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POLITICAS

AMBIENTALES
MS.c, Econ. EBER APAZA ZAPANA
IMPUESTOS
Los impuestos ambientales se abren paso para proteger el
medio ambiente

Los impuestos ambientales son aquellos destinados a gravar los


comportamientos nocivos para la salud del planeta. Parten de un sencillo
principio — quien contamina, paga — y son esenciales para frenar el cambio
climático.
El cambio climático es la mayor amenaza medioambiental a la que nos
enfrentamos los seres humanos. La temperatura media global ya ha
aumentado 1,1 °C desde la época preindustrial y, de no cumplir el objetivo
del Acuerdo de París — mantener el aumento por debajo de los 2 °C y tratar
de limitarlo a 1,5 °C, las consecuencias podrían ser catastróficas.
Necesitamos, por tanto, reducir la emisión de gases de efecto invernadero
a nivel mundial y organismos internacionales — como el Fondo Monetario
Internacional (FMI), organizaciones ecologistas y numerosos economistas
coinciden en que una herramienta clave para combatir el cambio climático son
los impuestos ambientales.
Los impuestos ambientales se abren paso para proteger el
medio ambiente
¿QUÉ SON LOS IMPUESTOS AMBIENTALES?
De acuerdo al marco estadístico desarrollado conjuntamente en 1997 por
Eurostat, la Comisión Europea, la Organización de Cooperación y Desarrollo
Económico (OCDE) y la Agencia Internacional de la Energía (IEA), los
impuestos ambientales son "aquellos cuya base imponible consiste en
una unidad física (o similar) de algún material que tiene un impacto
negativo, comprobado y específico sobre el medioambiente".
En un escenario sin regulaciones, una empresa podría fabricar un producto de
manera contaminante sin considerar su impacto sobre la salud del planeta o
del medio ambiente. Esto es lo que en economía se conoce
como externalidad. La finalidad de los impuestos verdes es obligar a
pagar una tasa a los contaminadores bajo el principio de quién
contamina paga, de tal forma que el precio refleje también el coste de
estas externalidades.
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medio ambiente
BENEFICIOS DE LOS IMPUESTOS AMBIENTALES
Existe casi total unanimidad a la hora de señalar la fiscalidad ambiental como
una herramienta clave para avanzar hacia una economía descarbonizada que
favorezca el desarrollo sostenible. Entre los principales beneficios que
justifican la existencia de este tipo de impuestos destacan:

❖Internalizan las externalidades negativas.


❖Promueven el ahorro energético y la utilización de fuentes renovables.
❖Desincentivan comportamientos antiecológicos.
❖Incentivan a las empresas a innovar en sostenibilidad.
❖Generan recaudación para los gobiernos que puede servir para bajar otros
impuestos o para desarrollar proyectos ambientales.
❖Protegen el medio ambiente.
Los impuestos ambientales se abren paso para proteger el
medio ambiente
El FMI ha propuesto que los países que más gases de efecto
invernadero emiten establezcan un impuesto sobre las emisiones de
CO2. Según esta organización, esa tasa tendría que ser de 75 dólares/68
euros por tonelada en 2030. El organismo sostiene que esta tasa impactará,
principalmente, en el uso del carbón para generar electricidad. Este tipo de
impuestos buscan desplazar formas de energía más contaminantes en favor
de otras menos contaminantes, como las renovables.
La situación ideal de la fiscalidad ambiental es lo que se conoce como la
hipótesis del doble dividendo. Contrariamente al prejuicio de que
los impuestos verdes lastran la economía, un escenario en el que la subida
de estos impuestos se viera compensada con una bajada de impuestos al
trabajo, al capital o al consumo redundaría en un doble beneficio: la mejora
de la calidad ambiental y de la eficiencia del sistema económico.
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QUÉ GRAVAN LOS IMPUESTOS VERDES
Cada país cuenta con su propio diseño en materia de fiscalidad verde. Pese a ello, a nivel
internacional los principales hechos imponibles con interés ambiental son:
✓ Las emisiones de monóxido de nitrógeno (NO) y dióxido de nitrógeno (NO2) que
producen, sobre todo, los vehículos de combustión.
✓ Las emisiones de dióxido de azufre (SO2) — principal causante de la lluvia ácida —
producidas, especialmente, por la combustión de productos petrolíferos y la quema de
carbón.
✓ La gestión de residuos (domésticos, comerciales, industriales, de construcción, etc).
✓ El ruido producido por el despegue y aterrizaje de los aviones.
✓ Los productos energéticos (gasolina, diésel, gas natural, carbón, producción de
electricidad con combustibles, etc.) cuya combustión genera emisiones de CO2.
✓ Fuentes de polución del agua (pesticidas, fertilizantes artificiales, ácidos, etc).
✓ El manejo de la tierra y la extracción y uso de recursos naturales.
✓ Las emisiones de dióxido de carbono (CO2).
✓ Los productos que reducen la capa de ozono.
✓ El transporte (matriculación, uso, importación o venta de vehículos contaminantes).
Los impuestos ambientales se abren paso para proteger el
medio ambiente
En cuanto a los sectores, el
más afectado por la
fiscalidad ambiental es el
energético. De acuerdo a
Eurostat, en 2017 los
impuestos sobre la energía
supusieron el 76,9% de los
ingresos procedentes de
los impuestos verdes en la
Unión Europea (UE), muy
por delante de las otras dos
categorías: los impuestos
sobre el transporte (19,7%) y
sobre la contaminación y los
recursos (3,4%)
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La recaudación de
los impuestos
verdes
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PRINCIPIOS PARA UNA BUENA IMPOSICIÓN AMBIENTAL
De acuerdo con la OCDE, una buena regulación ambiental debería seguir los
siguientes principios:
➢ Los impuestos ambientales deben dirigirse a la actividad que causa el
perjuicio, con mínimas excepciones.
➢ El ámbito del impuesto ambiental debe cubrir todo el daño.
➢ El tipo impositivo debe ser proporcional al daño medioambiental causado.
➢ Los impuestos deben ser creíbles y predecibles para incentivar
comportamientos coherentes con la protección del medio ambiente.
➢ Los ingresos procedentes de la reforma fiscal medioambiental pueden
servir como ingresos adicionales o para reducir otros impuestos.
➢ Los problemas de equidad deben solucionarse mediante otro tipo de
políticas específicas.
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PRINCIPIOS PARA UNA BUENA IMPOSICIÓN AMBIENTAL
➢ Los posibles problemas de competitividad deben ser tenidos en
cuenta, pero no para frenar los impuestos sino para plantear la
posibilidad de coordinar políticas o establecer periodos transitorios
a la aplicación de la reforma.
➢ La imposición medioambiental debe ser explicada a la opinión
pública para facilitar su aceptación.
➢ En ciertos casos, los impuestos medioambientales no son
suficientes para solucionar un determinado problema y deben ser
utilizados en coordinación con otros instrumentos de política
ambiental.
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medio ambiente
PRINCIPIOS PARA UNA BUENA IMPOSICIÓN AMBIENTAL
Sin embargo, es frecuente que la implementación de las distintas figuras impositivas y el
conjunto de la denominada imposición ambiental no refleje estos principios. Entre las
críticas más frecuentes se encuentran:
▪ Falta de vinculación a las externalidades negativas que han generado el impuesto.
▪ Falta de consistencia ambiental en el diseño al no estar basado en el daño ambiental.
▪ Falta de consideración del alcance espacial de los hechos imponibles, sometiendo
tecnologías e instalaciones en lugar de daños y consumos.
▪ Tipos demasiado reducidos para desincentivar a los agentes causantes del daño
medioambiental.
▪ Los impuestos sobre el carbón a menudo son cero o casi inexistentes, según el
informe Fiscalidad sobre la energía 2018 de la OCDE.
▪ La complejidad y heterogeneidad de tributos a los que se ve sometido el sector más
afectado de todos, el energético.
▪ La falta de homogeneidad internacional o regional en materia de fiscalidad ambiental
provoca disparidad en la recaudación.
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medio ambiente
PRINCIPIOS PARA UNA BUENA IMPOSICIÓN AMBIENTAL
La fiscalidad ambiental es comúnmente señalada como una pieza clave para
frenar el cambio climático y, por esa razón, los expertos en la materia,
organismos internacionales — como la OCDE o la Comisión Europea— critican
la falta de compromiso en fiscalidad ambiental de muchos países y les
insta a que hagan reformas fiscales verdes. Los expertos se muestran muy
preocupados por el hecho de que el porcentaje recaudado por los impuestos
verdes ha descendido en el mundo durante el periodo 2000-2017. Por
ejemplo, la recaudación por impuestos ambientales en la UE en 2003 representó
el 2,56% del PIB frente al 2,4% en 2017.
SUBSIDIOS
Subsidios
Los subsidios son un tipo de asistencia
financiera ofrecida a los productores por la
entidad reguladora.
El subsidio actúa como una recompensa por
reducir contaminación (Field,1997).

Lewis (1994), los subsidios pueden ser ineficientes siempre


que la entidad reguladora pueda medir perfectamente en
términos monetarios los daños generados a personas y al
ambiente como resultado de la contaminación.
Subsidios Ambientales
Son identificados como remuneraciones económicas por parte del estado,
que apoyan a las entidades o empresas que tienen procesos amigables con
el medio ambiente, con el propósito de alcanzar el bienestar social para evitar
contaminar nuestro ecosistema.
Los subsidios ambientales son necesarios para algunos usos de la tierra, los
subsidios se pueden dar por hectárea, por cultivo, por finca, y/o por
producción, cada una de las anteriores tiene diferentes implicaciones sociales
y sobre el manejo del medio ambiente.
El objetivo principal de los subsidios ambientales es estimular un
comportamiento menos agresivo con el medio ambiente, estos incentivos
están enfocados a motivar a las compañías a seguir con las buenas prácticas
y aportar un poco de lo mucho que nos da nuestro medio ambiente.
Subsidios Ambientales
Los tipos más conocidos de subsidios ambientales son:
▪ Subsidio de equipo para abatimiento: son implementados como préstamos de
bajo costo y lo que buscan es adaptar las externalidades positivas. Cuanto mayor
sea la reducción de emisiones toxicas o químicas, por medio de tecnologías más
limpias, de sustituir insumos productivos que protejan el medio ambiente, la
facilidad de adaptación a cambios ambientales, el manejo para reciclaje de los
residuos, contribuirá a un mayor coste de abatimiento de las empresas.
▪ Subsidio para la reducción de la contaminación: también es llamado subsidio
por unidad de reducción de la polución, porque el gobierno acuerda pagar un
subsidio al contaminador por cada unidad de contaminación eliminada por debajo
del nivel promedio establecido. La contaminación producida por los procesos
industriales o intervención del ser humano genera daños en el ecosistema en
general, el desgaste de la capa de ozono, la reducción en la calidad de vida.
La contaminación del aire es de las principales causas del calentamiento global de
la atmósfera con cambios climáticos y desastres naturales. (Casadiego, 2013)
Subsidios Ambientales
Limitaciones de los subsidios ambientales
El subsidio beneficia a los contaminadores ya que reduce los costos, por
ende las ganancias aumentan y esto hace que la industria sea atractiva e
ingresan más empresas, parece contradictorio porque cada industria
reduce la contaminación pero al ser mayor el número de empresas la
contaminación puede aumentar.

Ventajas de los subsidios ambientales


Los subsidios permiten redistribuir el ingreso y disminuir la pobreza, la
principal ventaja es cuidar el medio ambiente y motivar a las empresas a
que sigan cumpliendo con los procesos que aportan y cuidan los recursos
naturales.

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