Está en la página 1de 17

Hacia una pedagogía del conocimiento Dinári1ica del desarrollo cognitivo individual

atención y sacrificio de gustos y placeres inmediatos a nada clase social. Así, la pedagogía sería un obstáculo pa-
cambio de la esperanza de una satisfacción más valiosa y ra el desarrollo intelectual y la enseñanza de las ciencias.
duradera. Los maestros que enseñan-sólo aquello que los Por supuesto, nosotros no podemos ceder a semejante
niños disfruten inmediatamente, sólo lo que les guste, tentación irracionalista, ni podemos conciliar con pedago-
están afianzando al niño por el cainino del facilismo pro- gías a11cladas en el pasado, que en el fondo están en con-
pio del principio del pl~cer, lo están maleducando en ;1 tradicción con una enseñanza efectiva y contemporánea l a ambigüedad de
egoísmo y en la ignorancra. Pero claro, t_ampoco_se tratan_a de las ciencias en nuestro país, no de corte positivo, sino la "educación
de abrumarlo con tensiones, preocupaCiones, nuedos, fati- un conocimiento integral, que se relacione con la vida y integral" podría
ga y aburrimiento, pues la depresión tampoco permite a con la transformación inteligente del medio natural y so- sustituirse por una
la mente enfrentar el arduo camino del aprendizaje. Al la- cial, que garantice un desarrollo armónico y estable de to- enseñanza de las
do de una exigencia y norrnatividad ("super yo") fuertes, dos los individuos y de nuestra sociedad en su conjunto. ciencias integrada
requiere de un rrúnímo de satisfacción placentera y afectiva Solamente a este conocimiento científico integral es al que con la vida.
para que su mente, desde cierto equilibrio, pueda concen- podemos considerar verdaderamente educativo, dotado
trarse en el estudio y dedicarse al trabajo racional de com- de sentido humano y de potencialidad para desarrollar
prender el mundo natural y cultur~ que lo rodea, como la espiritualmente a los individuos reales en su proceso de
actividad espiritual que lo caracteriZa en cuanto hombre. autocreación cultural.
Es precisamente rob~dole espaci~ al in~tinto irracio?-al y Sobre todo, cuando es preciso reconocer que la
ampliando y profundizando su raaonalidad como el mdi- activídad científica humanizada es en sí misma una disci-
viduo se humaniza. Aquí radica el optimismo de la peda- plina altamente formadora de calidades humanas en los
gogía contra el pesimismo de ~';Ichos psicoan~listas que individuos que la ejercitan, con mucha mayor eficacia,
no le dejan a la mente una rendiJa de autono~a. . . quizás, que los sermones tradicionales de los maestros.
No podemos, pues, ignorar el sustrato de Irraaonali- No me refiero sólo al rigor, sistematicidad, constancia,
dad en que se produce la actividad cognoscitiva del versatilidad, disciplina, tenacidad tradicionalmente reco-
hombre, e incluso la enseñanza de las ciencias -recono- nocidos en la personalidad intelectual del científico, sino
ciendo que esta última no puede ser ~iguros~ antes. de la a otros valores sociales tales como la tolerancia y el respeto
etapa de los diez años que ha estableado el rrusmo P1aget. por las opiniones ajenas, la honradez y la sinceridad respecto
El hombre es mucho más que conocimiento, e incluso no a los alcances, limitaciones y éxitos del propio trabajo y
puede conocer sino lo que desea, ~o 9-':e ama. Sus deseos del ajeno, el compromiso y la solidaridad social hacia la Pero el principal
alimentan todo proyecto de aprop1acron del mundo a tra- gente con cuyas demandas de Claridad y mejores condi- propósito de la
vés de los mitos, la religión, la mora}¡ el arte, la ciencia, la ciones de vida material y espiritual está comprometida la enseñanza de las
tradición, incluso a través de las maneras de juego y de la actividad de los científicos; la generosidad y capacidad de ciencias, ha de ser
buena mesa (pues como han descubierto los antropólogos: postergar la satisfacción de deseos inmediatos por la más el de humanizar a
"en la mesa y en el juego se conoce al caballero"), los profunda y espiritual satisfacción de servirle al desarrollo. los individuos,
cuales, por vias distintas, cumplen una función, la de ser- y bienestar de la humanidad, y demás valores e ideales elevando su nivel
vir de puente entre la realidad y la imagen que nos hemos éticos que podrían construirse los individuos a través de cultural.
hecho de ella, con el apoyo del poder o de la comunicación una actividad intelectual humanizada que se fomentara
amorosa. Por supuesto, semejantes proyectos de apropia- desde la misma escuela secundaria. Así, la actividad cien-
ción del mundo no podían dejarse al libre albedrío de l~s tíficanosería unfinensímismo, sino un medio altamente
indivíduos, han sido reglamentados y encauzados a traves pedagógico para el desarrollo "integral" de los individuos.
de la educación, tal como la entiende, por ejemplo, Durk- El nivel cultural de una sociedad no se puede medir
heim, como transmisión de pautas y valores de una por la cantidad de bienes, ni por la cantidad de conocimien-
generación a otra. Y si por pedagogía ,se entiend; el c~mo de tos científicos que en ella se producen, sino por la asimila-
esta educación, entonces la pedagogm no podría deJar de ción creadora de toda esa riqueza material y espiritual
ser un proyecto cada día más racionalizado de control por parte de los individuos que la componen, por la cali-
discursivo de la vida entera de los individuos, incluyendo dad humana de las personas que se están generando en
sus creencias, sus costumbres, su moral, su concepción relación consigo mismas, con el colectivo social presente
del mundo, etc., a la manera de un mecanismo racion~ y futuro, con la naturaleza, con su actividad cognoscitiva
para fundar la irracionalidad que le interesa a una deternu- creadora, con el trabajo cotidiano, con el tiempo libre, el
·~- ---------.-:--·

Hacia una pedagogía del conocimiento

amor, etc. Es esto lo que nos indica el nivel cultural de una


sociedad. Tal comprensión de la cultura nos permite, aho-
ra, definir mejor lo que es educación para pasar luego a
proponer una redefinición provisional de lo que podría
ser la pedagogía.
Ya no en sentido amplio sino en sentido estricto,
educación es el proceso activo, consciente y efectivo de
desarrollo integral de los individuos de una sociedad a
través de la asimilación creadora de la experiencia social
de esa s.ociedad y de la hum.anLdad, en su producción
material y espirituaL En €Ste mismO sentido, la educación
es el proceso mediante el cual una sociedad particular
inicia y cultiva en sus individuos la capacidad de asimilar
A partir de la y producir cultura. En consecuencia~ la institución escolar
debería abandonar la pretensión omnímoda, totalitaria y La enseñabilidad
adolescencia, la
educación debiera exclusiva de educar a los individuos, y reconocer que
centrarse en una sobre todo a partir de la escuela secundaria y universitaria de las ciencias
efectiva enseñanza su labor en la época contemporánea está convocada a
integral de /as centrarse principalmente en el aspecto de la enseñanza de
ciencias guiada por las ciencias, en lo que el conocimiento científico aporta al CAPíTULO
una pedagogía desarrollo cultural de los individuos, es decir, en la com-
científica. prensión del proceso creador de esos mismos conocimien-
tos. Y el cómo de esa enseñanza, en sus aspectos descrip-
tivo-explicativos debería convertirse en objeto privilegiado
de una nueva pedagogía, como disciplina científica. Y por
supuesto, el cómo de esa enseñanza no puede ser com-
prendido adecuadamente sino se reconocen sus relaciones
con la tradición y la cultura en la cual está inmersa tanto
en su& metas ético-sociales, como en Su contenido~ como
en el tipo y dinámica de la relación profesor-alurrui.o, etc.

L~ dinámiCa de la actividad cognoscitiva del sujeto indi-


·.- v:dual nos mereció-un tratamiento más detallado~ pre-
~ament~ porque ~a~ta . ahora TI_? ~ay evidencia de que
dicha actiVIdad sea 1dentica a la log¡ca del desarrollo cien-
tífico. La diferenciació?- Y. distancia eTitre ambos procesos
es lo que abre ;a pos1bilidad del espado para que una
disaplina _crentífica descubra las condiciones y regulari-
dades que presiden el acercamiento e integración entre
!ale_s procesos en un mismo sujeto aprendiz (sea éste
mdlVldual o grupal, adulto o en periodo de maduración),
Y m~d~ante una misma acción sistemática que podemos
continuar llamando #enseñanza"; tal disciplina no sería
otra que la pedagogía. Base fundamental para la reflexión
pedagógica contemporánea es la hipótesis epistemológica
sobre ~a ens~~abilidad de laS ciencias, que voy a sustentar
a continuao.on.
.•. -~!".

Hada una pedagogía de! conocimiento


La enseñabilidad de las ciencias

1. El contexto de la enseñabilidad realizada y consumada hasta tanto no produzca un


Distinto al contexto de la justificación y como complemento resultado objetivo, es decir, hasta tanto no haya salido de
del contexto del descubrimiento, existe un tercer contexto, la c_abeza del in':"estigador bajo la forma de un artículo, de
· originado en la necesidad de la ciencia de extenderse y de nn informe paraal, de una conferencia o de una exhibición
reproducirse a lo ancho del espacio y del tiempo. Este cualquiera. La formulación de una explicación científica
tercer contexto no se genera a partir de una derivación conforma la estructura del saber científico, su funciona-
lógico-deductiva intrínseca a la estructura de los conoci- miento y los modos de organización del mismo saber
En el análisis de la mientos científicos, sino que se proyecta a su interior des- des~e el mismo momento en que esté concebido por el in~
ciencia se puede de la necesidad de la comunidad científica de reproducirse, vestiga?-or _p_ara ser compartido intersubjetivamente. La
identificar el contexto de ampliar y prolongar su empresa social de búsqueda en comurucabilidad del saber no es consecuencia sino condi-
de la enseñabilidad, las nuevas generaciones de investigadores, y de difundir c~ón de su producción, y cada disciplina podría caracte-
como una sus conocimientos a través de la comunicación y enseñanza nzarse por las formas de comunicación al interior de cada
intersección cultural de sus resultados logrados desde su paradigma. Sólo que c~m~dad cien~ca. Pues bien. Tal comuil.icación para-
sobre la producción esta respuesta cultural que denominaremos "contexto de digmatica se configura análogamente al contexto de la
cien~ífica. enseñanza" termina repercutiendo sobre la estructura enseñanza propio de c<:da. ~poca,. y sirve como garante y
misma de los nuevos conocimientos y afectando el proceso fun~amento de la ensenabzlzdad de cada ciencia. En este
de elaboración y formulación de los proyectos y de los sentido la enseñabilidad hace parte del estatuto epistemo-
informes de investigación. El contexto de la enseñanza lógico de cada ciencia.
deja de ser un contexto externo y sobreañadido a la pro- Aunque la unidad básica de la producción científica
ducción científica, como pudo aparecer ante los ojos de r;o fueran las teorías sino más bien los conceptos, tomados
algunos científicos, o de la mayoría de los educadores estos :n el sentido de interrogantes al estilo de Can-
contemporáneos centrados únicamente en el cómo ense- guil~eun: que perduran más allá de la fragilidad de las
teonas, sm embargo cada conocimiento tiende a presen-
la presentación
ñar, y se convierte en una dimensión que atraviesa el contemporánea de
proceso mismo de la investigación cientifica, a instancias tarse en las ciencias modernas como un nódulo más de un
cada nuevo
de la cultura, a la manera de los sabios de la antigüedad, sistema teórico encadenado lógicamente, sustentado y
conocimiento bajo la
que producían conocimientos para ser enseñados por ellos argumentado en forma demostrativa, como sí el científico
forma de un sistema
mismos, e investigaban enseñando a la manera de la mayéu- estuviese suministrándonos la fundamentación de su saber
es una necesidad
Cuando el científico tica socrática. Para el mismo Aristóteles la mayor pi1.leba Y ase~ando nuestra aceptación reflexiva y crítica. Se cultural del contexto
muestra y demuestra de sabiduría y de dorninío de la ciencia era la capacidad ~t~~ seguramente de _un resultado aislado, de una inves-
de la enseñanza.
su saber de enseñarla, pues según él sólo lo racional es enseñable, ~gacro~ sep~ada, y, sm embargo, no puede informarse
objetivándolo, estaría argumentable1. smo szstematlcamente dentro de cierto marco teórico
realízando una Lo que vamos a mostrar entonces es cómo la enseña- conceptu~l, cie~a consistencia lógico-deductiva en cuyo
acción incipiente y büidad de la ciencia no es sobreañadida ni complementaria, ~eno se hipotetiza, _se operacionaliza, se experimenta y se
abstracta de que el funcionamiento mismo del conocimiento en el con- mterpreta ... Es decii,la enseñabilidad del saber no es una
enseñanza. texto de la enseñanza no es exterior a la naturaleza misma superes~?ch?"a ~aralela y sobreañadida al proceso de
del saber científico, y que los elementos del saber, corno producaon Científica ... la estamos describiendo en este
objetos culturales, están preñados, preadaptados desde la proceso necesario en el que el ciéntífico desmenuza su
matriz que posibilita su enseñanza. De hecho, hay diferen- explícación, la desagrega lógicamente y la reorganiza de
cia entre la explicación de un fenómeno para especialistas manera presentable y convincente, tal como lo haría
del área, y la misma explicación expuesta a personas que cualquier profesor en el proceso de enseñanza ante un
carecen del vocabulario especializado. Pero tal diferencia grupo pr?medio y abstracto de alumnos, para el cual pla-
no es esencial ni definitiva, a medida que la ciencia se di- nea anahticamente una Cierta dosificación de conoci-
funde aún más entre la gente con la ayuda de instituciones mientos previendo a la vez la secuencia y concatenación
especializadas dedicadas a diluir tales diferencias. Pero lo con que habrán de transmitirse en forma persuasiva y
importante es que ninguna investigació~ científic~ está coherente. No se trata ya, para el científico, de formular
e~cuetamente su hallazgo, sino de la presentación de un
1
Véase Aristóteles, Metafisica,libro I, Caps. 1 y 2; Ética a Nicómaco, hbro szstema de datos y conceptos analizado y argumentado
VI, Cap. 3, Ed. Sarpe, Madrid, 1985.
consecuentemente acerca de un sector de la realidad, es
Hacia una pedagogía del conocimiento La enseñabilidad de las ciencias

decir, Se trata de la presentación obligada de cualquier


avance conceptual bajo la forma de una teoría elaborada.
m Precisamente, lo que estábamos mostrando era cómo la
E

o 'iñ
inserción de cada. concepto científico en una teoría es una
oo. !:!O 00 necesidad cultural derivada del desarrollo histórico de la
o
oo ""
o o
.,oo
~-~

~
o
E,
•o actividad cognoscitiva, emanada desde el contexto de la
• Do.
1ií
e
:Q
:g enseñanza y bajo la influencia de ciertos requisitos cultu-
.,•e
00 00
•E
••
•E ""
>2
"Ooo
•••
~

~
J'l

E
rales. Por esto, los informes científicos preparados, desde
que salen de manos del investigador, para desplazarse en
•"'
:o:::: o e
o• ~g -' "
00
UJ
o
u_
la enseñanza, ofrecen características tales como objetivi-
dad, coi:iliabilidad, validez, universalidad, reproducibili-

<:C--------\,-~--~-~-.1___________ _
dad, intersubjetividad, etc. Desde su proceso de produc-
ción, el nuevo resultado científico está en condiciones de
atravesar avatares como el artículo de revista, el abstract,
la monografía o el manual, conservando invariante su nú-
cleo principal, precisamente porque desde su producción
original está estructurado para funcionar en el contexto
de la enseñanza, gracias a la enseñabilidad inducida cul-
0::: turalmente desde la formulación científica.
Oaro está que hasta aquí nos referimos al contexto
amplio de la enseñanza de las ciencias, conscientes de que
::J Resultados
los informes de investigación se dirigen en primera instan-
cia a un público más o menos especializado, no escolar.
(enseñables)
En consecuencia, no hay que confundir la enseñabilidad
de una ciencia con su enseñanza, ni mucho menos con la
1- pedagogía, pues la hipótesis epistemológica sobre una
pedagogización implícita del saber científico contempo-
..J ráneo, desde la producción del mismo, se refiere a una pe-
dagogización formal y abstracta"(no hay grupo de alunmos
FonnulacJón específico y concreto) que convierte al interlocutor también
en sujeto abstracto al que se le asigna también un lugar,
::l perspectivas y dudas previstas en el sistema teórico frente
al cual se coloca como aprendiz, como si fuera otro
()-------¡;--~-~~--~--~------- elemento sistémico al que le corresponde un lugar preciso
y.no oti'o: sólo puede plantearse pregunta~ que .el sistema
considere coherentes y ra.zonables; juzgar y evaluar sólo
e '·N'
1-o e
1 2~
1 ~ g;
1
1
1
A. lo que le corresponda evaluar; observar sólo lo que la
perspectiva teórica le registre o le permita ver y, por su-
puesto, el tipo y volumen de conocimientos está previsto
1 e
e 1 en el sistema de instrucción científica formalizada2•
1 8~ !

z El aislamiento de esta pedagogización abStracta y formal respecto de


Figura 6.1 Influencias culturales sobre la investigación científica (el contexto de la producción científica ha inducido frecuentemente a errores acerca
la enseñanza incide en la formulación). de lo que es la investigación, reduciéndola al estricto seguimiento de
los formatos y protocolos de presentación de proyectos e informes .fi-
nales (como las normas del Icontec), en los que interesa el orden lógico
de los "pasos" de la investigación y las normas de sistematicidad para
la elaboración de los informes, o el grado de correspondencia y de
" .

Hacia una pedagogía del conocimiento La eli.señabilidad de las ciencias

Probablemente; la enseñabilidad de las ciencias, des- CÜl y elegancia magistral de su demostración, que
conocida para los profesores, sin embargo constituya el además no ahorra argumentos, ni suposiciones, ni
punto de partida imprescindible para la enseñanza de las ecuaciones, ni pasos, ni sustituciones ni trucos nece-
ciencias en las universidades y para la constitución de la sarios para sustentar con diafanidad y persuasión
didáctica especial para cada ciencia, ya no de manera formal y apodíctica no sólo la solidez y veracidad de su tesis,
abstracta sino desde las necesidades y características cultu- sino también sus diferencias y contrastes con las
rales y de lenguaje de los alumnos como sujetos cognoscen- tesis adversas de la mecánica clásica,las cuales rebate
tes activos y concretos. de manera relativista, es decir, variando el marco de
Cuando el científico produce su informe de investiga- referencia en el que Newton las formuló. Así, Einstein
ción no simplemente se atiene a las reglas lógico-formales, logró demostrar, entre otras cosas, que el aumento
de correspondencia y de verificación internas, propias del de la masa con la velocidad era aplicable a todo
"rigor" científico, sino que todas estas normas son desple- objeto conocido. Y que los aumentos de velocidad
gadas a la luz de otro marco de referencia, a saber, el de la no sólo acortan las longitudes y acrecientan la masa,
comunicación al menos con los colegas de su misma co- sino que, incluso, retrasan el paso del tiempo: los
munidad científica dedicados al estudio de otros interro- relojes se atrasan por el acortamiento de la varilla
gantes particulares. La objetivación de su descubrimiento medidora. Las medidas del espacio y del tiempo son
l a formulación y la no es ajena al efecto de comunicación que se propone lo- Jlrelativas" respecto de la estructura de referencia
comunicación grar; el propósito intersubjetiva está presente en el proceso que se haya elegido, y por eso su teoría se ha llamado
propias de cada mismo de la plasmación de los nuevos conocimientos, de "de la relatividad". Pero la estruchrra y exhibición
ciencia fundamentan tal manera que el método de exposición de cada ciencia de sus descubrimientos no requirieron de ayudas
su enseñabilidad. no es sobreañadido sino que es inseparable, incluso, de audiovisuales ni experimentales, y el ejemplo del
sus métodos de investigación, tanto en su efecto de demos- "tren en movimiento", de las "varillas" o de los "re-
tración, como en su efecto de comunicación, ambos lojes" son apenas ilustraciones didácticas en el desa-
inseparables del significado producido por la actividad rrollo de su exposición a las que asigna práctica-
creadora del científico -que le da sentido a sus ecuaciones mente ningún valor demostrativo. Su preocupación
y formalismos- y configurados por lo que denorrrinare- es más bien la delasistematícidad dentro de su propia
rnos el contexto de la enseñanza siempre implícito en la teoría, y la de resaltar sus vínculos y contrastes con
producción científica, fundamento de la posibilidad de las demás investigaciones anteriores o contemporá-
comunicación y de enseñabilidad de cualquier conocimien- neas en el campo de la física y de la matemática e
to. Veamos primero en Einstein y luego en Marx, a manera incluso con nuestras ideas cotidianas-o filosóficas-
de ilustración, cómo es que se manifiesta el contexto de la acerca del espacio y del tiempo; su propósito se des-
enseñanza, aclarando que éste es otro resultado de la pro- prende, por ejemplo, de la introducción al informe
ducción histórico-cultural del cual depende la ciencia mo- de sus descubrimientos presentado ante la comuni-
derna, como lo explicamos en el capítulo 2. dad de físicos en sus corúerencias en la Universidad
· de Princeton (Estados Unidos) en 1921: "El objeto de
Einstein, ejemplo 1 toda ciencia, sea natural o psicológico, consiste en
Una de las explicaciones científicas más deslum- coordinar nuestras experiencias de modo que el todo
brantes en el siglo XX ha sido la de la teoría especial forme un sistema lógico" 3 • En el seguimiento de las
y general de la relatividad de Einstein, no sólo por su exposiciones científicas de Einstein se descubre no
carácter deductivo-formal ni por el viso espectacular sólo al físico matemático, sino también al maestro
de sus descubrimientos, sino también por la parsimo- que enseña y configura su investigación desde el
nia de la exposición, su coherencia, rigor, contunden- contexto de la enseñanza (además con vocación de
maestro que abre y muestra caminos de búsqueda y
de aventura al pensamiento).
coherencia lógico-formal entre el "marco teórico", los "objetivos" o las
"hipótesis", las definiciones conceptuales y operacionales, el análisis
estadístico, etc., perdiendo de vista la comprensión y relevancia del
contenido fenoménico conceptual que se intenta problematizar
3 Albert Einstein,. El significado de la relatividad, Ed. Planeta Agostini,
específicamente en la investigación. Bogotá, 1986, p. 51 (el subrayado es nuestro).
Hacia una pedagogía del conocimiento La enseñabilidad de las ciencias

Marx, ejemplo 2 nias de desarrollo y a descubrir sus nexos internos.


Dejando a un lado las vicisitudes políticas de sus Sólo después de coronada estalaborpuede el investi-
seguidores; Marx en El capital y otros estudios es gador proceder a exponer adecuadamente el movimiento
real...n 6•
pionero de una joven ciencia; la ciencia de la historia,
cuando analiza y explica las transformaciones socia-
la solución de
Obsérvese que se trata no de una distinción real, si-no problemas de ciencia
les a partir del movimiento de las clases sociales en
formal, pues son dos momentos diferentes del mismo normal es similar a la
permanente confrontación; el mismo Marx es cons-
movimiento. Precisamente, lo que hemos venido susten- solución de
ciente de la necesidad de diferenciar el contexto lógi-
tando ~s 9-ue en el mome_nto e~ que la investigacióri tiell- problemas por parte
co-dialéctico mediante el cual indaga por los con- de los estudiantes,
ceptos claves que le permiten construir su objeto y de a ob¡etivarse, cuand? el mve~ti~ador "entiende" y procede
aformular y a exponer mtersub¡etzvamente el movimiento real, siguiendo el
descifrar la estructura y funcionamíento del modo
es cuando el contexto de la enseñanza deja de ser mero horizonte "problema modelo"
de producción capitalista, a partir de un proceso
~ultu_ra! l?~ra co?-ve~se en forma constitutiva y marco de (el "ejemplar'')-
arduo de búsqueda de indicios, hechos y documentos
sociales, al principio configurados caóticamenter mtehgrb1hdad rmplícrto del resultado mismo de la inves-
sobre los cuales fue detectando analíticamente con- tigación, de la ciencia real que es la formulada, concretán-
ceptos cada vez más elementales, hasta llegar a las dose así, objetivamente, la enseñabilidad de la misma.
determinaciones más simples y abstractas que le Pero lo más sorprendente es que podamos inferir, a
pennitieron luego, de regreso, reconstruir la totalidad partir de ciertas observaciones de Thomas Kuhn7, sobre
social en sus múltiples relaciones y determinaciones, los paradigmas científicos, que la actividad misma de la
como un todo diferenciado y jerarquizado, producido investigación ordinaria en la solución dé problemas nue-
por el pensamiento en su ascenso desde lo más vos se desarrolla a la manera como los estudiantes de
abstracto hasta lo "concreto de pensamiento" como ciencias aprenden a solucionar los problemas típicos pro-
fruto de su creación científica4 • Por supuesto, la ela- puestos al final de su libro de texto.
boración y presentación de los resultados de su Ef~ctivamente, el segundo ~entido más importante
investigación en El capital no es el reflejo del proceso y esencral del concepto de paradigma es el de "ejemplar",
cronológico de su penosa búsqueda, ni de sus entendi~o éste como procedimientos típicos para plantear
alternativas desechadas o verificadas, sino al contra- y soluc10r:ar pr?blemas concretos, compartidos por el
rio, empieza su exposición precisamente por la pieza grupo de ~vestigadores ~omo modelos paradigmáticos.
clave de su descubrimiento teórico, el concepto de Dada la dificultad de analizar y evaluar generalizaciones
mercancía, para la comprensión del sistema de pro- simbólicas y conceptos teóricos disponibles, cada vez que E1 proceso de
ducción capitalista, como inicio de una exposición hay que_ reso~v~~ una cuestión empírica particular, y la investigación normal
sistemática y apodíctica, en la que el orden de los escasa clisporubilidad de reglas mediadoras entre la teoría no es un proceso de
conceptos que caracteriza su razonamiento analítico, y las sihlaciones experimentales concretas (las reglas de aplicación de reglas
crítico y demostrativo5, _no es extraño_ al contexto de "correspondencia" pertenecen más al mundo de los episte- y protocolos de
la enseñanza que yenimos ilustrando, y de cuya pre- mólagos y filósofos que al de los científicos), losinvestíga- investigación.
sencia en El capital era· plenamente consciente el ~o~es en su activrda~ cotidiana se valen de los problemas
mismo Marx, como se infiere de su postfacio de la se- típicos y de sus solucrones para resolver, por analogía, un
gunda edición alemana: nuevo problema, a la manera como los estudiantes se
"Claro está que el método de exposición debe guían por el ejemplo del libro de texto, sin necesidad de
distinguirse formalmente del método de investigación. recurrir a la teoría. La habilidad del investigador se funda-
La investigación ha de tender a asimilarse en detalle ría, en parte, en un mayor bagaje de ejemplares disponibles
a la materia investigada, a analizar sus diversas for- y en su capacidad para reconocer semejanzas entre proble-
mas aparentemente ajenos dentro de ciertos límites"auto-

4 Véase Karl Marx, Elementos fundamentales para la critica de la econo- 6


mía política (Borrador), 1857-1858, Ed. Siglo XXI Buenos Aires, 1973, Karl Marx, El capital, Fondo de Cultura Económica, México, 1973,
tomo l, XXIII.
pp-21-22. 7
s Véase L. Althusser, E. Balivar, Para leer El capital, Ed. Síglo XXI, México, Véase Thomas Kuhn, La tensión esencíal, Fondo de Cultura Económica
1972, p. 56. México, 1982, pp. 325 y ss. '
Hacía una pedagogía del conocimiento La enseñabilidad de las ciencias

rizados" por su comunidad de especialistas. Los criterios a la pedagogía. Ésf:a., más bien, deriva las consecuencias de
de semejanza equivalen precisamente a las reglas de co-
H tales leyes que sean pertinentes para su propósito, a saber,
rrespondencia# que quedan sustituidas o subsumida~ en identificar, describir y comprender los procesos de ense-
el ejemplar. Es claro que estos ejemplares desempenan ñanza que elevan la calidad de la formación de los indivi-
una función cognoscitiva esencial como procesadores de duos, siendo su proceso de intervención privilegiado el
nuevos datos, aun antes del dominio de los conceptos y de la enseñanza de la cultura y de las ciencias, tal como se
de las generalizaciones teóricas que tales ejemplares observa en el desarrollo del presente texto. Un factor
representan, y como elementos indispensables en la forma- desencadenante, imprescindible para la pedagogía, es la
ción de investigadores para la ciencia normal, pues para reflexión sobre las condiciones de enseñabilidad de cada
crear una nueva teoría o un nuevo paradigma, no es fácil saber, y sobre los obstáculos epistemológicos que se opo-
formar a nadie. nen a su aprendizaje.
Pareciera derivarse de lo anterior que investigar no No se trata tanto de la importante tarea psicopedagó-
gica de diseñar la estrategia global y las experiencias
E1 pedagogo se
es aplicar reglas ni definiciones operacionales y por tanto ocupa del acceso
no sería viable, por este camino, formar nuevos inves- particulares que afiancen el desarrollo intelectual y socio- de los individuos
tigadores, mucho menos sobre el aprendizaje de regl';' afectivo del niño hasta garantizar que todos accedan a la al pensamiento
generales y abstractas, aunque las agrupemos bajo el ro- etapa de funcionamiento superior del pensamiento lógico lógico formal y de
tulo de "metodología de la investigación científica" .. ~1 formal, en la que los individuos disponen con solvencia cómo remover los
proceso de creación intelectual en 1~ ciencia ~s t~b1en de los esquemas racionales abstractos que les permitirán obstáculos para el
un proceso cognitivo estructural, mas global, m~tivo y relacionar multivariadamente ideas con ideas, en la reela- aprendizaje del
heurístico de lo que uno se imagina cuando lee las mvesti- boración del conocimiento científico, sino que además, el contenido científico.
gaciones terminadas, pues el producto de la investigación, pedagogo ha de diseñar estrategias y modelos pertinentes
para que sea aceptable", debe elaborarse de manera
11 para desmontar aquellas imágenes y nociones residuales
lógico-deductiva, paso por paso, estableciendo el puente de etapas de desarrollo intelectual ya superadas, pero que
entre el"marco conceptual" que alienta la hipótesis y_ las actúan en la estructura cognoscitiva presente del aprendiz
conclusiones y generalizaciones encontradas. Precisa- en calidad de obstáculos para el aprendizaje de cada ciencia
mente, el puente lo constituyen las definiciones opera- contemporánea, tales como el subjetivismo y el egocen-
cionales y, sobre todo, la verificación experimental. Es así trismo, el animismo, el antropomorfismo, el nominalismo,
La enseñabilidad el razonamiento teleológico, la "causalidad única", etc.8,
de los saberes es como se presenta en las ciencias naturales un resultado
válido, confiable, objetivo, coherente, sistematizado y sus- lo cual exige a la pedagogía una tarea de comprensión, de
punto de partida para diseño y experimentación, en contextos culturales diversos,
la reflexión tentado persuasivamente desde el c~:mtexto de la en~e­
ñanza, sea cual fuere el proceso preVIO del hallazgo; sol? de modelos de intervención que articulen el contexto de La pedagogía
pedagógica. enseñabilidad de cada ciencia con las posibilidades y con-
que en la medida en que el aprendizaje upor descubn- identifica los
miento" en la solución de problemas por parte de los estu- diciones de apropiación creativa del grupo concreto de componentes de las
diantes se asemeje, como cree .Kuhn, a la actividad inves- aprendices. estructuras
tigativa normal de los científicos, se reforzaría con otro Más compleja aún es la tarea de identificar la diná- cognoscitivas que
argumento más la hipótesis de que la :nseñabilidad n~ ~s mica de los componentes principales que movilizan la intervienen en el
ajena sino constitutiva del proceso nusmo de produccron estructura cognoscitiva global y especifica de un individuo aprendizaje ( v. gr.,
científica. dispuesto a iniciar el estudio de un nuevo conocimiento los "organizadores
científico particular, pues no se trata solamente de los previos").
esquemas racionales universales que caracterizan el
2. Enseñabilidad del contenido científico pensamiento lógico-formal ("reversibilidad" 9, etc.), sino
también de los contenidos y propiedades sustanciales y
Precisamente, el contenido más importante de una ciencia
son sus interrogantes, sus problemas y sus hipótesis de organizatívos próximos y remotos al tema que se dispone a
solución. Sin su dominio no hay enseñanza, por más que 8
Véase H. Aebli, Didáctica: Una aplicación de la psicología de ]ean Piáget,
se conozcan los métodos de enseñanza o la psicología Ed. Kapelusz, Buenos Aires, 1957.
individual. El estudio de las leyes generales que presiden " "Reversibilidad" es una de las operaciones claves en el desarrollo
la naturaleza del desarrollo humano individual, como fin intelectual según Piaget, consistente en la capacidad de realizar ejerci-
y objeto propio, es propósito de otras disciplinas diferentes cios mentales opuestos simultáneamente.
Hacía una pedagogía del conocimiento La enseñabi!idad de las ciencias

abordar el aprendiz. Para que la asímilación activa y gar, eri.la mayoría de las disciplinas científicas hay que
duradera del nuevo conocimiento científico se convierta aprovechar el encadenamiento y secuencia lógica de sus
en un aprendizaje significativo, el aprendiz requiere dis- ~iferentes divisiones e interdependencias, pues éstas han
poner del lenguaje y de ciertas ideas previas más generales s1do producidas por el científico también desde el contexto
pero pertinentes al nuevo conocimiento. Tales ideas abar- de la enseñabilidad, como una especie de organizador
Es posible facilitar
la asimilación de los cadoras relacionan, ubican e incorporan pertinentemente previo según una lógica pedagogizada del descubrimiento.
nuevos aprendizajes el aprendizaje en la estructura cognitiva previa, y por esto Finalmente, nunca deberían introducirse materiales
guiados por Ausubel las denomina "organizadores previos" 10 • La nuevos en la enseñanza de una ciencia mientras no haya
conceptos disponibilidad de semejante recurso codificador facilita claro y estable dominio de las lecciones anteriores, pues
organizadores . la adquisición significativa, no memorística de los aprendi- los aprendizajes previos no apoyarán ni serán transferibles
extraídos de la ZajeS, 'eleva su ·cQnsolidación y retención 'Y amplía las a 1os nuevos .mientras aquéllos no se sobreapréndan.
ciencia misma. posibilidades de transferencia y de solución de problemas; Semejar:te principio vale también para el aprendizaje por
en la medida en que tales organizadores previos (suminis- descubruruento; pero la transferencia, de todas maneras,
trados al aprendiz por el maestro) sean claros y estables y no es automática y debería inducirse deliberadamente
permitan destacar o resaltar las diferencias entre el nuevo desde cada principio o concepto previo hacia la nueva
aprendizaje y el conocimiento preexistente ante los ojos área de aprendizaje propuesto.
del aprendiz. Sería posible, por ejemplo, elevar el nivel de transfe-
Se dispone de evidencias experimentales acerca de rencia en_la enseñanza de la pedagogía para los futuros
la influencia positiva en la enseñanza de una ciencia :n:aestros.mcorporando en su pénsum materias y erperíen-
cualquiera, cuando se le suministra al estudiante una czas explfcz~mente de transición entre la teoría del aprendizaje
organización sustancial de los contenidos a partir de y la practica docente, entre los principios de las ciencias Para elevar
E1 método conceptos "organizadores" básicos para toda la materia y puras acerca del desarrollo humano y sus aplicaciones la calidad y
expositlvo en la unidad por unidad, como lo acabamos de describir. Pero pe.dagógicas, en~e las estrategias, técnicas y procedi- transferencia de los
enseñanza podría también hay conclusiones importantes respecto de la orga- nuen~~s de ensenanza para una ciencia particular, y la aprendizajes hay que
complementarse con nización secuencial de los programas: inversamente al soluc10n de problemas en el aula. Habría que tratar de lograr influir en los
experiencias de conductismo, es preferible empezar por la presentación elevar la claridad, estabilidad y aplicabilidad de los componentes de la
transición entre de las ideas más generales y abarcadoras y luego ir diferen- principios y conceptos didácticos de una ciencia particular estructura cognitiva
teoría Y. práctica. ciando progresivamente, especificando y detallando, pues como fundamento directo de su enseñanza en el aula. Po- índívídual.
parece ser que el conocimiento perceptivo humano prime- J?~~ mejorars~ e_l contenido, la organización y la super-
ro globaliza y luego discrimina, y sucede así mismo en el VISlon de la practica docente en las instituciones educativas
proceso de conocimiento complejo, aunque a veces excep- diagnosticando y solucionando problemas concretos de
cionalmente sea necesario proceder a la inversa. En segun- la docencia, y ejerciéndola directamente bajo asesoría
do lugar, la organización del programa debe prever la permanente, como paso intermedio a su ejercicio profe-
interrelación e integración de los diferentes temas y con- sional independiente. El método expositivo en la enseñanza
ceptos sin diluir los contraStes y las diferencias. En tercer lu- de la ?1-?áctica no se o~ondría necesariamente al logro de
su ObJetivo, a saber, ID€JOrar en los estudiantes su habilidad
para definir los procesos de la enseñanza en situaciones
100. Ausubel, Psicología educativa, Ed. Trillas, México, 1974, p. 164. No
puede uno dejar de evocar a Herbart, para quien la "masa aperceptiva" específicas, pues aquí el aprendizaje deprincipiosy estrategias
o estructura cognitiva preexistente influía detenninantemente en la globales no puede reemplazarse por destrezas en ejecutar ejercidos
comprensión y retención de las nuevas ideas, y por ello la labor de los o solucio~ar problemas y casos particulares, en cuyo
maestros era modelar dicha estructura. Sólo que Ausubel precisa entrenarmento no se puede generalizar.
cómo hacerlo significativamente, ya no por simple asociación. Véase
también D. Ausubel, "Defenses of Advance O:rganizers", Rev. of
Mejor dicho, si la estructura cognoscitiva actual refleja
Educational Research, 1978, Vol. 48, No. 2, pp. 251~257. Un importante el resultado de todo el aprendizaje significativo anterior,
desarrollo del aprendizaje significativo lo constituye la estrategia d~ es necesario lograr influir en los componentes más impor-
descomponer y conectar cada concepto principal de la ciencia que se tantes de esta estructura para elevar la precisión, claridad
va a enseñar en sus contenidos implícitos y sus relaciones afines, hasta y capacidad de transferencia de los nuevos conocimientos.
lograr representarlo en nn esquema gráfico jerarquizado denominado
"mapa conceptual". Al respecto véase Novak y Gowin, Aprendiendo a Semejante influencia la podemos lograr, por ejemplo,
aprender, Ed. Martínez Roca, Barcelona, 1988. proveyendo a los estudiantes de conceptos unificadores,
Hacia una pedagogía del conocimiento La enseñabilidad de las ciencias

abarcadores, que ayuden a relacionar e incorporar. or9~­ con más rapidez que los adultos si se les imparte de manera
camente los nuevos aprendizajes; empleando pnnc1p10s que lo puedan comprender" 11 • Reconocidas las ventajas
de programación a~ecua~o~ para order:ar 1~ ~ec_uencia de de adolescentes y adultos sobre los niños, por su capacidad
la materia, construir su logtca y orgaruzaaon mterna, y de extraer elementos de su estructura cognitiva previa
diseñando ensayos, simulaciones y talleres de prácticas. para trabajar los nuevos materiales de conocimiento a un
La anterior estrategia heurística general para la nivel abstracto y lógico-formal, no se puede dejar de seña-
enseñanza de diversas disciplinas, que precisaremos en el lar los vacíos y lagunas existentes en nuestra enseñanza
próximo parágrafo, no pretende se~ ~:rersal ni desarro- por la ausencia generalizada de elaboración pedagógica en
llar la capacidad de pensar de los mdiVI?uos de mane~a todos los ciclos del sistema educativo, en relación con la
general e índependientemenb~ del contemd~ de l.a ;:tatena enseñanza de las ciencias, articulada a la vida del niño y a la
particular bajo estudi?; a?emas, porq~e la dzspo~tczon par~ problemática comunitaria y sociocultural en la que está
aprender siempre es~a ~ne_ntada, focal_IZa?~ haaa detenm- enclavada la escuela.
No obstante, la nada asignatura o disCiplina, y cada mdividuo en s~ ~ta­ Naturalmente, el contexto de la enseñanza preocupa
disposición individual pa particular de desarrollo y en su estructura cognoscr~va, no sólo al pedagogo, como alguien podrá haberse imagina-
para cada nuevo su estilo propio de enfrentarse a~ mund~ ~a los contemdos do. También a los epistemólogos les preocupa el proceso
aprendizaje es de aprendizaje, sus experiencras familiares, culturales, de aprendizaje de las ciencias y de su enseñanza; pero no
específica, variable y sociales y educativas y su estilo muy p~rsonal de pens~, a los epistemólogos neopositivistas que menosprecian el
de alta complejidad. todo ello articulado, contribuye a configurar el compleJO contexto del descubrimiento, sino a aquellos que lo prefie-
espacio en el que el pedagogo debe acoger y definir l<;s ren como objeto de reflexión, al estilo de Bachelard, Piaget
contenidos, expenencras, lenguaJe y metodologms mas o Kuhn. Este último, en particular, asimila el proceso de
compatibles y prod~ctiv_os para la enseñru:za de nuevos solución de problemas científicos de ciencia normal al
conocimientos, y el clima mterpersonal y socral que asegure proceso mediante el cual un estudiante soluciona un pro-
mejores efectos educativos para el desarrollo de la persona- blema por analogía con el ejemplo del texto o con otro pro-
lidad y creatividad del alunmo. . blema que haya resuelto antes exitosamente, y no como
De todas maneras, cualquier tema puede ser expli- un proceso de aplicación de reglas y definiciones opera-
cado y enseñado a un niño, como sostiene Bruner: "En cionales. De cierta manera, el problema modelo, el "ejem- Los epistemólogos
cada etapa de desarrollo el niño ti e~~ una m~er~ caracte- plar" actúa como un procesador de infonnación, como un que se ocupan de la
rística de ver el mundo y de explicarselo a SI rrusmo. La "organizador" prevía compartido por la comunidad cientí- actividad creadora de
tarea de enseñarle un tema a un niño de cualquier edad en fica que caracteriza tanto el paradigma vigente como el los conocimientos
Los aprendices particular, es la de represent~ la estructura de ese tema proceso de formación de los nuevos investigadores. Esta también se interesan
más jóvenes pueden en función de su manera propia de contemplar las cosas. tesis de Thomas Kuhn de que los profesionales y científicos por la enseñanza.
también aprender Puede pensarse que se trata de una tarea de traducción ... S~ se forman solucionando problemas y no enseñándoles
cualquier tema, por se respeta la manera de pensar del niño en desarrollo, SI teoría ni reglas de correspondencia12 es una toma de
complejo que uno es lo bastante comedido como para traducirle el partido a favor de la estrategia de enseñanza "por descubri-
parezca; la clave es material a sus formas lógicas, y lo suficientemente exigente núento" preconizada por Bnmer para la formación de la
pedagógica. corno para tentarlo a que adelante, entonces sería posible nueva generación en el aprendizaje de las ciencias.
inducirlo, a una edad muy temprana, en las ideas y estilos
que en años posteriores constituyen al hombre educado... 3. Enseñabilidad de estrategias de pensamiento
Cualquier idea puede ser representada en las forn;as del
pensamiento del niño en edad escolar ... Xes~as pnmeras
científico
representaciones pueden hacerse despues mas poder?s~s Acabamos de mostrar cómo desde la enseñabilidad del
y exactas con mayor facilidad en virtud de tal aprendizaJe contenido dentífico es posible elaborar principios pedagó-
temprano... Después de haber enseñado desde el preesco- gicos y criterios que permitan influir en la estructura cognosci-
lar hasta la escuela graduada, me he sorprendido de la
semejanza intelectual de los seres humanos de todas las
n Jerónimo Bruner, The Process of Education, Cambridge, Harvard
edades, aunque los niños quizás sean más espontáneo~, University Press, 1960, pp. 33 y 39-40.
creativos y enérgicos que los adultos ... Ha~ta don~e yo se, n Véase Thomas Kuhn, La tensión esencial, Fondo de Cultura Económica,
los niños pequeños pueden aprender cas1 cualqmer cosa México, 1982, pp. 329 y ss.
Hacia una pedagogía del conocimiento La ehseñabilidad de las ciencias

tiva previa del aprendiz de. ciencias para elevar el nivel d.e Sé han hecho estudios que suministran evidencias
precisión, corrección y transferencia de sus nuevos conoc~­ a.cerca del carácter constante de las concepciones estudian-
mientos, en el sentido de facilitarle no tanto mayor canti- tiles sobre los fenómenos físicos antes, durante y después
dad de información ya elaborada, sino, sobre todo, nuevas de la ins~cción científica convencional. La mayoría de
estrategias de procesamiento de información que lepenni- los estudiantes, aun en secundaria, continúan con el
tan incrementar su capacidad de procesar, interpretar y modelo u egocéntrico" según el cual algo que cae al otro
sintetizar activamente la información que requiere, organi- lado de la tieria caerá lejos de ella,. o siguen pensando en
zándola y transformándola en nueva información, en el fondo que la tierra es plana y redonda como una torta13.
nuevo aprendizaje. Desarrollar estrategias de producción de Muchos confunden temperatura y calor y en el análisis de
E1 proceso de
construcción dé
conocimientos, más que inculcarle nuevos datos en su me- los circuit~s generalmente se ap~ican y se preocupan más
moria, es lo que requiere el estudiante contemporáneo por la co_rnente que P?r el voltaje; confundiendo causa y
conceptos permite para participar más autónoma y responsabl~mente en su efecto, e mcluso sus rmsmos profesores pierden de vista el la instrucción
mayor desarrollo de propia formación: "no le regales un pescado, sino más ca;á~er de retroaliméntación presente .en todo sistema científica tradicional
las estrategias de bien enséñale a pescar" es el antiguo precedente cultural electnco14• Muchos otros creen que una bola continúa en no cambia la
pensamiento. chino al vago concepto de "aprender a aprender", que toda- una trayectoria curva luego de hberarse de un movimiento estructura cognitiva
vía hoy casina die explica, peroqueseubíca en la vertiente circular; o que los objetos se dirigen hacia la dirección en del aprendiz.
constructivista de que lo importante en la formación del q~e uno los empuja aunque ya se encuentren en movi-
aprendiz no son los estímulos o datos que recibe sino las miento hacia otra dirección; y hay también estudiantes
transformaciones que él ejerce sobre éstos. Pues bien, trate- qu~ creen que el calor es una sustancia que se puede
mos de avanzar en la pesquisa comúnmente eludida de qmtar o poner, como si tuviera masa, al estilo de la con-
cómo la enseñanza de las ciencias puede contribuir efecti- cepción predominante en el siglo xvnps_ .
vamente a desarrollar estrategias cognoscitivas en el La verdad es que la persistencia de muchas de las
aprendiz. ~oncep~~ne~ int;:itivas de los estudiantes a pesar de la
Naturalmente, las estructuras cognoscitivas, como orga- mstrucC1on C1entífica, nos conduce a pensar en cuáles son
nizaciones mentales de la experiencia previa, son relativa- esos mecanismos que generan tales concepciones o con
mente estables (funcionan como esquemas activos de qué circunstancias podrán asociarse. Una es que el mundo
filtración, codificación, categorización y evaluación de la natural; tal como lo vemos; desinforma bastante acerca de
nueva experiencia), pero se supone que permanentemente su real funcionamiento (por esto es que epistemólogos
se transforman, se acomodan con los nuevos aprendizajes, como Bachelard hablan del N sentido comúnn como de un
sobre todo cuando estos últimos se refieren, no tanto a la obstáculo epistemológico). Otra es el uso natural del len-
definición de un concepto, sino a cómo lo genera, cómo lo guaje que origina confusiones, y el uso incorrecto de ana-
recrea, cómo lo aprende; no se reduce al contenido mismo logías. Pero también, la causa de tales concepciones puede
del concepto sino también a su proceso de producción inte- estar en la secuencia y presentación del tema en la enseñan-
rior. Es este aprendizaj~ del p;roceso el que permitiría al - z~ escolar, .e_:r: los ma;r:uales, y en el carácter abstracto y
aprendíz mayores ganaricias en el desarrollo de estrategias a;-slad? de la u:s~cC1on,. que no se articula ni aplica a las
de aprendizaje, y el que tendencialmente afectaría con s1tuaC1ones cotidianas de los estudiantes, ni confronta sus
mayor profundidad las estructuras cognoscitivas del concepciones.
aprendiz. Sin embargo, parece que las estructuras cognos- No es sorprendente que las investigaciones acerca
citivas de los aprendices permanecen casi intactas a lo lar- de la articulación o enlace de ideas y conceptos (uestructu-
go de la escolaridad, y la enseñanza convencional de las ras cognitivas") en los estudiantes reporten incorrección e
ciencias en la secundaria y en la misma universidad, no logra incoherencia entre los conceptos en un mismo estudiante,
afectar las ideas cotidianas de las estudiantes acerca de las y que tales inconsistencias y contradicciones puedan per-
fenómenos naturales; sus ideas ingenuas acerca del mundo
continúan bien arraigadas aun después de la instrucción
13
científica que las contradice, pues lo que han encontrado Veílse Bat-Sheva Eylon, Marcia Li.nn, "Learning and lnstruction: Four
recientes ínvestigaciones es que los estudian~es ajustan Research Perspectives in Science Education", Review of Educatianal
Research, Fa11 Vol. 58, No. 3, 1988, pp. 251~301.
acomodaticiamente la nueva irúormación aprendida, a 14
Ibúi.
sus viejos puntos de vista, en vez de alterarlos o cambiarlos. 15[b{d.
Hacia una pedagogía del conocimiento La enseñabilidad de !as ciencias

sistir inconscientemente durante largo tiempo por falta errores de razonamiento atribuibles a la falta de discrimina-
de confrontación, pu€s los conocimientos de los estudian- cíón entre conceptos.
tes permanecen con frecuencia sueltos, aislados, dispersos. Podríamos aportarle a la estructura cognoscitiva de
La misma instrucción científica no hace énfasis en relacio- los estudiantes factores de cambio aún más profundos
nar conceptos, no explicita su articulación ni los refiere a que los cambios de contenido conceptual que hemos descrito
las situaciones o fenómenos que ocurren en la naturaleza en este parágrafo, suministrándole alternativas de organi-
vivida por el estudiante¡ no lo hace ni el maestro ni el zación formal de su actividad de pensar y de resolver
texto escolar, mientras que la mayoría de los estudiantes problemas. Veamos cómo algunas estrategias de pensamiento
carecen de la habilidad específica para enlazar, de manera cíentífico pueden llegar aconvertirse en estrategias de aprendizaje
pertinente, cada concepto aprendido con otros anteriores mediante una atinada orientación del maestro (que pudiera
la enseñanza o·con experiencias futuras 16, garantizar la posibilidad de "autoaprendizaje", o del
integra y diferencia En general, los estudiantes se diferencian de los "aprender a aprender"), partiendo de situaciones o expe-
los conceptos científicos en que usan la terminología de manera impre- riencias compartidas desde las cuales los estudiantes pue-
científicos, y cisa, desarrollan concepciones descriptivas del mundo dan formularse preguntas relevantes que permitan la bús-
confronta las consistentes aunque incorrectas, distorsionan las relaciones queda de soluciones científicas, corno ilustración sobre la
concepciones causales, estudian fenómenos científicos aislados, y enseñabilidad del método científico.
erróneas, presuponen que la ciencia no es para entenderla sino para Veamos brevemente dos tipos de estrategias cog-
memorizarla. Esta situación, todavía observable en noscitivas derivadas de la investigación científica, una de
nuestras universidades, ayuda a entender aún más por enfoque inductivo propuesta por Hilda Taba17 y la otra de
qué las concepciones cotidianas de los estudiantes s~e enfoque deductivo expuesta por Chadwick18, ambos peda-
resisten al cambio, al pensamiento científico contempera- gogos destacados que tratan de aplicar los principios
neo,- máxime cuando la enseñanza convencional no es constructivistas cognitivos al aula de clase.
consciente de este problema y las innovaciones y reestruc- El modelo inductivo de Taba propone tres níveles o ta-
turaciones académicas no lo tocan o se quedan en pura reas del pensar como estrategias de pensamiento secuen-
demagogia. ciales que ha de propiciar el maestro en sus alumnos a
Ante la situación descrita, no podríamos afectar partir de la identificación de preguntas estimulantes que
positivamente la estructura cognoscitiva de los estudiantes los fueran introduciendo dentro del tema-problema y
a menos que logremos abrimos a una enseñanza científica provocando su actividad mental creadora. La secuencia
que resalte y explicite tanto las relaciones como las de actividades de los estudian'tes constituye la sintaxis de
diferencias entre los conceptos tratados ahora, sobre el las estrategias pedagógicas, la cual el maestro va facilitan-
tema actual, como con los conceptos anteriores, de manera do sólo mediante preguntas "provocadoras", formuladas
coherente y sistemática, a medida que se anticipen y oportunamente de acuerdo con la fase por la que atraviesa
contrarresten las concepciones cotidianas, de sentido común e el estudiante en su tarea de aprender a pensar. En la tabla
intuitivas acerca de los fenómenos sobre los que versan los 6.1 puede verse el resumen de este modelo, extraído del
conceptos científicos bajo estudio. Es un trabajo crucial del clásico método inductivo de investigación.
docente identificar y analizar las concepciones erróneas de los El segnndo modelo, presentado por C. Chadwick
estudiantes sobre cada tema principal de su materia; pero como una estrategia cognitiva de -"resolución de proble-
es también tarea imprescinélible para un docente efectivo mas" que facilita a los estudiantes el desarrollo de sus
en el cambio de la estructura cognitiva de sus estudiantes, propias estrategias de aprendizaje, puede aplicarse a la
tener siempre presente el horizonte conceptual con que solución de cualquier problema y presenta una forma
llegan desde otros cursos anteriores o paralelos, con el fin deductiva basada en investigaciones de procesamiento
de desplegar más rútida y fuertemente los enlaces y los
contrastes conceptuales que afianzan y robustecen el nuevo
aprendizaje. Integración y diferenciación, he aquí dos estrate-
gias claves de la enseñanza para enfrentar muchos de los
17 Véase B. Joyce, M. Weil, Models of Teaching, Prentice Hall, Inc.,
Englewood Cliffs, New Jersey, 1972, pp. 123-136.
18 Véase Oifton Chadwick, "Estrategias cognoscitivas y afectivas de

aprendizaje", Rev. Latinoamericana de Psicología, Vol. 20, No. 2, 1988,


16 Ibíd., p. 258. pp. 163-205.
Hacia una pedagogía del conocimiento La enseñabilídad de las ci~ncias

semántico adelantadas por Greeno19• Sus pasos esenciales 4. Enseñabilidad de los valores
son los siguientes:
¿Acaso los maestros, aparte de enseñar conocimientos no
1. Identificación clara y representación detallada del enseñan también a comportarse, a tomar decisiones,
problema a resolver. valorar, _querer, respetar y obedecer unas cosas y a rechazar
2. Generación de alternativas de respuesta. otras? S1 todo esto hace parte de la educación, ¿entonces Educar es mucho
3. Selección lógica de las alternativas más promisorias. por qué proponer sólo como objeto de estudio de la más que enseñar
4. Ensayo o confrontación de las alternativas escogidas. pedagogía la enseñanza de las ciencias? ¿Qué va a pasar ciencias.
5. Supervisión o monitoreo sobre el avance del proceso con la taxononúa de los objetivos afectivos ypsicomotores?
de solución, y ajuste permanente de éste a la luz de la , A esta importante cuestión ya empezamos a respon-
"retroalimentación". der en ·el parágrafo anterior. Y, por supuesto, antes del
6. Evaluación de la confrontación o prueba de la alterna- uso de razón, es decir, antes de la etapa de los diez años,
tiva escogida ·según criterios. no se debería enseñar ciencia, ni teoría de conjuntos. Esta
prim~ra época es de ubicación en el mUndo del espacio,
del tiempo, de los otros seres humanos, a través del
Tabla 6.1 Estrategia pedagógica derivada del modelo aprendizaje de la lengua y otros códigos para la comuni-
inductivo (Hilda Taba). cación cotidiana en la vida contemporánea. Es la época
del adiestramiento, de la manipulación psicomotora de
los obj~to~ y de su sustitución simbólica; es la época del Antes de los diez
aprendiZa¡e yrespeto por las reglas del juego, la época de años enseñar
Estrategia uno: formación de conceptos la IIDagmaoon reproductora y fantástica de un mundo en ciencias no es lo
el cual el niño se sueña como el centro, hasta que se prioritario.
Fase uno Fase dos Fase tres identifique consigo mismo. En fin, este niño puede ser
Nombramiento.
preparado para una futura enseñanza de las ciencias,
Enumeración y Agrupamiento
pero lo que más necesita es afecto, socialización; identificar-
listado de de categorías.
obs~rvaciones.
se sin bloqueos ni temores, es decir, más que un maestro, lo
que necesita es un psicopedagogo que le brinde apoyo en su
desarrollo.
Estrategia dos: interpretación de datos. Pero, para edades posteriores, la prevención contra
(inferenc1a y generalización) una educación centrada en la enseñanza de las ciencias se
j~tificaría sólo ~omo concesión a la concepción positivista
Fase cuatro Fase cinco Fase ~eis remante en el s1glo XX sobre la enseñanza de las ciencias
Identificación Explicación de Hacer (como mecanismo para reproducirse como comunidad Pero luego el
de dimensiones las· dimensioneS inferencias. científica); concepción traída a nuestro medio sin recibir énfasis debería ser
y relaciones. y relaciones. críticas, y propuesta recientemente como objeto re4ucido cognitivo (científico-
de la pedagogía, que desarraiga la enseñanza de la vida cultural), pero no a la
de los alumnos y de sus necesidades reales de aplicación manera positivista.
Estrategia tres: aplicación de principios y transformación.
(y explicación de nuevos fenómenos) En efecto, cuando Wittgenstein postulaba la neutrali-
dad valorativa en la ciencia, pues, según sus palabras:
Fase siete Fase ocho Fase nueve "Incluso en el caso de que hubiera una respuesta para
Establecimiento Explicación y/o Verificación todas las cuestiones científicas imaginables, nuestros
de hipótesis, sustentación de de las problemas vitales no serían ni siquiera rozados" 20; o
predicción de las predicciones predicciones. cuando Popper defiende e! ideal de la pureza de la ciencia",
consecuencias. e hipótesis. para el que reivindica el mundo de los hechos, opuesto al
20 1. Wittgenstein, Tractafus Logico-Philosophi.cus, 6-52.
19 Véase J. Greeno, Processes of Solving Arithmetic Word Problems, paper, 21
K Popper, Lógica de ~ ciencias sociales, Ed. Grijalbo, México, 1978,
A.E.R.A., 1982, citado por Chadwick, ibíd. pp. 18-19.
Hacia una pedagogía del conocimiento La enseñabilidad de las ciencias

mundo extracientífico de las decisiones, valores e intereses, principal de afianzar su autonomía, es decir, llegar a ser
ante semejante postulado de neutralidad valorativa no capaz de pensar por sí mjsmo, con sentido crítico, teniendo
podemos menos que compartir la crítica de Habermas al en cuenta lo~ puntos de vista tanto teóricos como prácticos
respecto: "Ello demuestra que los procedimientos empí- de los demas. Es esta experiencia, de consideración de
rico~analíticos de los neopositivistas no son capaces de rnuci:o.s puntos de vista ajenos, lo que facilita en el niño la
darse cuenta de la referencia respecto de la vida en la que posíbi!idad de superar el egocentrismo inicial, la capacidad
de ub1carse en el lugar del otrp, permitiéndole construir
E1 conocimiento en realidad ellos mismos se encuentran inmersos objetiva-
mente. En el seno de una referencia vital fijada en el len- en s~inter~ambio con l?s demás ;ma relación de "reciproci-
científico-social guaje cotidiano y enmarcada en normas sociales, experi- dad medtante la cual nnportana tratar a los demás corno
no es neutra!. mentamos y enjuiciamos tanto cosas como seres humanos quisie~a que lo trataran a él mismo: "No puede haber
con vistas a un sentido específico en el que el contenido moralidad cuando se consideran únicamente los propios
descriptivo y nonnativo vienen a decir conjuntamente tanto puntos de vista. Si se consideran los prmtos de vista de los
acerca de los sujetos allí vivientes como sob!e los propios demás, no se es libre para mentir, romper promesas o ser
objetos experimentados: los valores se constituyen dialécti- descon~iderad?... Un niño que puede hacer todo lo que
camente en la relación entre unos y otros ... La neutralidad desee sm considerar el punto de vista de los demás, per-
axiológica de lo científico es un producto de la cosificación manece atrapado dentro de su egocentricidad. Un niño
capitalista de la mercancía, de manera similar a como son no puede nunca descentrarse lo suficiente como para de-
abstraídos los valores del contexto de la vida... Las condi- sarrollar autonomía, si nunca tiene que considerar los
ciones definitorias de la acción se comportan como momen- sentimientos de las otras personas"23• l a reciprocidad
tos de una totalidad que no pueden ser divididos en una El quid de la cuestión es que para Piaget el principio se aprende
parte muerta y en otra parte viva, en hechos y en valores, de //reciprocidad//, fuente de los valores, se construye so- desplazando y
en medios axiológicamente neutrales y en fines cargados bre la base y de manera análoga que la "reversibilidad", y coordinando variados
de valoraciones, sin malograr aquélla" 22 • Esta relación como las demás estructuras lógicas y cognitivas del hom- puntos de vista, a la
íntima, planteada por Habermas, entre el carácter descrip- bre, a través de la descentralización y coordinación de manera como se
tivo y normativo del conocimiento científico, tan necesaria prmtos de vista en perspectivas cada vez más amplias construyen los
para la educación y la pedagogía, además de clara, parece sobre las cosas y las personas que nos rodean. Y no sólo el esquemas lógicos o
realista e ineludible en el terreno de las ciencias sociales y d~s~r~ollo cognitivo ~dividua!, sino también el proceso a la manera como
humanas. histonco de co~trucaon de las ciencias habría progresado avanza la ciencia.
Naturalmente, esta critica a la neutralidad axiológica sobre estos rmsmos mecanismos de descentralización
y al formalismo lógico en las ciencias sociales no justifica (superando el"egocentrismo") y de coordinación de múlti-
los valores no se ples puntos. de vista (teniendo en cuenta diferentes puntos
sermonean ni se todavía suficientemente la propuesta de una pedagogía
del conocimiento. Pues aunque el conocimíento se enseña- de referencia), de modo que el desarrollo histórico delco~
interiorizan, sino que nocimiento hum~o sería comparable, a grandes rasgos,
se construyen se "comprometido" con la vida de los alumnos, seguiría
vigente el camino tradicional de enseñarles valores, o al con el desarrollo mtelectual natural del individuo. Así, la
afianzando la propia revolución copemicana es un ejemplo de descentralización
autonomía bajo la menos el camino de propiciar que los alumnos los adquie-
ran del medio sociocultural o del medio escolar para desde la teoría geocéntrica, que obviamente era una teoría
mira de los puntos de egocéntrica; la geometrí~ tuvo que pasar muchos siglos
vista de los demás. apropiárselos e interiorizarlos desde afuera hacia dentro.
La verdad es que los niños no adquieren los valores mora- por los conceptos de Euclides antes de descentralizarse en
les absorbiéndolos del ambiente sino construyéndolos desde la geometría no euclidiana; la física cuántica y la relatividad
adentro a través de su interacción con el ambiente, siempre so~ ~jemplos de ~escentralización y coordinación de
y cuando se les garantice el afecto y respeto mutuo de par- múltiples perspectivas por encima de Newton y Galileo, y
te de los adultos que los rodean. La tendencia natural en de la infantil y egocéntrica física de Aristóteles; el mismo
el desarrollo del niño, observada por Piaget, es que precisa- re.alismo in9enu~ ?e la filosofía es un modelo de egocen-
mente el complemento consecuente del desarrollo intelec- tnsmo que Identificaba la cosa en sí con el sujeto, como el
tual es el desarrollo de su personalidad, en el sentido niño que no diferencia su mano de su juguete.

ZZJ. Habermas, Teoná analítica de la cienciil, Ed. Grijalbo, México, 1978, ZJ Constance I<ar.ni La autonomía como finalidad de la educaciól!r implicaciones
pp. 82-85. de la teoría de Pinget, Unicef, Mimeo, Medellin, 1985.
Hacia una ped_agogía del conocimiento La enseñabilidad de las ciencias

Lo que finalmente queda clarificado es que la tenden- través del método, al cual se le asignaba un cierto valor
cia a superar el egocentrismo hacia la autonomía .es ~a místico, un cierto poder generalizador de transferencia
tendencia objetiva manifiesta tanto en el desarrollo m- ingenua para todos los saberes a partir de ciertas claves
dividua! como en el desarrollo histórico del conocimiento mágicas -cuyos vicarios más próximos han sido el latín
humano, fuente natural de los valores en el desarrollo de y las matemáticas- y a través de ciertos pasos ("el
la personalidad a partir de 1~ interacción soci;ll desde la camino") que convertían al neófito en "iniciado~~. En la
infancia; y que la construccron de la autononua como un segunda época de la educación, cuando predominó el
valor moral se puede promover y enseñar a partir de los conocimiento para especular verbalmep.te al margen de la
mismos factores que ímpulsan el desarrollo de las ope- vida (a través de la literatura, la retórica, la gramática y la
raciones lógicas en el niño24, las cuale~s presiden, a su-v_ez, oratoria)~ én medio del realismo ingenuo de la filosofía de
la estructura misma de la autonorrua en su progresiva la época, que consideraba que el conocimiento era la cosa,
elaboración, siempre y cuando las condiciones del medio el método de enseñanza no podía menos que inspirarse
sociocultural y escolar no se lo impidan. Cuando los en el lenguaje, y más particularmente, en la forma como
maestros enseñan los valores y las pautas de buen compor- los infantes lograban el aprendizaje de la lengua materna,
tamiento, o enseñan las materias con conocimientos ya u de lo simple a lo complejo", bajo la misma metáfora que
hechos, definidos, formulados, clasificados, etc., no hay inspira el método inductivo" de lo particular a lo general",
espacio para que el alumno desarrolle ;su person~al1dad y "de lo singular al concepto".
fomente su creatividad, o construya su autonorrua, precr- Semejante mistificación del método debiera investi-
samente porque no se le ofrece otra alternativa fuera de garse históricamente, teniendo en cuenta que si las palabras
obedecer y aprenderse lo que el maestro le enseña. ~?r representaban las cosas y éstas hacían parte de la armmúa
supuesto, una enseñanza de valores co~tr~ la construc~on del universo, el cual a su vez era divino, o por lo menos la
interior de la autonomía y de los conocmuentos es antipe- obra de Dios, de tal manera que siguiendo las huellas de l a pedagogía
Cuando el maestro dagógica. En tanto que una estrategia de enseñanza en la Dios sobre las cosas se podría alcanzar la plena sabiduría, tradicional se dedicó
expone los valores o que el mismo estudiante se inquiete por ciertas preguntas, tal como lo sugieren la misma dialéctica platónica, San siempre al estudio
los conocimientos se proponga analizarlas, evaluarlas y resolverlas yara Agustín, San Buenaventura (véase su obra Itinerarium del método sobre
como algo ya hecho luego autocorregirse honestamente con sus compane~os Mentís in Deum, que es un tratado sobre el método para cómo enseñar.
y acabado, está y el maestro, es una enseñanza que,_ ~e suyo, a .medida llegar a la verdad plena), el método no es sólo el camino"
lf

impidiendo que el a!
que estructura cognitivamente mdiVIduo, lo afianza. en sino también "el destino", pues ''nos hiciste, Señor, para
alumno construya su su propia capacidad y autonorma. Es en esta perspectiva Ti, e inquieto estará mi corazón mientras no descanse en
que proponemos una pedagogía del conocimiento, no c.errad.a
.,
. autonomía y T1 .
desarrolle su en la ciencia por la ciencia, ni dicotom.izada en senes asi- El método de enseñanza en los colegios de los jesuitas
personalidad. métricas de materias, o de" objetivos", unos cognoscitivos y lasallistas no pudo ser muy diferente, dado que en el
y otros ético-socio-afectivos, pues son dos aspectos insepa- siglo XVII todavía se desconocían por completo tanto la
rables e irreductibles=de la existencia humana. Pues, aun- estructura de la capacidad cognoscitiva de los sujetos
que la lógica de laS dencias n? es la misma lógic~ de. ~os como las características más sobresalientes de la dinámiéa
valores, ambas podrían aproxnnars~ en la comun:cacron, del descubrimiento científico, y por tanto, el método no
en el diálogo como estructura esencral de la ensenanza. era más que una intención práctico-normativa que servía
Así, la enseñanza de las ciencias no tendría por qué de puente ideológico entre una teoría ingenua del conoci-
estar de espaldas al "ideal" de contribuir a la formación miento y una concepción metafísica acerca del alma y de
integral del hombre, pero co:rí la diferencia de que la e~e­ sus facultades.
ñanza "normativa" se haría ahora con base y como derzva- No podemos seguir fundando una disciplina cien-
ción del conocimiento y del diálogo racional y no como tífica en un conjunto sistemático de proposiciones nonnativas,
imposición. dado que la intención de la formulación del métOdO no
Desde los antiquísimos maestros hindúes y chinos era principalmente especulativa en el sentido de que se
ha habido constancias de reflexión· acerca del cómo propusiera penetrar en la esencia del aprendizaje, sino
transmitir los "saberes" y valores a la nueva generación a básicamente normativa, de prescribir a quiénes se debía
enseñar, cómo, dónde, a qué horas, etc., siendo difícil en-
2~ Véase Jean Piaget, Psicología del niña, Ed. Morata, Madrid, 1976, p. 148. tonces establecer algún momento histórico en que dicho
Hacia una pedagogía del conocimiento La enseñabilidad de las Ciencias

discurso pedagógico tradicional haya reahnente franquea~ miento", como se desprende de las hipótesis psicosociales
do el umbral epistemológico15 de que habla Foucault, salvo a de Kuhn, Bachelard, del mismo Yaruschevski, e incluso
partir del siglo XX". La posibilidad de una ciencia peda¡;ó- de Piaget; precisamente este último culmina privilegiando,
gica requiere de ciertos deslindes mínimos necesanosr en su gran programa investigativo de la epistemología
como el de que la normatividad que preside el proceso de genética, a la psicología del desarrollo, en reconocimiento,
enseñanza no puede ser verdaderamente pedagógica a además, de que no puede estudiarse la producción
no ser que emane de la comprensión, conceptualización y científica suprimiendo la actividad del sujeto que la
explicación teórica rigurosa, acerca de la interacción entre produce, como harían los estructuralistas, los positivistas
la dinámica del pensamiento científico-cultural contempo- y los conductistas. Popper ha sido más cauto en su
ráneo y la actividad cognoscitiva de los sujetos bajo la mi- epistemología de la ciencia objetivada, P'!les su supresión
La pedagogía
ra de la formación más plena del hombre. del sujeto, de la mente conscienter es apenas una puesta
prescriptiva
Fue un error reducir la pedagogía a la ideológica entre paréntesis metodológica para analizar la ciencia,
tradicional parece
relación tradicional profesor-alumno como "la relación e pero reconociendo la importancia crucial de la mente y la
más un tratado de
pedagógica", cuyos avatares en medio del conjunto de las autoconciencia en la existencia del #Mundo 2N, como él lo
moral que una llama. ·
disciplina dedicada a relaciones sociales es de todas maneras indispensable
estudiar históricamenter e incluso describir etnográfica- De todas maneras, lo que estamos relievando aquí es
entender los
mente, como capítulos de la historia social de cada país, o que tampoco el contexto del 11 descubrimiento" ha re-
procesos de
enseñanza. de alguna antropología cultural. Pero la pedagogía no es sultado todavía suficientemente clarificado, no obstante
los importantes estudios regionales realizados desde el
Pero la ·dinámica de
reemplazable por las famosas didácticas especiales, la producción
propias de la enseñanza de cada ciencia, en las que los punto de vista genético por Piaget en el campo de las científica está
científicos probablemente llevarían la voz cantante como matemáticas y la física, o desde un enfoque de historia de apenas por
exclusivos conocedores de su práctica -y los pedagogos conceptos por Canguilheim en el campo de la biología. Y aclararse, lo mismo
serían excluidos no tanto por acientíficos sino por ambicio- de ninguna manera está suficientemente definido el con- que "el contexto de la
sos-, como lo sugiere el autor del texto siguiente: "La texto de la enseñabilidadr ni a nivel general ni regional, de enseñanza".
pedagogía es una disciplina tentacular que se extiende manera explícita y consciente, pues entre los científicos ha
por todas partes. Se considera que para un enseñante existido siempre como el razonable presupuesto no
viene a ser más importante aprender a enseñar que apren- sustentado de que cada disciplina se aprende trabajándola,
der qué enseñar, se produce aquí una situación patológica metiéndose en su estructura y funcionamiento paradigmá-
La pedagogía no se resultante de una enfermedad del espíritu, del cuerpo so- tico propio, y que sus formas dt? presentación y exposición
. agota en el estudio cial y de la enseñanza: la pedagogitis" 27. "en público"r que le adeudan a la cultura "científican de la
de la relación época, son más bien derivaciones implícitas de su objeto y
maestro-alumno ni método científico. El objeto y el método de enseñanza se-
en la dialéctica. 5. La creatividad no es enseñable ría, según ellos, consecuencia directa y exclusiva del objeto
y método de la ciencia que se enseña, como si el aprendiz y
La dinámica misma de las ciencias no es completamente su can texto no existíeran, o existieran sólo como rma entidad
transparente, ni siquiera en el contexto de la justificación, lógico-formal abstracta y universal. Es decir, no hay que
es decir, en el desarrollo de la lógica interna de las ciencias, confundir la enseñabilidad de una ciencia con su enseñan-
tal como se presenta en los informes de investigación zq. concreta a un grupo particular de aprendices, pues ésta
objetivados; y las hipótesis que describimos en el capítulo es más bien un proceso del "Mundo dos", aunque esté
4 para explicar el progreso científico tienden a ser iluminado por la pedagogía.
tautológicas ( 11falsaciónn, "filosofía del no", "saturación" Lo que sí parece claro es que la actividad creadora en
del paradigma) o tienden a explicarse por el"otro" con- la producción de nuevos conocimientos es de similar
texto, por la actividad individual o social del "descubri- calidad en la ciencia "normal" que en la producción de
una nueva teoría revolucionaria, pues estos dos niveles
23 Michel Foucault, La arqueología del saber, Ed. Siglo XXI, México, 19:(3. de la actividad científica no pueden delimitarse de ante-
25 Véase la diso.tsión planteada por Gómez y Bedoya en Epistemología y mano muy llitidamente ni diferenciarse en su esencia, no
pedagogía, Ed. U. de A, Medellin, 1983, Cap. IL o~stante Kuhn homologue la actividad de ciencia notmal
27 Guy Avanzini, La educación en el siglo XX, Ed. Narcea, Madrid, 1977,

p. 347, citando a R. Picard.


en la solución de problemas nuevos, a la actividad de
Hacia una pedagogía del conocímiento La enseñabilidad de las ciencias

aprendizaje de las ciencias por el método pedagógico de !O~ supuesto que la nueva raza de "máquinas de
solución de problemas "por descubrimiento" (J. Bruner) ensenar' son los computadores. Pero para los informáticos
bajo la guía del ejemplar; es decir, para Kuhn ambas acti- 1a asimilación continúa siendo un proceso misterioso y
vidades de solución de problemas, la una como investi- mágico de"caja negra". Para ellos, en principio, el cerebro
gador y la otra como aprendiz, son psicológicamente opera de manera comprensíble y, en consecuencia, ¡todos
análogas28 • los procesos cerebrales se derivan de un: sustrato compu-
No obstante, la actividad creadora permanece aún table! Como si el hecho de que las neuronas sumaran co-
sin definir y sin algoritmizar (probablemente no por igno- rrectamente garantizara la corrección de las conclusiones
rancia), a pesar de los ingentes intentos hechos en el que se infieren a nivel superior. Flotando sobre la actividad
No contamos con campo de la cibernética por automatiZar electrónicamente neuronal el nivel simbólico del cerebro (la actividad men-
criterios para ·za inteligencia (frtificial, inspirados paradójicamente por tal) refleja al mundo, pero la sola actividad neuronal com-
establecer fronteras una concepción determinista de explicacíón causal propia del putabl~ ~~genera por sí misma pensamiento, a pesar de
cualitativas entre la siglo XVII: el acto creativo -aparentemente contrario a lo s~ preaswn calculadora. Los procesos simbólicos de alto
creatividad del mecánico-, como cualquier otro efecto, tendría una expli- mvel que crean la experiencia de apreciación de la belleza
aprendiz, la del cación determinable, modelable, programable y en conse- son perfectamente racionales en el nivel básico de síntesi;
científico normal y la cuencia mecanizable por medio del computador. La difi- neuro.cerebral, donde generalmente no se producen equi-
del descubridor cultad de este proyecto radica precisamente en que la vocaCiones; cualquier "irracionalidad", si la hubiere, se La sola actividad
revolucionario. flexibilidad propia del acto creativo pertenece a un orden produciría en niveles intermedios de la mente autocons- neuronal computable
diferente del físico o neurofisiológico, que su marco de re- cien~e, en su interminable búsqueda de significaciones a no genera
ferencia es precisamente el libre arbitrio, es decir, la arbi- partir de las estructuras cognoscitivas multidimensionales pensamiento,
trariedad, la ambigüedad, la fluidez y la imprecisión in- del ~térprete, en donde las propiedades semánticas se ni imaginación
determinables mecánicamente, y en que este carácter repliegan imprevisible e inagotablemente. Los procesos creadora.
polisém.ico y opaco de la creatividad no puede ser sustitui- de razonamiento deductivo pueden programarse en un
do por la escogencia automatizada y azarosa de números solo nivel, el lógico-formal, por lo cual pueden per-
aleatorios en un programa de computador, precisamente fect~ente separ~se, aislarse.~ esquematizarse y repro-
porque las decisiones creadoras, aunque indeterminables, ducrrse por e~ analista. Pero los procesos de la imaginación
siempre son motivadas incluso emocionahnente. Además, y del pensamlento analógico requieren de diversos niveles
la creatividad no es una entelequia que exista en ninguna capas Y. sus~r~!os inseparables, donde empieza la creativi~
parte, ni que posea rringúnindividuo en particular; lo que dad, la mhncron creadora de los artistas y de los científicos,
existen son actos creativos concretos y específicos cuya montada sobre acontecimientos ininterpretables de menor
transferencia a otras sihlaciones es impredecible e indeter- nivel (pues el nivel '~alto" es el de lo "lógico-formal"), co-
minable -y por ello a nadie se le puede formar en mo ~ob.re el l~guzqe naturaL en el que la sintaxis y la
La actividad creatividad en general ni en particular-, aunque tenga- se~antica estan pr?fundamente imbricadas, expresando
creadora no es regtones subconsCientes de intancibles lazos entre los
mos la presunción de que pedagógicamente convenga
programable ni más no interferir la espontaneidad del estudiante en el símbolos y las vivencias y experie;cias -de este mundo.
enseñable. desarrollo de su actividad, cuando está aprendiendo a
solucionar un nuevo problema con sus propios recursos,
aprovisionándose como aprendiz de un nuevo patrón pa- 6. La pedagogía del conocimiento,
ra procesar información, ala manera de las ciencias cuando disciplina hermenéutica
disciernen un nuevo patrón en el mundo, o de la gente co-
mún cuando comienzan a mirar un aspecto del mundo, La ambigüedad epistemológica de la pedagogía no se
de los demás o de sí mismos de manera diferente, pues ongma entonces en su necesaria relación con los valores
mutáciones paradigmáticas acontecen todos los días aun- las ide?lo~~ o los avatares sociopolíticos; sino más bi~
que no trasciendan a los archivos de los historiadores. en la histonodad y complejidad interna de su objeto que
le ha exigid~ la sobrecargada tarea de ser ella mi~a y
desde el c~nuenzo, ~ m~os, t~ complej~ como el objeto
23 Véase Thomas Kuhn, La tensión esencial, Fondo de Cultura Económica, que estudia, para evitar srmplificarlo y distorsionarlO¡ y
México, 1982. - para no exponerse a ser mirada como un obstáculo en la
Hacia una pedagogía del conocimiento La enseñabilidad de !as ciencias

enseñanza de las ciencias por los episternólogos, tipo dizaje en orden a la formación íntegral del aprendiz
Bachelard, o por los mismos alumnos aburridos con la -observando aqui que la "formación" es también un valor,
escuela. La comprensión de la articulación Jorma?ora en~re la definido sociohistóricamente en cada cultura, inseparable
dinámica de las ciencias y la dinámica del aprendz~ constl~uye de la determinación histórica que atraviesa esencialmente a la
su "objeto" de estudio. Ta~ arti~lación no ~s ~-unpos1b~e, pedagogía.
puesto que en efecto los mvestigadores, crentíficos.Y artis- Naturalmente que puede haber curanderos eficaces
tas son precisamente ejemplares de tal convergencra/ en el en la llamada medicina "tradicional", como puede haber
"limite" del desarrollo de las dos dinámicas. Pero ambas buenos profesores de matemáticas sin formación peda-
pertenecen a órdenes diferentes, se consti~yen .bajo la gógica, es decir, pedagogos espontáneos e improvisados
presidencia de leyes autónomas, a veces divergentes, }o que, gracias al contexto de la enseñabilidad en que está
que ha dificultado el éxito epistemológico de la pedagog¡a. formulada la misma matemática, logren algún éxito en su
El carácter fluido del desarrollo mmterrump1do de enseñanzaf sobre todo con alumnos prestos y con alta
l a movilidad la cultura y de las ciencias en su doble'' contexto", y la??- predisposición a aprender la materia a pesar de las dificul-
creciente de la ble inestabilidad del contexto del aprendiz, enconstruccron tades, como es el caso de muchos estudiantes de las
producción científico- ininterrumpida por su agitada interacción con la c.ultura, universidades, o para "ganarlau como es el caso de lama-
cultural del aprendiz por un lado, y con las ciencias por el o?'o, ~os pr~:11e.ne ~; yoría. Pero difícilmente ese profesor podrá emular con un
exige que la la ilusión de esperar que la pedagogta, s1empre ab~erta. , profesor que posea el mismo dominio de la teoría matemática,
pedagogía sea una se convierta definitivamente algún día en una cencra pero además conocedor de la génesis de las nociones de l a pedagogía
disciplina abierta. acabada, y nos confirma a su vez el carácter fluctuante de número, espacio y tiempo en el niño, etc., de las caracte- sistematiza y
la interacción aprendiz-comprensión científic~-cultural, rísticas propias del contexto cognoscitivo, lingüístico y recontextualiza
que la pedagogía se propone compr~nder, explicar y cua- sociocultural del grupo de alumnos, y además de la derivaciones
lificar eficazmente, no sín que ella nusma se afecte de una epistemología e historia de los conceptos que va a traducir conceptuales de
cierta provisionalidad en sus conclusiones. histórí~?­ en clase. La integración de estas habilidades en un mismo otras ciencias.
culturalmente determinadas. No obstante, tal mteracaon maestro es escasa, pero debería estarse fomentando desde
en su variabilidad no desaparece, perdura como esencial hace tiempo en las facultades de educación (claro está que
a la existencia misma del hombre, pues no se trata de una lo que llamamos propiamente pedagogía no son las
simple yuxtaposición accidental entre el contexto de l~s consecuencias prácticas de semejante suma de saberes
ciencias y el del aprendiz, entre los cuales la pedagop-a para el maestro en el aula, sino más bien la comprensión
tendería un puente hermenéutico, sino de una relacmn teórico-conceptual sistematizada y corroborada de la inter-
esencial mediante la cual el aprendiz no se forma sino en acción formativa entre el contexto de la enseñabilidad y el
interacción con el conocimiento y la verdad, erunarcado contexto del aprendiz). Por supuesto, la pedagogía así
por una relación estructuradora y abarcadora de la historia definida no es una disciplina sólo aplicable a niños, porque
y de la cultura que necesitamos entende~ :acionalmente. para la pedagogía nadie es un adulto, todos los individuos
De manera análoga a como la medicma es entre las están en desarrollo ininterrumpido, su estructur!l cognos-
ciencias naturales una disciplina aplicada que extrae citiva nunca está acabada, siempre podrá reestructurarse
consecuencias de otras disciplinas puras (o aplicadas) desde una nueva experiencia, una nueva concepción del
como la biología y la fisiología o la química farmacéutica, mundo, un asombro... Las operaCiones lógico-formales
para describir y evaluar los estados de salud de la pobla- disponibles para el índividuo desde la adolescencia apenas
ción y formular las estr:_ategias clínicas pertinent~,s par~,su son la herramienta para acelerar más poderosamente el
protección vital-observese que el concepto de s~lu.d es proceso de conocimiento y de autoformación espiritual
un valor, de carácter axiológico y sociocultural-, as1 rmsmo que dura toda la vida.
la teoría pedagógica desde su misión formadora puede Finahnente, la enseñabilidad del saber racional de
derivar consecuencias de la psicología del desarrollo, de las ciencias en su lógica, contenido y estrategias metodo-
la epistemología regional y genética, de~ contexto de lógicas constituye apenas la condición del material más
enseñabilidad de una ciencia y de su histona, para enten- calificado sobre el cual los hombres pueden desplegar
der mejor las condiciones generales de su enseña.n::a, y acciones inteligentes, valorativas y creativas de manera
aplicarlas a las condicion::S específic~ .culturales e mdl- coordinada y sistemática, para lograr mayores niveles de
viduales que eleven la calidad y efectiVIdad de su apren- humanización bajo orientación pedagógica. La pretensión

1
¡

También podría gustarte