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Radiologia convencional: las bases del procedimiento radioldgico Coordinador: P. Borrego Ruiz Capitulo 1. Introduccién a la radiologia y técnica radiogréfica. Historia de la radiologia Capitulo 2. Rayos X: generalidades Capitulo 3. La produccién de rayos X: generadores y tubos Capitulo 4. Registro de la imagen: peliculas, pantallas e intensificadores de imagen Capitulo 5. El procesado de las imagenes. Calidad de la imagen radiogréfica. Radiacién dispersa indice de contenidos * Introduccién 7 ‘+ Antecedentes histérico-cientificos = = + Réntgen y el descubrimiento de los rayos X ‘+ Impacto médico y social del descubrimiento ‘= Primeras aplicaciones médicas y avances posteriores + Laespecialidad hoy ant * Técnicos de radiologia Us letting + Any Nyy a PNG Un Umesh) OM lc l ml etme) Pa Ty Bay Ae ere eC eee TOUR ok a eg eA a Pe eet ACEC [ob Seat Seen COI ite Entender ta evolucién de tas principales aplicaciones médicas de tas exploraciones radiolégicas. Gonocertas sefias de identidad que definen ta espBeiglldad de la Fadiotogla actual. Se ee ae Oe ey Eri cnica radiografica. oria de la radiolog @ INTRODUCCION La radiologia, radiodiagnéstico © diagnéstico por la imagen, que por todas estas denominaciones se la conoce, aunque sea la primera la que més nos guste, es una especialidad médica ya centenaria, aunque muy joven si la comparamos con otras disciplinas clinicas. Se inicia, como es légico, con el descubrimiento de los rayos X por Rantgen y se ha ido desarrollando a la luz de todos los avances tecnolégicos que siguieron a este gran ito cientifico. Hoy en dfa la radiologia se entiende como la es- pecialidad médica cuyo fines el diagnéstico o el tratamiento de procesos patolégicos ‘mediante la utilizacién de métodos de imagen basados en radiaciones ionizantes 1 otras fuentes de energia. Es una especialidad de referencia que proporciona servicios de consulta a otros especialistas médicos. Para llegar ala situacién actual, se han dado muchos pasos, unos grandes, otros de menor importancia, aunque lo que resulta hoy en dia incuestionable es que los rayos X han modificado de forma radical y desde muy poco tiempo después de su descubrimiento la préctica de la medicina, de tal manera ‘que en précticamente todos los procesos patolégicos se recurre de una w otra forma a los estudios de imagen. El trabajo del radidlogo esti casi siempre precedido por la labor del técnico, que es quien obtiene las imagenes adecuadas para la lectura posterior por parte del radiélogo. De la excelencia de ambos depende el resultado final. Los avances técnicos, como la digitalizacién de la imagen, el posproceso en los estudios de tomografia computarizada © de resonancia magnética, han motivado nuevos cambios en los quehaceres de los, téenicos de radiologia: no sélo se encargan de obtener unos buenos estudios, sino de aprovechar todas las herramientas informaticas disponibles para mejorar las explora~ ciones y aumentar al maximo las posibilidades diagnésticas de las diferentes técnicas. @ ANTECEDENTES HISTORICO-CIENTIFICOS Los grandes descubrimientos cientficos no surgen «de la nada, sino que son con- secuencia de multitud de trabajos previos que, por asi decirlo, preparan el camino y proporcionan las herramientas necesarias para seguir avanzando. Los antecedentes de los rayos X hay que buscarlos, por tanto, en los conocimientos de los que disponian los investigadores de finales del siglo XIX, en los campos de la electricidad, el magnetismo yeel vacio y en los progresos de la fotografia. Los descubrimientos de Faraday, Volta, ersted, Ohm y tantos otros eran bien conocidos por los cientificos de esta época, entre ellos, por supuesto, Rontgen. De hecho, en los afios precedentes los fisicos estaban muy interesados en conocer cl paso de la corriente eléctrica a través de los gases, por lo que se diseiaron tubos con distinto grado de vacfo para su estudio, A través de ellos se generaban descargas eléctri- cas, analizando la luz que se producia. Se habia comprobado que en la regidn opuesta al cécodo aparecia una mancha fluorescente, cuyo color variaba segiin el gas que es- taba introducido dentro del tubo. Esta mancha se podia mover al aplicar un campo La radiotogia es la especialidad médica cuyo fin es el diagnéstico el tratamiento de enfermeda- des mediante la utilizacién de métodos de imagen basados en radiaciones ionizantes u otras. fuentes de energia. El trabajo del radiétogo esté casi siempre precedido por la labor del técnico, que es quien obtiene las imagenes adecuadas para la lectura posterior por parte det radiélogo. De la excelencia de ambos depende et resultado final. 4 Figura 1-1. Reproduccién de un tubo de Hittorf, de los usados por Réntgen en Wurtzburgo, en cuyo Instituto de Fisica Las investigaciones previas al descubrimiento de los rayos X se centraban en el estudio dela corriente eléctrica a través de gases encerrados en tubos con distintos grados de vacio en su interior. ‘4 Figura 1-2. Wilhelm Conrad Rantgen, hacia 1900. rmagnético cercano. Hittorf, uno de los ereadores junto con el britinico Crookes de los tubos de vacio (Fig. 1-1), observé que colocando un obstéculo frente al citodo se producian sombras regulares en la zona de luorescencia. Estos rayos, que Goldstein propuso llamar rayos catddics, se propagaban pues en linea recta. Los cientficos no se ponfan de acuerdo sobre la naturaleza de los rayos: frente a la resis corpuscular de Crookes, que defendia que los rayos eran particulas, los alemanes Hertz y Lenard sos- tenian que eran ondas, como la luz, ya que podian atravesar delgadas placas metilicas. © RONTGEN Y EL DESCUBRIMIENTO DE LOS RAYOS X Wilhelm Conrad Réntgen nace en 1845 en la pequefia localidad alemana de Len- rep (en esa época perteneciente al estado de Prusia) hijo inico de una familia acomo- dada, Su padre, préspero fabricante y comerciante de tejidos, librepensador, decide, por razones politicas, trasladarse junto con su familia a Holanda, de donde es originaria su mujer. En este ambiente crece Réntgen. Debido a un absurdo incidente escolar, al negarse a delatar a un compafiero que habfa hecho una caricatura de uno de los, profesores, no sélo fue expulsado de la escucla, sino que este asunto, afios mas tarde, imposibilité su ingreso en la universidad local. Tavo pues que realizar sus estudios de ingenieria, matemiticas y dibujo mecinico fuera de Holanda, concretamente en Zirich. En 1868 recibe su diploma de Ingeniero Mecénico y comienza a trabajar con su maestro Kundt en la cétedra de Fisica de Wurteburgo. En 1879, acepta la citedra de Fisica en la Universidad de Gissen, Nueve afios des- ppués, se le ofrece la cétedta en la universidad en la que habia trabajado a las érdenes de su maestro, Tras 6 afios de intensos trabajos en electricidad, gas y tubos de vacfo en Wartzburgo, es nombrado rector de esta universidad (Fig, 1-2). Muy poco tiempo después, en 1894, en un discurso para conmemorar el 312° aniversario de la universi- dad, el recién nombrado rector W. C. Réntgen pronuncia la siguiente cita: «A menudo Ja naturaleza deja aparecer en las cosas més banales fendmenos asombrosos, que sin embargo tan sélo son reconocidos por aquellos que con sagacidad y con sentido creado para la investigacidn toman consejo de la experiencia, preceptor de todas las cosas... Estas palabras de Athanasius Kircher, uno de los cientificos més importantes del siglo XVIL,resultarfan proféticas tan slo 1 afio mas tarde, con el descubrimiento de los rayos X, ala vez que ponen el acento en la caracteristica principal de todo cientifico: la observacién de los hechos y la bisqueda de una explicacién l6gica y coherente de éstos. Rontgen utilizaba tubos de Hittorf-Crookes 0 el modificado por Lenard que per- mitia que los rayos emitidos por el electrodo negativo 0 citodo, los ya conocidos rayos catédicos, salieran del tubo, en una distancia muy corta, atravesando una delgada capa de aluminio (Fig, 1-3). En la tarde del 8 de noviembre de 1895, Réntgen trabajaba con el tubo de Hitcort cubriéndolo con una capa de cartén negro para evitar la fluorescencia que se producta en las paredes de vidrio del tubo por la accién de los rayos catédicos. Vio que cuando hacia pasar la corriente por este tubo, se iluminaba intensamente un cartén impreg- nado en platino-cianuro de bario presente en la mesa de trabajo. Esta sustancia era - Alejé atin mas la conocida por la incensa fluorescencia amarillo-verdosa que produ placa y comprobé que se seguia iluminando al conectar el tubo. No podia ser debido a los rayos catédicos, pues era sabido que se atenuaban a pocos centimetros del tubo de Lenard. Siguié haciendo varias pruebas, interponiendo todo tipo de materiales Para Réntgen estaba claro que lo que emitfa el tubo era un nuevo tipo de radiacién de naturaleza desconocida, de ahi la denominacién elegida por él de rays X, cotalmente distinea de los rayos catédicos: no eran desviados por un campo magnético y no eran detenidos por la mayoria de los cuerpos opacos, sino que como mucho eran atenuados, dependiendo del espesor del cuerpo interpuesto, Comprobé ademis que las placas, foxogréfcas dentro de su caja estaban totalmente veladas, intuyendo de forma genial aque la nueva radiacién habia actuado también sobre la emulsion fotogréfica. En esto se diferenciaba de otros colegas, que antes que él habian comprobado este efecto pero no se habfan cuestionado el porqué. Siguieron dias de intensa actividad con todo tipo asta que el 22 de diciembre de 1895 pidié a su mujer, Bertha, que colo- 4 placa fotogritica de cristal: al cabo de quince largos minutos cto de La mano de Bertha con su anillo de casada no sob alli estaba, sobre la placa, ef esqui 1. En estas casi 12 décaday de vida de la radiologi papel del azar, de la pura casualidad, en el descubrimiento de Réntgen, 0 por usar un término procede a serendipia (alusidn al cuento de Walpole Los tres n cosas que no buscaban). Se ha visto, se ha escrito mucho acerca del del inglés. de pprincipes de Serendip. que en sus viajes descubr por el contrario, aunque de manera muy resumi cantidad de cientificos hasta la obtencién de los rayos X, y cémo este hecho fue fruto del trabajo preciso, de la observacién y la experimentacién cuidadosas. Como dijo Pas- de observacién, la suerte sélo favorece a las mentes preparadas». a » camino recorrido por gran @ IMPACTO MEDICO Y SOCIAL DEL DESCUBRIMIENTO El descubrimiento de los rayos X. al contrario de otros descubrimientos cientificos, tuvo una ripida difusi6n internacional y un enorme impacto popular. Réntgen tuvo la idea de publicar sus primeras conclusiones en las actas de la Sociedad Fisico-Médica de Wurtzburgo dias antes de exponerlas verbalmente en una conferencia alos miembros de dicha sociedad. Todos los suscriptores de estas actas recibieron en los primeros dias del afo siguiente, 1896, copias de este trabajo preliminar, por lo que la difusi6n en el mundo cientifico fue enormemente répida En los dltimos afios del siglo XIX, sin medios de comunic: masivos, ¢s lamativo el enorme impacto que tuvo el descubrimiento no sélo en el mundo médico, sino entre la gente corriente. No s6lo atrajo la atencién de médicos ¢ ingenieros, sino de comerciantes y de charlatanes: la idea de «ver el interior de los jén verdaderamente cuerposs desperts el interés cientifico, pero también el espiritu comercial de muchos aventureros, Como ocurre con frecuencia, la imaginacién de un entusiasta editor pe- riodistico (cuyo hijo, profesor de fisica, le comunicé dias antes el descubrimiento de Rontgen) se hizo realidad pocos meses después con las primeras radiografias sobre pacientes. Lo cierto es que, gracias a este periodista, la noticia se extendié por las agencias y en los primeros dias del nuevo aio 1896 los principales diarios europeos y americanos destacaban la noticia del descubrimiento con mayor o menor seriedad.. En Espana, el acontecimiento tambien se refle}6 en la Hutnacion espaol y ameri- cana, en su nimero de enero de 1896, en un precioso articulo, «La luz del Dr. Rént- gens, Pocos dias después, en la misma revista, el futuro premio Nobel José Echegaray, en el articulo «Lo visible y lo invisible», escribia: bYa las sombras no son un misterio: hay una luz —que es sombra también— que nos va a hacer visibles los mas ocultos senos de las tinicblas. Y la imaginacién se echa a volar y forja un nuevo mundo, acertando acaso algunas veces, rozando otras veces con lo imposible, pero llevando siempre en sus fantisticas alas matices de esperanza». Curiosamente, frente a estas opiniones entusiastas y hasta poéticas, también se alzaron voces eriticas, incluso desde la propia profesién médica, algunas con evidente falta de visién de futuro, como la del catedritico de Medicina de Madrid, el profe- sor Letamendi, que compara el procedimiento con artes de picardia y chifladura», Iamindolo carte de ejecutar sombras chinescas sin candi». Tampoco parecfa nada convencido el profesor Royo Villanova, cuando afirmaba: »ni los rayos X acusan una novedad tan grande como se cree, ni mucho menos representan en la medicina un descubrimiento tan \itil como se piensa. Porque no pueden abrigarse esperanzas de obtener retratos del cerebro dentro del crineo, de los pulmones dentro del trax y de la visceras abdominales dentro dela pelvis. Tales exageradas ilusiones son propias de algunos espiritus cdndidos y excesivamente creyentess, Muchos médicos, metidos a adivinos cuando emplean sus conocimientos en pronosticar el «futuro», hacen el ridiculo més espantoso. Rntgen, al igual que Louis Pasteur con ocasién de las vacunas, se negé a obtener beneficio comercial alguno de su descubrimiento, ya que era de la opinién de que los ‘4 Figura 1-3. Reproduccién de un tubo de Lenard, también utilizado por Ront- gen. Nétese cémo a diferencia del tubo de Hittorf, éste dispone de un pequefio disco de aluminio que cierra la parte an- terior del tubo. Los rayos X fueron descubiertos por W. C. Réntgen en los dltimos meses de 1895. ‘A Figura 1-4, Reproduccién dela radio: gratia de (a mano de Bertha Rontgen, can su anillo de bodas. Probablemente sea la primera radiografia realizada so- bre sujeto vivo por el propio Réntgen ‘A Figura 1-8. En esta reproduccién se vea Edison mirando através de suradios- copio la mano de su ayudante Dally, et ual, debide a las miltiples exposiciones ‘no controladas, fue una de las primeras victimas de los excesos de las radiacio- nes ionizantes ‘A Figura 1-6. Philippe Lenard, hacia 1895. Pasé de ser un colega respetuoso del trabajo de Réntgen a convertirse en ‘su mas envidioso contrincante. 6 dlescubrimientos cientificos pertenecen a la humanidad. Edison, en cambio, siguiendo su olfato comercial, intent6 obtener la patente, y al no conseguitlo construyé su propio aparato de luoroscopia, o criprscopo,ylo present en la Exposicidn Nacional de Elec- tricidad de Nueva York, en marzo de 1896, como si se tratara de una barraca de feria: los asistentes podtian ver su cuerpo a través del nuevo ingenio. El ayudante de Edison, Dally, empezé a sufirlesiones en la piel de la mano, con graves quemaduras, lo que provocé la amputacién de la extremidad y finalmente su muerte a los pocos meses: 1-5). A dle siguieron muchos fue una de ls primeras vitimas de la radiacién de los pioneros de la radiologia de distintos paises. Se vivié en todo el mundo una auténtica «fiebre Réntgen», que convirtié el nuevo fico en un espectéculo propio de charlatanes yferiantes. En 1924, algunas americanas disponfan de un sistema de fluoroscopia 0 «podoscopio» para comprobar la buena adapracién del zapato al pie de cliente. A principios de los cin- cuenta, aunque hoy en dia parezca increible, se contabilizaban mas de 10,000 de estos aparatosen las tiendas de zapatos de Estados Unidos. parte de estas anécdoras, conviene resltar el profundo impacto del descubrimiento en el mundo cientifico: en el ao siguiente, 1896, se publicaron més de 1.000 arcicu- los sobre rayos X en las revista especializadas, ademis de 49 monografias. Ya en 1897 aparece la primera tesis doctoral sobre la utilidad de los rayos X en medicina. Se Figura 2-2. Estructura atémica del tungsteno. Sus 74 electrones se distri- buyen por capas oniveles de energia. En estado relajado, cualquier Stomo tendra ocupados todos sus niveles de energia con la maxima ocupacién lv. Tabla 2-1 para el tungstenol. 16 de estas fuerzas, los electrones se mueven alrededor del niicleo describiendo trayectorias complejas. Hoy en dia se sabe que la posicién instanténea de los electrones en cada punto de la corteza es una cuestién probabilistica y, por lo tanto, es poco preciso hablar de trayectorias; mas bien se deberian tratar como nubes de probabilidad de presencia No obstante, para todo lo reference a este texto, ¢s suficiente la aproximacidn que dela realidad hace el modelo atdmico de Bohr. Este modelo, propuesto en 1913 por el fisico danés Niels Bohr, coloca a los electrones en rbitas circulares o elipticas a distancias relativamente grandes del niicleo. Los electrones poseen una energia determinada (energia del electrén), propia de la Figura 2-6. Atamo de hidrégeno con los posibles niveles energéticos para suclec- trén y con indicacion, mediante tlechas, de cuales son las posibles transiciones electronicas. A Figura 2-7. Situacién clasica de emi- sién de radiacién de frenado.o Bremsstra- /hlung: una particula cargada en movi rmiento desacelera debido ala presencia de otra particula cargada. En el proceso pierde energia que es emitida en forma de radiacion electromagnética {fotén}, 20 { 5 _‘Atomo de hidrogeno (con los niveles de energia del electrin permitidos, Las transiciones en sentido ascenderte Fequleren de un apore externa de energia (ios slecrones vajan ‘Bestados de mayor energia). Las transiciones en ‘sentido descendente ‘aportan o emiten fa fenergia que el elecrén tiene que perder para ‘caer a un estado de ‘menor energia ‘Cada salto corresponde a la emisién de un fotén de energia dada por la diferencia entre las energias de los dos niveles. Cuando se produce la desexcitacién de los Atomos, segiin la energia emitida (dif- rencia de energia entre las dos capas que participan en la transicién) nos encontraremos ‘en una determinada zona del espectro electromagnético (v. Fig. 2-5). Al aumentar el valor de Z de un 4tomo, se incrementa el mimero de capas en su estructura elecrénica yaumenta, por tanto, el ntimero de posibles transiciones entre capas. Fenémenos de desexcitacién pueden propiciarse siempre y cuando un étomo tenga vacantes en orbitales internos; cuando esos orbitales no tienen completo su rimero maximo de electrones, se trata de un estado poco estable del étomo. En este caso, es muy probable que, de forma espontanea, electrones de capas més exte- nas lleven a cabo una transicién electrdnica tendente a llenar la capa que estaba medio Ilena. De la misma manera que se acaba de ver para la desexcitacién de un lectrén previamente excitado, esto conllevard la emisién de energia en forma de fotones. @ RADIACION DE FRENADO Independientemente de lo visto hasta ahora con las transiciones electrénicas de los electrones de un étomo, otro fenémeno fisico involucrado en la generacién de los rayos X es el Bremsstrahlung (del alemin bremsen, ‘frenar’, y Strablung, ‘radiacién’, 0 sea, ‘radiacién de frenado’). Es una radiacién electromagnética producida por la deceles cién de una particula cargada, como por ejemplo un electrdn, cuando es desvada por otra particula cargada, como por ejemplo un niicleo atémico (Fig. 2-7). El fenémeno fue descubierto por Nikola Tesla cuando hacia experimentos con altas frecuencias entre 1888 y 1897. Al Bremstrablung también se lo conoce como radiacién libre-libre (fe-fe rai tion en inglés), porque la produce una particula cargada que est libre antes y despuds de la deflexién (aceleracién) que produce la emisién. @ RAYOS X: NATURALEZA Y PROCEDENCIA ‘A modo de resumen de lo estudiado hasta el momento en este capitulo, se pueden resumir los siguientes principios fundamentales de los rayos X. Naturaleza de los rayos X Los rayos X son radiaciones electromagnéticas cuya longitud de onda va desde 1 nim hasta 0,001 nm (x, Fig. 2-5). Cuanto menor es la longitud de onda de los rayos X, mayores son su energia y poder de penetracién en la materia. En el espec- to electromagnético (v. Fig. 2-5), se sitian entre los rayos ultravioleta y los rayos gamma, Los rayos X de mayor longitud de onda, cercanos a la banda ultravioleta del espectto electromagnético, se conocen como rayos X blandos: los de menor longitud de onda, que estin mis proximos a la zona de rayos gamma o incluso se solapan con &ta, se denominan rayos X duros. Los haces de rayos X formados por una mercla de muchas longitudes de onda diferentes se conocen como rayos X eblancos», para diferenciarlos de los haces de rayos X monocromiticos, que tienen una tinica lon- gitud de onda. En la parte alta del espectro, los rayos X de mayor energia se confunden con los rayos gamma; su nica diferencia es la procedencia de éstos: os rayos X se han produ- «ido en la corteza de los étomos que los generan: los rayos gamma son radiacién pro cedente del micleo y se producen bien por la desexcitacién de un nucledn de un nivel excitado a otro de menor energia, bien por la desintegracién del micleo de un isétopo radiactiv. Procedencia de los rayos X Enel apartado «Absorcién y emisién de energia por los étomos: excitacion y desex- citacién» se descubria la lad que tienen los étomos excitados de emitir radia- ign electromagnética mediante su desexcitacién. Por lo tanto, algunas transiciones electronicas de capas exteriores (mayor energia) a capas interiores (menor energia) llevan asociada emisin de forones de rayos X. Cuanto mayor sea el ntimero atémico del dtomo generador de rayos X, mayor serd la energla con la que es capaz de generarlos. Esto es asi porque a mayor Z, mis protones tendri el rticleo, mas electrones en su corteza y mas niveles energéticos de és estarén ocupados, cde modo que los electrones de sus niveles 0 capas externas tendriin mayor energia ¥ serin factibles transiciones con un balance energético de emisién més elevado. ‘Oura fuente de rayos X serd la emisién de fotones de Bremsserahlung, tal y como se hha visto en el apartado «Radiacién de frenado» de este capitulo. En este caso, la emisién de rayos X no procede del seno de un étomo, sino que procede de particulas cargadas ‘en movimiento que varian su velocidad y son frenadas o desviadas por la presencia de otras particulas. En ese proceso, se emite un forén de energias correspondientes al rango de los rayos X. @ INTERACCION DE LOS RAYOS X CON LA MATERIA Una ver estudiada la produccién de los rayos X y su naturaleza, se veré cudl es su interaccién cuando inciden sobre la materia. Desde el mismo momento de su descubrimiento, Rontgen experiments y describié «estos rayos misteriosos como capaces de atravesar los cuerpos opacos. Efectivamente, una de las propiedades fundamentales de los rayos X es que pueden atravesar cuerpos impermeables para la luz. Sin embargo, también se supo pronto que esta propiedad era ‘una capacidad limitada, ya que los rayos X sufrian atenuacién cuando se transmitéan a través de la materia. ‘Un principio general de la interaccién de la radiacién electromagnética con su centorno es que ésta suele acontecer con particulas o estructuras de tamafios cercanos al de su longitud de onda. Por eso los rayos X de baja energia (A de nm) suelen interactuar con éromos enteros, los rayos X de energia moderada tienden a interactuar ‘on los electrones (que, si bien son muy pequeos, ocupan zonas grandes del espacio cortical) y los rayos X de elevadas energias, por lo general, interactian con los micleos. Este mismo razonamiento sirve para explicar cémo aquellos forones de mayor energia, Hablar de un haz de rayos X for- ‘mado por muchas longitudes de onda o frecuencias es lo mismo que hablar de un haz de rayos X formado por fotones de muchas energias. Y hablar de un haz de rayos X de una Unica longitud de onda o frecuencia es hablar de tun haz de rayos X constituido por fotones de una misma energia. Segiin sea la energia de desex- Citacién de un dtomo (diferencia entre la energia del nivel ener- gético «destino» y la energia del nivel energético «origen>), se tendra una radiacién elec- tromagnética de una u otra fre- cuencia y, por to tanto, de una u otra naturaleza: hay transicio- res en las que se emiten fotones de luz visible, otras en las que se emiten fotones ultravioletas, otras en las que se emiten foto- nes de rayos X, etcétera 2 ‘A Figura 2-8. Dispersion coherente 0 ‘Thompson. El fotén incidente es reemi- tide con ta misma longitud de onda misma energia), pero en una direccién ligeramente distinta. Esta dispersién es predominante para fotones de baja ener- gia [< 10 keV . Dispersion o efecto Compton. > Figura 2-9. Etecto Compton. Un fotén incidente interacciona con un electrén de las capas externas (también llamados electrones de valencial, arrancéndolo y sufriendo una pérdida energetica y de direccién en su desplazamiento [éngulo de dispersién]. La longitud de onda aso- cada al fot6n dispersado sera mayor que la asociada a la del fotén incidente. 2 tienen un poder de penetracién en la materia mucho mayor debido a que s6lo podrin interactuar («colisionars) con particulas tan pequefias como su longitud de onda. Los forones de rayos X pueden sufrir cinco tipos de interaccién diferentes con la materia: dispersién coherente, efecto Compton, efecto fotoeléctrico, producciéa de pares y desintegracién forénica. De ella, lo el efecto Compton y el foroeléctrico son televantes en el proceso radiolégico, dado que se producen en un rango de energias fot6nicas que son de uso habitual en los haces de rayos X de diagnéstico médico. Dispersién coherente Resulta de muy poca trascendencia en el Ambito del radiodiagnéstico. Es una incr. accién predominante para forones de energias inferiores a los 10 keV y que se produce entre el forén de rayos X y todo el étomo. Este absorbe al forén incidente, que pasa a estar en un estado excitado. A continuacién, y de forma inmediata, se relaja de nuevo cemitiendo un for6n de una energia idéntica a la del forén incidente. Sin embargo, la direccién del fotdn emitido no es la misma que la que tenia el fotén incidente. El resultado es un cambio de direccién del fotdn sin transferencia final de energia, de forma que el tomo queda en un estado idéntico al que se encontraba. Estos forones no contribuyen a la formacién de la imagen por ser muy poco penetrantes; siempre acaban siendo atenuados en los tejidos del propio paciente. Esta interaccidn recibe también el nombre de dispersién Thompson, el fisico inglés que la describié (Fig, 2-8) Efecto Compton Un segundo tipo de interaccién de los rayos X con la materia fue estudiado pore isco Arthur Compton en 1923. Se asemeja al anterior en la medida en que el fordn incidente no desaparece y emerge de nuevo del étomo que sirve de blanco en la interaccién, aunque con menor energia yen una direccién distinta de la inicial (es, por lo tanto, una disper sign), La interaccin se produce con un electrén de las capas externas del éxomo (Fig. 29. A diferencia de lo que ocurre en la dispersién coherente, en este caso el electrén, ¢s expulsado del 4tomo, es decir, existe un proceso de ionizacién (sérmino que ya se hhabia descrito al final del apartado «Absorcién y emisién de energ{a por los 4eomos: cexcitacién y desexcitaciéns). EI electrén expulsado se denomina electrén Compton 0 secundario. La energia del foton disperso ¢s igual ala diferencia entre la energia del fotén incidente y la suma de las energias de ligadura del electrén y cinética del mismo clectrén una ver liberado. Tras un suceso Compton, tanto el forén dispersado como el electrén Compton tienen capacidad para seguir interactuando con otros étomos y seguir produciendo nuevas ionizaciones. Al final, el fot6n sera definitivamente absorbido en alguna inter- accién fotocléctrica (v. apartado siguiente) y el electr6n acabaré alojado en el orbital de algiin étomo que tenga alguna vacante debida a algin otro suceso ionizante. En la figura 2-10 se puede observar el recorrido de un fotén incidente que, tras protagoni- zar varias interacciones Compton (en cada una de los cuales libera un electrén de las capas externas de distintos 4tomos), acaba suftiendo una absorcién total por efecto fotoeléctrico. Los rayos X dispersos que regresan en la direccién del haz incidente (angulos de dis petsién, @, cercanos alos 180°) se denominan nadiacién retrodispersa. Aunque un efecto ‘Compton puede acontecer con un Angulo de salida aleatorio para el fotén disperso, hay tuna funcidn de probabilidades que otorga mayor preponderancia a la retrodispersion que alla dispersi6n producida en otras direcciones (@ entre 0° y unos 135°). Efecto fotoeléctrico Esta interaccién se leva a cabo entre el fot6n incidente y un electrén de las capas més internas del éromo. El fot6n incidente, en este caso, no se dispersa, sino que ¢s totalmente absorbido por el étomo. El electrdn, al que se llama fotoelectrén, es arrancado del 4tomo (ionizacidn) y escapa con una energia cinética que es igual a la diferencia entre la energia del forén incidence y la energia de ligadura del electrén (Fig. 2-11). El foroelectr6n, ras la ionizacién, suftirédistintas interacciones con otros 4tomos, pierde energia paulatinamente y acaba alojado en alguna vacante de algiin orbital de algiin étomo cercano. Un interaccién fotoeléctrica no podré acontecer a menos que el rayo incidente pre- sente una energia igual 0 superior a la energia de unién del fotoelectrén que, como ha quedado dicho, pertenece a alguna de las capas internas de la corteza (donde mayores, son las energias de enlace). ‘Ouro fendmeno de interaccién de los rayos X con la materia es la produccién de pares electrén-positrin. Un forén X con suficience energia, si consigue llegar cerca del riicleo atémico, puede sufrir una materializacién en un par de particulas:electtdn y positrdn, La masa de cada una de estas particulas equivale, en términos energéticos, 4 Figura 2-10. ilustracién det recorrido de un fotén en un medio con el que inter actia. La mayoria de interacciones son dispersiones Compton; en cada una de ellas pierde energia, de manera que cada, vez se hace mas probable el efecto fotoeléctrico, que es el que al final con- lUeva la desaparicién definitiva del fotén por absorcién. Video. Efecto fotoeléctrico.

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