Axiología y la formación del ser

humano
El valor del hombre, como concepto, es el modo de ser por el cual el hombre se hace
bueno y realiza bien lo que le corresponde hacer en lo individual, en su entorno
inmediato y en la sociedad de la que forma parte; esto es el modo mediante el que
realiza bien sus funciones propias. En consecuencia no es incorrecto afirmar que el
hombre virtuoso es aquel que ha adquirido como hábito la realización correcta de sus
funciones individuales y sociales, en términos de buscar siempre beneficios y de evitar
siempre perjuicios. El hombre que se desempeña con virtud juzga con rectitud todas
las cosas y en cada una de ellas se le muestra el valor.
El valor en tanto cualidad relacional se manifiesta o surge, en principio, con el buen
actuar del hombre, es decir, siempre que el hombre observa comportamientos
tendentes a generar algo benéfico y a reducir consecuencias perjudiciales. Lo anterior
se presenta en actividades humanas tan variadas
Comenzamos a tener valores cuando somos niños. Primero aprendemos a tener aprecio
por las cosas que satisfacen nuestras necesidades básicas, pero valoramos especialmente
a las personas que nos las proporcionan. Su comportamiento hacia nosotros se vuelve la
principal referencia de lo que es valioso.
Aranda Barradas, Juan Silvestre y Salgado Manjarrez, Edgar (2005). La formación de
valores en el ser humano. Innovación Educativa, 5 (28), 33-43. [Fecha de Consulta 10 de
Agosto de 2021]. ISSN: 1665-2673. Disponible en: https://www.redalyc.org/articulo.oa?
id=179421470004

( El ser humano es un ser apto de voluntad y de cultura, el cual tiene como proceso

convertirse en una persona que se incorpora a participar en una sociedad de valores.
Como personas hay que valorar a todos por igual sin importar  raza, color, sexo, idioma,
religión o diferente costumbres y eso lo aprendemos desde muy pequeños con ejemplos,
con amor y sabiduría de las personas que nos guían y nos dan esa formación de valores
Por esta razón, nuestro carácter y personalidad se moldea con las actitudes y
comportamientos de las personas que nos crían, bien sea los padres o otros familiares .

Tambien vamos aprendiendo a valorar el fondo y la forma de todo lo que ellos dicen y
hacen, así como lo que dejan de decir o hacer. Cada gesto o comentario tiene una gran
influencia en la formación como personas)