Muchos amigos se preguntan ¿qué hicimos para merecer este
castigo de gobierno que tenemos en Venezuela? Yo también me lo he preguntado y la respuesta que he encontrado pes que no es lo que hicimos lo que importa sino algo mucho peor ¡lo que no hicimos! NO votamos con conciencia y en muchos casos NO VOTAMOS porque ¡que fastidio! NO trabajamos por el bien común. NO supimos conservar lo bueno que teníamos porque más fácil era enchinchorrarnos y darlo por merecido sin haber hecho el menor esfuerzo. NO marchamos protestando el primer muerto por la violencia. NO marchamos ante los abusos de poder de todos los que nos han gobernado. NO marchamos para exigir los derechos que debíamos tener y por cumplir los deberes que son nuestra responsabilidad. Ahora nos toca marchar mucho más de lo que lo hemos hecho para poder redimir las omisiones, que son los peores pecados, porque lo que NO hemos hecho corre el riesgo de quedarse sin hacer para siempre.