de los recursos edáficos. Debido a la gran extensión de su territorio y a la peculiaridad de su tipo de suelo oscuro, su producción de grano ha hecho que se la conozca como “el granero del mundo”. Asimismo, esta producción favorece también que la carne local sea de gran calidad.
La Importancia Del Suelo En La Agricultura
Como no podía ser de otra manera, el suelo juega un papel fundamental en el
éxito de la agricultura. Es donde se encuentran las plantas y obtienen sus nutrientes, que luego nos proveerán a humanos y animales de alimento. Por ello, cuanto más saludable sea, mejor para todos. No obstante, hay distintos tipos de suelos y sus características no siempre son propicias para producir los nutrientes necesarios para el crecimiento saludable de las cosechas, ya que poseen diferente color, textura y propiedades químicas. Igualmente, las partículas que lo componen pueden ser de diferentes tamaños; al combinar todos estos factores obtendremos una representación de su nivel de fertilidad. Por lo tanto, es lógico pensar que la efectividad de la actividad agrícola se basará en gran parte en el conocimiento de los tipos de suelo usado y como se compensen o solucionen los problemas relacionados con sus características naturales. Tipos De Suelo En Argentina
La siguiente lista determina el mapa de tipos de suelo de Argentina y sus
características, que se compone de: Alfisoles. Son arcillosos, cuya filtración de agua es baja, húmedos y que no permiten la agricultura. Se les conoce como “suelos grises”. Andisoles. Situado en zonas templadas o frías, principalmente a lo largo de la cordillera de los Andes. Su textura franco arenosa y su desarrollo en depósitos volcánicos de zonas húmedas y subhúmedas hace que se meteorice rápidamente, formando mezclas de silicato y aluminio. Aridisoles. Como su propio nombre indica, son áridos de color claro y escasa fertilidad. Situados mayormente en la zona norte del país, cercanos a Puna. Entisoles. Ubicados en valles fluviales, están débilmente desarrollados y poseen una baja fertilidad, por lo que su uso en agricultura está desaconsejado. Su tonalidad es castaña o marrón. Gelisoles. Se encuentran en zonas de hielo permanente o permafrost y no pueden ser usados para la agricultura.
Histosoles. Son suelos de zonas pantanosas y lugares con mucha cantidad
de agua, de ahí que, aunque posean mucha materia orgánica, sean poco apetecibles para el desarrollo de la agricultura en ellos. Inceptisoles. Aunque su acumulación de nutrientes no sea la mejor, los convierte en utilizables para el desarrollo de diferentes tipos de cultivos agrícolas. De color pardo, suelen estar cubiertos por bosque y se encuentran en la zona más al norte del país. Molisoles. Son los más valiosos y fértiles del país, con un color muy oscuro y muy buen drenaje. Se pueden encontrar en la zona oeste del país, en las llanuras chaco-pampeanas. Oxisoles. El óxido de hierro forma parte de este tipo de suelo, lo que le confiere un color rojizo. Aunque están en zonas subtropicales, su alta porosidad y su escasa fertilidad no favorecen su uso. Spodosoles. Situados en el sur del país (Tierra de Fuego), son demasiados ácidos para ser aptos para la agricultura. Ultisoles. Con un color entre rojizo oscuro y pardo, su presencia es mayor que la de los oxisoles en zonas del noreste del país con desarrollo joven. Son poco espesos y difícilmente saturables. Vertisoles. Son arcilloso