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FILOSOFÍA DE CALIDAD

La calidad es una herramienta que permite evaluar cuantitativa y cualitativamente las características
propias de un producto, cumpliendo con ciertos requisitos que impiden tener productos
defectuosos, gracias a la ausencia de errores en la línea productiva. Para mejorar la calidad y
aumentar la productividad todos los procesos deben garantizar una mejora continua mediante la
planificación, la implementación de los procesos, la toma de acciones para mejorar y la verificación
de dichos procesos.
También se debe considerar la calidad desde una perspectiva interna y externa; es decir, relacionar
la empresa con el objetivo de lograr una alta calidad en el diseño y contribución de cada
departamento de la empresa. Finalmente, todos estos factores deben contribuir a conseguir la
calidad, aumentando la satisfacción del cliente y disminuyendo los costos al mismo tiempo.

JUSTIFICACIÓN

A pesar de sus importantes diferencias, los diferentes gurús de la calidad todos buscan con sus
filosofías que se considere a la calidad como una característica necesaria para la competitividad en
el mercado y como práctica administrativa para reducir costos, buscando siempre una mejora
continua. Por ello se toma como base para la filosofía desarrollada el ciclo de Edwards Deming, que
garantiza un proceso de calidad continuo es consecuente con el aseguramiento de calidad que busca
la norma ISO 9000:2000 de Sistemas de Gestión de la Calidad. También se asumen las ideas de
Shigeo Shingo y Philip B. Crosby que buscan sistemas de calidad donde los errores sean evitados
para obtener productos de alta calidad. Y en general los aportes de los gurús que reconocen la
calidad como elementos de importancia para cliente y las relaciones estrechas entre la
administración y los trabajadores.

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