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Resumen Abstract
El duelo por el fallecimiento de un hijo tie- Bereavement for the death of a son / a daug-
ne características particulares por el carácter hter has special features for the unnatural na-
antinatural de la pérdida y por el valor identi- ture of loss and the identifier value of the bond
ficante del vínculo entre padres e hijos. La pér- between parents and children. This loss shakes
dida del hijo sacude estas identidades y sume these identities and joins the mourners in a deep
a los dolientes en un profundo dolor y un des- pain and a total embarrassment to the break
concierto total ante la ruptura con el pasado y with the past and loss of future expectations.
la pérdida de expectativas con el futuro. The experiences that each member of the fa-
Las vivencias que cada miembro del núcleo mily have had with the deceased, will have a
familiar han tenido con el fallecido, influirán direct influence on the development and over-
de manera directa sobre el desarrollo y la coming of grief for both the individual and
superación del duelo tanto a nivel individual family. For this reason, the approach should
como familiar. Por esta razón, el abordaje debe be customized and responsive to the needs of
ser personalizado y sensible a las necesidades different family structures that exist in a plu-
de las distintas estructuras familiares que se ralistic society.
dan en una sociedad plural. It is important that health care institutio-
Es importante que las instituciones sanita- ns, from Cancer-Pediatric Services, aware and
rias, desde los Servicios Oncológico-Pediátri- promoting genuine preventive work before the
cos, tomen conciencia y promuevan un autén- death of the child. Similarly, will be bidding
tico trabajo preventivo antes del fallecimiento to the death of a child (clear risk factor for
del niño. Del mismo modo, será preciso ofertar complicated grief), professional help from psy-
ante la muerte de un hijo (claro factor de ries- chologists adequately prepared.
go de duelo complicado), la ayuda profesional
de psicólogos debidamente preparados. Key words: Grief, parents, death, pediatrics,
oncology, palliative care.
Palabras clave: Duelo, padres, muerte, pe-
diatría, oncología, cuidados paliativos.
Correspondencia
Javier Barbero
Servicio de Hematología y Hemoterapia.Hospital Universitario La Paz.
Pº Castellana 261, 28046-Madrid.
E-mail: jbarbero.hulp@salud.madrid.org
jbarbero.hulp@salud.madrid.or .
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El proceso psicológico ante una pérdi- Los estados de ánimo pueden variar
da importante en la vida se conoce como y manifestarse con distintas intensidades.
duelo y se refiere, de forma más específi- Los sentimientos más habituales son triste-
ca, al dolor emocional que se experimenta za, enfado, rabia, culpa, miedo, ansiedad,
tras la desaparición de algo o alguien sig- soledad, desamparo e impotencia, añoran-
nificativo en nuestras vidas(1). En nuestro za y anhelo, cansancio existencial, deses-
caso nos centraremos en el duelo por la peranza, abatimiento, alivio y liberación,
muerte de un ser querido y, en particular, sensación de abandono y amargura.
por la muerte de un hijo con cáncer, lo
que presenta, como veremos, algunas pe- Dimensión cognitiva
culiaridades significativas. Los escenarios
pueden ser varios: padres de 70-80 años a Dificultad para la atención y la concen-
quien les fallece un hijo de 40-50 años; o tración, confusión, embotamiento mental,
padres de 30-40 años que pierden a su hijo falta de interés por las cosas, ideas repe-
–pongamos- de 5-15 años. La experiencia titivas, generalmente relacionadas con el
tendrá matices diferenciales. En este traba- difunto, sensaciones de presencia, olvidos
jo nos centraremos fundamentalmente en frecuentes.
este segundo escenario, en el que el falle-
cido es un niño o un adolescente. Dimensión conductual
Con el duelo la persona necesita una
adaptación constante para mantener el Hiperactividad o inactividad, conductas
equilibrio personal y una calidad de vida de búsqueda, llanto, aumento del consu-
aceptable. A pesar de las dificultades mar- mo de tabaco, alcohol y/o psicofármacos.
cadas por el dolor y por la búsqueda de
respuestas no halladas, el duelo se consi- Dimensión social
dera un proceso normal, cuyas manifesta-
ciones más comunes se pueden agrupar en Resentimiento hacia los demás, aisla-
seis dimensiones diferenciadas(2): miento social.
adaptativa. Es importante no taponar para mas más comunes son pérdida de apetito,
que los dolientes puedan entender la causa inquietud y/o insomnio, tensión en la gar-
de su enfado y para que éste no se traduzca ganta, sentimientos vacíos en el abdomen,
tardíamente en una depresión. cansancio general, etc.
Con el aumento del malestar físico, se
Culpa incrementa el uso de sustancias, en espe-
cial, tranquilizantes y alcohol. Es impor-
La culpa es otra de las emociones que tante controlar este hecho y derivar a un
los padres pueden experimentar. La socie- especialista en caso de que esta conducta
dad espera que los padres protejan a sus se pueda convertir en algo habitual.
hijos y la muerte de un hijo puede crear
sentimientos de fracaso en esa responsabi- Otros problemas emocionales.
lidad. Los padres pueden culparse a sí mis-
mos por algo que hicieron u omitieron en Otros problemas emocionales pueden
el pasado (pasar más tiempo con el niño, sucederse a lo largo de todo el proceso de
no trabajar tanto, etc.). duelo, sobre todo en forma de sintomato-
Este tipo de culpa puede ser irracio- logía ansiosa y depresiva. En estos casos,
nal. El terapeuta deberá tratar de romper cuando la sintomatología intercurrente re-
la relación falsamente establecida por el sulte muy frecuente o muy intensa y, en
doliente entre la muerte del hijo y su ac- especial, cuando puedan bloquear la vida
tuación durante la enfermedad(11). del padre doliente, se debe acudir al es-
pecialista.
Miedo
Aislamiento Social
Después de la muerte del hijo, muchos
padres experimentan una sensación inten- La mayoría de los padres creen que las
sa de miedo, de que algo horrible va a personas que nunca han experimentado la
pasar. Esto puede generar un cambio de muerte de un hijo no pueden entender su
conducta en los padres, volviéndose exce- dolor. Esto hace que se aislen de su en-
sivamente protectores con los hijos super- torno. En estos casos, el doliente necesita
vivientes e inseguros ante sus capacidades encontrar salidas a su aislamiento, al prin-
y habiliades como educadores. cipio con ayuda más especializada o de
Asimismo, sienten miedo de volverse grupos de autoayuda para después apren-
locos por la necesidad irrefrenable de es- der a establecer relaciones con los demás,
capar, de evadirse y de huir de este ma- independientemente del fallecimiento.
lestar. Compartir con el terapeuta estos
miedos difíciles de asumir puede llegar a Una vez comentadas las reacciones y
ser muy útil para recuperar el control de la sentimientos más comunes tras la muerte
situación y combatir el miedo amenazante del hijo, abordaremos a continuación las
y desconocido. cuatro tareas básicas del duelo que, según
Worden(12), favorecen la adaptación a la
Problemas físicos pérdida:
la muerte de un hijo. En castellano, la con otros padres con los que compartía
palabra “aceptación” suele estar asociada horas de parque; b) adaptaciones internas,
a un acontecimiento positivo. Tendemos referentes a cómo la muerte ha influido en
a aceptar lo agradable y satisfactorio y a la imagen de uno mismo y c) adaptacio-
negar lo desagradable y doloroso. ¿Cómo nes espirituales, referentes a cómo influye
puede convertirse en una tarea la acep- la muerte en las creencias y valores. Este
tación de algo tan radicalmente doloroso objetivo se puede abordar de diferentes
y antinatural como es la muerte de un maneras: algunos encuentran significado
hijo? Pues precisamente porque se trata en la adhesión a creencias religiosas o
de aceptar la pérdida como real, no como filosóficas, otros lo hacen resaltando las
positiva o deseable, y cuando uno huye particularidades del pequeño y encontran-
de la realidad, al final ésta acaba impo- do alguna manera adecuada de honrar su
niéndose de manera más desadaptativa y recuerdo, otros participando en activida-
dolorosa. Negar (mecanismo de defensa des altruistas que pueden ayudar a terceras
primario y emocional) suele ser un me- personas y, en ocasiones, a otros padres de
canismo adaptativo al principio pero si se niños con cáncer.
instala, acaba destruyendo a la persona y
sus relaciones. Tarea IV: Recolocar emocionalmente al fa-
La negación se puede practicar a varios llecido y continuar viviendo
niveles y tomar diversas formas, pero la
mayoría de las veces implica negar el sig- Esta tarea resulta especialmente com-
nificado o la irreversabilidad de la pérdida. plicada, sin embargo es posible y, para
Un ejemplo de esta dificultad para aceptar, algunos, esta lucha por recolocar al hijo
son las conductas de momificación, cons- perdido puede llevar a una mayor auto-
truyéndose un entorno en el que no se conciencia y a un posible crecimiento
“permite” el paso del tiempo. personal, consecuencia de esta dificil ex-
periencia. Se trata, como afirmaba George
Tarea II: Trabajar las emociones y el dolor Sand, de “que mi recuerdo no envenene
de la pérdida tus futuras alegrías, pero no permitas que
tus alegrías destruyan mi recuerdo”.
Como ya hemos visto, con frecuencia
se presentan emociones intensas como la Pareja
ira y la culpa. Procesar estas emociones
es la segunda tarea del duelo y es impor- Tras la pérdida, el duelo será vivido
tante que, en la medida de lo posible, se de forma distinta por cada miembro de
realice dentro del entorno comunitario de la pareja, en función del tipo de relación
los padres. mantenida con el hijo y de los recursos
y estrategias de afrontamiento personales.
Tarea III: Adaptarse a un medio en el que Estas diferencias pueden producir tensión
el fallecido está ausente en la relación conyugal y esto, a su vez,
fricciones y cambio de alianzas entre los
La adaptación deberá alcanzarse en diferentes miembros de la familia(13).
tres áreas distintas: a) adaptaciones exter- Cada uno de los padres debe poner
nas tanto a nivel práctico como a nivel nombre a su propia manera de vivir y ex-
relacional, referentes a la actuación coti- presar el duelo, así como el estilo de due-
diana del doliente tras la muerte. Por ejem- lo adoptado por su pareja. Puede darse el
plo, adaptación a la pérdida de relaciones caso de que uno de los cónyuges tenga
El duelo en padres del niño oncológico 491
más facilidad para la expresión emocio- cia, describen las emociones propias como
nal, siendo capaz de hablar de una ma- quien las contara de otro. Este hecho no se
nera más abierta de sus sentimientos. Este debe a que los hombres no sean capaces
hecho puede suponer una amenaza para de poner nombre a lo que sienten, sino
el otro miembro, favoreciendo un herme- más bien a que la sociedad obliga a que
tismo que dificulte la comunicación y que el hombre se muestre más fuerte que la
distancie a la pareja en su dolor. mujer y que esa fortaleza sirva para ayu-
Si se da esta situación y la pareja no dar a los demás a superar su dolor. Esto
rompe con la inercia natural de no enten- se traduce en un menor apoyo social y en
der el dolor individual del otro, esto puede una expresión emocional “adecuada”, sin
desembocar en una frustración mayor de exceder los límites de lo aceptable.
la esperable ya que los sentimientos de En ocasiones estos papeles impuestos
soledad y de incomunicación se irán agu- pueden resultar protectores a la hora de
dizando con el tiempo, creando rencores y elaborar el duelo pero, en otros, puede
reproches que no harán más que empeorar desembocar en conflictos personales entre
el daño emocional. Por esta razón parece “lo que soy” y “lo que se espera de mí”,
muy importante que la pareja mantenga generando sentimientos de fustración, ira y
un diálogo abierto de aceptación con el soledad en el duelo.
otro y que se permitan mútuamente expre- No hay manera correcta o incorrecta
sar el dolor de la manera que les resulte de llorar a un hijo muerto. Sin embargo,
más adaptativa satisfaciendo sus necesida- por el bien de la relación matrimonial, la
des y teniendo en cuenta las necesidades pareja debe mantener las líneas de comu-
del otro. nicación abierta, aceptando los sentimien-
En ocasiones es recomendable una tos del otro y reconociéndolos como legí-
asesoría externa que ayude a facilitar la timos incluso cuando resulten difíciles de
comprensión e integración desde las dife- entender o dolorosos de escuchar.
rencias. El duelo no puede convertirse en
una competición o reproche sobre quién Sexualidad
sufre más.
Muchas veces los padres, tras la muerte
Diferencias entre sexos del hijo, se sorprenden a sí mismos ante
sus propias necesidades y respuestas a ni-
Se ha estudiado mucho sobre las dife- vel sexual. La gravedad de la pérdida inci-
rencias existentes entre ambos sexos a la ta a la búsqueda de cercanía e intimidad,
hora de elaborar el duelo, con el interés pero algunos padres se asombran cuando
de entender cómo influyen las expectati- se descubren intentando cubrir éstas de
vas impuestas por la sociedad en los roles manera sexual. Es importante que los dos
sexuales respecto a la adaptación a un pro- cónyuges entiendan este hecho como par-
ceso traumático. te del proceso vital normal y la necesidad
Hay estudios que revelan que es más de sentirse unidos como pareja.
probable que los hombres encuentren más En otros casos puede ocurrir justamen-
dificultades en la expresión emocional te lo contrario, que la pareja pierda inte-
que las mujeres. Las mujeres expresan sus rés sexual y entren en la abstinencia. Esto
sentimientos de una manera más abierta y puede ser como consecuencia de un due-
emocional. Los hombres, por el contrario, lo abrumador que rompe con los deseos
revelan mucha menos información íntima sexuales aunque no necesariamente con el
a otras personas y, con demasiada frecuen- deseo de intimidad y compañía.
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interferir en el desarrollo cognitivo y emo- que otro familiar muera, fantasías de muer-
cional del pequeño. te, dificultades de aprendizaje y culpa. En
Como es de suponer, ninguno de estos el plano conductual aparecen comporta-
dos extremos es adaptativo para los padres mientos regresivos, emociones explosivas,
ni para los hijos. Los padres no se desha- berrinches moderados, timidez extrema,
rán nunca de sus fantasmas ya que no se desinterés por el grupo, dependencia ex-
permiten soltar el enorme peso que supo- cesiva y demanda de atención.
ne la lucha contra la realidad. Los hijos La mayoría de las reacciones son más
crecerán en un ambiente sobreprotegido fecuentes los primeros meses tras el falle-
creado por sus padres temerosos, limitan- cimiento, aunque algunas pueden aparcer
do el desarrollo de su individualidad. Por incluso después de dos años.
esta razón es muy importante que los im- Las manifestaciones en los adolescentes
plicados acepten la realidad de la pérdida son similares a las de los adultos, aunque
antes de tener otro hijo. en los más jóvenes predomina el malestar
El dolor de decir adiós al vínculo con fisiológico (dolor de cabeza y estómago) y
un hijo es una experiencia que te cambia en los de más edad, el psicológico (baja
para siempre y no se entiende o aprende autoestima)(1).
rápidamente sino que necesita del tiempo La capacidad de los padres para ayu-
suficiente para poder aceptar los cambios. dar a los hermanos a comunicarse dentro
No obstante, la superación es posible y de la unidad familiar y darles la oportu-
comienza cuando los padres, de manera nidad de expresar directamente los senti-
paulatina, empiezan a tomar parte activa mientos, lleva a la negociación sana de las
en sus vidas, encontrando un nuevo senti- tareas del duelo descritas por Worden(17)
do a su existencia. No existe ningún tiem- que, como hemos visto, son: 1) Aceptar
po establecido para la resolución del due- la realidad de la pérdida, 2) Expresar los
lo. Lo que si se sabe es que cada persona aspectos emocionales, 3) Ajustarse a un
ha de encontrar su particular manera de ambiente en donde el hermano fallecido
hacer frente a la pérdida, con o sin ayuda, está ausente y 4) Recolocar el vínculo y
y que el resultado final tras el trauma su- sentirle cerca.
pondrá un cambio en la forma de entender La clave es la honestidad y no apar-
la vida, en los valores que dirigen ésta y en tar al niño de su realidad con el pretex-
el modo en el que decidimos vivirla(12). to de protegerle y ahorrarle sufrimiento.
Por esta razón, en la medida de lo posi-
HERMANOS ble, pasadas las primeras horas de mayor
dramatismo y confusión, es aconsejable
Las dimensiones previamente comenta- buscar un momento y un lugar adecuado
das de la manifestación del duelo, son las para que los padres expliquen lo ocurrido
mismas para todos los sujetos, indepen- al niño a través de un lenguaje sencillo.
dientemente de su edad o condición. No Las necesidades de información no serán
obstante, se ha observado que los niños las mismas para todos los niños, depen-
presentan un mayor componente somático derá de su edad, del grado de desarrollo
y de problemas de conducta que los adul- del concepto de muerte, de característi-
tos. En el plano físico, son características cas inviduales, del grado de madurez, etc.
las dificultades del sueño, la negativa a co- Independientemente del nivel de informa-
mer, la eneuresis y los dolores de cabeza ción, es importante responder de manera
y de estómago. En el plano cognitivo se sincera a todas las preguntas, incluso para
produce ansiedad de separación, miedo a aquellos interrogantes que no hallan res-
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