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COMO DIOS RESTAURA NUESTRA AUTOESTIMA


La sociedad moderna esta llena de estereotipos sociales, y altos estándares
globalizados, por lo que es común ver a muchas personas sufrir de depresión,
ansiedad o baja autoestima, sin embargo, desde siempre estos flagelos han sido
parte del diario vivir.

Para todas estas aflicciones Dios tiene una respuesta, es por ello, que en esta
oportunidad queremos compartirte algunos Personajes de la Biblia con baja Auto
estima, y cómo Dios transformó sus debilidades en la manifestación de su gloria.

Problemas de Estima.
Es inaceptable que un creyente de Dios tenga problemas de estima, pues Dios nos
demostró su amor eterno hacia nosotros entregándose a sí mismo.

Sin embargo, la realidad es que muchas personas cristianas tienen problemas en esta
área también.

Esto se debe a que la estima personal necesita sanidad y restauración,

Primero porque también fue un área dañada por el pecado original.

Segundo, porque esta se forja a lo largo de la vida a base de heridas y tratos de


otras personas.

Auto Estima en la Biblia

Al respecto del autoestima, la Santa Biblia es clara cuando expresa que


debemos pensar de nosotros mismos con moderación, es decir, ni con problemas
de auto estima alta ni con problemas de auto estima baja.

“Por la gracia que se me ha dado, les digo a todos ustedes:


Nadie tenga un concepto de sí más alto que el que debe tener, sino más bien
piense de sí mismo con moderación, según la medida de fe que Dios le haya
dado”

Romanos 12.3 NVI


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Personajes con baja autoestima en la Biblia.


En la Biblia encontramos la historia de hombres y mujeres, que como usted y como
yo, tenían sus luchas y sus debilidades, y que a pesar de ser personajes con baja
autoestima, Dios se manifestó en sus vidas con un fin eterno y maravilloso.

Muchos de ellos rechazaron a Dios y otros tantos transformaron el mundo conocido


hasta ese momento o de la mano de Dios.

-La Baja Autoestima del Rey Saúl.


La historia del Rey Saúl es una de las historias de Personajes Bíblicos con Baja
Autoestima más tristes, pues fue un hombre que pasó su vida atormentado por este
flagelo desde su juventud, e incluso le costó la unción de Dios, el trono, y le trajo
una muerte cruel.

“Quis tenía un hijo llamado Saúl, que era buen mozo y apuesto Como ningún otro
israelita, tan alto que los demás apenas le llegaban al hombro”

1Samuel 9.2 NVI

La Biblia señala que No había hombre como Saúl y sin embargo cuando el profeta
Samuel le dice que será ungido como Rey para Israel esta fue su respuesta:

“— ¿Por qué me dices eso? —Respondió Saúl—.


¿No soy yo de la tribu de Benjamín, que es la más pequeña de Israel? ¿Y no es
mi familia la más insignificante de la tribu de Benjamín?”

1Samuel 9.21 NVI

El no sentirse lo suficiente delante de Dios y delante de otros estaba muy


arraigado en Saúl, quien

o paso su vida escondiéndose


o queriendo agradar a otros
o más adelante sintiendo celos de David.

Saúl paso una vida atormentado, cuyo error fundamental fue no creer que Dios lo
había elegido a él como Rey.
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Gedeón se creía el más Insignificante.

“El SEÑOR lo encaró y le dijo:


—Ve con la fuerza que tienes, y salvarás a Israel del poder de Madián. Yo Soy
quien te envía.
—Pero, Señor —objetó Gedeón—, ¿Cómo voy a salvar a Israel? Mi Clan es el más
débil de la tribu de Manasés, y yo soy el más insignificante de mi familia”

Jueces 6.14-15

Existen muchas personas que se ven seriamente marcadas por su humilde origen,
este también fue el caso de Gedeón un hombre humilde de una pequeña tribu, que al
igual que el Rey Saúl, fue llamado por Dios es un momento de necesidad para hacer
grandes cosas por su nación.

Y aunque Gedeón no solo pensaba que su tribu era pequeña sino también que el
mismo era un ser sin importancia, futuro o habilidades, decidió creerle al Dios vio y
su maravillosa historia aparece en las sagradas escrituras.

La historia de Gedeón nos enseña que no importa cómo nos sintamos, ni qué cosa
hemos vivido, sino nuestra disposición en creerle a Dios, y dejarlo actuar en
nuestras vidas a pesar de nuestras debilidades.

No sé qué situaciones has vivido, pero posiblemente pienses que no tienes


posibilidades de cambiar tu destino, pero te garantizo que de la mano de Dios podrás
lograr grandes cosas.

Deja de escuchar al mundo, y deja de escucharte a ti mismo y tus temores, y empieza


a creerle a Dios quien te ve como su especial tesoro por el cual dio la vida, no seas
como el Rey Saúl que no le creyó a Dios, sino más bien se cómo Gedeón
quien supero todos sus miedos, y sus complejos con la ayuda de Señor quien lo
respaldo hasta el último día de su vida.

Busca la palabra de Dios y acércate aún más al


Espíritu Santo en oración y verás cómo te sentirás
mejor.
Recuerda debes pensar de ti con moderación porque
esto le agrada a tu creador.

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