EL LLAMADO A RECONSTRUIR.

Les dije, pues: Vosotros veis el mal en que estamos, que Jerusalén está desierta, y sus
puertas consumidas por el fuego; venid, y edifiquemos el muro de Jerusalén, y no
estemos más en oprobio. Nehemías 2:17

A. Dios anhela restaurar, volver a su estado ideal a sus hijos, pero es necesario que
por lo menos una persona esté dispuesta. La restauración empieza con un
hombre o con una mujer. CUANDO SE HABLA DE RESTAURAR ALGO SE
HACE REFERENCIA A VOLVER UNA COSA AL ESTADO O
CIRCUNSTANCIA EN QUE SE ENCONTRABA ANTES.
B. . Nehemías fue utilizado por el Señor para reedificar Jerusalén. Nehemías como
copero del rey Artajerjes estaba tranquilo en su trabajo en el palacio del rey a
quien servía en un puesto muy importante de confianza. No tenía necesidad de
complicarse la vida dejando la seguridad de un buen trabajo, con sus garantías,
para edificar los muros de una ciudad casi destruida. Al llegar a Jerusalén e
inspeccionar las ruinas, reunió al pueblo y les comunicó su visión de restaurar
los muros derrumbados y las puertas quemadas.
Les dije, pues: Vosotros veis el mal en que estamos, que Jerusalén está desierta, y sus
puertas consumidas por el fuego; venid, y edifiquemos el muro de Jerusalén, y no
estemos más en oprobio. Otra versión nos dice: “Ustedes son testigos de nuestra
desgracia. Jerusalén está en ruinas, y sus puertas han sido consumidas por el fuego.
¡VAMOS, LEVANTEMONOS! ¡Reconstruyamos la muralla de Jerusalén para que ya
nadie se burle de nosotros!” (Nehemías 2:17)

Al oír esto fueron animados y exclamaron, ¡Manos a la obra! Y UNIERON LA

PALABRA CON LA ACCIÓN. Cada creyente tiene esta responsabilidad de poner
manos a la obra, de quitar los escombros ESPIRITUALES y levantar las murallas para
nuestra DEFENZA.

A. Los muros representan protección. Los muros son para evitar la invasión de los que
vienen a robar, matar o destruir. Tanto corporal como individual, necesitamos muros de
protección para impedir el avance del enemigo de nuestras almas. DIOS HA HECHO
PROVISIÓN PARA PROTEGER A SU PUEBLO DE LOS ATAQUES Y
ESTRATEGIAS DEL DIABLO.
La fe en la Palabra y en el carácter de Dios, levanta MUROS DE DEFENSA contra los
ataques del enemigo.
La oración, la lectura de la Palabra y la convicción de nuestra fe, edifican un muro
IMPENETRABLE.

V. EL PUEBLO REACCIONA LEVANTANDOSE. “Y dijeron: Levantémonos y

edifiquemos. Así esforzaron sus manos para bien” (Nehemías 2:17-18)
A. El enemigo tenia al pueblo de Israel en oprobio. Nehemías le dijo al pueblo: “…y no
estemos más en oprobio.” Nehemías 2:17. Oprobio: vergüenza, ruindad, vagesa, etc. El
daño estaba hecho. Los muros que protegían la ciudad estaban destruidos, la gente lo
sabía, lo veían cada día, pero fue hasta que Nehemías llegó y evaluó el daño, fue que se
levantaron a reconstruir su ciudad.
LA ACTITUD DEL PUEBLO FUE IMPORTANTE
Nosotros sabemos los daños que el enemigo ha hecho en nuestra vida, Es tiempo que
nosotros como hijos de Dios nos levantemos y edifiquemos lo que está destruido no
importa lo que sea, lo importante es que haya una actitud de esfuerzo y ánimo para
lograr nuestras metas en Dios.
B. La Biblia dice que todo tiene su tiempo y este es el tiempo para nosotros:
• No es tiempo de estar lamentándonos
• No es tiempo de rendirse.
• No es tiempo de mirar atrás.
• No es tiempo para desmayar.
• No es tiempo para murmurar.
• No es tiempo para resentimientos.
• No es tiempo de dudar
• No es tiempo para vivir estancados.
Es tiempo de: Levantarnos de edificar, predicar, orar, clamar, alabar, sacrificarse,
ayunar y de poner a Dios en el primer lugar en nuestras vidas.

. LEVANTA TUS MUROS ESPIRITUALES.

A. Nosotros tenemos muros en nuestra vida, alguno de ellos pueden estar caídos, estos
muros son:
 Nuestra relación con Dios
 Nuestra armonía familiar.
 Nuestro ministerio.
 Nuestra vida espiritual
 Nuestro matrimonio
 Nuestro testimonio cristiano, etc.
 Nuestros sentimientos.
 Nuestra vida emocional
 Nuestra economía. etc.
 Nuestros valores espirituales y éticos.
 Nuestro carácter. etc.

B. Cada una de estas áreas son muros en nuestra vida, muros que debemos edificar cada
día en el Señor, pues son muy importantes. Si hay brechas en los muros de los
sentimientos y emociones, el diablo tratará de entrar por allí ejerciendo presión. Si tus
muros espirituales están destruidos, tú también estás abierto al ataque del enemigo.
”Como ciudad derribada y sin muro, es el hombre cuyo espíritu no tiene rienda”
Proverbios 25:28. Cualquier obra del enemigo puede entrar.
Es el deber de cada cristiano ser una persona constructora de murallas espirituales
porque esto fortalece la fe, especialmente de los débiles y los desanimados.

CONCLUSIÓN: De la edificación de esta nueva muralla podemos ver:

• La gran cantidad de familias de judíos que colaboraron para llevar a adelante esta
obra. Se involucraron todos.
• Como iglesia podemos aprender que debemos trabajar todos juntos para cumplir la
misión que Jesús nos encomendó.
• Así como Dios movió a Nehemías y los judíos a restaurar las murallas de Jerusalén,
también quiere usar a la Iglesia para restaurar a su pueblo que está en ruinas.
• Los distintos oficios de todos los que colaboraban. Dios usa distintos roles (Función o
papel) y dones en su obra.
• Todos tenemos alguna función que cumplir y algún don que utilizar. Dios quiere usar
tu vida para su obra. MANOS A LA OBRA.