SENTENCIA No.

T-594/93
Trabajo de Derecho Civil – Parte General y Personas

Facultad de Derecho:
Primer Semestre

Sede Buganviles

Maestra:
Maria Nory Polanco De Ramos

Estudiante:
Julián Andrés Roa Méndez

UNIVERSIDAD ANTONIO NARIÑO

Neiva – Huila
2020
 RESÚMEN DE LA SENTENCIA No. T-594/93
En esta sentencia No. T-594/93 se basa de dos pilares fundamentales los cuales son: Derecho
al libre desarrollo de la personalidad como objetivo y como subjetivo o como fundamento
jurídico por el cual se emite esta sentencia es por el cambio de nombre.

Primero que todo el ciudadano reconocido en aquel entonces como Carlos Montaño Díaz

en contra del señor Notario Tercero del Circulo de Cali Jorge Caicedo Zamorano. Donde

realiza el ciudadano Carlos Montaño Diaz basándose en el artículo 86 de la Constitución

Política presentando una acción de tutela debido a que este considera que se le están

vulnerando sus derechos fundamentales y la Sala de la Corte entra en revisión de lo que acude

el ciudadano Carlos Montaño Díaz lo que el pide es que el nombre con el que se le ha

reconocido desde hace 13 años sea el que aparezca en su registro civil pero el Notario le niega

esta petición al ciudadano ya que el criterio del Notario es que este ciudadano quiere cambiar

un nombre de aspecto masculino a uno femenino en donde el peticionario llevaria a cabo una

serie de pasos a seguir para poder cambiar su nombre de manera legítima ante la ley.

Para tener una mayor legitimidad sobre la petición de Carlos Montaño Díaz el Juzgado
primero Municipal de Cali pidió el historial clínico del Hospital Universitario del Valle para
hacer veracidad del cambio de sexo de este ciudadano.

Aunque en Primera Instancia donde el fallador proclama la acción de tutela es

improcedente que no es aceptable lo que el peticionario reclama ya que el derecho a la

igualdad tiene que estar implicado en la relacion entre dos personas donde lo que busca es que

estas personas ante el Estado tengan las mismas oportunidades sean igualitarias sin importar

su sexo. El fallador se basa en el Decreto 999 de 1988 mediante escritura publica se puede

corregir, sustituir el nombre que la persona desea cambiar con el único fin de identificar o fijar
su identidad ante los demás aunque el Decreto 1260 del 70 donde el artículo 95 donde el

cambio de estado civil puede hacerse bajo una escritura publica presentada pero se considera

improcedente donde el fallador le indica al ciudadano Carlos Montaña Díaz que se diriga al

juez de familia bajo el Decreto 2272 de 1989 en el arituclo 5 donde la competencia de los

jueces de familia procedan según la ley ante el asunto de poder cambiar el nombre o de la

protección del mismo.

Pero para los notarios en el caso de Jorge Caicedo Zamorano el cual se negó a proceder al

cambio de nombre. Hay un Decreto en donde 999 de 1989 del articlo 97 donde a los notarios

se les concede la autoridad de cambiar por una sola vez el nombre a una persona por la

escritura pública con el único fin de fijar a la persona que desee hacer este cambio fijar su

identidad.

¿Por qué el Notario simplemente no hizo el cambio de nombre al ciudadano peticionario?

Fácil porque se lo ordena el Decreto 1260 de 1970 en su artículo 95 donde se dice que la

modificación se haría bajo una escritura pública de decisión judicial en donde se exija el

cambio porque lo que el Notario se basó en sus principios y en sus ordenes. El notario hace su

exposición acerca del tema y afirma de que la acción de tutela no debía ser aceptada ya que no

se violó ningún derecho fundamental ante ningún ciudadano ya que el ciudadano Carlos

Montaño Díaz al cambiar su nombre presenta una alteración en su estado civil.

El cambio de nombre de forma caprichosa no es admitido por la ley ya que lo que se busca

es que se fije bien la identidad que esta persona tiene. Pero en el fallo de primera instancia se
hizo una revisión sobre lo que el fallador habia dictaminado, en donde se le da un plazo al

Notario que en un promedio de 48 horas haga válido el cambio de nombre por parte del

ciudadano Carlos Montaño Díaz a Pamela Montaño Díaz.

Donde en segunda Instancia el fallador indica que el derecho a la igualdad jurídica es

reconocido por la Constitución Política en artículo 14 y se debe velar por ese derecho donde a

través de la acción de tutela puede amparar el nombre y otros aspectos a proteger. En el

Decreto 1260 de 1970, encontró el Juez Tercero Civil del Circuito de Cali que es permitido,

por una sola vez, el cambio del nombre, mediante escritura pública, con el fin de que las

personas fijen su identidad personal. Ademas el nombre de Pamela el cual identifica al

ciudadano por más de 13 años ha sido verídico para llevar a cabo el cambio de nombre en su

respectivo procedimiento.

El desarrollo de la expresión de la individualidad es vital para todo ciudadano en el Estado

colombiano donde todos podemos optar o velar por nuestra singularidad del individuo frente a

la sociedad y que por necesidad nostros como individuos debemos ser reconocidos como ente

distinto y distinguible donde debemos recibir respeto, no solo por el Estado si no por la

sociedad civil, la cual reclamaba el ciudadano Pamela Montaño Díaz.

Cabe aclarar que el derecho a la expresión de la individualidad es algo inherente a la

persona, algo esencial y vital para todos como personas y tambien es algo que viene integral al

derecho al libre desarrollo de la personalidad que da facultades, aunque en la norma no se

mencione con exactitud se puede hacer una buena deducción de la norma. Para que la persona

pueda sentirse conforme debe fijar su identidad y que sea fijada a su identidad que desea
proyectar ante los demás; también la autonomía es la facultad que tenemos los ciudadanos de

igual forma para poder reconocer nuestra identidad y poder conciderarnos dueños de nosotros

mismos. Tambien el libre desarrollo de la personalidad tiene un fundamentamento autónomo

del hombre como persona y la esencia de este derecho se basa en el reconocimiento de la

facultad natural de toda persona a ser de manera individual según esta considere su identidad.

Si se remite a términos jurídicos la personalidad como término a la capacidad de un ser o una

persona para tener unos derechos y unas obligaciones es una dualidad y relación a su vez entre

el Estado y la sociedad civil.

El libre desarrollo a la personalidad logra unificarse bajo el pensamiento y la expresion ya

que es un deber de la persona expresarse tanto en su propio vivir como en el modo de ser en la

convivencia humana con su entorno o sociedad civil y desde que la libre expresión no afecte o

no intervenga ante otros en el derecho ajeno el Estado debe velar porque estos derechos

puedan llevarse a cabo y ser protegido bajo el orden jurídico.

Los artículos 94 y 95 del Decreto 1260 de 1970 prácticamente destacan que si se puede

hacer cambio de nombre ya sea por nombres extravagantes e inconformidad se podrá hacer

ese cambio con el único fin de que este sea el de fijar su identidad en un futuro y ante la

sociedad bajo una escritura pública o decisión judicial que ordene o exija este cambio; aunque

estos dos artículos serían subderogados osea serían modificados pero no del todo, bajo el

Decreto 999 de 1988 argumentando de mejor manera que aquella modificación o inscripción

de nuevo nombre podrá hacerse y que la ley se lo permite sólo por una vez mediante escritura

con el único fin de fijar a futuro su conformidad con su identidad personal.y se sustituiría el

trámite judicial por un trámite más fácil que sería el notarial

 El nombre fija la identidad de una persona tanto en relaciones sociales como de Estado que

lo hace distinguible de las demás personas en su entorno en donde el derecho a la expresión de

la individualidad al como somos ante las demás personas lo cual nos hacen distintos. Por lo

que el cambio de nombre se ve envuelto en una especie de trámite jurídico pero el cambio de

nombre no cambia para nada la relación de parentesco, consanguinidad e infinidad solo se le

permitirá hacer cambio de nombre solo una vez y no tomar esta potestad para hacerlo cuantas

veces quiera. Todas las personas, ciudadanos tienen una libre autonomía y un libre dominio de

su estar ante el Estado y en Sociedad como identidad singular propia de uno mismo que es en

lo que busca que se vele al peticionario su corrección de nombre por Pamela Montaño Díaz.

Por lo que se determina por última instancia de que no hay ningún principio, motivo para que

el notario no haga verídico su cambio de nombre ya que ante la ley está permitido este tipo de

cambios ya que tiene una excusa valida para poder implementarse este tipo de cambio donde la

Sala Judicial determina que el articulo 6 del Decreto 999 de 1988 es el único autorizada para

hacerse un cambio de nombre por una vez bajo la escritura publica como requisito primordial

para hacer efectivo este cambio por lo que el ciudadano Carlos Montaño Díaz ejercerá su

derecho a la expresión de la individualidad y al libre desarrollo de la personalidad el cambio de

nombre deberá hacerlo bajo el único fin de poder fijar bien su identidad en donde si esta persona

presenta estos motivos no hay nada ni nadie que pueda interceder a no llevar a cabo la debida

sustitución del nombre. El notario como tarea debe tener autenticidad del documento de escritura

publica y no se tomaran medidas ante el notario como lo sé pronuncia en el articulo 9 del Decreto
1260 de 1970 ya que el notario está haciendo el cumplimiento de la norma como lo establece y

tiene como orden por medio de esta sentencia regular el acto por el cual el peticionario Pamela

Montaño Díaz, ya que este ciudadano no pide un cambio de sexo si no cambio de nombre con el

fin de que el ciudadano Pamela haga fijar su identidad personal ante el Estado y la Sociedad

Civil.

Donde la decisión por parte del Juzgado Tercero del circuito de Cali dice que se confirma tutelar

el derecho al cambio de nombre como derecho al libre desarrollo de la personalidad y también

basarse en lo que dice el articulo 36 del Decreto 2591 de 1991 en relación para los efectos que el

Juez tomara ante este caso en donde el peticionario Pamela Montaño Díaz tiene derecho a

cambiarse su nombre respectivamente.

CASO:

Eloy esta inconforme con su nombre, le consulta si lo puede cambiar, absuelva la consulta

apoyándose en el Código Civil y Jurisprudencia de la Corte Constitucional.

Eloy es un ciudadano que por lo visto esta inconforme con su nombre no se siente gusto o no

le identifica en su plenitud desea cambiarlo. Se pueden presentar varias opciones de poder

ejercer este cambio de nombre.

Si Eloy es menor de edad, menos de 18 años, la Ley les reserva a estos menos dos

oportunidades de poder efectuar este cambio. El primero puede hacerse antes de los 18 con la

representación de sus padres ya que son los representantes legales del menor y en caso tal que

el menor se sienta después de la mayoría de edad inconforme con el nombre por el cual se ha
reformado este puede volver a cambiar el nombre pero no lo podrá volver a hacer así que debe

pensar muy bien que nombre ponerse ya que ese será el único nombre por el que a nivel

publico se le reconocerá.

Pero si Eloy es un adulto y se siente inconforme con su nombre la Ley solo le permite una vez

hacer este cambio después de haber hecho este cambio no podrá haber marcha atrás

exceptuando en algunos casos muy esenciales en donde la Ley o la norma que impone esto

pueda en algunos casos ser no tenida en cuenta o derogada ya sea porque se ha practicado una

persona se ha cambiado su nombre pero tiempo después se hizo un cambio de género y que al

hacer este cambio el nombre que había cambiado no identifica la nueva identidad que posee

entonces se puede ver inmerso en un caso de estos como nos lo presenta la sentencia T-977/12

en donde la Ley o la norma que exige que solo una vez en la vida se puede cambiar el nombre

pues en este caso la Sala que ha llevado el caso no ha tenido en cuenta con total exactitud lo

que se dice ya que lo que vela la persona y no solo en este caso si no para todas las personas

es que todos estemos conformes con nuestro nombre y que a su vez este nos identifica como

identidad ante la sociedad donde no se nos pueden vulnerar los derechos al libre desarrollo de

la personalidad y al reconocimiento jurídico como tal.

Teniendo en cuenta de que Eloy será un ciudadano mayor de 18 años por lo tanto él tramite

que debe hacer este para poder hacerse su debido cambio de nombre sería:

Eloy como persona ciudadana en un Estado quiere modificar, cambiar, sustituir su nombre y

este procedimiento es valido ante la Corte Constitucional como lo nombre el articulo 6 del

Decreto 999 de 1988 el cual modifico el articulo 94 del Decreto 1260 de 1970 donde se

ratifica que toda persona que desee modificar su nombre podrá hacerlo solo por una vez

mediante una escritura publica y la modificación del registro con el único fin de que este
tramite se haga para fijar su identidad personal ante el Estado y la sociedad. Este tramite

dejaría de ser judicial y pasaría a ser un tramite notarial donde es necesario que Eloy llevase

fotocopia de la cedula de ciudadanía y copia autentica del registro civil de nacimiento e ir a la

oficina de donde está el registro civil de Eloy para solicitar la modificación. Luego de

realizarse el debido cambio tendrá que tramitar la debida rectificación del documento de

identidad con la copia del registro civil de nacimiento que da pie al cambio de nombre.

Aunque hay que tener en cuenta que la Sala Plena de la Corte Constitucional que la expresión

de solo cambiar el nombre por una vez se declara exequible, pero cuando hayan casos en

donde esta expresión no será aplicable siempre y cuando haya una justificación clara y

suficiente para hacer dicha modificación. Pero en conclusión Eloy ante la ley puede hacer los

tramites necesarios para efectuar el cambio de nombre respectivo para fijar su identidad

personal.