que Beltrán, porque si
lo pensamos en
una familia pueda tener, de acumular dinero o propiedades con fines de formación de comunidades
donde el gasto se
capital. La riqueza, si se hereda o se adquiere, debe transformarse en prestigio por hace de manera
colectiva, por
medio de comités
medio de la redistribución: las familias que dilapidan más, que se desprenden más de fiestas por
ejemplo, la cosa
generosamente de cuanto poseen, demuestran con ello su valor moral y son cambia
con frecuencia. Sólo obliga a los ricos a convertir su excedente económico en estatus
social, y el instrumento de esta conversión es la jerarquía" clxxxvi.
Resumiendo su posición declara Henri Favre: "Al operar la conversión del
excedente en prestigio, la jerarquía comunitaria canaliza hacia una vía
económicamente improductiva una parte de las disponibilidades de la comunidad.
Impide la acumulación de capital en la medida en que esteriliza un ahorro que podría
invertirse en la compra de bienes o en la modernización de las técnicas de producción.
Al hacerlo así, inhibe el desarrollo de cualquier diferenciación económica que podría
conducir a una forma de estratificación social. Su función es justo mantener la
homogeneidad de la comunidad y la igualdad de sus miembros, pero a un nivel que
apenas sobrepasa el de la subsistencia" clxxxvii.
Fernando Cámara ha trasladado el aspecto económico del sistema de cargos al
terreno de la cultura y la ideología, colindante con los problemas psicológicos, en su
presentación del sistema de cargos y análisis mediante el "Folk-Urgan Continumm" de
Robert Redfield: "Teóricamente por lo menos el bien-estar de la comunidad tiende a ser
considerado como más importante que el bien-estar del individuo" clxxxviii. Eso es, según
Fernando Cámara, la situación en las comunidades que él llama "centrípetas", es decir
las comunidades donde se mantienen en vigor las tradiciones sociales y culturales y
donde encontramos al sistema de cargos en condición intacta y funcionalclxxxix .
La misma interpretación niveladora del sistema de cargos encontramos, a título
de ejemplo, en una temprana monografía de una comunidad indígena en Guatemala en
donde
Charles Wagley nota, de una manera un poco arrogante, que "no encontramos
en Chimaltenango el mismo abismo entre las gentes que entre Rockefeller y su
empleado"cxc , y Sol Tax declara acerca de la distribución de la tierra en una de las
comunidades que estudió en la región del Lago de Atitlán que "la tierra se encuentra
equitativamente distribuida, no hay grandes terratenientes ni minifundistas" cxci.
Pero la discusión más a fondo del carácter económico del sistema de cargos se
debe a Frank Cancian que, en una serie de trabajos monográficos y comparativos,
observó que la institución no impide en la realidad que surjan diferencias económicas,
sólo justifica la existencia de estas diferencias cxcii.
Es evidente, tan sólo de la mayor parte de los nombres del sistema de cargos,
que éste tiene un importante aspecto político - la jerarquía político-religiosa, la jerarquía
cívico-religiosa, la jerarquía de autoridad, el gobierno tradicional, etc. - y como declara
Henning Siverts: "Este sistema de cargos que en realidad constituye el gobierno
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LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 228
1
Las denominaciones aquí citadas son, respectivamente, de Waldemar R. Smith,
1981; Harry Tscopik, 1947; Pedro Carrasco, 1979; Frank Cancian, 1967; y
Fernando Cámara Barbachano, 1952. Las referencias son a la bibliografía al
final de la antología.
2
En Sol Tax, 1937. Romero y Castaños (1997) llamaron la atención al hecho de
que el antropólogo mexicano Noriega ya había descrito y analizado esta
institución unos años antes, de una manera que se puede clasificar como el
típico sistema de cargos (Noriega, 1922); sin embargo, el trabajo de Noriega
fue totalmente olvidado y no dejó huellas en la tradición antropológica de
estudio del sistema de cargos, así que el artículo de Sol Tax de 1937 sigue
siendo el inicio de esta tradición.
3
Según Frank Cancian, 1967:293.
4
Según Frank Cancian, 1967, Fernando Cámara Barbachano, 1952, entre otros.
5
Manning Nash, 1958.
6
Oliver La Farge, 1947; Oliver LaFarge & Douglas Byers, 1931; Charles Wagley,
1949; y Maud Oakes, 1951.
7
Betty Starr, 1949.
8
Judith Friedlander, 1981; y Michael Kearney, 1971.
9
Notablemente Henning Siverts, 1960, 1964, 1965, 1969.
10
Notablemente Frank Cancian, 1965, 1967.
11
Cancian, 1964, 1965.
12
Cámara Barbachano, 1952.
13
Wasserstrom, 1977, 1983; W. R. Smith, 1981.
14
Buchler & McKinlay, 1969.
15
Kearney, 1971.
16
Aguirre Beltrán, 1967.
17
Falla, 1969.
18
Köhler, 1975.
19
Chance & Taylor, 1987.
20
Price, 1974.
21
Carrasco, 1979.
22
Korsbaek, 1987.
23
Kuhn: La estructura de las revoluciones científicas “formas de gobierno
indígena”, Fondo de Cultura Económica, Breviario No.213, 1971; la traducción
al español es de la primera edición en inglés, de 1962, y no tiene el
importante prefacio de Thomas Kuhn a la segunda edición de 1971.
24
Es la intención iniciar, con la presentación de la presente antología, una
discusión acerca de la interpretación mexicana y la interpretación extranjera
del sistema de cargos, entre Andrés Medina y Leif Korsbaek.
25
Expresión de Leif Korsbaek: “La triste e increíble historia de la
antropología en chiapas”, en Yucatán: Historia y economía, Vol. 27, Mérida,
1981:24-40.
26
Sol Tax, en Evon Z. Vogt & Alberto Ruz Lhullier, (comps).: Desarrollo
cultural de los mayas, UNAM, 1964.
27
Sol Tax, 1937.
28
Pozas, 1981, Frank Cancian, 1965, Evon Z. Vogt, 1969, W.R. Holland, 1963,
Calixta Guiteras, Holmes, 1965, Fernando Cámara, 1952, Henning Siverts, 1965,
Esther Hermitte, 1970, Michael Salowesh, 1975, June Nash, 1975, Kazuyasu
Ochiai, 1985.
29
Por ejemplo Christian Deverre: La production de l'Indien. les relations de
production agraire dans l'etat de Chiapas (Mexique), París, Université René
Descartes, 1976, 2 tomos.
30
Smith, 1981, Wasserstrom, 1977, 1983, Favre, 1973, Dehouve, 1976.
31
Siverts, 1964, Alain Breton, 1984, Robert C. Harman, 1974.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 230
32
Cancian, 1965, Robert Wasserstrom, 1977.
33
En lo referente a la relación entre la antropología y la historia, véase
Korsbaek, 1992, 1995, y Chance & Taylor, 1987.
34
Zabalo Cubillas, 1961.
35
Vogt: “Algunos aspectos de patrones de poblami ento y de la organización
ceremonial en Zinacantán”, publicado en Evon Z. Vogt, comp.: Los
zinacantecos, INI, 1966.
36
He dividido el proceso de estudio antropológico del sistema de cargos en
cuatro períodos: el formativo, el del olvido freudiano, el del
reduscubrimiento etnográfico y el del estudio antropológico, más un período
crítico: Leif Korsbaek, 1995; otra división se encuentra en Chance & Taylor,
1987.
37
El estudio del nahualismo no ha sido abandonado por completo, véase por
ejemplo Hermitte, 1966 y Favre, 1973.
38
Comunicación verbal de Fernando Cámara.
39
El concepto de paradigma, que va estrechamente relacionado con él de
ciencia normal (y con escándalo científico) proviene evidentemente de Kuhn,
1971.
40
De los pocos trabajos sobre la cultura ladina en Chiapas es preciso
mencionar a Julian Pitt-Rivers: “Las palabras y los hechos”, en Norman
McQuown & Pitt-Rivers, comps. Op.cit., 1970, y de los pocos trabajos sobre el
sistema de cargos en comunidades no indígenas se puede mencionar a John
Swetnam, 1974; véase también a Lourdes Arizpe: “El exilio de la cultura
nacional”, Nexos 117, sep 1987:12-13.
41
Pedro Carrasco, 1961.
42
Henning Siverts, 1965.
43
Frank Cancian, 1965, 1967; Daniele Dehouve, 1974.
44
Los principales trabajos comparativos son exactamente los reunidos en esta antología: los trabajos de
Sol Tax, 1937; Eric Wolf, 1959; Manning Nash, 1958; Fernando Cámara, 1952; Frank Cancian, 1967 y
Billy DeWalt, 1974; a estos sería justo anexar el artículo de Pedro Carrasco aparecido en 1961 en
American Anthropologist. Los títulos se encuentran en la bibliografía que cierra esta antología.
45
Es notable que en México, donde manifiestamente existe una de las prácticas indigenistas más
acabados en el mundo desde por lo menos 1948, nunca se ha producido una defi nición coherente de
quién es el indígena. La clásica definición de Alfonso caso, de 1948 - que quién hable una lengua
indígena y se siente perteneciente a una comunidad indígena, es indígena - es evidentemente
insuficiente, o bien directamente falsa, ya que la mayor parte de los indígenas de México hoy viven en
las ciudades. La lengua como criterio de la calidad indígena tampoco es muy satisfactoria, ya que se ha
visto que un pueblo puede cambiar de lengua sin cambiar de costumbres o de posición global, com o por
ejemplo reporta G.M.Foster de Tzintzuntzan. En una plática en el Primer Encuentro de Estudiantes de
Antropología, organizado entre la UAM Iztapalapa y la ENAH en 1987, planteé que es un problema que
todas las definiciones vigentes del indígena son definiciones negativas, hacen referencia a las carencias
del indígena. Desde este ángulo, el problema es evidentemente un problema político.
46
El concepto de "comunidad cerrada corporativa de campesinos" fue cuñada por Eric Wolf en una serie
de artículos y libros alrededor de los 1950: 1955, 1957, 1959, 1966.
47
El area cultural de Mesoamérica tiene su origen en la obra de Alfred Kroeber:"Cultural and Natural
Areas of Native North America", University of California, 1939; sin embargo fue definida por vez prim era
en el artículo de Paul Kirchoff: "Mesoamérica como area cultural" de 1946, y ha sido discutida
posteriormente en Jaime Litvag King: "En torno al problema de la definición de Mesoamérica", Anales de
Antropología, UNAM, Volumen XII, 1975: 171-195 y Wigberto Jiménez Moreno: "Mesoamérica" en
Enciclopedia de México.
48
Fernando Cámara,1952.
49
John Swetnam, 1974.
50
G.M.Foster: "Empire's Children: The People of Tzintzuntzan", Smithsonian Institution, Institute of Social
Anthropology, Publication No. 6, Washington D.C., 1948.
51
Clifford Geertz: "La interpretación de las culturas", ed. GEDISA.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 231
52
Vease mi trabajo sobre el culturalismo: "El sistema de cargos, el culturalismo y la antropología
mesoamericana", Ponencia presentada en la Mesa Redonda de la Sociedad Mexicana de Antropología
en Mérida en octubre de 1989. Mi definición del culturalismo, adelantada ya en Leif Korsbaek, 1981,
debe claramente mucho a los trabajos de Andrés Medina, Henri Favre y Danielle Dehouve.
53
Un gran número de definiciones de "antropología" con firman ampliamente éso; como ejemplo se
puede convenientemente consultar la colección de definiciones de Evans -Pritchard, Malinowski,
Radcliffe-Brown, Piddington y Nadel que se encuentra citada en John Beattie: "Explanation and
Understanding in Social Anthropology", British Journal of Sociology, Vol. 10, 1959, y se puede agregar
las definiciones de la antropología cultural de Boas, Kroeber y Ruth Benedict.
54
Fernando Cámara, 1952.
55
Alfonso Villa Rojas, 1946, Zingg, 1982, Bennett & Zingg, 1935, Weitlaner & Hoogshagen, 1960.
56
Thomas Hinton, 1964.
57
Frank Cancian, 1967.
58
En este contexto es relevante señalar la importancia que tiene el sistema de cargos para la creación y
el mantenimiento de una identidad étnica y comunitaria, elemento que ha sido subrayado por Gonzalo
Aguirre Beltrán, 1973,
59
Véase al respecto F. Chevalier, 1944; Pedro Carrasco, 1961; Chance & Taylor, 1985.
60
Portal, 1996: 33.
61
Una observación hecha principalmente en los trabajos de la Escuela de Manchester, en particular en
J.C. Mitchell: "The Meaning of Misfortune for Urban Africans", en M. Fortes & M. Dieterlen, comps.:
"African Systems of Thought", Londres, 1965.
62
Las cofradías y hermandades urbanas abundan, pero la cuestión es si estas organizaciones religiosas
(que tienen también aspectos políticos, es cierto) llenan los requisitos para ser consideradas como
sistemas de cargos.
63
64
Éso se desprende con claridad de las declaraciones de Sol Tax, 1937, Fernando Cámara, 1952, Frank
Cancian, 1967, entre otras.
65
Waldemar R. Smith, 1981.
66
Gonzalo Aguirre Beltrán, 1973.
67
Harry Tschopik, 1947.
68
C.J. Erasmus, 1967.
69
Éso es el tónico de "Primitiva and Peasant Economic Systems" de Manning Nash, de 1966, del artículo
comparativo de Eric Wolf, de 1957, y también de una propuesta de Paul McDowell de fines de los 1970.
70
Artículo de E.R.Service en American Anthropologist, 1955.
71
en Leif Korsbaek: "Chiapas, tierra de conquista: la triste e increible historia de la antropología en
Chiapas", in "Yucatan: Historia y Economía", University of Yucatan, Nr. 27, 1981.
72
El "modelo genético-histórico" encuentra su expresión más clara en "Desarrollo cultural de los mayas",
antología compuesta por Evon Z. Vogt y Alberto Ruz Lhullier, UNAM, 1964 (segunda edición, 1971).
73
Leif Korsbaek, 1981, 1987, 1990.
74
Antonio García de León:
75
76
Así la casi totalidad de los artículos analíticos y comprativos cubren los sistemas de cargos en
Mesoamérica o una parte, frecuentemente México o Guatemala. Eso es el caso con Sol Tax, 1937,
Fernando Cámara, 1949, R.N.Adams, 1957, Manning Nash, 1958, 1971, Frank Cancian, 1967, Billy
DeWalt, 1974, Robert Wasserstrom & Jan Rus, 1981, Chance & Taylor, 1987. Las excepciones son
pocas, como ejemplos se pueden mencionar a C.J.Erasmus, 19.. y Eric Wolf, 1955, 1957.
77
Mesoamérica como area cultural tiene como antecedente el trabajo de Alfred Kroeber: "The Cultural
Areas of Native North America", de 1943; con precisión fue definida por Paul Kirchhoff en 1946 en su
"Mesoamérica, sus límites geográficos, composición étnica y carácteres culturales", Tlatoani, supl. No.3,
ENAH, 1967 (org.1946, en inglés 1952 en Sol Tax, ed.: "Heritage of Conquest"), ha sido discutido en
Wigberto Jiménez Moreno en "Mesoamérica", Enciclopedia de México, y en Jaime Litwag King: "En torno
al problema de la definición de Mesoamérica", en Anales de Antropología de la UNAM, Vol.XXII, 1975:
171-195. Véase las dos publicaciones recientes: "Una definición de Mesoamérica", Varios autores, IIA,
1994; y "la validez teórica del concepto Mesoamérica", Varios aut ores, INAH, 1990.
78
Billy DeWalt, 1974.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 232
79
Frank Cancian, 1967
80
La mayoría de estas denominaciones se encontrarán a lo largo de la presente antología, tal vez con la
excepción de la de "sistema de fiestas", utilizada entre otros por Waldemar R. Smith (1981), y "sistema
de vara", utilizada por Harry Tschopik (1947).
81
Los trabajos sintéticos y comparativos serán discutidos más adelante, cuando se introduce el
paradigma de cargos.
82
He planteado la posibilidad de comparar los sistemas de cargos en Chiapas & Guatemala, con los de
Michoacán y de la Costa Chica en Guerrero, en la ponencia sobre "la conquista espiritual de las
comunidades indígenas y el sistema de cargos", (Leif Korsbaek & Ana Hilda Ramírez, 1990).
83
Sol Tax, 1937.
84
Sol Tax, 1937.
85
Manning Nash, 1958.
86
Eric Wolf, 1955.
87
Eric Wolf, 1957.
88
El diagrama aquí esta tomado de Buchler & McKinlay, 1969, que lo han tomado de Frank Cancian,
1964, quién lo ha tomado de Charles Wagley, 1949.
89
La vara se encuentra en muchos contextos en el arte maya, en la forma del escetro de serpiente,
véase por ejemplo en Linda Schele & Mary Ellen Miller: "The Blood of Kings: Dynasty and Ritual in Maya
Art", Thames & Hudson, 1992.
90
Henning Siverts, 1969.
91
Henning Siverts, 1969.
92
Harry McArthur, 1961.
93
Frank Cancian, 1965.
94
Frank Cancian, 1964.
95
Fernando Cámara, 1966.
96
Frank Cancian, 1965.
97
Danielle Dehouve, 1979.
98
W.R.Holland, 1963.
99
Colby & Van den Berghe, 1969.
100
Robert Redfield, 1940.
101
Julio de la Fuente, 1949.
102
Julio de la Fuente, 1949.
103
Gregory Reck, 1984.
104
Frank Cancian, 1965.
105
June Nash, 1970.
106
Ralph E.Beals, 1946.
107
G.M.Foster, 1987.
108
Harry McArthur, 1961.
109
Ruth Bunzel, 1952.
110
Manning Nash, 1958.
111
Harry McArthuer, 1961.
112
Calixta Guiteras Holmes, 1962.
113
Frank Cancian, 1965.
114
Véase por ejemplo Frank Cancian, 1965.
115
Este rasgo encierra buena parte de la lógica del sistema de cargos: Se adquiere prestigio que se
convierte en poder político, según Pedro Carrasco, 1961, o la riqueza acumulada se convierte en
prestigio, según Eric Wolf, 1955, 1957.
116
June Nash, 1970.
117
Calixta Guiteras Holmes, 1965
118
Frank Cancian, 1965.
119
Vease Frank Cancian, 1967, donde discute el sistema de cargos en comunidades un número de
comunidades de Mesoamérica.
120
Italo Signorini, 1979.
121
M.Oettinger, 1979.
122
Manning Nash, 1958.
LEIF KORSBAEK, COMP.: INTRODUCCION AL SISTEMA DE CARGOS. ANTOLOGIA. 233
123
Sol Tax, 1953; vease la crítica de Frank Cancian, 1967.
124
June Nash, 1970.
125
June Nash, 1970.
126
Frank Cancian, 1965.
127
Frank Cancian, 1965.
128
June Nash, 1970.
129
Frank Cancian, 1965.
130
June Nash, 1970.
131
Ricardo Pozas, 1981.
132
W.R.Holland, 1961.
133
Julio de la Fuente, 1949.
134
Georgette Soustelle, 1958.
135
El concepto de consumo conspícuo ha sido tratado en los diferentes trabajos de Manning Nash y de
Eric Wolf dedicados a la antropología económica, mientras que los evolucionistas tradicionales con
frecuencia postularon la falta de racionalidad económica en los pueblos "primitivos".
136
Frank Cancian, 1965.
137
Evon Z.Vogt, 1969.
138
Henri Favre, 1973.
139
Henri Favre, 1965.
140
Henning Siverts, 1965.
141
Ira Buchler & Michael McKinlay, 1969.
142
Sol Tax, 1953.
143
Manning Nash, 1958.
144
G.M.Foster, 1987.
145
Calixta Guiteras Holmes, 1965.
146
Francois Lartigue, 1973.
147
Charles Wagley, 1949.
148
Manning Nash, 1958.
149
Julio de la Fuente, 1949.
150
June Nash, 1970.
151
Harry S. McArthur, 1961.
152
Acerca del ascenso en zig-zag hay una viva discusión entre los partidarios de una visión émica y los
de una visión ética, véase Leif Korsbaek, 1991.
153
Henning Siverts, 1969.
154
Julio de la Fuente, 1949.
155
W.R.Holland, 1961.
156
Este carácter de promoción en zig-zag ya subraya Sol Tax, 1937, pero en particular lo enfatiza
Manning Nash, 1958; véase la discusión en Leif Korsbaek, 1991.
157
Esta parte del sistema de cargos corresponde curiosamente a algunos rasgos de las tradicionales
comunidades de campesinos en Dinamarca e Inglaterra, como se revela en los oficios de Oldermand y
Elder.
158
Douglas Byers & Oliver LaFarge, 1931.
159
June Nash, 1970.
160
W.R. Holland, 1963.
161
Manning Nash, 1958.
162
Este típico sistema de cargos ha sido presentado en varias ocasiones: Leif Korsbaek, 1987, 1989,
1991.
163
....