Está en la página 1de 1

Cómo hacer masa madre sin gluten – articulo web de Conasi

Tras conocer los beneficios de la masa madre sin gluten y entrar en profundidad en la importancia
de los ingredientes, toca la parte práctica de esta fermentación con la receta de masa madre sin
gluten, paso a paso. Solo necesitarás harinas sin gluten, agua y tiempo.
En los siguientes posts aprenderemos cómo mantenerla y con qué ingredientes hacer el pan sin
gluten y después, la receta del pan sin gluten, con esta masa madre sin gluten.

UTENSILIOS
Tarro de vidrio
Báscula de cocina
Cuchara pequeña
Fermentadora
Cuchara sopera
Nevera

INGREDIENTES

Mezcla de harinas
40 g harina de avena integral sin gluten
60 g harina de trigo sarraceno
40 g harina de quinoa
1 cucharadita miel ecológica o pasas

ELABORACIÓN PASO A PASO

Día 1
Introducir 70 g de la mezcla de harinas sin gluten en un tarro de cristal. Añadir 70 g de agua filtrada,
a temperatura ambiente y una cucharadita de miel o un puñadito de pasas ligeramente machacadas.
Mezclar todo muy bien hasta que tenga una consistencia de masa espesa.
Colocar el tarro sin tapar en un lugar cálido, que tenga una temperatura de unos 25-30 ºC o, mejor
aún, introducirlo en la fermentadora, a esa temperatura.
Día 2
No hay que hacer nada, solamente remover un poco con una cuchara y listo.
Día 3
En este punto, la masa madre ya tiene sus primeras burbujitas. Quitar una cucharada a la masa
madre y añadir una nueva cucharada de la mezcla de harinas sin gluten (avena, trigo sarraceno y
quinoa) + 1 cucharada de agua a temperatura ambiente. Mezclar todo bien y seguir dejando en el
lugar cálido durante un día más.
Día 4
La preparación tiene pinta de masa madre. Tiene muchas burbujitas, ha crecido respecto al día
anterior y huele a eso, a masa madre. Sin embargo, le falta el último empujón. Repetir el proceso
del día 3 y dejar un día más fermentando.
Día 5
La masa madre ya estará lista: estará llena de burbujas y habrá crecido bastante. Refrescar de
nuevo: retirar una cucharada y añadir una nueva de harina y otra de agua.
Tras realizar este proceso, la masa madre vuelve a crecer bastante y tiene consistencia de mousse,
ya estará lista.
Introducirla en el frigorífico hasta que se utilice para hacer pan.

También podría gustarte