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La Civilización en el Perú
Durante la civilización algunos centros ceremoniales desbordaron sus ámbitos de influencia local, hasta
proyectar influencias regional y nacional. Clases sacerdotales difundieron sus creencias religiosas,
ejerciendo un dominio cultural y/o político sobre distintas zonas. Por eso las primeras formas de
gobiernos serian eminentemente teocrático (gobiernos vinculados a la religión).
Miles de peregrinos, de los diferentes lugares del país, concurrían hacia dichos centros ceremoniales
ofreciendo como tributo, los productos agrícolas, ganaderos y pesqueros para ser “consumidos” por los
dioses a través de los sacerdotes. De esta forma, las personas fueron intercambiando ideas, progresos y
modos de vida. Uno de estos ceremoniales es Chavín de Huántar.
Por muchos años se califico a Chavín como la primera civilización peruana (1 000 a.c) y punto de origen
del proceso civilizatorio en el territorio. Sin embargo, actualmente esta apreciación ha sufrido
variaciones, pues ahora Chavín es considerada parte de una larga serie de flujos civilizadores, algunos
más antiguos y probablemente de igual complejidad.
Chavín sigue siendo considerada una trascendente civilización, sobre todo por la gran influencias
culturales que proyecto a partir de su religión y del prestigio de su principal santuario, Chavín de
Huantar; pero no fue la primera ni la única de su tiempo. Hay investigaciones que señalan el inicio de la
civilización en el Periodo Inicial e, inclusive, a fines del arcaico. Es lo que ha ocurrido con los estudios
realizados en el yacimiento arqueológico de Caral, que han dado luces sobre una posible ciudad-Estado,
casi 2 mil años más antigua que Chavín.