El Abandono hacia Personas Mayores como tipo y delito

Diego Oscar Ortiz1

I.- Introducción

El termino abandono surge del saber general, el dejar de cuidar, desproteger,

exponer, desamparar, etc. Cuando la persona abandonada es la persona mayor,
debemos estudiar la especialidad del tema en torno al sujeto y la situación de
violencia que padece. La idea de este artículo es plantear este tema como tipo
de violencia y como delito.

II.- El abandono como tipo de violencia

a). La ubicación del tema dentro del tipo de violencia

En la actualidad podemos decir que hay tipos de violencia que están expresados
en las normas como por ejemplo la física, sexual, económica y/o simbólica y en
las intervenciones profesionales como la violencia ambiental y/o emocional.
Todos estos tipos deben ser receptados para las intervenciones institucionales.
Después podemos diferenciar en cuanto al sujeto de protección, el abandono
hacia una mujer, un niño, niña o adolescente, una persona que tenga algún
padecimiento mental o una persona mayor. El denominador común de todos
estos casos es que son personas en condición de vulnerabilidad susceptibles de
protección, las 100 Reglas de Brasilia sobre Acceso a justicia de las personas
en condición de vulnerabilidad así lo plantea.

La diferencia entre un abandono u otro radica en los aspectos conceptuales,

legales y/o procesales. Un ejemplo de esto es que la Convención Interamericana
de Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores aparece
recientemente en comparación con el marco normativo de niñez y adolescencia
o el de discapacidad. Y esto se relacionaría con que la sociedad comúnmente
no ve a la persona mayor como alguien vulnerable, tiende a darle un tratamiento
singular al tema y no como una cuestión atinente a todo un grupo o colectivo de

1
Abogado, Profesor Universitario en Ciencias Jurídicas, Especialista en Violencia Familiar, autor de
artículos y libros de su especialidad.
personas. Y esta invisibilidad se relaciona también con lo que entendemos por
abandono hacia una persona mayor. De hecho la Convención Interamericana
para Prevenir, sancionar o erradicar la violencia comúnmente denominada
Belem do Para menciona a las mujeres mayores dentro de la norma y la ley
26.485 posteriormente no lo hace en su individualidad. Por eso se habla de la
necesidad de reconocer las interseccionalidades, incluyendo a las mujeres
mayores.

Cuando uno estudia los tipos de violencia para detectar el abandono podemos
incluirlo dentro de un tipo expresado y/o leerlo de manera independiente.

Como venimos sosteniendo, la ley 26485 es para todas las mujeres, inclusive las
mujeres mayores. El art 5.2 plantea dentro del tipo de violencia psicológica: La
que causa daño emocional y disminución de la autoestima o perjudica y perturba
el pleno desarrollo personal o que busca degradar o controlar sus acciones,
comportamientos, creencias y decisiones, mediante… abandono...

La ley 5420 de CABA introduce el tema apuntado a estos sujetos de protección.

El art 3° de la ley entiende por abuso o maltrato a los Adultos Mayores a toda
acción u omisión que provoque un daño a los mismos, sea esta intencional o
consecuencia de un obrar negligente y que atente contra su bienestar general,
vulnerando derechos. Del artículo referido, hay tres elementos relevantes que
definen el maltrato:

1) La ocurrencia de una acción u omisión de manera intencional, lo que

implica la intención de perjudicar, de lesionar y/o de dañar a la persona
mayor.
2) Un obrar negligente, que supone una conducta, ya sea una acción u
omisión que expone y/o desprotege a la persona mayor por más que no
sea una intención directa hacerlo como por ejemplo la deja sin medicación
prescripta por un descuido, no provee de los alimentos necesarios,
incumple los cuidados médicos específicos, no asigna personal para el
cuidado personal, etc.
3) La conducta intencional o no debe ser atentatoria contra el bienestar
general y/o la integridad psicofísica de la persona mayor. Si entendemos
 a la violencia, como cualquier conducta, ya sea una acción u omisión que
afecta la integridad de las personas, entonces la omisión de la cuidados
necesarios por parte de los responsables (descendientes) a las personas
mayores (ascendientes) es un acto de violencia. Por ende pasible de
darse cualquier tipo, entre ellos la económica.

En un fallo2 se resuelve que corresponde hacer lugar, parcialmente, a un pedido

de disminución de cuota alimentaria formulado por una abuela paterna que está
jubilada, y no puede generar ingresos adicionales, toda vez que en estos casos,
hay que buscar una solución jurídica que permita equilibrar los dos intereses en
juego: por una parte, los derechos alimentarios de la nieta y, por la otra, los de
la abuela, en su calidad de adulta mayor, que también requiere una protección
especial.

El art 5 inc. h) de la ley plantea dentro de los tipos de violencia al abandono y

dice que tiene lugar no solo en los supuestos contemplados por la legislación
penal, tipificados en el delito de Abandono de Persona, sino que también abarca
situaciones derivadas de Negligencia, consistente en la dejadez, intencional
(activo) o no intencional (pasivo) de las obligaciones sobre la aportación de
elementos básicos y esenciales para la vida de la persona cuidada. Un medidor
de la necesidad de garantizar los derechos alimentarios de una persona mayor
es la vulnerabilidad. La Regla 6 de Brasilia sobre Acceso a Justicia menciona a
las personas mayores como sujetos vulnerables.

El artículo aludido tiene un concepto amplio de lo que se entiende por abandono,

no circunscribiéndose exclusivamente a la órbita penal, sino a diferentes tipos de
situaciones. Menciona algunos términos interesantes que serían abandono (por
más que no configuren el delito referido):

1) La existencia de situaciones derivadas de negligencia como termino

general que abarca algunos ejemplos como:

2
G., M. N. y otro s/ solicita homologación, 24/11/20, Juzgado de Familia 2DA Nominación. Córdoba, Id
SAIJ: FA20160079, http://www.saij.gob.ar/FA20160079.
 2) La dejadez intencional, en donde la inacción se hace con voluntad de
desproveer a la persona de las condiciones indispensables para llevar a
cabo una vida digna.
3) La dejadez no intencional, se refiere a que la omisión de cuidados y/o
cumplimiento de obligaciones no se realiza teniendo en miras el daño sino
por simple descuido.

En un fallo3, se fija una cuota de alimentos que el demandado debe abonar a su

progenitora considerando la avanzada edad de ésta (art. 537 y 538 CCivCom.),
su estado de salud y el hecho de que no han arribado a una solución en lo que
respecta a la partición de los inmuebles que componen el acervo hereditario de
la sucesión de quien fuera padre y marido de ambos, respectivamente, sin
perjuicio de considerar, a los fines de la fijación del monto, que la reclamante
percibe una pensión en moneda extranjera que podría llegar a cubrir los gastos
liquidados en la demanda, pues se presume -sin duda- que sus necesidades se
han visto incrementadas en la medida en que ha existido un aumento del costo
de la vida. En el caso, es un hecho no controvertido que la actora tiene 94 años
de edad y que su estado de salud -tal como surge de la pericia médica obrante
a fs.477- evidentemente es un factor limitante.

El art 9 de la Convención Interamericana de Protección de los Derechos

Humanos de las Personas Mayores titulado Derecho a la seguridad y a una vida
sin ningún tipo de violencia, plantea que la violencia contra la persona mayor
comprende, entre otros, distintos tipos de abuso, al…psicológico…y toda forma
de abandono o negligencia que tenga lugar dentro o fuera del ámbito familiar o
unidad doméstica o que sea perpetrado o tolerado por el Estado o sus agentes
dondequiera que ocurra. La Convención recurre a un concepto amplio de lo que
se entiende por abandono y lo separa de la negligencia, entendiéndolo a este
como abusivo, intencional y con finalidad de perjudicar.

III. El abandono como delito

3
B. D. C., M. R. c/ C. C. A. y otro s/ alimentos, Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil Sala H, 11-
jul-2019, MJ-JU-M-120655-AR | MJJ120655 | MJJ120655.
a) La ubicación del tema dentro del delito

El concepto de abandono también puede ser analizado desde el derecho penal

con sus propios elementos y/o presupuestos para configurarlo. Sin embargo la
tipicidad del delito no es óbice para analizarlo conforme la temática. El art 106
del Código Penal, plantea dentro de los Delitos contra las personas la figura del
Abandono, sostiene que: El que pusiere en peligro la vida o la salud de otro, sea
colocándolo en situación de desamparo, sea abandonando a su suerte a una
persona incapaz de valerse y a la que deba mantener o cuidar o a la que el
mismo autor haya incapacitado, será reprimido con prisión de 2 a 6 años. La
pena será de reclusión o prisión de 3 a 10 años, si a consecuencia del abandono
resultare grave daño en el cuerpo o en la salud de la víctima. Si ocurriere la
muerte, la pena será de 5 a 15 años de reclusión o prisión. De lo expuesto,
entendemos que el delito no se refiere solo a las personas mayores sino a
cualquier persona expuesta a una determinada situación de desamparo. La
acción típica no consiste en solo abandonar (verbo que significa desentenderse,
dejar de lado un objeto, un interés o una obligación, desamparar o resignar)
como parece indicarlo el título, pues lo esencial es poner en peligro la vida o la
salud de otro. El colocar en situación de desamparo o abandonar a su suerte son
las formas tipificadas de crear riesgo para esos bienes. De manera que el delito
se comete tanto haciendo nacer la amenaza por desamparo, como abandonando
a su suerte a la víctima. En el primer supuesto el agente la pone en situación de
carecer de los cuidados necesarios como para que no corran peligro su vida o
su salud. En el segundo se desentiende de resguardarla4. La acción típica se
agota con la creación de la situación de peligro producto del desamparo o el
abandono, pero para que aquella se produzca el riesgo debe ser efectivo. Por lo
que el simple hecho de apartarse del sujeto pasivo no constituye delito, si existen
terceros que asumen el cuidado, haciendo así que la vida o la salud no hayan
estado comprometidas5.

4
TERRAGNI, Marco, Abandono de Personas y Omisión de Auxilio, Código Penal Comentado de Acceso
Libre, Asociación Pensamiento Penal,
http://www.pensamientopenal.com.ar/system/files/cpcomentado/cpc37492.pdf
5
TERRAGNI, Marco, Pensamiento Penal,
http://www.pensamientopenal.com.ar/system/files/cpcomentado/cpc37492.pdf.
En cuanto al sujeto pasivo, puede ser cualquiera a quien se coloca en situación
de desamparo. Debe tratarse de una persona incapaz de valerse, a la que se
abandona. Esta fórmula: incapaz de valerse se equipara a valetudinario, palabra
que emplea el Código en el art. 10. Ambas expresiones derivan de valer, cuya
raíz latina valere identifica el ser fuerte, vigoroso, potente, que está sano6.

IV.- Conclusión

Como cierre de este aporte, el análisis de los tipos de violencia de determinados

sujetos de protección contribuye a una mirada más abarcativa de la problemática
y con perspectiva de los derechos humanos de las personas.

6
TERRAGNI, Marco, Pensamiento Penal,
http://www.pensamientopenal.com.ar/system/files/cpcomentado/cpc37492.pdf