Carlos Ruiz – 000363032 - Grupo 5

Gases de efecto invernadero

Gases Fluorados:

Los gases fluorados se utilizan como sustitutos de las sustancias que agotan la capa de ozono en la
estratosfera (por ejemplo, clorofluorocarbonos, hidrofluorocarbonos y halones). Estos gases
generalmente emiten pequeñas cantidades, pero debido a que son poderosos gases de efecto
invernadero, a veces se les llama gases con alto potencial de calentamiento global (o "gases con
alto potencial de calentamiento global").

Dióxido de carbono (CO2):

De los gases de efecto invernadero, este es el más importante porque es el que más se asocia a
actividades humanas, y el principal responsable de este efecto. La concentración en la atmósfera
se debe al uso de combustibles fósiles para procesos industriales y medios de transporte.

Metano (CH4):

Su origen se encuentra en la fermentación de bacterias anaerobias especiales que se descargan de

los intestinos de los cultivos (como el arroz) y del ganado en las zonas pantanosas. También es
causada por depósitos naturales y fugas de tuberías industriales.

Óxido nitroso (N2O):

Gas de efecto invernadero provocado principalmente por el uso masivo de fertilizantes

nitrogenados en la agricultura intensiva. También lo producen otras fuentes como las centrales
térmicas, los tubos de escape de automóviles y los motores de aviones, la quema de biomasa y la
fabricación de nailon y ácido nítrico.

El efecto de cada gas sobre el cambio climático depende de tres factores principales:

-Concentración o abundancia

-Duración o tiempo

-Fuerza en la atmosfera
Sin embargo, hay formas en las que se pueden reducir el efecto invernadero desde casa, estas son
algunas de ellas:

-A la hora de comprar productos electrónicos, asegurarse de que son energéticamente eficientes

-Aísla tu hogar

-Utiliza el agua con mesura

-Recicla todo lo que puedas

- Reducir el gasto en papel