UNIVERSIDAD CATOLICA SANTA ROSA

FACULTAD DE DERECHO

ESCUELA DE DERECHO

SINTESIS DEL AUDIO

DERECHO PENALII

Estudiante: Oscar Rodríguez

Cédula: 9847892

PUERTO CABELLO, JUNIO, 2021

 La responsabilidad civil derivada del delito puede definirse como la
obligación que tiene el autor de un delito o falta de reparar
económicamente los daños y perjuicios causados o derivados de su
infracción. El Código Penal venezolano vigente en su artículo 113,114
numeral 2, establece que la responsabilidad por la ejecución de un delito
obliga a reparar los daños y perjuicios por él causados. La
responsabilidad civil derivada del delito se reflejará en tres pretensiones
por orden de jerarquía, que son: la restitución de la situación o el bien
dañado en primer lugar; la reparación del daño causado; y por último la
indemnización que consiste en una suma de dinero que compensa de
forma integral al perjudicado. La responsabilidad civil derivada del delito
se podrá atribuir a distintas personas y de manera conjunta, incluyendo a
los aseguradoras que hubieren asumido responsabilidades pecuniarias
derivadas de la consecuencia de cualquier hecho ilícito. Siempre que se
produzca la conducta típica que se haya configurado como riesgo
asegurado, los aseguradores se convierten en responsables civiles
directos de los daños que se hayan derivado de aquella.

La responsabilidad civil derivada del delito no es muy antiguo, aunque la

reparación de daños si lo es, data del antiguo derecho romano, donde
establecía en el IUS CIVILE y la ley de la XII tablas, el pago por daños
causados, el jurista ULPIANO del siglo III, postulo su ya famoso postulado,
“los tria iuris praecepta” , es decir el honeste vivere, el alterum non
leadere y suum cuique tribuere, que traducido al castellano seria, vivir
honestamente, no dañar a otro y dar a cada uno lo que le corresponde.
Cuando plantea no dañar a nadie, ya se instituyó la responsabilidad civil,
la responsabilidad civil en el derecho como tal es la institución más
antigua, no hubiese existido nunca la vida en sociedad si no hubiese
límites de no dañar a nadie. También la ley de Talión (el ojo por ojo y
diente por diente) aunque pareciera bárbara, fue una especie primitiva de
responsabilidad civil derivada del delito ,es decir la obligación de resarcir
el daño causado.

Según el sistema venezolano la responsabilidad civil derivada del delito,

a pesar de su naturaleza civil, se regula específicamente por
las normas contenidas en el Código Penal, en el artículo 113 y siguientes
del Código Penal; además de las disposiciones contenidas en el Código
Orgánico Procesal Penal en el cual se establece que la víctima o sus
herederos solo podrán ejercer la acción civil, después que la sentencia
penal quede firme, ante la jurisdicción penal; claro está sin perjuicio del
derecho de la víctima de demandar ante la jurisdicción Civil, esta
disposición está contenida en el artículo 47 del COPP.

El sujeto activo en el caso de la responsabilidad civil derivada del delito

es la persona que está en el derecho exigir el cumplimiento de la
obligación como un derecho propio, y el sujeto pasivo es la persona que
debe cumplirlo, por ejemplo, un accidente de tránsito(choque contra un
poste de alumbrado público, dañado por el impacto) el conductor la
persona que tiene que cancelar los daños ocasionados al alumbrado
público(sujeto pasivo)y el ESTADO(sujeto activo) la persona que puede
exigir que se cancele los daños, estos serían el sujeto pasivo y activo
respectivamente. Otro ejemplo seria, un accidente de tránsito en donde
estén involucrados dos vehículos, de los cuales fue el culpable según
dictamen del tribunal, el sujeto activo seria las víctimas del accidente, y el
pasivo el conductor del que ocasionó el accidente, tiene una
responsabilidad civil por los daños ocasionados al vehículo.

La responsabilidad subsidiaria se verifica cuando la infracción la realiza,

no el responsable criminalmente, sino un tercero que resulta civilmente
responsable, es decir, la que se refiere al sujeto obligado como lo
establece El 116 del Código, Penal hace referencia a ésta, al aludir a las
personas que responderán civilmente, en defecto de los que los sean
criminalmente; y lo propio hacen los Artículos 117 y 118, al referirse a las
personas que son "responsables subsidiariamente".