ser quien es.

Mercurio es amigo de develar la verdad escondida en

las cosas, pero para quienes lo tienen en Piscis, esa verdad, como
está en su interior, les es esquiva; por eso les conviene desarrollar
una aptitud correcta, para aprender a ver la relación existente entre
las cosas.
Como les es fundamental lograr aplicar al diario cualquier
visión espiritual, son muy dados a la reflexión y la meditación; pero
deben cuidarse de los estados de modorra mental en los cuales
pueden caer, pues la confusión los ronda. Les cuesta trabajo tomar
medidas o medir las realidades de la vida; pero en cambio son muy
buenos para perderse en el laberinto que son ellos mismos. Como
Mercurio simboliza la sincronicidad, las transiciones, lo sensorio y la
intuición, en este signo, si la persona no maneja bien dichos
conceptos, también representa el miedo a ser uno mismo y la
inestabilidad.
La persona poseedora de esta posición, puede tener una
extraña comunicación con las personas de este signo. Para
comprender más su significado vea en qué decanato y casa tiene
este principio astral.
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VENUS, la Varona Divina.

Venus, la gracia de Dios, siempre se ha asociado con los
conceptos del espíritu verdadero y del amor ideal (aún ideales
individuales), ya bien sea dando o recibiendo dicho afecto. También
se reconoce en él, por su regencia del signo Tauro, al Becerro de
Oro de la materia y sus placeres, así como la estabilidad de las
cosas materiales y corporales (Venus-Pandemia); mientras que por
su regencia en el signo de Libra simboliza el dinamismo equilibrado,
perceptivo y racional de la mente (Venus-Urania)
Se dice que es dual, como acabo de mencionarlo; además,
si sale en el horizonte antes que el Sol como Estrella Matutina, se le
conoce con el nombre de Venus Lucifer; y si sale después, Venus
Hespéride o estrella vespertina. La primera Venus puede
representar a las personas que se sienten elegidas por Dios para
una misión específica; son seres creativos, innovadores, intuitivos y
buscadores de la libertad, que viven para vivir el día con gusto y
gracia. La otra Venus representa a alguien amoroso, estable, más
racional y relajado; alguien que vive para comenzar la noche.
Se estudia en la posición de Venus en nuestra carta natal, el
alma humana consciente o el intelecto en el plano mental. El alma o
ánima, entonces, aprovecha esta materia para dibujar y dejar
plasmada en la realidad sensible su propósito. Venus, necesitando
ser deseada y evitando todo tipo de enfrentamientos, suaviza
cualquier planeta en aspecto con él; lima asperezas y rechaza toda
violencia, representando la paz, el concepto de felicidad, lo que nos
hace felices solos (amor a sí mismo) o compartiendo (el amante) las
relaciones sociales; pues nos ha de gustar el deseo de compañía y
de reflejarnos en el otro o en la gente de la cual nos rodeamos; así
como en el entorno en el cual vivimos. Por ello Venus representa la
base de la autenticidad de nuestras elecciones personales y cómo
atraemos a los demás. Lo que nos gusta; lo que nos gusta de
aquello que nos rodea, y qué de nosotros le gusta a los demás; es
decir cómo, por qué y con qué los atraemos.
Venus-Afrodita es la seducción y el amor adolescente; el
símbolo de la armonía y de las coaliciones, de la fuerza o poder de
atracción (en especial el tipo humano en particular que atraemos a
nuestra vida); también representa el talento (la musa) creativo innato
(el arte) y la intuición sensorial.
En la posición de Venus en nuestra carta astral, hemos de
estudiar la conciencia específica del individuo, y los impactos
psicológicos que nos ha dejado impresa nuestra madre en la
infancia. También representa la autoestima, los valores o lo que
valoramos permanentemente, y como obtener autovaloración;
porque nos puede dar identidad o fama; porque nos puede servir
para reconstruir lo afectado en nuestra vida; porque le da placer al
cuerpo (el dulce deseo y lo erótico y sensual) o satisfacción crítica.
Venus es símbolo de lo estético, de lo hermoso en todo sentido, del
refinamiento de las costumbres, del glamur, del deseo de gustar (o
el objeto deseado), de la risa, la diplomacia y de todo aquello que
nos ayude a introducir no sólo armonía social en la vida personal,
sino a contribuir calurosamente con la sociedad. Si no lo logramos,
aparece la otra cara de Venus trayéndonos la pérdida de
autoconfianza y estima en esas mismas situaciones sociales; pues
reprimimos facultades socialmente valiosas, por miedo al rechazo.
Pero también estudiamos en Venus la vida en común, cómo
acentuar nuestras mejores cualidades y hacernos felices a sí
mismos y a los demás; he ahí nuestras comparaciones, el compartir,
los compromisos en general, el dar, la dependencia de los demás, el
dinero, las formas de cambio, el gusto, el ocio, la comodidad, el
beneficio menor, lo poco práctico, la tranquilidad.
En una carta femenina la energía de Venus es más accesible
que la de Marte; sucede lo contrario en una masculina. Venus es lo
que él busca en las mujeres y Marte lo que ella en los hombres. En
la carta astral de una mujer, Venus significa lo que ella es capaz de
darle al hombre (la copa o cáliz abierto); y en la de un hombre, el
tipo de mujer que él necesita, atrae o busca ya bien sea como
compañía, novia, esposa o amante.
En la mitología grecorromana Venus encarna a Eufrosina,
una de las tres Gracias; aquella que es la encarnación del regocijo,
el júbilo y la alegría. Entre las Musas es Erato la amorosa;
acompañada de un ciervo de cornamenta en forma de lira; es ella la
encargada de la elegía, la lírica-amorosa, la poesía erótica y la
prosa romántica (canción amatoria)
Venus y la Luna Negra son la lujuria, o la abundancia y
exuberancia en demasía pero, especialmente, en lo sexual y fuera
de control al estilo Pan, Príapo, Eros, Dioniso, Lilith o Afrodita por no
mencionar más. Es ella la energía sexual que se aprovecha del
excedente de energía de los otros centros que componen al hombre
y a la mujer; es decir, se vale de la energía del intelecto, las
emociones, lo instintivo y lo físico, para adueñarse de dicho
excedente en forma de comportamientos lascivos, estilo mente
lujuriosa, “viejo verde” o “chiste morboso”.
Pero por encima de todo lo escrito hasta aquí, Venus es… lo
que necesitamos.

VENUS EN ARIES
Qué poco le agrada a Venus estar en este signo; es como si
a la bella Afrodita le correspondiera aguantarse al sucio, agresivo y
sudoroso Atila a su lado. Venus es la paz, pero Aries es la guerra;
Venus es el sexo femenino, Aries lo masculino; Venus es lo que
atraemos, Aries lo que rechazamos o la agresividad con la cual
actuamos. A pesar de estas contradicciones, quienes tienen esta
posición sienten una fuerte devoción a sí mismos; y, como son de
afectos intensos, la benevolencia no es una de sus cualidades. Por
el contrario, su sentido de justicia y hasta de artes estratégicas,
puede estar acentuado. Esta posición también puede dar apatía,
despreocupación, escepticismo, como que no vale la pena luchar, o
a la persona le cuesta mucho hacerse valer.
Venus es la armonía, pero en Aries puede tener una falta de
discernimiento tan grande, que también le cuesta trabajo lograrla.
Como la dulzura de Venus se puede volver indolencia en este signo,
las personas que poseen dicho aspecto debieran cultivar la frase
“quiero lo que tú quieras”; pues la función de este planeta es amar,
no importa en cual signo se encuentre. Precisamente, el amor y las
relaciones con los demás son críticos cuando Venus está en Aries;
por eso se hace difícil la convivencia social y en especial las
relaciones maritales.
Como la persona ha de tener mucha afinidad con las
personas de este signo, para comprender más su significado vea en
qué decanato y casa tiene este principio astral; y observe qué casas
rigen Libra y Tauro.

VENUS EN TAURO
Como Venus rige a este signo, quienes tienen tal posición le
hacen la coquetería a la vida; puesto que les fascinan los deleites, la
delicadeza, las diversiones y se emocionan con todo aquello que les
produzca placer y…dinero. Para ellos la vida es como saborear un
dulce, una crema, un helado y, como no importa quién se los de,
son símbolo de la infidelidad. Como ansían la paz a como tenga
lugar, la frivolidad los ronda; es decir, siendo Tauro el burgués y el
buena vida, les atrae todo lo fino, los perfumes, el placer de los
sentidos, la vestimenta costosa y por supuesto todo ello acaba
haciéndolos ser sensuales y eróticos. La música, el sentido artístico
en general y la educación para poder vivir su tren de vida, los hace
ser muy trabajadores o muy amigos de buscar quien los sostenga.
La intuición les ayuda para lograr ambas cosas y, en especial, la
seguridad económica, para lo cual pueden llegar a extremos
inconcebibles.
Muchos individuos con esta posición, logran conquistar un
espíritu verdadero de paz y armonía a través de la materia y los
asuntos prácticos de la vida; por lo cual jamás entrarán en
elucubraciones mentales que los saquen de su base personal.
Como el verbo dar y pedir es algo que utilizan con mucha
frecuencia, tienen un dinamismo muy equilibrado en entradas y
salidas de dinero, y de energía en general.
La persona ha de tener mucha afinidad con las personas de
este signo. Para comprender más su significado vea en qué
decanato y casa tiene este principio astral; observe qué casas rigen
Libra y Tauro.

VENUS EN GÉMINIS
Puede llegar a ser un placer el escuchar hablar o contar
historia a quienes tienen esta posición; pues poseen un dinamismo
equilibrado y racional de la mente, lo cual les ayuda a evitar
enfrentamientos y limar asperezas con los demás a través del
diálogo. Rechazan todo tipo de violencia y representan la paz
lograda por medio de conceptos mentales. Como su concepto de
felicidad está muy ligado al de la inteligencia, pueden ser felices
solos, mientras estén entretenidos con el tema que les agrade o
compartiendo con los demás sus descubrimientos. Las relaciones
sociales pueden ser fáciles y múltiples, ya que les gusta el deseo de
compañía y reflejar en el otro o en quienes se rodean, lo que han
aprendido. Lo que sí les cuesta mucho trabajo, es a la hora de elegir
lo que sea o a quien sea; pues no saben qué es lo que les atrae de
los demás, ni qué es lo que en ellos ha atraído a las otras personas.
Como Venus es la seducción y Géminis es la adolescencia,
quienes tienen esta posición siempre se sentirán jóvenes al amar y
amando a los demás. La amabilidad, la armonía y las constantes
coaliciones, los acompañarán toda la vida, y deben saber que su
fuerza o poder de atracción está en su centro intelectual; por eso
deben cultivarse mentalmente con mucha insistencia.
 La persona ha de tener mucha afinidad con las personas de
este signo. Para comprender más su significado vea en qué
decanato y casa tiene este principio astral; observe qué casas rigen
Libra y Tauro.

VENUS EN CÁNCER
Si Venus es el amor y Cáncer la familia, aquí encontramos al
individuo que busca el tipo humano que le atrae para sentir placer
en el hogar. Muchos tienen una musa encerrada que deben dejar
fluir, pues lo creativo innato está muy arraigado en ellos gracias a
una intuición sensorial, que puede ser tan fuerte que los lleva a sufrir
más de la cuenta, y por pequeñeces que ni siquiera vale la pena
mencionar. Les fascina atender a los demás y hacerlos sentir como
si estuvieran entre sus brazos o en su propia casa. Los impactos
psicológicos que les ha dejado impresa su madre en la infancia son
tan fuertes, que muchos jamás pueden cortar los cordones
umbilicales con ella.
Estas personas tienen que desarrollar la autoestima y estar
pendientes hasta de cómo se visten, peinan y maquillan, pues sus
emociones dependen de la apariencia externa. Como sus valores, o
lo que valoran permanentemente, está muy ligado a los conceptos
de familia, es allí en donde encuentran su mejor autovaloración, ya
que ello les da sentido de identidad. Siempre están tratando de
reconstruir lo afectado en su vida, que puede ir desde su fama,
hasta la salud corporal. Pero una vez lograda la armonía emocional
y se instalen en donde lo hagan, encuentran una satisfacción crítica
que los complace de por vida.
La persona ha de tener mucha afinidad con las personas de
este signo. Para comprender más su significado vea en qué
decanato y casa tiene este principio astral; observe qué casas rigen
Libra y Tauro.

VENUS EN LEO
Este sí que es un bello gato callejero con ínfulas de león de
barrio. Alguien preocupado constantemente por estarse acicalando y
manteniendo la postura correcta ante los demás. Tiene un gran
sentido de la hermosura en todo su sentido, especialmente hacia las
costumbres, la elegancia, el deseo de agradar, la diplomacia y todo
aquello que los ayude a introducir, no solo armonía en la vida social
en general, sino a contribuir calurosamente con la sociedad.
Pero la otra cara de Venus es oscura, cuando de llamar la
atención se trata; pues la persona es capaz de hacer lo que sea
cuando quiere que se note su presencia. Como Venus puede ser la
pérdida de autoconfianza y Leo es la confianza en sí mismo, ésto da
como resultado que el individuo que tenga esta posición, jamás irá a
sitios o reuniones en donde sienta que alguien lo puede opacar,
pues esta ubicación genera cierto miedo al rechazo. Logran ser
felices consigo mismos y esto ayuda a llevar felicidad a los demás.
Es necesario que desarrollen algún tipo de arte y que dejen la manía
de compararse tanto con otras personas, y mejor compartan su
tiempo y posesiones con ellos. Pueden meterse en tantos
compromisos por quedar bien con todo el mundo, que luego se ven
a gatas para salir de los atolladeros.
La persona ha de tener mucha afinidad con las personas de
este signo. Para comprender más su significado vea en qué
decanato y casa tiene este principio astral; observe qué casas rigen
Libra y Tauro.

VENUS EN VIRGO
Venus puede tener cierta afinidad con este signo, en donde
el dar está más acentuado que el recibir o el pedir. Para ellos el
dinero es algo tan útil que pueden volverse avaros, pero más
consigo mismos que con los demás. En su modo de ser pueden
aparentar ser una dulzura, pero cuando emiten un juicio lo dicen tan
contundentemente que no hay como contradecirlos. Su gusto es
recatado y tendría que estar muy “mal” aspectado Venus, para llegar
a la lujuria, el exceso de comodidad, el ocio o la pereza. Sienten un
enorme placer trabajando en aquello que les gusta y tanto, que para
ellos la diversión es…trabajo. Son capaces de obtener un beneficio
menor si se trata de sacrificarse por otros, y la tranquilidad que les
da el sentirse útiles para los demás les permite meterse en cualquier
clase de actividad.
La cautela en las relaciones sociales o de pareja, es una de
sus principales características y manejan la economía y la energía
con tanta eficiencia, que su intuición les dice en qué gastar y en
donde abstenerse de hacerlo. Las relaciones que establecen tienen
para ellos un método rutinario, y una cierta prudencia para llevarlas
con toda seriedad. Son más sensibles de lo que aparentan y
muchos de ellos piensan más con el corazón que con la cabeza, lo
cual los llena de problemas sentimentales.
La persona ha de tener mucha afinidad con las personas de
este signo. Para comprender más su significado vea en qué
decanato y casa tiene este principio astral; observe qué casas rigen
Libra y Tauro.

VENUS EN LIBRA
Como este es el signo que rige Venus, las características de
ambos son semejantes y acentuadas. Su afán de adaptación les
hace desarrollar la diplomacia y el gusto por lo bello; tienen buenas
aptitudes artísticas y un idealismo muy elevado, lo cual los hace ser
buenos consejeros debido a su imparcialidad. Libra y Venus
representan el gusto refinado, la modestia, la persuasión y la
previsión, pero a ninguno de los dos se les puede poner en trabajos
forzados, pues ello va contra su armonía y equilibrio. Son tan
pacifistas que, guardadas las proporciones, nada los saca de su
equilibrio. Por esa misma razón pueden pasar por elitistas y
aburridos, y su permanente balanceo les hace dudar acerca de si
irán en la dirección correcta en la vida. No importa, mientras todo
esté bello y nada los asuste, ni los ponga a depender de otros, todo
está bien. La vida es su columpio.
Estos individuos son abiertos, armonizadores, bondadosos,
conciliadores, entusiastas, optimistas y en especial muy románticos.
Pero su actitud condescendiente se viene a pique cuando han sido
“traicionados” por alguien a quien dieron su corazón. Entonces, esos
tiernos afectos se convierten en odio; y ese decoro al manifestarlos
se transforma en inmutabilidad. Deben tener sumo cuidado con la
frivolidad y la pereza.
La persona ha de tener mucha afinidad con las personas de
este signo. Para comprender más su significado vea en qué
decanato y casa tiene este principio astral; observe qué casas rigen
Libra y Tauro.
VENUS EN SCORPIO
En un principio Venus sí que se asusta en este signo, pues
es la misma relación existente entre la bella-Venus y la bestia-
Escorpio. Tanto así, que la actividad de Escorpio puede llegar a
abrumar a Venus, pues este planeta no sabe por dónde lo ha de
introducir semejante signo en las más profundas crisis amorosas y
emocionales en general. Las ambiciones de Escorpio van por lo
general en contra vía con las de Venus, a no ser que juntos deseen
poseer lo amado hasta esclavizarlo. Como Scorpio solo tiene
devoción a sí mismo y Venus a los demás, es muy difícil que ambos
lleguen a la comprensión de las pasiones; es decir, a comprenderse
con las demás personas. Escorpio, al igual que Venus, goza de
cierta elocuencia; pero la del primero es agresiva, enérgica,
intrépida, con optimismo y tenacidad, lo cual hace sufrir al recatado
Venus. Sin embargo, el lado oscuro del planeta -el amor prohibido-
puede llegar a sentir cualquier clase de placer e intriga en este
signo. Entonces, su creatividad para amar u odiar no tiene límites, y
la impulsividad se adueña de ellos en cualquiera de las dos
direcciones.
Escorpio es un signo laborioso, no así Venus cuando está en
él y, por lo tanto, el individuo tiene que lograr una completa
regeneración de su ser emocional, y saber cuándo debe ser
enérgico y cuando pasivo. Nunca dejará de ser un problema la
sexualidad o, al menos, la satisfacción constante de este
requerimiento. ¿Qué hacer con su energía sexual? ¿Volverla
sagrada o darle de comer a la bestia?
El individuo ha de tener mucha afinidad con las personas de
este signo. Para comprender más su significado vea en qué
decanato y casa tiene este principio astral; observe qué casas rigen
Libra y Tauro.

VENUS EN SAGITARIO
El placer por lo desconocido, las aventuras y las conquistas
en general, es una de las principales características de esta posición
zodiacal. Ambos, planeta y signo, denotan esperanza, franqueza,
generosidad, honestidad y jovialidad; pero la lógica de Sagitario
entra en conflicto con los sentimientos de Venus; pues mientras el
primero solo quiere recorrer el mundo, el otro se quiere quedar en
todas partes, ya que allí se siente a gusto. Es en ese momento, en
donde la perseverancia de Sagitario en continuar el camino siempre
hacia adelante, debe tomar el mando y prever que Venus habrá de
costarle caro, pues si no se puede quedar en ninguna parte, al
menos querrá llevarse todo al precio que sea.
Las personas que tienen esta posición pueden desarrollar un
cierto gusto por los temas esotéricos y la cultura en general;
además, porque con su sentido profético y sentimiento fogoso,
querrán saber de todo y aplicarlo a su vida diaria. Son dados a las
aperturas emocionales y al no comprometerse con nada ni nadie;
pero también los caracteriza su buen humor, idealismo, justicia,
lealtad y originalidad extrema. Tienen tantos anhelos que,
obviamente, no es posible realizarlos todos; pero en medio de sus
exploraciones físicas, mentales o emocionales, habrán de ver
cuales les convienen más. Gracias a su afán de cultura, siempre
saben a qué se están refiriendo los demás.
La persona ha de tener mucha afinidad con las personas de
este signo. Para comprender más su significado vea en qué
decanato y casa tiene este principio astral; observe qué casas rigen
Libra y Tauro.

VENUS EN CAPRICORNIO
En este signo, el amor se siente como abandonado o perdido
en el desierto. Capricornio tiene aptitudes para organizar todo, pero
cuando Venus está en él, lo único que no puede organizar es su
vida afectiva. Venus obra con mucha cautela en las relaciones
sociales que establece cuando se encuentra en Capricornio; en
cambio se siente muy a gusto en ambientes elitistas y refinados en
donde saca a relucir su dignidad, diplomacia, buenas maneras y
espíritu práctico, ya que no irá a donde no saque algún provecho.
Venus no es amiga de los esfuerzos concentrados que hace
Capricornio, ni de su ceño adusto y pesimismo característico; de
modo que, quien posea esta posición, debe dejarse seducir más por
la vida para así salir de su soledad y dejar de ser un aguacero para
los demás.
 La prudencia de Capricornio y su afán de reverencia pueden
gustar a Venus; pues la ambición que se desarrolla en este caso es
la de aplicar a la vida diaria lo que se siente en el corazón.
Capricornio es el cálculo y Venus no sabe nada de calcular,
sencillamente sintió empatía y se dejó arrastrar; lo cual hace perder
la independencia tan preciada por este signo. Pero la persona que
tenga esta posición zodiacal puede amar al prójimo de una forma
tan realista como pocos lo hacen. El problema es que el prójimo es
escaso.
La persona ha de tener mucha afinidad con la gente de este
signo. Para comprender más su significado vea en qué decanato y
casa tiene este principio astral; observe qué casas rigen Libra y
Tauro.

VENUS EN ACUARIO
He aquí el verdadero amor al prójimo. Quien posea esta
posición tendrá todo un harem de posibilidades para comprobar
cuánta capacidad tiene para recibir de, y dar a los demás. Serán
queridos por muchos que también habrán de ayudarles y querrán
participar en sus proyectos comunitarios. Agradables en su
conversación, compartirán con los demás según su independencia
no se vea muy comprometida; pues al menor atisbo de que alguien
quiere coartarlos, salen cual huracán dejando a todos plantados.
Acuario comunica constancia, espíritu progresivo y social; y para
ello Venus está pronto a gastar el dinero que sea por más quijotesca
que parezca la empresa que la persona tenga entre manos.
Si aprovecha la intuición, la paciencia y la sinceridad, el
individuo recogerá o, por lo menos, ayudará a que otros recojan el
fruto de sus esfuerzos. Les caracteriza el idealismo, su vida utópica,
la recursividad inventiva y su sensibilidad, pero en especial el
sentido vibratorio que tienen con las personas que ellos consideran
como su prójimo. En el amor son libres y sin compromisos, ni gustos
comunes y corrientes. De la misma forma que aman a los demás y
les dejan su libertad, quieren que les dejen la suya, sin que otros los
juzguen como buenos o como malos. ¿Me quieres? Entonces, no
me juzgues y acéptame como yo te acepto.
 El individuo ha de tener mucha afinidad con las personas de
este signo. Para comprender más su significado vea en qué
decanato y casa tiene este principio astral; observe qué casas rigen
Libra y Tauro.

VENUS EN PISCIS
Si Venus logra encontrar por quien sacrificarse cuando está
en Piscis, será el más feliz de todos los planetas del zodíaco, en lo
que se refiere a dar la vida por los demás. Hay mucha afinidad en el
sentido de ambos factores, pero especialmente en el de las ansias
de alcanzar la paz interna; pues juntos comunican hospitalidad,
pureza en sus intenciones y refinamiento a veces exagerado. La
persona puede ser abnegada, con un fuerte sentido hacia la
humanidad en su afán de redimirlos y sacarlos del sufrimiento. Pero
¿quién los sacará a ellos mismos?
Venus en Piscis puede hacer a la persona muy crédula de
los demás, lo cual le llevará irremediablemente a desencantos
frecuentes, en especial con los príncipes y las princesas azules que
se tope por el camino; pues, como los amores platónicos son parte
del menú cotidiano, siempre esperan que tras el último amor
fracasado, el siguiente sí se realice. Desarrollan una buena
inteligencia poética gracias a su intuición, pero con mucha
frecuencia siempre se estarán preguntando qué hacen allí, en cada
una de las situaciones emocionales en la cual se meten. ¿Cómo
salgo del laberinto? ¿Hasta cuándo estaré en esta soltería, en este
matrimonio, en esta situación? Venus, entonces, puede sentirse
exaltado pero desconcertado con las sensaciones que le invadirán
estando en Piscis.
El individuo ha de tener mucha afinidad con las personas de
este signo. Para comprender más su significado vea en qué
decanato y casa tiene este principio astral; observe qué casas rigen
Libra y Tauro.

MARTE, el Varón Divino.

A Marte, que rige a Aries, se le conoce como el Castigador,
el Cronómetro del zodíaco, el Defensor de las causas y de los