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EDUCACION HUMANISTA
SHELSYN MORENO
2021
La sociedad de habla Hispanoamérica ha tenido grandes sucesos históricos que han impactado
significativamente en todas las estructuras de orden social, político, económico, cultural, y sobre
todo en el ámbito educativo, por lo cual concierne una transformación impulsada por los
pensadores más influyentes dentro del crecimiento fortuito del mundo, estos yacieron en las
guerras tales como la de la independencia, la llegada del petróleo, la industrialización, la
globalización que es el que ha dirigido socialmente y culturalmente el potencial innegable de las
riquezas humanas, pero como todo lo impactante globalmente, ha tenido componentes o
respuestas negativas que es el egoísmo y la jerarquía y sobre todo el pensamiento de ver todo lo
que produce el ser humano como recurso o inversión que puede utilizarse y desecharse. por
sectores que la dirigen, pero al menos ha promovido la paz solidaridad y el entendimiento por
parte de un colectivo humanístico de la sociedad.
En este contexto, la educación por tal razón no ha estado desprendida de los desafíos históricos
asociados a los tiempos que corren, y son muchos los teóricos que plantean ideas acerca de una
educación regida por el humanismo. Es de gran calibre conflictivo ver como hoy día es cada vez
más difícil motivar y generar en los estudiantes una actitud de entrega y dedicación hacia sus
estudios como parte de una identificación personal y no como algo instrumental La forma
tradicional de la educación y principalmente conductista, ha venido socavando la voluntad de los
jóvenes, sometiéndolos a una visión limitada del hecho educativo y por ende de su propio
aprendizaje. En Donde el mayor peso de conciencia se maneja en la necesidad de obtener una
titulación y no en la formación del sí mismo, ni mucho menos en el desarrollo de ser.
Por tal razón se dice que facultades humanas forman un sistema que no puede haber regularidad
armonía sin el concurso de cada una, y que no se pude paralizar una fibra, ni una sola fibra del
alma, sin que todas se enfermen, porque simplemente el estudiante no es estudiante sino hay
humanidad, moral, equilibrio, mente científica, ética y afecto. Por eso desde el siglo XX, nos
referimos a una nueva juventud que se siente más empoderada de su persona, que, con sus
aptitudes, y actitudes ya que desde el hogar se les trata con mayor horizontalidad, es decir tienen
muchas veces voz y voto dentro de las decisiones que se toman en la familia. Esto hace que
dentro de las clases exijan mayor respeto a su individualidad, consideración a sus circunstancias
vitales y reconocimiento de lo que son por derecho propio, es decir como seres humanos. Aunque
a veces, el nivel de sus exigencias se quede apenas en la reivindicación de una calificación o la
protesta por una injusticia, sin conocer sus verdaderos derechos dentro del sistema educativo, así
como el sentido profundo de encontrarse en él.