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Tema 3.

Ecosistemas

El tema 3 de esta unidad pretende conocer los aspectos más importantes que se
estudian de los ecosistemas, así como identificar los principales ecosistemas
colombianos y los servicios que estos nos brindan.

3.1 Conceptos básicos de los ecosistemas (Biotopo y biocenosis)

El concepto de ecosistema ha tenido múltiples definiciones, desde que fue


propuesto por Tansley (1935) y entendido como “un sistema integrado compuesto
por la interacción de factores bióticos y abióticos”. Un sistema es un conjunto de
partes organizadas en el cual hay interdependencia e interacción de sus partes. En
un sistema abierto, como es el ecosistema, hay entradas y salidas (Sutton, 2009).
(Figura 1).

Figura 1. Entradas y salidas e un sistema abierto. Fuente: adaptado de Sutton y


Harmon (2009).

El ecosistema se ha convertido en un concepto fundamental para el manejo y


planificación de recursos, ya que al ser un sistema natural dinámico que varía a lo
largo de gradientes complejos en el espacio y el tiempo, se convierte en un
articulador de la dinámica natural de la tierra, en la cual sus componentes
incluyendo al hombre y sus actividades se relacionan e interactúan.

Al igual que la comunidad, el ecosistema presenta límites espaciales y al definir


estos límites, es posible observar un ecosistema con relación a su entorno. En este
sentido, los intercambios del entorno hacia el ecosistema se denominan entradas,
mientras que los que provienen del interior del ecosistema y van al entorno son
salidas (Smith y Smith, 2007).
El concepto de ecosistema incluye la relación entre un biotopo y una biocenosis. El
biotopo significa el lugar que ocupan los organismos con los elementos y las
condiciones ambientales que rodean la vida. Puede decirse que es el ambiente en
el que se forma y al que se adaptan las distintas formas de vida. Biocenosis
significa la comunidad de organismos que viven en un determinado biotopo (Ángel,
1993). (Figura 2).

Figura 2. Esquema del biotopo y la biocenosis de un ecosistema. Fuente:


http://img.ecologiahoy.com/2011/02/Biocenosis.jpg

3.2 Componentes del ecosistema.

La ecología de ecosistemas considera el estudio de las entradas y las salidas del


ecosistema, así como los intercambios de energía y materia entre sus componentes
(Smith y Smith, 2007). Al ecosistema entra la energía solar y sale energía térmica
o energía trasformada en forma de calor. Entran nutrientes y pasan a través de las
cadenas alimenticias a los organismos y sufren trasformaciones (Figura 3).
Figura 3. Principales componentes del ecosistema. Fuente:
http://aprende.colombiaaprende.edu.co/sites/default/files/naspublic/plan_choco/
CIENCIAS_7_BIM2_SEM4_EST.pdf.

A continuación veremos en detalle los tres componentes básicos del ecosistema:


estructura trófica o alimenticia (sección 3.2.1), circulación de la materia (sección
3.2.2) y flujo de la energía (sección 3.2.3). Observe en la figura 4 como la energía
fluye en una sola dirección, los nutrientes (Carbono, nitrógeno, entre otros) circulan
pasando a través de los organismos (biosfera), atmósfera, hidrósfera y geósfera.
Figura 4. Principales Componentes del ecosistema. Fuente: http://med.se-
todo.com/himiya/1403/index.html

3.2.1. Estructura trófica (niveles tróficos, redes, cadenas, pirámides)

La estructura trófica o alimentaria se refiera a la forma en la que se organizan los


organismos en el ecosistema de acuerdo con el tipo de alimento que consumen (en
términos coloquiales es la relación que indica quién se come a quien). Una gran
parte de las relaciones que los seres vivos establecen con su medio ambiente tiene
como finalidad obtener la materia y energía que necesitan para su nutrición. La
estructura trófica tiene ciertas características. Los Productores, consumidores y
descomponedores forman los diferentes niveles tróficos o alimenticios que se dan
en un ecosistema. Cada nivel trófico agrupa a todas las especies que tienen el
mismo tipo de alimentación y que tienen una dieta a base de especies de un nivel
inferior.
Los productores que pertenecen al primer nivel, son organismos autótrofos que
fabrican su propia materia orgánica (su alimento), a partir de materia inorgánica,
dentro de estos están las algas, las plantas y las bacterias fotosintetizadoras.
Los consumidores se alimentan de materia orgánica viva y se dividen en
consumidores primarios, secundarios y terciarios. Los consumidores primarios que
pertenecen al segundo nivel, se alimentan de productores (herbívoros), los
consumidores secundarios que se ubican en el tercer nivel, se alimentan de
consumidores primarios (carnívoros y parásitos de herbívoros) y los consumidores
terciarios que se incluyen en el cuarto nivel, se alimentan de consumidores
secundarios (carnívoros finales y parásitos consumidores secundarios).
Los descomponedores son heterótrofos que transforman la materia orgánica en
materia inorgánica (son hongos y bacterias) (Valverde, Cano-Santana, Meave y
Carabias 2005) (Figura 5). Recordemos que la materia orgánica incluye en
estructura compuestos derivados del Carbono (C), mientras que la materia
inorgánica no tiene Carbono.

Figura 5. Representación de los niveles tróficos en un ecosistema. Fuente:


https://educacion.gob.ec/wp-
content/uploads/downloads/2016/09/Curriculo/CCNN/CCNN_7_EGB_Cuaderno.pd
f.

Existen tres maneras en las cuales se pueden representar la estructura trófica:


cadenas, redes y pirámides.

Cadenas alimenticias: es una secuencia simple y lineal de organismos que se


alimentan unos de otros y que pertenecen a distintos niveles tróficos. Las flechas
de estas líneas representan la dirección hacia la que va el flujo de la energía. La
energía almacenada en los tejidos de los productores primarios constituye la base
para alimentar a todos los organismos heterótrofos (Figura 6).
Figura 6. Representación de una cadena trófica un ecosistema acuático. Fuente:
https://educacion.gob.ec/wp-
content/uploads/downloads/2016/09/Curriculo/CCNN/CCNN_7_EGB_Cuaderno.pd
f.

Red trófica: corresponde a la combinación las distintas cadenas alimentarias


entrelazadas. Las relaciones alimentarias en los ecosistemas son más complejas
que las cadenas lineales simples mostradas en la figura 4. Por ejemplo, en un
ecosistema acuático podemos encontrar una red trófica compuesta de diversas
cadenas alimenticias (figura 7).
Figura 7. Representación de una red trófica en un ecosistema acuático.
https://educacion.gob.ec/wp-
content/uploads/downloads/2016/09/Curriculo/CCNN/CCNN_7_EGB_Cuaderno.pd
f.

Pirámides tróficas: Una pirámide trófica es un modelo que utiliza un triángulo


para representar las relaciones tróficas en un ecosistema en el que cada eslabón o
nivel trófico se representa con una determinada área proporcional a la cantidad de
energía contenida, a la biomasa y al número de individuos presentes en cada nivel.
En figura 8 puede ver como se ubican los niveles tróficos (productores y
consumidores) en la pirámide. Observe que los descomponedores no se
representan en el triángulo debido a que éstos actúan de manera paralela para los
tres niveles tróficos, es decir, si un productor o consumidor se muere, los
descomponedores hacen su función de trasformar materia orgánica en inorgánica
(Miller, 1999). Por ejemplo ellos transforman nuestro cuerpo conformado de
carbohidratos, lípidos y proteínas en sustancias inorgánicas como amoníaco (NH 3),
agua (H2O), Anhídrido Carbónico (CO2), sales y óxidos, entre otros.

Figura 8. Representación gráfica de una pirámide trófica. Fuente:


http://aprende.colombiaaprende.edu.co/sites/default/files/naspublic/plan_choco/
CIENCIAS_7_BIM2_SEM4_EST.pdf.
Las pirámides pueden ser de tres tipos (Sutton y Harmon, 2009):

 Pirámide de Energía: representan la producción de cada nivel trófico. Dan


información sobre el flujo de energía en el ecosistema, sus unidades son
calorías o kilocalorías o en algunos casos de kilocalorías /m2 (Figura 9).

Figura 9. Pirámide de energía en un ecosistema de pradera. Fuente: (Singh-Candy


y Cain, 2012).

 Pirámide de Biomasa: Representan la cantidad de materia orgánica o


biomasa presente en cada nivel trófico. La biomasa es el peso de materia
viva, esta se expresa en gramos (g), kilos (K), g/cm2 o g/cm3 (Figura 10).
Figura 10. Pirámide de biomasa en un ecosistema acuático. Fuente:
http://www.academico.cecyt7.ipn.mx/bio_bas/contenidos/programascion_cd/cd_
html/unidades/cd_unidad4/cd_biologia_u4_t3.html.

 Pirámide Numérica: Representan el número de individuos en cada nivel


trófico. Se reconoce porque su unidad será número de individuos o en
algunos casos solo se indica el número sin unidad (Figura 11).

Figura 11. Pirámide numérica en un ecosistema de pradera. Fuente:


http://www.academico.cecyt7.ipn.mx/bio_bas/contenidos/programascion_cd/cd_
html/unidades/cd_unidad4/cd_biologia_u4_t3.html.

En algunos casos las pirámides numéricas y de biomasa pueden ser invertidas o


ser presentadas por una figura diferente a un triángulo, esto se debe a que en
algunos ecosistemas la biomasa o el número de individuos de consumidores pueden
ser mayor que los productores. Por el contrario, las pirámides de energía siempre
conservan la forma de triángulo porque la energía va pasando de productores a
consumidores primarios, luego de consumidores primarios a consumidores
secundarios y de consumidores secundarios a consumidores terciarios.

3.2.2. Movimiento de la Materia: ciclos biogeoquímicos.

Para comenzar a ver los ciclos biogeoquímicos debemos recordar que la materia no
desaparece sino que sufre una gran cantidad de modificaciones. Ahora pensemos
¿De qué están compuestos principalmente los seres vivos?, aproximadamente el
70% de sus cuerpos es agua y de la masa restante, 95% son compuestos orgánicos
o también llamados compuestos del carbono (proteínas, carbohidratos, lípidos,
entre otros). Estas moléculas están formados tan sólo por 27 de los 109 elementos
de la tabla periódica. Dentro de estos 27, existe un grupo muy importante llamados
macronutrientes o elementos esenciales, éstos son requeridos por organismos en
grandes cantidades para realizar sus funciones vitales. Dentro de los
macronutrientes se incluyen los siguientes elementos: Azufre (S), Calcio (Ca),
Carbono (C), Nitrógeno (N), Hidrógeno (H), Oxígeno (O), Magnesio (Mg), Potasio
(K) y Fósforo (P) (Valverde, Cano-Santana, Meave y Carabias 2005). La cantidad
de cualquier elemento presente en la tierra es limitada, sin embargo, los elementos
se pueden encontrar en distintas formas y compuestos (Osuna, Marroquín y García,
2010).

La materia que se encuentra en los ecosistemas es utilizada de forma cíclica, una


y otra vez: esta materia está formada por moléculas inorgánicas (agua y sales
minerales) y orgánicas (carbohidratos, lípidos, proteínas) que se transforman
químicamente, aunque los elementos químicos que la constituyen (carbono,
nitrógeno, fósforo, etc.) permanecen (Sutton y Harmon, 2009) (Figura 12).
Figura 12. Circulación de la materia en los ecosistemas. http://e-
ducativa.catedu.es/44700165/aula/archivos/repositorio/500/570/html/Unidad05/
pagina_16.html

Los ciclos biogeoquímicos se refieren a que los elementos químicos esenciales


mencionados se mueven de manera cíclica a través de los organismos (“bio”) y el
ambiente geológico (“geo”) conformado por la atmósfera, la litósfera o corteza
terrestre y la hidrósfera que corresponde a la parte de la tierra compuesta por
agua. Estos ciclos pueden dividirse en dos tipos: Ciclos atmosféricos o gaseosos
y ciclos sedimentarios (Sutton y Harmon, 2009).

Ciclos atmosféricos o gaseosos: son también conocidos como ciclos globales.


En estos participan elementos y compuestos, que en estado gaseoso, se mueven
por todo el planeta debido a las corrientes de aire en la atmósfera. Se caracterizan
porque la circulación es más rápida que en los ciclos sedimentarios, los elementos
que tiene este tipo de ciclo son: el carbono, el nitrógeno, el azufre, el
hidrógeno y el oxígeno. Debido a estos dos últimos elementos, el agua (H2O)
también tiene un ciclo atmosférico. En la Figura 13.a se muestra un esquema que
representa las rutas generales de los ciclos atmosféricos (Valverde, Cano-Santana,
Meave y Carabias 2005) (Figura 13 a).

Ciclos sedimentarios: también conocidos como ciclos locales. En estos interviene


elementos que no pueden moverse a través de la atmósfera, sino que se acumulan
principalmente en el la corteza terrestre (suelo, rocas y sedimentos sobre la tierra
y el fondo marino), la hidrósfera y los organismos. Los elementos de estos ciclos
son reciclados mucho más lentamente que los ciclos atmosféricos porque los
elementos son retenidos en las rocas sedimentarias. Tienen ciclos sedimentarios el
calcio, el fósforo, el potasio, magnesio, entre otros (Miller, 1999). Las rocas
sedimentarias se forman por la lluvia y acumulación de materia mineral de una
solución o por la compactación de restos vegetales y/o animales que se consolidan
en rocas duras (Servicio Geológico Mexicano, 2017). En la Figura 13.b se observa
la ruta general que siguen los ciclos sedimentarios (Valverde, Cano-Santana, Meave
y Carabias, 2005) (Figura 13 a).

Figura 13. Esquema general de un ciclo atmosférico (a) y de un ciclo sedimentario


(b). El mantillo es la capa superior del suelo formada principalmente por materia
orgánica en descomposición. Las líneas negras corresponden a los ciclos del
carbono, azufre y agua; las líneas rojas al ciclo del nitrógeno. Fuente: adaptado de
(Valverde, Cano-Santana, Meave y Carabias, 2005).

En el siguiente video puedes ver una explicación de los principales ciclos


biogeoquímicos. https://www.youtube.com/watch?v=bZ_R84p27q8

3.2.3. El flujo de la Energía.

La energía se define como la capacidad de generar trabajo y puede ser de varios


tipos: energía calórica (como la que genera un gas de una estufa al quemarse),
energía química (que está almacenada en los enlaces químicos de las sustancias
que componen los alimentos y en los seres vivos) y la energía lumínica (que irradia
el sol), entre otras. Son manifestaciones de los diferentes tipos de energía el
movimiento de un río debido a la energía potencial, la evaporación del agua por la
energía que viene del sol y el movimiento de los animales con la energía química
que obtienen al metabolizar los alimentos. La energía puede ser medida en
Calorías, Kilocalorías o Julios. Los ecosistemas están sujetos a las leyes de la
termodinámica, es decir la ciencia que estudia los procesos relacionados con el
intercambio de calor.
Leyes de la termodinámica:
Primera ley: la energía no se crea ni se destruye sino que se transforma.
Segunda ley: las transformaciones de la energía no son 100% eficientes. La
energía fluye de donde está más concentrada a donde está menos concentrada
(Valverde, Cano-Santana, Meave y Carabias, 2005).

La aplicación de la primera ley de la termodinámica la podemos observar cuando


la energía fluye a través de un ecosistema utilizando las cadena alimenticias, es
decir la energía fluye desde los autótrofos (o seres transformadores de energía
lumínica) hacia los heterótrofos (o seres consumidores de energía química) y
finalmente hacia los descomponedores (figura 14).

Figura 14. Flujo de la energía en una cadena alimenticia. Los detritívoros también
llamados saprófitos o descomponedores obtienen su alimentación de detritos
(residuos) o materia orgánica en descomposición. Fuente: (Miller, 1999).

La segunda ley de la termodinámica puede verse reflejada en los ecosistemas


cuando se observa que de la energía al ser transferida de un organismo a otro en
forma de alimento, solo una porción se almacena en los tejidos vivos y gran parte
de ella se disipa como calor (Smith y Smith, 2007). Si observa la figura 14 se
muestran las flechas amarillas que indican la generación de calor a través de las
cadenas alimenticias. Además, cuando la energía se procesa a través de un
ecosistema, es cada vez menor la cantidad utilizable (es decir, en forma organizada
y concentrada) (Sutton, 2009), esto significa además que los procesos en el
ecosistema no son tan eficientes.
Existen dos procesos metabólicos que tienen relación directa con el flujo de energía
en los ecosistemas estos son la fotosíntesis y la respiración (Valverde, Cano-
Santana, Meave y Carabias, 2005).

Fotosíntesis: proceso mediante el cual organismos autótrofos (plantas, algas y


microorganismos que tiene pigmentos fotosintéticos) absorben luz solar y la utilizan
para producir compuestos químicos. La fotosíntesis es importante porque
constituye la única forma para los seres vivos de fijar la energía solar. Los
organismos fotosintéticos liberan oxígeno (O2) y generan un compuesto orgánico,
la glucosa (6C6H12O6), a partir de compuestos inorgánicos como agua (H2O) y
anhídrido carbónico (CO2) como resultado de su metabolismo tal como se muestra
en la siguiente ecuación:

Respiración: este proceso es inverso a la fotosíntesis, ya que consiste en la


absorción de oxígeno con el fin de degradar moléculas presentes en los alimentos
(azúcares como la glucosa, lípidos y proteínas) con la finalidad de liberar la energía
necesaria para mantener las funciones vitales. Como producto de desecho se
generan anhídrido carbónico (CO2) y agua (H2O).Este proceso se describe en la
siguiente ecuación:

El flujo de energía en un ecosistema comienza con el aprovechamiento de la luz


solar por parte de los autótrofos. La formación de nuevos tejidos es el resultado de
la fotosíntesis realizada por los productores y del consumo de alimento realizado
por los organismos heterótrofos (producción). Los ecólogos miden la tasa a la que
la fotosíntesis convierte la energía radiante en compuestos orgánicos
(productividad primaria).

En otras palabras la producción es la cantidad total de tejidos acumulados en


cierto periodo de tiempo, mientras que la productividad es la velocidad o tasa
con la cual se acumuló dicha cantidad. La producción se mide en kg/m 2 y la
productividad puede tener unidades de kg/m2 por año. Tanto la producción como
la productividad pueden ser primaria, si estos procesos suceden en autótrofos, o
secundaria si ocurren en organismos heterótrofos.

La productividad primaria es muy importante para todos los ecosistemas, ya que


representan la velocidad a la que cada ecosistema produce la energía alimenticia
con la cual cuentan los organismos heterótrofos, incluido el ser humano, para su
mantenimiento. La productividad primaria varía entre ecosistemas (tabla 1).

Tabla 1. Productividad primaria (g/m2 por año) en algunos ecosistema del mundo.
Fuente: (Valverde, Cano-Santana, Meave y Carabias, 2005).
Los factores que afectan la productividad primaria son los mismos que afectan el
crecimiento de lo autótrofos. Dentro de estos factores están la radiación solar, la
temperatura, la disponibilidad de nutrientes y la disponibilidad de agua (Valverde,
Cano-Santana, Meave y Carabias, 2005).

En la figura 15 se observa el patrón global de la productividad primaria en


ecosistemas terrestres, donde se observa en verde oscuro que los ecosistemas
cerca dela línea del ecuador son los que presentan mayor productividad, esto es
debido principalmente a que allí la radiación solar llega de manera directa durante
todo el año, lo que implica que no hay estaciones climáticas marcadas y por lo
tanto se presentan temperaturas altas durante todo el año. Además, los
ecosistemas tropicales tienden a ser más lluviosos.

Figura 15. Mapa mundial de productividad primaria en ecosistemas terrestres.


Fuente: (Smith y Smith, 2007).
En la figura 16 se observa la variación de la productividad en los océanos. En esta
figura se observa que la productividad es mayor cerca a las costas debido en gran
parte a la gran disponibilidad de nutrientes que se encuentra allí, producto de
arrastre de materia orgánica e inorgánica (residuos, troncos, arrastre de material
por erosión) que llevan los ríos que desembocan al mar. Además, cerca de las
costas la profundidad es menor, razón por la cual los rayos solares penetran al
agua directamente y facilitan la fotosíntesis de los organismos autótrofos
(fitoplancton, plantas acuáticas y algas).

Figura 16. Variación geográfica en la producción primaria en el océano. Fuente:


(Smith y Smith, 2007).

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